Familiares lejanos I
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por morochouruguayo.
Primero me presento. Soy Luis, tengo 24 años, gay, y vivo en Montevideo, Uruguay, con mi vieja y mi hermano mayor, de 45 años. Soy normal de cuerpo, algo marcado porque hago natacion desde los 16 años, de pelo negro y ojos marrones, 1.87 de altura. Soy originario de Cerro Largo pero cuando yo tenia 10 años porla separación de mis padres, mi mama decidio venir a vivir a Montevideo. Mi familia por parte de mimadre es bastante amplia, se puede decir que tengo familia por todos lados, y casi todos viven alla en mi departamento natal, aunque algunos viven aqui en Montevideo tambien. Siempre que voy alla, se realizan comidas grandes donde invitan a todos, llegamos a ser 30 personas comiendo asado. Cuando tenia 18 años, fui a Melo de vacaciones, y como era verano estabamos todo el tiempo con mucho calor, por lo que un dia se organizo un almuerzo en la casa de mi abuelo, que tiene piscina. Alli conoci a un primo de mi madre, digamos Abel.
El es alto, debe medir 19.5, flaco de pelo y ojos negros, 38 años. La primera vez que lo vi no me llamó mucho la atención. Era en verdad muy simpático, hablamos bastante y me cayó muy bien, se notaba que era muy machito. Estaba casado hace cuatro años con su mujer, una mujer mas bien fea y con cara de mala onda. Despues de comer, y de la acostumbrada siesta, era hora de meterse a la piscina. Me puse mi malla y me fui para el patio, cuando vi a Abel con uno de esos pantalocitos de baño que quedan bien apretados al cuerpo. Me lo quede mirando si poder creerlo, cuando lo habia visto antes no habia notado el buen cuerpo que tenía. Tenia unos pectorales para morirse, bien marcaditos y lindos, un estomago plano con un poco de abdominales. Pero lo que mas me llamo la atencion fue su paquete. Se marcaba en ese short de tal forma que parecia estar desnudo. Abel se dio cuenta de como lo miraba, por lo que me dijo riendo “que te gusta?”. Yo me rei y me hice el boludo y me meti a la piscina para bajar la ereccion q ya empezaba a notarse.
Al finalizar el dia quede hablando con Abel, me dijo que el vivia en Montevideo y me paso su mail por si queria que tomemos un mate algun dia. Cuando llegue de mis vacaciones lo agregue, y a los dos dias quedamos en vernos. Llegue a su casa a la tarde, tipo tres. Su esposa estaba trabajando en el momento, y no llegaria hasta mas tarde. Nos pusimos a tomar mate y charlar, me contaba de sus aventuras de soltero, realmente era un gran macho, habia llegado a hacer un trio con dos mujeres y cada mas me contaba mas caliente me ponia yo. Me pregunto sobre mis novias, que hacia con ellas, y le dije que no tenia. “Y en los boliches? ganas ahi?” “Por supuesto ” le digo ” jaja sos selectivo?” “le doy a lo que venga” le contesto y me le quedo mirando… A los que me responde “sos de los mios entonces” y me guiña un ojo. Yo no sabia como interpretarlo asi que me quede callado. Me sigui contando y me dijo que su esposa no le gustaba chuparla ni que se la metieran por el orto y que tenia muchas ganas de que se lo hicieran pero que no conseguia. “ademas cada vez que veo porno veo como se la chupan a actor y me quiero matar!!! queres ver una que tengo aca?”
Yo le digo que si, muy nervioso, a lo que se trae la notebook y nos vamos a sentar a los sillones uno al lado del otro, y busca en su computadora una porno y la pone. Era una mina chupandosela a dos tipos, la verdad muy buenas vergas los dos. Esto me calento aun mas y no sabia como disimularlo. Miro de repente a mi tio, y veo como se empieza a sober el paquete, estaba creciendo cada vez mas y no podia esperar para tenerlo adentro de mi boca. “No te molesta que me pajee un rato no?” me pregunta mi tio “no para nada” le respondo, a lo que se baja el pantalon y el boxer y deja ver una verga realmente muy buena. Era gruesa y venosa, mas o menos 21 cm, con unos huevos bien grandes. Viendo como mi tio se pajeaba me empece a sobar yo mismo, era realmente un espectaculo ver a tal macho pajeandose solo para mi, tener ese glande rosado tan cerca y queriendo ver ya su lechita. Estaba tan concetrado en mirar su verga que no me doy cuenta cuando mi tio me agarra del cuello y me acerca la cara a su verga. Tan nervioso estaba que mi primer instinto fue separarme. “Dale sobrino si se notaba en tu cara que tenias ganas de comerte este paquete! Ahora es todo para vos, vas a ver lo que es una buena verga”
Yo, obediente, me arrodillo en el suelo y le agarro la verga, empezando a pajearla. “Si dale asi putita chupamela ahora que no aguanto mas, tragate esta verga y si me haces gozar te voy a dar un regalo:” Al decirme esto yo me pongo como loco, empiezo a chupar esa verga cada vez mas rapido, casi no me entra de lo gorda que es pero intento igualmente tragarmela toda hasta la garganta. Al rato siento como la verga de mi tio se comienza a hinchar, a lo que el me agarra la cabeza y me entierra toda su verga en la garganta, dejandome toda su leche ahi. A pesar de que me encanto, comienzo a toser como loco y voy al baño para calmar la tos. Cuando salgo, mi tio esta cortando el teléfono y me dice ” no te vayas a ir ahora, que todavia te falta tu regalito”
Me lleva a su pieza y saca del armario de su señora una tanga rojita bien apretadita y me la da para que me la ponga “Dale putita ponete esto que ya vas a ver lo bien que te queda!” A lo que el sale de la habitacion para darme privacidad. Me pongo la tanguita y me miro al espejo, realmente no me quedaba mal, ademas me exitaba mucho estar usando ropa interior de mujer, me sentia la puta que en realidad soy adentro.
Mientras me estoy mirando al espejo, escucho un portazo, a lo que me subo rapidamente el pantalon, olvidando sacarme la tanga, y cuando salgo al comedor me encuentro con que habia llegado un amigo de mi tio. Se llamaba Joaquin, era bonito de cara pero tenia una barriga cervezera, aunque esta le daba un aspecto muy masculino. “aqui esta tu regalito” me dijo mi tio. “Asi que esta es la putita que me dijiste por telefono? no parece muy perra” “espera que te chupe la verga y vas a ver” responde mi tio.
“Ah si? a ver puta chupala como nene” dice Joaquin bajandose los pantalones y mostrando una pija como nunca he visto, deberian ser unos 27 cm, realmente era un buen regalo. Me agacho y empiezo a chuparla y mi tio me empieza a tocar la cola, a lo que yo me pongo a gemir como una puta. “Asi que te dejaste las braguitas eh? realmente sos una putita como ninguna vos” “asi que tu sobrina usa bragas? quiero verlas” dice Joaquin a lo que me da vuelta y me empieza a apoyar esa verga enorme contra mi ano. Soy bastante dilatado, por lo que en momentos esa verga enorme comienza a entrar por mi cola, produciendome un gran dolor
“Ya no por favor duele” digo yo “que te va a doler puta aguantate como la nena que sos me dice Joaquin, y no puedo decir nada mas, porque mi tio me emte su verga por la boca y me empieza a follar como si mis labios fueran una vagina. Por atras, Joaquin ya casi habia entrado completo, por lo que me empieza a coger lentamente, pero acelerando el paso cada vez mas. El dolor que sentia comenzo a convertirse en placer,y sintiendome como una perra comence a gemir mientras dos hombres, uno de mi familia, me daban pija cada vez mas duro. Al parecer mis gemidos los calentaron, por lo que juan dijo “dale puta gemi gemi mira como entra esta verga gorda en tu culo, cuando terminemos con vos no vas a querer ninguna otra pija que la nuestra” “sisi digo yo, demen verga este culo es de uds” “si sos nuestra putita decilo” “SI SI” grito yo. “Me corrooooo” dijo mi tio a lo que me saco la verga de la boca y me acabo en toda la cara, dejandomela blanquita de toda la wasca que me tiro. Dos segundos despues, Joaquin empezo a tirar su peso contra mi,y senti como su verga se hinchaba y tiraba sus chorros de semen contra mi intestino…
Me agache de nuevo y les limpie la verga hasta que no quedo ni una gota de leche, mientras me pajeaba, no tarde nada en acabar, estaba demasiado caliente. “Bien putita parece que lo pasaste bien, de ahora en mas cuando te llamemos vas a venir para aca y nos vas a entregar la cola esta bien?” “Si machos dije, siempre que quieran me pueden llenar todo de leche”
Nos quedamos charlando los tres, al rato llego la mujer de Abel, por suerte no se dio cuenta de nada, pero yo me lleve su tanguita a casa, y a veces me pongo a olerla y acordarme de esos momentos, aunque ya no me junte ni con Joaquin ni con Abel.
Espero que les haya gustado! Dejen comentarios!
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