ESTEBAN CONOCE NUEVOS AMIGOS 5
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por hot_3814.
ESTEBAN CONOCE NUEVOS AMIGOS 5.
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Y así sin darnos casi cuenta se nos ha ido la semana, plena de placeres de todo tipo para Esteban y Miguel en éste su primer viaje vacacional a nuestra capital.
Habiendo ya conocido los sitios de interés que, para un chico de 13 años de zona rural, me decido a llevarlo al Museo Interactivo Mirador, que no solo es interesante para un chico curioso como Esteban sino para todo tipo de gente, así que luego de un almuerzo partimos raudos hacia aquel sitio.
Con Miguel ya habíamos planeado nuestra actividad de placer propio para la tarde.
Le había mencionado que había invitado a una pareja de amigos, a quienes conocí a través del chat gay, para participar en un trio.
Ellos eran Javier de 20 años, un chico algo tímido, con cara de niño, versátil en lo sexual, y Ricardo, su pareja mayor, de 30 años, activo, y que vivían juntos en la zona centro de la ciudad.
Gustaban de disfrutar del sexo, y de vez en cuando hacer tríos, que Ricardo disfruta el morbo de mirar cuando Javier se tragaba analmente otras vergas.
Como el primer encuentro fue muy agradable, seguimos reuniéndonos periódicamente a veces en mi domicilio y otras en el suyo.
En lo personal me agradó Javier desde un principio pues tiene una figura de niño inocente, que demuestra mucho menos edad que la real, y por cierto muy caliente al momento de la intimidad.
Pues ya teniendo confianza, les había mencionado algo del motivo de mis continuos viajes al sur y por lo tanto cuando les hice la invitación a compartir con nosotros aceptaron encantados.
Además, para mí sería una linda oportunidad de ver a Javier actuando como activo que con nosotros siempre ha sido el pasivo.
Así pues y luego de pasar la tarde en el MIM, nos dirigimos al McDonald de avenida Macul (parada obligada con Esteban) y posteriormente al departamento.
A eso de las 20 horas el conserje anunció la llegada de nuestros visitantes, a quienes prontamente le di aviso que subieran.
Sonó el timbre y fue Esteban quien fue a abrir la puerta, les sonrió a los recién llegados y les hizo pasar, presentándose por su nombre y dándole un beso a la mejilla a los amigos que recién conocía.
Javier, como era de esperar, entró algo tímido, que yo sabía era normal al principio, pero ya entraría en confianza.
Luego de las presentaciones iniciales, ofrecer algún refrigerio, les dije que, porque mejor no nos poníamos cómodos y pasábamos al dormitorio, lo que fue gratamente aceptado, Esteban tomó a ambos invitados de la mano y los dirigió, si bien ellos ya sabían dónde se encontraba por sus anteriores visitas.
Nos empezamos a desnudar, y como siempre fue Esteban el primero en quedarse solo en bóxer, los demás le seguimos y yo sugerí que, para empezar, Ricardo jugara con Esteban y Miguel hiciera lo propio con Javi, lo cual fue aceptado.
Así pues, Ricardo no se hizo esperar y empezó a acariciar a Esteban, dándole besos en su cuerpito, acariciándole con ambos manos y en especial sus nalgas tan firmes y redondas que no hicieron, sino que poner en máximo esplendor los 19 cms de pene que rápidamente Esteban agarró con ambas manos y lo empezó a mamar como tan bien sabe hacer.
Por otro lado, Miguel sin mayor preámbulo agarró la cabeza de Javi y la dirigió hacia su pene que también estaba erecto cual mástil y prontamente empezó a desaparecer en su boca en una intensa mamada inicial que terminó con la timidez del chico.
Para no ser un simple espectador, y mientras Ricardo ya estaba acomodando sobre la cama a Esteban a quien había despojado del bóxer iniciando una ronda de mamadas y lamidas en su zona baja, especialmente su culito apetitoso y que arrancaba los primeros gemidos al niño, yo me puse detrás de Javi, y bajando su bóxer también inicie una exploración lingüística a su ano, separando con mis manos sus nalgas firmes y absolutamente lampiñas, que si bien eran pequeñas, ya sabía que su profundidad era la adecuada para recibir penes de gran tamaño por su gran capacidad de dilatación.
A todo esto, ya Ricardo estaba acomodando a Esteban sobre la cama, en posición de espaldas y seguía lamiendo el huequito y ya con la clara intención de clavar su estaca algo más gruesa que la mía y que yo ya conocía de reuniones anteriores.
Por nuestra parte, también acomodamos a Javi en posición de 4 para que fuera Miguel quien lo clavara con sus 20 cms mientras yo le llenaba la boca con mi verga ansiosa de esa carne joven.
Lo lubricó con crema y lo empezó a apuntalar, mientras a su lado Ricardo ya estaba en la misma tarea horadando el culito de Esteban, y se empezaron a sentir los primeros gemidos de ambos chicos siendo empalados simultáneamente.
Se inicio una sesión de gemidos a dos voces, y además se sentía el ruido de los huevos de ambos violadores, al chocar en las nalgas de sus víctimas voluntarias en cada mete y saca hasta el fondo.
El ambiente olía a sexo caliente pero no duró demasiado ya que Miguel dio avisos que estaba pronto a finalizar su primera tarea por lo que prontamente me cambié a su lado para así, apenas se retiró de su posición, la ocupé yo, llenando nuevamente aquel agujero que ahora chorreaba semen recién depositado y que facilitó la entrada de mi verga de un solo golpe y hasta el fondo del culo de Javi quien lanzo un pequeño quejido al sentir la nueva penetración.
Por su parte Ricardo empezó a gemir en voz alta y a emitir expresiones de profundo placer y de pronto exclamó ¡yaaaaa!, y empezó a temblar anunciando que estaba lanzando los chorros de su semen copioso dentro de la intimidad de Esteban, lo que aceleró mi acabada que también fue abundante.
Javi, entonces salió de su posición y se fue en busca de Esteban, a quien acomodo nuevamente en posición de espaldas y me pude fijar en su pene completamente erecto, y que era de un gran tamaño y algo grueso incluso.
Detalles que antes no me había fijado por cuanto siempre lo habíamos tenido en su rol de pasivo con Ricardo en cuyas ocasiones lo penetrábamos alternadamente.
Y así, el chico le clavó su herramienta de carne sin mayor espera, que en todo caso estaba bien dilatado por la anterior penetración y eyaculada de Ricardo que lo había dejado en condiciones óptimas para la follada.
Nosotros 3 nos pusimos a su lado como espectadores, observando cada detalle de la culiada, mirando con morbo como entraba y salía su verga en el ya cada vez menos virginal agujero de Esteban, situación que duró pocos minutos hasta que, estando listo para acabar, saco su pene y lo acercó a la boca del niño lanzando en oleadas chorros de su néctar los que fueron engullidos ávidamente por nuestro regalón, hasta quedar desplomado a un lado absolutamente satisfecho.
Nos quedamos reposando y compartiendo algún refrigerio, Miguel y Ricardo comentaban la forma que nos habíamos conocido y los increíbles vuelcos que va dando la vida, que en especial Miguel decía que ni en el mejor de sus sueños había pensado estar en Santiago disfrutando de tan deliciosos momentos y mejor aún en tan grata compañía, Ricardo por su lado también agradecía a su buena suerte por habernos conocido.
Mientras estábamos en estas cavilaciones, Esteban y Javi se habían levantado, medio aseado en el baño retirándose los restos de semen y ya estaban instalados frente a la consola comentando los juegos que Esteban tenia y los niveles que había alcanzado en los últimos días.
Pero como la reunión no era para comentar sobre juegos tecnológicos, les llamé al dormitorio donde Miguel y Ricardo estaban acostados juntos de espalda y con sus vergas ansiosas de carne tierna, por lo que les dije que era hora de cabalgar, así que cada uno se instaló a horcajadas, Esteban sobre Ricardo y Javi sobre Miguel y se fueron acomodando a la altura necesaria, y sus penes prontamente empezaron a desaparecer, tragadas por los culos golosos de ambos chicos.
Una vez introducidas en su totalidad, empezaron a saltar sobre ellas en un mete saca que rápidamente se fue acelerando y que era acompañada de gemidos, y el ruido inequívoco de las nalgas chocando con los huevos junto al sonido del mete saca húmedo producto de los restos de semen que aún estaba en sus interiores de las anteriores folladas.
Ambos hombres estaban en el cielo, la sensación de aquellos culos pequeños, ajustados, que envolvían sus penes como si fueran un guante de carne, prácticamente los hacían sentirse en las nubes.
Primero Miguel, y luego Ricardo se levantan con los chicos ensartados hasta el fondo en posición de koala y mientras Ricardo acomodó a Esteban en la cama de espaldas y lo empezó a follar con cierta violencia con piernas al hombro, Miguel se llevó a Javier al comedor y lo instalo sobre la mesa, apegado al borde donde empezó a darle con dureza una follada como antes no había hecho.
Javier gemía y ambos sudaban que el movimiento era fuerte y profundo, clavando la totalidad de sus 20 cms e incluso hasta casi entraban los huevos al interior de su hueco anal absolutamente entregado al placer de la follada de aquel rudo hombre de campo.
Yo a un costado me masturbaba furiosamente y acariciaba a Javier quien me sonreía entregado al placer que estaba recibiendo y por cierto prodigando, placer que ya llegaba a su máxima expresión en que Miguel empieza a ponerse rojo lo que era anuncio de una pronta acabada la que llegó sin más dilación entre -nuevamente-gemidos puteadas y cuanta expresión que denote placer se les pudo ocurrir.
Sin perder tiempo, le digo a Miguel que me deje ubicarme para aprovechar la espectacular posición y sin más demora hundí mi pene en aquel culo que recién había recibido una lechada, lo cual me facilito poder clavarlo en un solo envión hasta el fondo y poder seguir gozando aquella pose poco usual pero muy efectiva para lograr una entrada a fondo que al igual que a Miguel, no soporté el intenso placer que me llevo a eyacular, para lo cual saque mi pene y le lance los chorros en su pecho cara e incluso algo alcanzo a su boca que fue tragado golosamente.
Mientras ello ocurría, Miguel había regresado al dormitorio y veía como Ricardo tenía a su hijo de costado, con lo que podía presenciar en una ubicación privilegiada, la penetración con lujo de detalles, ver como el pene salía hasta el borde, y como se clavaba hasta el fondo sacando gemidos de placer a su hijito, lo que también le producía a él un placer morboso de aquella escena.
De pronto, Ricardo hace una penetración hasta el fondo y se quedó abrazado a la espalda del chico, respirando en su pelo enmarañado y viendo Miguel como aquel pene (lo poco que veía por cuanto estaba completamente clavado) temblaba por oleadas, delatando la eyaculación en sucesivos chorros de semen.
Se mantuvieron así unos segundos, hasta que Esteban se fue moviendo para sacar la estaca que lo tenía clavado, y se sintió un sonido similar al destape de una botella de champan, escurriendo un líquido blanquecino que no cabía duda era el recién depositado dentro suyo por Ricardo.
Ya consideramos terminada la sesión de sexo, mientras nos turnábamos para ducharnos y vestirnos, procedí a pedir comida de delivery, la que llego al poco rato y que compartimos en un grato ambiente.
Miguel invitó a Ricardo y Javier a visitarle en su casa sureña lo que agradecieron y quedamos de en la medida de lo posible, hacer dicho viaje y por cierto la intención está, que,
¿Quién no querría repetir experiencias como ésta?
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