HACIENDO DEDO A MIS 13 AÑOS ( autostop)
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Ganymede.
Eran épocas con menos peligro que las actuales. Yo tenía la costumbre de hacer dedo en mi ciudad y así me ahorraba el dinero del pasaje en omnibus o subterraneo.
Ese día como otros tantos hacía dedo en una esquina con semáforo para aprovechar que los automóviles estaban detenidos. Me hizo señas un señor que subiera. Tendría unos 30 años y su auto y el olían muy bien. Rapidamente me llevó a la charla que el queria y me preguntaba si tenía novia o si había tenido sexo con alguna compañera de colegio. Su mano frecuentemente se apoyaba en mi pierna y la dejaba ahi. En eso me pregunta si yo había manejado antes un vehiculo, le dije que no. Me preguntó si me gustaría hacerlo. Claaaro, le dije yo. Se desvio del camino y entró a un parque arbolado con casi nada de transito. Me dijo que tomara el volante. Irremediablemente me tuve que acercar a él pero no le di importancia por las ganas que tenía de conducir.
Cuando estaba en lo mejor del paseo siento que su mano se apoya muy cerca de mi ingle y presionaba con distintas intensidades. Fue subiendo su mano hasta que hizo contacto con mi pene pero no retiro la mano. Yo estaba un poco asustado pero tambien disfrutaba del roce de su mano que se exageraba con el traqueteo del carro. Al principio dudé si el se daba cuenta donde tenía su mano, pero mis dudas se disiparon cuando empezó a recorrer con su dedo el perfil de mi miembro, que para ese momento empezaba a cobrar vida. Él siguió con su juego hasta ponermela dura como piedra. Y ya sus caricias fueron descaradas.
Me indico que me orillara y detuvo el auto, ya que el manejaba los pedales. Siguió acariciando por arriba de la ropa con ambas manos ahora. Entonces jalando una palanca dejo mi butaca casi horizontal y yo me recoste. El me desprendió el pantalon me bajó el cierre (zipper) yo ayudé apoyándome en mis talones y levantando las caderas. Mi pantalón y calzoncillo quedaron a la altura de mis rodillas, dándole libertad a mi aparato de unos 15 cms en ese entonces. El comenzo a acariciarlo y mover la piel hacia adelante y atras descubriendo mi cabeza que ya tenía un color rojo violaceo de la calentura. Sin decir una palabra se agachó y comenzó a pasar su lengua por toda mi pijita con especial atención en el glande. A mi cuerpo lo recorrían mil descargas de placer y creo que empece a contorsionarme.
De repente mi pene desapareció en su boca y empezo a subir y bajar su cabeza entrando y saliendo toda ella hasta mis huevos.
Cuando la punta chocaba con su garganta me arrancaba gritos de placer. No dure demasiado, a los 13 años mis hormonas estaban en efervescencia. Disparos de semen eran tragados por mi desconocido chofer mientras yo literalmentey gritaba sintiendo el mas intenso orgasmo jamas sentido. Se tragó hasta la ultima gota y la dejó en su boca un buen rato mas. Cuando se retiro me llamo la atención que estaba totalmente descapullada y brillante.
Me subí el pantalón y el me pregunto si tenía tiempo de tomar un helado. Le dije que si y fuimos a una heladeria dentro del parque en donde me compro el helado más grande con todos los aderezos. Charlamos, me pregunto si me habia gustado, elogio mi cuerpo y mis ojos. (verdes claros) Arrancamos en el auto y me dijo si me gustaría hacer algo mejor. Mi curiosidad pudo más que el regaño que recibiría al llegar a mi casa. Y ahora tomo un sendero secundario e incluso se salió de el para detenerse bajo unos sauces de ramas largas y colgantes, eso sumado a que la tarde ya estaba cayendo daba al lugar bastante intimidad.
Comenzo otra vez a mamarmela y cuando ya estaba muy dura me dijo si queria metersela. Le dije que si. Abrio las 2 puertas del lado del acompañante y quedó encerrando entre ellas al tronco del arbol. De la gaveta saco un pomo con un gel.. Se bajo los pantalones y ahi me di cuenta de donde venia tanto olor a perfume. Se acomodo con los pues en la tierra y su cuerpo recostado en el asiento trasero. Sus pantalones ya estaban en el asiento delantero. Me paso el gel y me dijo que lo apretara en su ano. Me llamo la atencion que no tuviese un solo pelo, parecia el culo de un niño. El perfume era intenso, con mi pija eternamente dura el le dio los ultimos besos y le coloco un poco de gel. Ya esta listo, me dijo. Lo apoye en su agujero y como vibora hambrienta se lo trago todo de un bocado, casi sin resistencia. El gritaba que le diera mas fuerte y mas duro. Subia y bajaba sus caderas, las deslizaba hacia atras y adelante y tambien hacia circulos si sumamos que contraia y relajaba su esfinter, yo me encontraba en un estado de nirvana, de placer total. El en un momento me dijo que queria que lo coja de frente. Se la saque se dio vuelta y abriendo las piernas las apoyo en los parantes de las puertas.
Por primera vez vi su pene y le pedi que pusiera algo entre el y yo para que no me rozara, puso su pantalon y de inmediato volvi a penetrarlo. Le miraba la cara y a veces sus ojos quedaban en blanco. Con sus manos acariciaba mi espalda y poco a poco fue abrazandome hasta quedar pegados. El cruzo sus piernas sobre mi haciendo mas fuerza. Cada vez bombeaba mas rapido y estaba muy cerca de mi segundo orgasmo. Empece a jadear cerrando los ojos, ante lo inminente, en eso siento que sus labios se apoyan en los míos y los empieza a morder. Antes que me hubiera dado cuenta su lengua jugaba con la mía.
Asi nos encontro el orgasmo, lucecitas multicolores estallaban en mi cabeza mientras que con todas mis fuerzas le clavaba mi palo hasta donde sus nalgas me lo permitian, mientras las contracciones de su tripa me ordeñaban como ternero mamon. En cada contraccion mis jugos regaban sus entrañas. Ahi me acorde que con su boca me acababa de chupar y me separe rapidamente.
Nos quedamos abrazados hasta que note como se salia por la flacidez. Me lleno de elogios y palabras dulces.
Nos vestimos. Me llevo a mi casa aunque lo hice dejarme 1 cuadra antes para que no sepa donde vivo. Me pregunto si queria repetirlo. Me dio cita para 3 dias despues. No fui.
Paso un año y por casualidad me lo encontre en un cyber cafe. Me saludo y…. Es otra historia. Pero solo les contare que deje de tenerle aprension a su pene, y que no solo olia bien sino que tambien sabia muy rico. Y cuando me penetro solo me dolio al principio..despues me hice adicto. 😉
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