Estando En El Trabajo
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por pasper.
Hola, este es el primer relato que subo a esta pagina, soy muy fan de la misma y quiero compartirle mi experiencia.
Empecemos describiéndome, soy alto moreno y algo de barriga, mucha gente me dice que no se me ve mal, tengo 30 años y soy de chiapas; México, trabajo en una boutique de ropa que es de mi propiedad y eso me a permitido ver mucho chico que pasa frente a la misma y que entra a comprar, esta historia es de un chico que pasaba frecuentemente frente a la tienda.
Este chico se llama Daniel, tiene 24 años y es bajito, delgado y piel blanca, pasaba frecuentemente frente a mi trabajo por quién sabe qué cosas y desde que lo vi me llamó la atención y para mis adentros decía que me lo iba a terminar llevando a la cama, empezamos a saludarnos de lejos y después un día llego preguntando por una prenda, le di el precio y empezamos a platicar, directamente le pregunté qué rol era el y me contestó que eso lo tenía que yo averiguar, en ese instante le dije que iba a cerrar la tienda para que me diera oportunidad de conocerlo y aceptó gustoso, después de cerrar me fui hacías el y empece a besarlo por todas partes y le quite la gorra que traía para poder acariciar su cabeza, poco a poco le fui quitando la ropa hasta que le baje el pantalón y lo que traía debajo del mismo me puso como loco, traía una pequeña tanga de hombre que se le veía genial en contraste con su color de piel clara, le quite la playera y así lo deje por un rato, le di la vuelta y pude apreciar ese cuerpo con poca ropa por un instante, antes de llevarlo a un sofá que tengo y ahí lo senté y me arrodille para poderle chupar esa pija que tiene, que la verdad no es enorme pero si esta bonita, de punta delgada y se va engrosando poco a poco hasta llegar a la base, ahí estuve chupando un rato, hasta que se empezó a escuchar sus gemidos un poco más fuerte de lo usual y me detuve, no quería que terminara todavía, quería sentir como se movía dentro de mi.
En cuanto deje de chuparle ese maravilloso pedazo de carne el se lanzo sobre mi y me agarro a besos y me empezó a desvestir, de inmediato me puso boca abajo en el piso de la tienda, donde empezó a menear su cadera sobre mis nalgas, ya no soporte mas y fui por el lubricante que tengo siempre escondido para ocasiones como estas y el condon y se lo puse para luego ponerme en cuatro (posición de perrito) para que me la empezara a meter, me pareció bastante tierno el hecho de que empezó a meterla despacio, teniendo consideración mía, poco a poco fue agarrando mas emoción y se empezaba a mover más rápido y fuerte, cambiamos de posición y lo acosté boca arriba y me fui sentando en su hermosa verga, en donde me meneaba encima de ella provocando fuertes gemidos a mi compañero, quiero aclarar que esa pose me vuelve loco, ya que puedo ver la cara de goce de mi compañero en turno, se le empezaba a notar que ya se “venía” y me detuve por completo, no quería que terminara, todavía no era tiempo para eso, estaba demasiado lujurioso y no sabia cuando volvería a tener la oportunidad de tenerlo de nuevo, así que tenía que gozarlo lo mas posible, así como estábamos nada mas me tiro en el piso sin sacármela del culo y me doblo poniendo mis piernas en sus hombros y ahí empezó a bombearme despacio, pero después le puso más ganas y fue más rápido
Ya no se pudo controlar y terminó soltando todo su semen mientras me la metía (me gusta que terminen dentro de mi). estaba jadeando y se notaba que le había gustado, así que solo lo abrace, le di un beso y me levante, lo pongo de pie y le quito el condón y me quedo viendo todo lo que soltó dentro, aunque no fue mucho pero me gusta, debo de contarles que tengo una pequeña manía de ver la leche que dejan mis compañeros dentro del condón.
Conversamos un rato, nos lavamos y nos despedimos, no sin antes concretar una segunda vez para conocernos más.
Gracias por leer y espero que les haya agrado.
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