Historia de un joven desubicado y parafílico 7: Anécdotas antes de volver a los malos pasos.
Relato de un par de anécdotas poco «excitantes» que me marcaron, mi primera cita fallida y el chico quien fue mi primer amor platónico. .
Continuando mis experiencias ahora en mi juventud, después de mi intento fallido de acabar con todo a mis 15 años, me pareció como si mi vida se fuera resolviendo sola, perdí contacto con el chico de 5 y sus amigos, comencé a estudiar en otra preparatoria y ahí me fue muy bien, en los siguientes años me enfoque en mis estudios.
A los 17 seguía viviendo y trabajando en casa de mi tío, por motivos de trabajo mi tío contrató internet que en ese entonces (a finales de los 90s) era muy rudimentario, (era el internet lento que llegaba por línea telefónica). Yo solía usarlo por las noches para no tener problemas por ocupar el teléfono, recuerdo había un chat en forma de cómic, en el que generalmente las salas eran en ingles, pero de vez en cuando había algún chat gay en español.
En esas salas por lo general encontraba gente de España, rara vez encontraba a alguien de mi país, pero en una platica cualquiera, coincidió que éramos de la misma ciudad y además teníamos edad similar, me dijo tenía 16.
Me pidió el número de teléfono de mi casa (en ese tiempo el uso de celular todavía no era tan común), yo por desconfianza no le di mi nombre real, me desconecté de internet para recibir su llamada, al poco tiempo me marcó, los 2 no podíamos creer que viviéramos cerca (en ese tiempo fue una gran coincidencia), estuvimos platicando un rato, me sentí muy bien platicando con él, me sorprendió que aún sin conocernos en persona ya me estaba pidiendo ser novios, pero yo no podía hablar cómodamente ya que mi tío a veces se acercaba y no tenía mucha privacidad, quedamos de vernos el día siguiente en un parque.
Al siguiente día estuve pensando, tal vez no era buena idea conocer a alguien de mi edad, para entonces ya era consciente que los chicos de mi edad o mayores no me llamaban la atención, y mucho menos me interesaba tener novio, entre tanto pensar si asistir o no, llegó la hora y se me hizo tarde, llegué al parque unos 30min después de lo acordado, cuando estaba a unos 50 metros del lugar vi a un chico muy apuesto sentado en la banca que acordamos, dude si realmente tendría 16 porque aparentaba menor edad, se veía como un chico de 13 o 14, mientras iba acercándome él se levantó, se notaba molesto, note que arrojó algo al suelo y se retiró, pasó a un lado de mi y dude si hablarle, aparte de verlo molesto no estaba seguro si era él, yo esperaba encontrar a un chico de mayor edad.
Me acerqué a la banca y vi lo que había arrojado, era una pulsera de tela con adornos de arcoíris hechos a mano, entonces fue cuando me convencí que era él, traté de alcanzarlo, pero entre tanta gente ya no lo encontré.
Cuando llegue a casa, tenía esperanza de que volviera a llamar, y así fue, pero desafortunadamente quién contestó fue mi tío, solo escuche a mi tío decir -aquí no vive nadie con ese nombre- y colgó, el teléfono no tenía identificador de llamadas y yo no le pregunté su número, las siguientes noches traté de encontrarlo en alguna de las salas de chat pero ya nunca supe de él.
Me arrepentí muchísimo de haber dudado en asistir, me quedó muy marcada esa experiencia porque muchas veces me pregunté que habría pasado si nos hubiéramos conocido, nos habríamos llevado bien? tener una relación con él habría evitando tantos errores que cometí en años siguientes? o tal vez yo ni siquiera le hubiera llamado la atención? quién sabe, igual los hubiera no existen y para bien o para mal no nos tocó conocernos.
Otra anécdota que me marcó mucho fue un año después, tenía 18 y acababa de terminar la preparatoria, todo iba bien en mi vida, pero encontrar lugar en la universidad no fue fácil, quedé en lista de espera y comenzaría a estudiar hasta después de 6 meses. Una maestra me comentó que un conocido tenía un internet público (en aquel tiempo comenzaron a ser muy populares) y buscaba un ayudante, como yo tendría libres 6 meses podría solicitarle empleo.
Aunque yo ya tenía trabajo con mi tío, me interesó hacer algo diferente, fui al negocio y el dueño me explicó lo que tendría que hacer, me presento a su familia quienes eran los que atendían el internet público, por las mañanas estaba su esposa, poco después de medio día llegaban sus hijos, un chico de 9 y su hermano de 13 y por la tarde noche atendía el dueño, yo trabajaría ayudando principalmente en el rato en el que estaban sus hijos.
Me llamó mucho la atención el chico de 9, su nombre era Daniel, era un chico bajito, ni gordito ni flaco, de piel un poco bronceada y cabello negro ondulado, pero más que su físico lo que me llamó la atención fue su carisma, era un chico muy atento y amigable, algo que no había visto en un chico de su edad, su hermano también era agradable pero era mucho mas reservado.
No tarde mucho en llevarme bien con ellos, Dani me tomo confianza muy pronto, comenzó a abrazarme, recargarse en mi o hacerme cosquillas en broma, yo en un principio me saque de onda, aunque me encantaban sus muestras de afecto no estaba acostumbrado, pero vi que así era con su familia, de hecho me dio la impresión de que conmigo buscaba el afecto que no encontraba con su hermano. Cuando teníamos ratos libres me pedía que jugara videojuegos con él o que le ayudara en sus tareas, como a los 2 nos gustaban las cosas de computadoras siempre teníamos algún tema para platicar. Su hermano por lo regular se la pasaba en su computadora y solo nos ayudaba si había muchos clientes, aunque interactuaba menos con su hermano igual nos llevábamos muy bien.
En el transcurso de los meses cumplí 19 años, en mi familia era raro festejar los cumpleaños, recuerdo ese día en el trabajo, cuando llegaron Dani y su hermano me llevaron un pequeño pastel, organizaron una fiesta invitando algunos de sus amigos, me sorprendió recibir mas afecto de esos 2 hermanos que de mi propia familia.
Dani aunque físicamente me atraía, con él me sentía diferente, sus abrazos y demás contacto físico me gustaban mucho pero no de forma sexual, a veces él intentaba sentarse en mis piernas pero yo no lo dejaba, de alguna manera no quería sentirme atraído mas de la cuenta, supongo que intentaba respetar esa amistad sincera que tenía con él.
Recuerdo los días que no me tocaba trabajar me sentía raro, a veces molesto y no sabía porqué, no lo entendía en ese momento pero la ausencia de Dani me afectaba, sin darme cuenta estaba sintiendo algo por él.
Lo más «sexual» que llegue a tener con él fue una tarde en la que solo estábamos Dani, su hermano y yo, ellos estaban riendo mientras miraban animaciones flash, entonces su hermano mayor para molestarlo comenzó a cargarlo y hacerle cosquillas, Dani le pedía que lo soltará porque tenía que ir al baño pero su hermano no le hacía caso, como pudo Dani se liberó y salió corriendo a un pequeño baño que había en el negocio.
Después escuche que Dani desde el baño me llamaba, me extrañó mucho, cuando le pregunté que sucedía me dijo que pasara, al abrir la puerta vi cuál era el problema, Dani no alcanzó a llegar al baño y se había orinado en los pantalones, cuando Dani me vio corrió y me abrazó, empezó a llorar preocupado porque sus padres lo regañarían, lo abrace y traté de consolarlo, en eso llegó su hermano y en vez de animarlo lo tomó más a burla.
Tratamos de contactar a su mamá para que le llevara otro cambio de ropa pero no estaba en casa, después llamamos a su papá y quedó en llevarle ropa pero llegaría algunas horas mas tarde. Como Dani estaba muy mojado su hermano sugirió que lo mejor sería poner a secar su ropa y que esperara en el baño a que llegara su padre.
Dejamos solo a Dani en el baño para que se quitara la ropa mojada y se aseara, después de un momento me volvió a llamar, le pregunté que sucedía y me dijo que si le podía ayudar a colgar su ropa junto a una ventana que no podía alcanzar, al entrar al baño esperaba que él se ocultara detrás de la puerta o que se tapara por vergüenza, pero no fue así, entré y lo vi desnudito de la cintura para abajo, estaba limpiando sus piernas con papel higiénico, yo trataba de mantener la mirada en su rostro pero no pude evitar mirar sus lindas piernitas y su pequeño penecito.
Dani actuaba de lo más normal, incluso en un momento se puso de espaldas a mi y me señaló dónde quería que colgara su ropa, dejándome ver a detalle su traserito (yo estaba desconcertado tratando de admirar lo más posible su hermoso cuerpecito) ahí me di cuenta que la mayoría de su cuerpo estaba bronceado ya que sus nalguitas y el resto de lo que cubrió su traje de baño eran mucho más blanquitas. En eso llegó nuevamente su hermano, curiosamente con él si mostró vergüenza y se cubrió con las manos para que no mostrar sus partecitas.
Como Dani no quería estar encerrado por varias horas, buscamos la manera de cubrirlo, había una pequeña toalla para secarse las manos, pero era muy pequeña para su cintura, entonces se me ocurrió quitarme el suéter y ponérselo como tapa rabos. Puede haberme aprovechado en ese momento y manosearle la colita mientras le colocaba mi suéter, pero Dani me tenía mucha confianza y no quise aprovecharme de él, solo accidentalmente roce un poco sus pompas y su penecito mientras le amarraba mi suéter en su cintura.
Dani recuperó su alegría habitual y se pasó el rato detrás del mostrador, entre bromas a veces su hermano le pellizcaba una pompa ya que mi suéter solo le cubría por enfrenté y aunque Dani estaba sentado se le alcanzaba a ver parte de su traserito, yo trataba de pasar el mayor tiempo junto a él para de vez en cuando mirar sus pompitas al aire, en un momento mientras estábamos sentados juntos, él se recargo junto a mi como a veces solía hacerlo, me encantaba sentir su cuerpecito pegado al mio, yo pase mi brazo por su espalda para abrazarlo por su hombro, me hubiera encantado bajar mi mano un poco mas y tocar sus nalguitas.
Algo curioso que pasó ese día es que uno de los amigos de Dani llegó, por lo regular siempre jugaban juntos pero esa ocasión por obvias razones Dani no quería salir y mostrar que estaba semi desnudo, fue entretenido inventar pretextos para que Dani se quedara en su lugar y para evitar que su amigo se acercara, entre el hermano mayor de Dani y yo bromeábamos con el niño para no dejarlo pasar del mostrador.
A las pocas horas llegaron sus padres, por suerte no lo regañaron, y hasta me agradecieron por haberlo cuidado, Dani me regresó mi suéter que por supuesto nunca volví a lavar y fue el único recuerdo que me quedó de él.
Algunas semanas después se cumplieron los 6 meses, yo tenía que prepararme para entrar a la universidad y de hecho ya no me necesitaban tanto en el negocio ya que la mamá se había desocupado y ahora estaba en el negocio desde la mañana hasta la tarde, llegó el momento de despedirme, el último día que estuve en ese internet público solo fue por la mañana, el dueño y su esposa me agradecieron y me dijeron que no era necesario que me quedara ese día, no pude despedirme de Dani y su hermano porque ellos llegaban hasta medio día, la última vez que los vi fue el día anterior y me despedí como cualquier día normal de trabajo. Debido a que estaba muy distraído por los trámites de la universidad no le di mucha importancia a despedirme, no me imaginé que ya no los volvería a ver.
Pasaron los días y noté que me sentía raro, algo me molestaba, algo me faltaba, me sentía triste pero no sabía porqué, hasta un día saliendo de la universidad tomé el autobús a casa, en eso se subió un chico de una edad similar a Dani, inmediatamente me hizo pensar en él, fue ahí cuando me di cuenta que lo extrañaba mucho, me dio un sentimiento de tristeza y muchas ganas de llorar, no lo entendía sentía que necesitaba estar junto a Dani.
Pensé acaso este sentimiento será estar enamorado?, nunca lo había sentido, no había reflexionado sobre lo bien que me sentía cuando estaba a su lado ya era tan normal para mi, aunque los estudios me distrajeron no podía evitar sentirme triste por no estar a su lado, escuchar cualquier canción triste me hacia pensar en él, muchas veces pensé regresar a ese negocio para saludarlo y saber de él, pero estaba consciente que me estaba obsesionado y que sería mas difícil dejar de pensar en él si lo seguía viendo, además pensaba no sería bien visto una amistad de un chico de 19 con alguien de 9, preferí mejor no involucrarme mas en su vida, nunca regresé y no supe más de él.
Con Dani no pasó nada sexual, lo más fue esa ocasión que lo vi semi desnudito, fue el primer chico con el que me sentí muy feliz sin haber tenido nada sexual, a él lo recuerdo por su afectó y por haber sido mi primer amor, nunca supe si él llego a sentir algo por mí, yo pienso que no, era solo un chico.
Sin embargo el sentimiento de tristeza me duró varios años, no estoy seguro pero estar en depresión tal vez influyó a que cometiera mis siguientes errores, entre los 21 y 22 regresé a mis malos pasos y comencé a manosear primos de entre 8 y 11 años, llegando hasta lo sexual con algunos.
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