Fernando, la curiosidad de tocar un pene
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Fabio4.
Fernando – el comienzo
Palabras más, palabras menos, el relato es real.
Fernando era mi amigo de la infancia, un moreno simpático que desde niño se le notaba lo gay, era un morenito de 1,60, un poco regordete, de facciones finas, nada feo, criticado por unos, amigo de otros.
su mamá y su hermana siempre fueron motivo de mis primeras erecciones, dos morenas muy voluptuosas, a las que siempre les miraba las tetas y nalgas.
Fernando por su lado nunca mostró interés por las chicas, tampoco por los chicos, pero si era muy amanerado.
Teníamos unos 13 años, recuerdo haber robado una película porno a mis hermanos para verla con mis amigos Fernando y César, lo que a esa edad nos asombraba, terminábamos con un bulto en el pantalón y cada quien se iba a su casa a masturbarse.
se repitió varias veces hasta que decidimos hacerlo entre nosotros, mirábamos la película y nos sacábamos el pene para masturbarnos, nos mirábamos unos a otros excitados y a veces nos veníamos mirándonos, hasta que un día Fernando dejó su pene y me agarró el mio, me sorprendió pero sentí rico y lo dejé, no pude decir palabra, su mano masturbando mi verga me calentó mucho, era la primera vez que me la agarraba un chico y no me desagradó, me masturbaba con una mano y con la otra se jalaba su pene, a mi me daba tentación pero no me animaba a más, César nos miraba y se jalaba su blanco pene, delgado y corto, con poco vello pero lo tenía bien duro, Fernando jalaba ambos penes delicioso, luego escuché a César gemir, los dos lo miramos justo cuando se vino en su mano, luego se levantó y se fue a limpiar, y se fue, no supimos por que pero seguíamos calientes y ya sin César, me animé y le agarré su pene, era la primera vez que tocaba uno que no fuera el mío, era corto pero algo grueso y estaba durísimo!! me gustó como se sentía en mi mano y se la jale de arriba a
abajo, su precum resbalaba en mi mano muy rico, nos dimos placer hasta terminar cada unos en la mano del otro.
Nos limpiamos y me dijo que me fuera, que iba a bañarse por que se sentía sucio y le daba remordimiento, si bien a mi también me daba, no al grado de el.
me sali de su casa también con remordimiento, varios días recorde lo sucedido, y lejos de remorderme me excitaba, pero me daba miedo repetirlo, Fernando no mencionaba el tema en muchos días, hasta que después de una semana me dijo que quería ver otra peli, le dije que si y nos fuimos a su casa, sus papás no estaban, César ya no quiso ver pelis con nosotros pero no nos importó y seguimos reuniéndonos para ver pelis porno y darnos placer, pero al terminar a Fernando siempre le daba remordimiento más fuerte que a mi.
un día estábamos en su recámara sentados en la cama y mirábamos una donde unos negros con vergas descomunales penetraban a una chica, Fernando se calentaba solo de mirarlas
-me puedo masturbar? – me preguntó
-es tu casa – le dije casi sin prestarle atención, se abrió el pantalón y se la sacó, no era grande, un poco gruesa y muy dura, yo lo miraba de reojo jalársela, Fernando era un moreno no tan delgado de cabello negro ondulado, tenía bien formado el cuerpo y estaba nalgón, muy simpático y amanerado
-yo también me la puedo a jalar? – le dije excitado
-bueno – me dijo sin dejar de mirar como me quitaba el pantalón, mi verga saltó dura y babeante, me senté a unos centímetros de el y me masturbe, continuamente nos mirábamos la verga uno al otro y sonreíamos
-te ayudo? – me dijo
-bueno – le dije y me agarró la verga, me la apretaba rico y me masturbaba, yo cerré los ojos y estire mi mano atrapando su duro pene que escurría rico precum, se lo apreté y jale, le sobe sus huevos y le dije que se quitara el pantalón, se lo quitó y noté que tenía pocos vellos, se sentó y nos agarramos nuestras vergas, nos masturbamos rico, me sobaba mis huevos y yo los suyos
-y si te la chupo? – me preguntó nervioso
-quieres? – respondi con un nudo en el estómago
-es que si se me antoja pero me da miedo
-de que?
-pues nunca he chupado una
-si no quieres no – le dije
-es que.
– se recostó en mi regazo y empuñando mi verga la miró a unos centímetros, luego sacó la lengua y tímidamente lamió el tronco, se lo saboreó y dijo
-sabe salado
-jajajaja creo que es normal, si no te gusta no lo hagas
como respuesta se la metió en la boca y comenzó a mamar despacio, me raspaba con los dientes y lo hacía algo torpe, pero de pronto se calentó y me la chupo con mas ganas
-creo que si te gustó verdad? – dije sintiendo rico
-está rica!! – dijo sacándosela de la boca, luego volvió a mamar y yo a jalarle su pito que estaba mas que duro, luego se arrodilló en el suelo, entre mis piernas y me miró
-no mames Fabio, que rico estás!
-tu crees? – le dije sonrojado
-siii – me acariciaba por todos lados, luego agarró mi verga para de nuevo chuparla con mas ganas, me lamía los huevos y la llenaba toda de saliva, luego se subió a la cama y se puso en cuatro para seguírmela mamando, estaba nalgón, le acaricié la cabeza mientras subía y bajaba sobre mi verga, mi mano bajó por su espalda hasta llegar a sus nalgas, se las apreté y acaricie, el abrió las piernas y mis dedos se deslizaron entre sus nalgas acariciando su ano, eso lo puso más caliente todavía y trataba de meterse entera mi verga pero no podia, entonces se me ocurrió un 69 y lo acosté sobre su costado y su verga apuntaba a mi cara, se la agarre y jale el prepucio hacia atrás, su glande rojo y babeante apareció, lo masturbé un momento dudando si chupársela o no, el me la seguía mamando muy rico, la tenía durísima y me calentó tanto tenerla en la mano que me la metí a la boca, su precum sabía salado como el mío, era el primero que mamaba y me sentía incómodo con su pene en la boca, Fernando empezó a mover sus caderas tratando de meter más su pene en mi boca, eso me puso muy caliente y se me quitó la pena, se la chupe como loco, y como no era muy grande, me la metí toda completa, estaba riquísima!! para ser mi primera vez creo que lo hice bien, pues el se retorcía de gusto y gemía con mi pene en su boca
-ay Fabio que rico chupas!! no es la primera verdad?
-si es la primera
-aaaah! pues no parece
se subió en mi y siguió chupandomela, ahora su pene colgaba sobre mi cara, escurría precum que me caía en las mejillas, así que abrí la boca y recibí su pene con la lengua, le acaricié sus lampiños huevos y se la chupé a placer, miraba su ano abrirse y cerrarse a cada mamada que le daba, así que le abrí las nalgas con las manos y jugué con mis dedos en su ano, el movía las nalgas muy rico en respuesta y su pene se paseaba por toda mi boca, el gemía con mi verga en su boca y entonces le metí la punta de mi dedo, se sacó mi pene de su boca para gemir
-aaaah que rico se siente!!
-de verdad??
-siiii mételo todo!!
me calentó su petición y le hundí mi dedo hasta los nudillos, a lo que respondió gimiendo rico y meneando las nalgas, luego me agarró la verga y me la chupó salvajemente, sobando mis huevos y apretándolos
-mete otro – me pidió, me ensalive dos dedos y se los metí en su apretado ano, gemía más fuerte y me la mamaba mas rico, luego le clavé tres dedos y el gozaba como loco
-y si me metes tu verga? – preguntó
-quieres?? – dije excitado
-se me antoja mucho pero me da miedo que me duela
-tu decides – le dije volviendo a meterme su pene en la boca y saboreando su precum, el se levantó y se puso en cuatro
-vamos a intentarlo – me dijo mirándome por encima del hombro y abriéndose las nalgas con las manos, su oscuro ano se abría y cerraba, así que lo tome de las nalgas y le apunte mi pito a su culo, hice presión y no entraba
-ponle saliva – me dijo jadeando, le puse saliva con mis dedos y volví a intentar, esta vez la cabeza de mi pene se hundió de un jalón, su ano se contrajo y apretándome la verga gimió de dolor
-aaay sácala me duele!!
se la saqué y el se sobaba su adolorido culo
-no mames la tienes muy gruesa! me dolió mucho!!
-jejeje ni modo, lo dejamos por la paz
-pero te la sigo mamando!
-ya te gusto verdad?
-ay si!! es que sabe bien rica
se terminó de quitar la ropa y se acostó, yo también me desnudé por completo y me subí a la cama, seguimos viendo la película y el me tocaba la verga y los huevos, yo lo abrazaba por la cintura y le tocaba sus paradas nalgas
-ay mira que vergotas! – decía excitado mirando la peli mientras me masturbaba
-uy! esas te van a doler más jajaja
-a lo mejor con el tiempo jajajaja
luego empezó a besarme el cuello, eso me incomodaba pero lo dejé por que me masturbaba riquísimo, luego fue bajando hasta llegar a mi pene y se lo metió en la boca, recostado en mi regazo yo le acariciaba las nalgas y le metía los dedos en su culo, también le agarraba su pequeño pene que seguía durísimo, el me la chupaba cada vez mejor, yo estaba muy excitado viendo la peli y jalándole su pene, y cuando me iba a venir se lo dije
-aaaah me voy a venir!
el se sacó mi verga de la boca, se puso en cuatro y me dijo
-échamelos en las nalgas!
me puse detrás de el, a centímetros de sus nalgas, me agarré la verga y varios disparos de semen cayeron en sus morenas nalgas y en su espalda
-aaaah están calientitos.
– dijo por encima de su hombro, luego se levantó y ofreciéndome su pene me dijo
-me ayudas?
me pare a su lado y tomé su pene con la mano, los masturbé y le sobe sus huevos, el me abrazaba de la cintura y gemía bajito
-ya.
ya.
! – dijo con los ojos cerrados, me apretó las nalgas y de su verga salieron varios chorros de tibia leche que cayeron en el piso y escurrieron en mi mano hasta que se vació, cayó sentado en la cama resoplando, me senté junto a el, me miró y me dijo
-que rico estuvo! pero ahora siento remordimiento! no se por que hice esto!!
-por que quisiste y yo también – le dije acariciando su pene, el se separó y me dijo
-ya mejor vete, me voy a bañar, me remuerde la conciencia!!
me limpié y me vestí, luego salí de su casa, al siguiente día me buscó y como si nada me dijo
-cuando vemos otra película?
continuará.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!