Follando con mi PROFESOR

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Davidtxus.
Hola, ya saben mi nombre, pero no mi historia.
si mes permiten se las contaré como empezó todo.

Yo chico de familia de clase media, estudiaba en un instituto privado, pero era tan malo en las asignaturas, que repetía porque suspendían, me llevaron a uno publico donde el nivel es más bajo por lo tanto sería más fácil para mi (o bueno al menos era lo que yo pensaba)… Decidí empezar un nuevo curso en un instituto nuevo, no conocía a nadie por lo que siempre estaba solo en el recreo, Yo un muchacho bajo, mulato , de complexión fuerte, pelo corto, labios rojos (intenso parece lo llevo pintado) ojos negros, nariz pequeña, y con unas nalgas bastante suaves y grandes… Bueno estaba yo intentando adaptarme a la nueva situación, compañeros nuevos, profesores nuevos, y me costaba bastante, sobre todo matemáticas que siempre se me ha dado fatal, pero el profesor de matemáticas desde el primer día que le vi como que me llamó la atención.

Era un hombre alto (1,83 m de altura más o menos) Bastante corpulento, de piel morena, calvo pero con barba abundante, gafas graduadas y se le veía bastante peludo, piernas gruesas, un culo que era duro como una roca, su labio era carnoso y su nariz era grande, sus ojos eran marrones, su mano era grande y gruesa, acompañadas de unos brazos también fuertes.
Tenía un aspecto muy serio, y en clase lo era, bastante duro con todos, menos conmigo.
Solía ser bastante amable, él sabía que se me daban muy mal las matemáticas pero aún así se mostraba compresivo con mi situación, a veces notaba como tenía trato de favor hacia a mi, colocándome en el grupo con gente trabajadora para aumentar mi nota.
Bueno después de que acabase el primer trimestre, saqué un 3 en matemáticas en la nota final.
Mi madre se enfadó mucho conmigo.

Y pidió una tutoría con el profesor para ver que estaba pasando conmigo en matemáticas, habló con el profesor que le sugirió que me buscase un profesor particular, mi madre le comentó que no teníamos mucho dinero y que no nos podíamos permitir, y el buen hombre le dijo que, como ahora tenia las tarde libres, podría hacerlo gratis.
Mi madre gratamente sorprendida aceptó, y él a la vuelta de las vacaciones se iba a poner en contacto conmigo para decidir las horas y días en los que me daría clases particulares… Y así fue, acabaron mis vacaciones de invierno, volví a clases cuando el primer día el profesor de matemáticas se me acercó y me dijo “Después de clases tengo que hablar contigo así que no te vayas” Y yo le respondí con un “vale”, a las 14:00 acabaron las clases y me quedé esperando él que llegó un poco tarde me dijo: “Toma asiento que tenemos cosas de que hablar” Yo le contesté: “Es por lo de las clases no?” y él me dijo: “Sí”.

Llegamos a un acuerdo al final de que yo iría tres días a la semana durante 3 horas, las clases serían en el aula del instituto.
La primera semana fui, y bueno todo lo que pasó fue normal, la segunda semana, él se retrasó dos días seguidos, y solía venir algo sudado, al tercer día me dice “bueno sinceramente yo creo que estaríamos mejor dando clases en mi casa así no tendría yo que molestarme en venir hasta el instituto, además solo eres tú mi único alumno así que ahorramos molestias al director” Yo entonces acepté, y le pregunté donde vivía para ir a su casa, él me lo apuntó en un papel (no me costó encontrarlo apenas eran un par de calles) La siguiente semana ya empecé a dar clases en su casa, cuando llegué por primera vez me impresionó lo ordenado que tenía todo y súper cuidado, vivía solo y eso me extrañaba en un hombre maduro como él, me invitó a pasar y a ponerme cómodo en su habitación de trabajo con escritorio y demás cosas, era un apartamento grande, pasaron los días y ya se me hizo familiar el piso, él me dejaba ir por su apartamento sin miedo, un día él se ausentó para ir a comprar, yo terminé los ejercicios… y me puse a curiosear sus cosas, vi que tenía unas revistas desordenadas, en un cajón medio abierto, cuando abrí, lo que ví me dejó atónito, tenía revistas de porno gay, empecé a ojearlas sin darme cuenta de que él llegó al apartamento, entró al cuarto y me vio observando sus revistas, me asusté y le pedí perdón por ser tan curioso, ya que había visto un cajón medio abierto y me puse a curiosear.

Él me dijo que me tranquilizara, a continuación me dijo: “Te has asustado más porque te he pillado cotilleándome que por el hecho de que tengo revistas para homosexuales” Yo le respondí “ Bueno el gusto de cada uno es su gusto y hay que respetarlo”, pero él insistiendo me dijo “No pareces incomodo, y parece que te gusta lo que ves” cogió la revista y me la volvió a dar, yo dije “Sí yo prefiero la compañía de hombres también, pero es un secreto no se lo cuentes a nadie por favor” él sonrió y me dijo “Ya lo suponía desde que te ví” me dijo que continuara mirando las revistas, hasta que me fui.

Al día siguiente llegué a su piso, y para mi sorpresa mi profesor no estaba tan arreglado como solía estar, solo estaba con una camiseta sin mangas un pantalón corto y calcetines, y esta vez no me mandó a la sala de estudios sino que me invitó a sentarme en el sofá para hablar… Observé que en la mesa del centro de su salón habían varias revistas más incluso una película porno donde habían jóvenes follando con maduros, se me sentó al lado en el sofá, yo muy nervioso le dije “hoy no estudiamos?” él me dice “Hoy vamos a hacer algo mejor” Y puso la película porno, y me dijo “ponte cómodo, estas en confianza” según avanzaba la película yo me ponía muy excitado y él lo sabía, me dijo que me pusiera más cómodo, o sea en calzoncillos.

Yo así lo hice, él me preguntó si ya había follado, yo le conté mis relaciones sexuales con mi tío, así que él sabiendo cosas sobre mi me dijo “entonces sabrías que hacer con esto no?” ( se sacó su polla dura del pantalón corto) Yo bueno… No tardé mucho en agarrársela, y se la empecé a menear suavemente… A él le gustaba bastante, así que me atreví a dar el siguiente paso, me acerqué con mi boca a su glande y le di un bocadito seguido de unos lametones… me dijo que continuara, que no tuviera miedo, así que sin pensármelo dos veces empecé a meterme su polla no muy gruesa en la boca, y la chupaba con mucho gusto, cada vez más, notaba como su polla estaba caliente y su pulso se aceleraba cada vez más, soltaba unos gemidos tímidos, la polla se le puso roja enseguida, él me quitó el bóxer que llevaba solo y me empezó a acariciar las nalgas, daba palmadas y me decía “ que nalguitas tan ricas tienes hijo mío” Yo no le respondía porque estaba muy viciado chupándole el rabo, hasta que me dijo “Para, ve al baño en el armario tienes un aparato para limpiarte el ano, úsalo cuando acabes ven al cuarto que estaré esperándote” Así lo hice.

Me preparé bien porque ya sabía que venía y estaba muy excitado, entré a su cuarto desnudo, y ahí estaba él con la polla durísima sobre su cama su pecho peludo me incorporé a la cama con él, él me agarro de la cintura y me dio un beso en la boca bastante intenso me puso en su colchón boca abajo, y con su boca empezó a besarme el culo, poco a poco, hasta llegar a mi ano, donde sentí su lengua moviéndose por el alrededor, también sentía como escupía sobre él, para luego meter el dedo índice, poco a poco hasta el fondo, varias veces lo movió dentro, mientras se escupía en su propio pene… después de jugar con su dedo en mi ano pasó a introducir poco a poco su polla, (No me dolió estaba acostumbrado ya) él me introdujo todo su polla desde arriba y comenzó a botar sobre mi, estuvo así un buen rato hasta que me pidió que pusiera el culo hacia arriba, yo lo hice, como alguien muy obediente, la penetración así fue más intensa, y él me daba palmadas en las nalgas… Estaba en el cielo, mi profesor me estaba follando sin piedad, después me dijo que llevara yo el ritmo un poco mientras él descansaba, así que se tumbó boca arriba y yo me senté, empecé a cabalgar arriba, abajo, arriba, abajo, me movía bien como yo sabia, él encantado decidió dar la vuelta a la situación y me puso apoyado en el cabezal de su cama con las dos manos y el culo hacia arriba, me follo un buen rato más en esa posición hasta que finalmente, acabar dentro de mi, noté esa leche caliente en mi ano, como chorreaba él la sacó de mi ano y me la puso en la boca, para que terminase de limpiar… Acabamos muy sudados, estuvimos un buen rato desnudos en la cama hablando, hasta que me dijo que me fuese a duchar… Yo fui pero él me acompañó me puso contra la pared y me volvió a follar, mientras me susurraba “llevaba mucho deseando hacerte esto, y ahora no quiero parar”.

Yo gritaba de placer me encantaba que me dominara… Acabo corriéndose otra vez en mi culo y terminamos, nos aseamos bien, él me besó otra vez en el baño.
Nos vestimos, él me dijo para volver a hacerlo yo acepté sin dudarlo, eso fue un principio de una pequeña relación que mantuve con él donde llegué a hacer muchas cositas…

Espero que les haya gustado, si tienen alguna sugerencia, no olviden comentar o mandarme un mensaje privado
Saludos.