Gracias a mi madre 2
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Mis amigos cuando no estaban cogiendo a mi madre, me estaban cogiendo a mí.
Mi ojete parecía que estaba amoldado a sus pijas, ya que cuando me la metían, solo me daban placer, no me dolía nada cuando me clavaban sus pijas en el culo.
Una tarde vengo de estudiar, y veo todo cerrado en casa, supuse que mi madre estaría cogiendo con alguno de mis amigos, así que me fui a al ventana de su habitación, y estaba bien cerrada.
Caminando me fui a la estación de trenes, donde siempre nos encontramos, pero no vi a nadie, así que me fui al galpón donde siempre cogíamos, y escucho voces, entre ellas la de mi madre, cuando me asomo, la veo medio desnuda, con sus tetas al aire, su calzón en los tobillos, su vestido subido hasta la cintura y tomando vino de un cartón, su voz estaba pastosa, era como si estuviera medio borracha, Gastón se agacha y le termina de sacar el calzón, José Luis le saca el vestido y la dejaron completamente desnuda, sin parar de manosearla, ella seguía tomando vino, y con la otra mano les acariciaba las pijas a mis amigos.
Pablo tendió el vestido de mi madre en el suelo, y se acostó boca arriba, haciendo que mi madre se siente en su pija, Gastón se acomodo detrás de ella y haciendo que se acueste sobre Pablo, le mete la pija por el culo, y José Luis le metió la pija en la boca.
Yo viendo como se cogían a mi madre mis tres amigos, me fui caminando por las vías del tren pateando piedras hasta mas haya de la zona de maniobras de los trenes, donde habían vagones abandonados, y me siento recostado contra una de las ruedas de fierro de uno de los vagones, "que te pasa pibe, que haces ahí?", escucho que me dijo un hombre, con mameluco de trabajo, era un tipo grande, fuerte, con una barriga bien abultada, que venía caminando hacia mi, yo me puse de pie enseguida, un poco asustado, "nada, sentado", le dije, "no sabes que esta zona es peligrosa, que no podes estar?", me dijo con voz ronca.
"Que te pasa, decime?", me dijo, llegando a donde estaba, yo no sabía que decirle, me daba un poco de miedo ese hombre, pero tampoco le podía decir que estaba buscando a mis amigos y que ellos se estaban cogiendo a mi vieja, "nada, vine a buscar a mis amigos y no los encontré", le dije, "y vos y tus amigos que hacen por acá?", me dijo, parado a mi lado, "no estarán haciendo cosas raras, no", me siguió diciendo, "como cosas raras, no entiendo", le dije, mirando su cara de hombre rudo, "alguno de ustedes no se dejara coger con los otros", me dijo, mirando mi cara, haciendo que sin que yo pudiera evitarlo, me ponga rojo, "ha, entonces sos vos el que te dejas coger con tus amigos?", me dijo, sin dejar de mirar mi cara, "si", le dije, bajando la vista a las vías del tren, "te gusta la pija?", me dijo, pasando su mano por mi hombro, yo sentí esa mano dura, enorme sobre mi hombro y pensé que me iba a hacer algo, yo estaba cayado, no decía nada, mientras ese hombre me seguía acariciando el hombro, "y tus amigos, los que te cogen, son de tu misma edad?, nunca te cogió un hombre de verdad?", me seguía diciendo, bajando su mano por mi espalda, yo estaba callado, no decía nada, pero sentir su mano en mi espalda no me disgustaba, "no te gustaría esto?", me dijo, subiendo el doble cierre de su mameluco, sacando su pija medio dura, mas grande así como estaba que la de mis amigos, "chupala un poco", me dijo, agarrando mi brazo y acercándome mas hacia él, yo no sabía que hacer, le miraba la pija y me gustaba, pero también tenía miedo, era el primer hombre de verdad, no eran mis amigos, con sus pijas de adolescente, esta era una pija de verdad, y se notaba que era grande y gruesa, "dale pibe, chupame la pija", me dijo, haciendo con su mano que baje la cabeza y meta su pija en mi boca, que cuando se la empecé a chupar notaba como se iba poniendo bien dura, como me llenaba la boca con su pija, que nada que ver con las pijas de mis amigos, "así, chupa, que se ponga bien dura, así te la meto en esa colita sabrosa que tenés", me dijo, dejando que le chupe la pija y metiendo su mano dentro de mi pantalón y apretando mis nalgas.
Mientras él me apretaba las nalgas, yo le chupaba la pija, "donde me vas a coger?", le dije, volviendo a meter su pija en mi boca, desabrochando mi pantalón, para que le sea mas fácil acariciar mi cola, "ahora vamos a ese vagón, así te hago bien la colita", me dijo, pasando su dedo por mi ojete, "lo tenés abiertito, se nota que ya te cogieron, pero yo te voy a dejar el orto bien abierto, yo si te voy a romper bien el culito", me decía sin dejar de pasar su dedo por mi ojete, mientras yo seguía chupando su pija.
"Vení, vamos", me dijo, sacando su mano de mi cola y su pija de mi boca, nos fuimos a un viejo vagón de pasajeros, subimos y cerró la puerta, "a ver como te sacás el pantalón y me dejas ver esa hermosa colita?", me dijo, acariciando su pija, mientras yo me sacaba las zapatillas, y me bajaba el pantalón, con mi culo para el lado donde estaba él, a medida que me bajaba el pantalón, movía mi cola, provocativo, sentía sus manos acariciar mis nalgas a medida que mas me bajaba el pantalón, me agachaba y sus manos me estrujaban las nalgas.
Cuando quedé desnudo de cintura para abajo, me agacho frente a él, y me abro las nalgas dejando que me vea el agujero de mi culo, "te gusta?", le dije, moviendo mi culo, sin cerrar mis nalgas.
Había pasado de los nervios a marica provocativo, quería que ese hombre rudo me garche con esa tremenda pija, "veni putito, chupame la pija de nuevo que te voy a meter un dedo en el culo", me dijo, haciendo que me agache y cuando le empiezo a chupar de nuevo la pija siento como me va metiendo el dedo en el culo, eso me hizo gemir de placer, a medida que metía su dedo, yo movía el culo, "acomodate acá, entre estos asientos que te voy a reventar el culo", me dijo, sacando su dedo de mi orto y si pija de mi boca, me acomodó entre unos asientos que se notaba que habían conocido tiempos mejores, yo levanto bien mi cola, con su mano me hace bajar el torso y siento como me pasa saliva por el ojete, yo sin que me diga nada, me abro las nalgas, y siento como me pasa su pija por el ojete, como deja caer saliva y acomoda la cabeza de su pija contra mi ojete y me agarra de la cintura, y haciendo fuerza, me hace gritar cuando me la empieza a meter, yo respiraba hondo, me relajaba a medida que sentía como esa enorme pija me abría el orto, ahora si me estaban rompiendo el culo de verdad.
La verdad me la estaba metiendo despacio, pero por el tamaño y el grosor, me dolía, pero también me gustaba, me gustaba como ese rudo ferroviario me estaba rompiendo el orto, yo gemía a medida que su pija no dejaba de entrar, hasta que dando un último empujón, me la termina de meter, "así, vez, bien clavadito por la colita", me dijo, aplastando mis nalgas contra su cuerpo, sentía su enorme pija dentro de mi culo, como despacio la empezó a mover, como me cogía con mucho cuidado, "quiero seguir comiendote la colita como te la estoy comiendo", me decía, sacando y metiendo su pija despacio de mi cola, yo gemía y a todo le decía que si, me gustaba como ese hombre de aspecto tan rudo, me cogía la cola con tanta delicadeza, la sentía salir y la sentía entrar toda, sentía mi culo abierto, lleno con su pija, sin sacar su pija de mi culo, me agarró fuerte de la cintura y me levantó literalmente clavado en su pija, y se sentó en el asiento donde estaba yo, ahora estaba sentado en su pija, sus manos me acariciaban el pecho, yo movía mi cintura en círculos, con toda su pija dentro, sentía como mi ojete se agrandaba, me encantaba la pija de mi desconocido amante, solo sabía que estaba ensartado en una tremenda y hermosa pija que me estaba cogiendo como jamás soñé que me cogieran en mi vida, sin dejar de mover mi cintura, rocosté mi cabeza contra su pecho, disfrutando de como me cogían, gimiendo, suspirando, "me volves loco con tu pija en mi culo", le dije, cerrando los ojos y disfrutando, me pasa sus manos por debajo de mis nalgas y me empieza a subir y bajar de su pija, cada vez que me metía toda la pija en la cola, yo gemía de placer, "cuando tus amigos te noten lo abierto que vas a tener el ojete, no vas a sentir sus pijas", me dijo, sin dejar de hacerme subir y bajar de su poronga, rompiendo bien mi orto, "no me importa, mientras me sigas cogiendo como me estas cogiendo", le dije, con vos muy mimosa, "siempre que quieras una pija de verdad, sabes donde encontrarme", me dijo, moviendo su pija mas rápido dentro de mi culo, "te querés acabar?", le dije, dejando que me haga como él quiera, "si mariquita, te voy a llenar el orto de leche", me dijo, haciendo que sus movimientos sean mas rápidos y fuertes, "si papito, llename bien la cola de leche, dame toda tu lechita en la cola", le dije, gimiendo fuerte, notando como me cogía mas fuerte, hasta que me dio un sentón fuerte y dando un grito, sentí como su pija latía dentro de mi culo, llenando mi orto de leche, yo aplastaba mas mi cola contra su pija, gemía, movía mi cintura en círculos, "si, dame toda la lechita, llename bien la cola, llename bien el orto de leche", le gritaba, sintiendo las palpitaciones de su pija dentro de mi culo, los dos gemíamos como locos, yo estaba en la gloria, como estaba disfrutando con esa enorme pija como loco.
Nos quedamos quietos, mi rudo amigo no me levantaba de su falda, yo seguía clavado en su pija, "te gustó?", me dijo, quietos los dos, "si, me volvió loco tu pija, me querés echar otro?", le dije, moviendo mi cola, insinuante, "te gusta tragar leche?", me dijo, haciendo que me levante de su pija, notando como me salía la leche del culo de lo abierto que me había dejado el ojete, yo me quedé parado viendo su pija, mojada de leche, roja, como hinchada, sentía mis piernas mojadas de su leche saliendo de mi culo, "me encanta la leche de pija", le dije, bajando mi cabeza y metiendo su pija en mi boca, chupando, limpiando de leche esa enorme cabeza que un momento antes la tenía toda metida en mi cola, me arrodille entre sus piernas y le chupaba fuerte la pija, notaba que estaba muy sensible, por sus gemidos y como retorcía el cuerpo a medida que yo lo chupaba, yo subía y bajaba mi cabeza haciendo que si pija entre y salga de mi boca, le pasaba la lengua por todo el tronco, por la cabeza, la volvía a meter en mi boca y la chupaba fuerte, así abre estado unos cinco minutos, hasta que siento como me agarra la cabeza y da un grito mas fuerte que cuando se estaba acabando en mi cola, y siento unos chorros de leche en mi boca, no decía nada, solo gemía, mientras yo me tragaba esa leche que me dejaba, le lamía toda la pija sacando hasta la última gota de leche, "me dejaste los huevos vacíos", me dijo, guardando su pija, mientras yo me ponía el pantalón, sintiendo como su leche me mojaba el calzoncillo.
Nos despedimos, quedando que nos íbamos a ver otra vez, y pase por donde mis amigos se habían estado cogiendo a mi madre, no había nadie, solo había tirado en el piso, sus calzones y su corpiño, se ve que de tanto que la cogieron y que estaba borracha, ni se acordó de ponérselo, se fue sin ropa interior, yo lo recogí y los lleve a casa, oliendo el calzón de mi madre, que olía a mas que nada a pis y se notaba que mis amigos se habían limpiado las pijas en el calzón de mi madre.
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