Esteban y nuestros encuentros.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Después de mis encuentros con las hermanas de Esteban, siguieron los encuentros con él.
La noche que tuve relaciones con su hermana Mercy, donde pasé toda la noche con ella y al regresar al cuarto de Esteban, Gregorio no quedó muy convencido de la respuesta que le di, cuando me preguntó que donde estaba.
Ese día lo pasamos haciendo cosas menores, yo reparé el equipo de sonido y la cocina que tenía unos quemadores tapados, ya en la noche comenzamos a tomarnos unos cocteles preparados por el papa de Esteban. Ya a las 11:00 pm yo me despedí para ir a dormir, me dirigí al cuarto de Esteban y me acosté en medio de su cama, ya al rato estaba dormido, no sé en qué momento llegaron Esteban y Gregorio y cada uno se colocó a mis lados. Esteban apaga la luz y yo me despierto sin que ellos se den cuenta y escucho su conversación, donde Gregorio le comentaba a Esteban que yo no había dormido con ellos la noche anterior y Esteban sabiendo lo mío por lo menos con una de sus hermanas, le respondió que a veces yo me salía a dormir al sofá pues el cuarto me era caluroso, eso bastó para que Gregorio se quedara tranquilo y se durmiera. Cuando ya estaba seguro del sueño de Gregorio, meto la mano en las entre piernas de Esteban y toco su miembro que estaba erecto y comienzo a masturbarlo y bajo mi short y le doy la espalda, Esteban con mucho cuidado y sin moverse mucho, pone saliva en mi culo y coloca su cabezota en el y deja entrar poco a poco su gran pene. Yo solo recibía las embestidas lentas pero fuertes de Esteban, mi culo recibía toda su virilidad. Así estuvimos mucho rato hasta que Esteban llegó dentro de mí. Nos dormimos y al día siguiente me levanté primero que todos y fui al baño a drenar el néctar de Esteban que lo tenía en las tripas. Al cabo de unos minutos todos se levantaron, nos desayunamos y como era domingo Gregorio y Yo, nos fuimos a nuestras casas.
En el camino de regreso Gregorio me comenta, que hacía en el cuarto de Mercy y yo me sorprendo pero él me dice que no dirá nada pero que tengo que darle algo, esa historia la conté en un relato hace algún tiempo, Yo respondo que o pensaría y no me dijo más nada.
El fin de semana siguiente al regresar a la casa de Esteban, me lo consigo solo, pues su mamá, papá y hermanas habían salido a una fiesta en otra ciudad y no regresarían hasta el día siguiente y que lo habían dejado esperándome para que no se detuviera el trabajo, ese día fue de locura. Comenzamos a instalar unos bombillos en la cocina y en el baño, cuando Esteban me aguantaba la escalera, me tocaba las nalgas, me las mordía, pasaba su cabeza por mis piernas hasta que llegaba el momento de no resistir más y nos abandonábamos al sexo.
En la primera oportunidad nos desnudamos por completo y pudimos vernos mutuamente como éramos, Esteban un poco más grueso de cuerpo que yo, con su abdomen marcado, bastante bellos púbicos y unas bolas redondas y llenas de pelos. Nos acostamos en la cama de una de las muchachas y me apoderé de aquella tranca, se la mamaba, se la lamía, le lamía sus bolas y las metía en mi boca y las chupaba, volvía nuevamente a esa cabezota, que succionaba con fuerzas, masturbaba y seguía mamando aquella pieza, después de un rato me sorprende Esteban, quien me tira en la cama boca arriba y se apodera de mi miembro, que no era tan pequeño, como describí anterior mente la diferencia eran las venas, el mío tenía menos venas, aquel macho me mamaba y hacía los mismos movimientos que había hecho yo en su momento, creo que estuvo viendo todo el tiempo y aprendiendo de lo que veía. La diferencia la hizo cuando comenzó a lamer por debajo de mis bolas y siguió hasta llegar a mi gruta, aquello fue para estallar, la lengua de Esteban estaba haciendo un buen trabajo, luego me volteó y siguió con mi culo, lamía y trataba de meter su lengua, cuando estuvo bien lubricado con su saliva, se montó en la cama y puso su herramienta en mi entrada y comenzó a meterlo poco a poco, en esto era muy delicado, metía y sacaba, y al volver a meter introducía un centímetro más, yo volteaba y solo veía sus piernas a mis costados.
Esteban me estuvo dando por largo rato, yo le sugerí que me cogiera por delante, posición que me gusta mucho, porque me permite ver la cara de gozo del activo y que en esa posición se me va hasta el alma, se siente en las tripas la cogida. Esteban comenzó de repente a acelerar sus embestidas y yo sentí como se hinchaba su pene y al rato sentí la inundación que provocaba su leche en mis entrañas. Él se quedó de frente a mí un rato sin sacar su pene de mi culo, al rato se desprende y me dice que si quiero hacerle al él lo mismo y no me hice de rogar, esta era mi oportunidad de coger al hombre que me había estado cogiendo fines de semanas atrás con la excusa de haberme visto con su hermana. Lo puse boca abajo en la cama y como estaba muy excitado solo alcancé a poner saliva en su hueco y puse mi cabeza allí, aquello era lo máximo porque él era virgen y su culo se reusaba a ser penetrado, yo lo sacaba y volvía escupir y luego volvía a intentarlo, hasta que pude meter la cabeza, él gruño un poco de dolor y le dije que me avisara cuando se le pasara, que eso era siempre la primera vez. Al rato él con sus piernas comenzó a jalarme hacia él y comprendí que ya era hora.
Comencé mi mete y saca muy delicado para evitarle el dolor y así seguí sacando y metiendo cada vez más mi pene en ese culo virgen como sus dos hermanas. Esteban se levantó un poco y comenzó a masturbarse y aquello me hizo poner más frenético y mi mete y saca fue aumentando de poder hasta que sin mas no me aguanté y dejé salir unos cuantos chorros de leche en aquel culito. Al mismo tiempo llegó Esteban y me dejé caer sobre él en la cama. Así estuvimos un rato, cuando mi pene se puso flácido lo saqué de su culo, tría rastros de leche, algo de sangre y unos puntos marrones, al ver aquello se lo mostré y le dije te revolví la mierda y reímos. Nos bañamos juntos y nos volvimos a coger uno al otro, así transcurrió aquel día con Esteban. Luego vinieron otros días. Luego les cuento.
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