Historias Alternativas: Blanco Nieves (Primera Parte)

El príncipe Blanco es un joven apuesto y bondadoso que se ve obligado a huir de su reino después de que su madrastra, la Reina Grimhilde, se siente amenazada por su belleza. En su viaje conocerá la calentura que lleva en su interior.
Blanco:

Edad:14 años

Estatura:1,60

Descripción: niño tímido, delgado, con razgos femeninos, piel blanca y gran culo heredado de su madre.

Cazador:

Edad: 35 años

Estatura: 1,85

Descripción: hombre con muy mal carácter, que está acostumbrado a una vida solitaria con cuerpo bien marcado ya que su trabajo necesita mucho desplazarse con agilidad.

Reina Malvada:

Edad: 50 años

Estatura: 1,67

Descripción: Es una mujer narcisista, muy bella que no aparenta su edad, con un cuerpo de grandes senos y gran trasero que deja loco a cualquier hombre.

El príncipe Blanco

En un reino lejano, vivía un príncipe llamado Blanco, conocido por su belleza y bondad. Su madrastra, la Reina Grimhilde, era una mujer cruel y ambiciosa que deseaba ser la más bella del reino.

La Reina Grimhilde al ver que el príncipe Blanco se robaba las miradas de todos los hombres y mujeres, ordenó a un cazador que lo matara en el bosque. Sin embargo, el cazador cuando vio a aquel chico tan hermoso y con un culo de sueños, solo lo quería para él.

Lo llevo a una cabaña y lo despojó de toda su vestimenta. Blanco estaba asustado ya que no sabía cuáles eran las intenciones de este hombre.

El cazador con una cerveza en una mano y un cuchillo en la otra ordenó al príncipe a qué se la chupara. Blanco, indefenso y sin nada con que defenderse se acercaba a aquel hombre con mucho temor, luego agarró su miembro y como pudo llevó aquel pedazo en su boca.

El cazador está disfrutando de su cerveza y teniendo la boquita del príncipe atragantandose con su miembro, viendo cómo el más hermoso de todo el reino se comía su polla.

Blanco por su parte sentía mucho temor y no podía respirar ya que aquella enorme cosa lo hacía atragantar. Pero en su mente pedía por favor que terminara esa humillación.

En unos minutos el cazador con un grito fuerte terminó en la cara del príncipe y le ordenó a qué se acostara en la cama y que durmiera temprano ya que al otro día tenía muchas mas ideas para hacerlas con ese niño bonito.

Es mi primer relato, si tienen alguna sugerencia por favor comenten así puedo mejorar en la segunda parte.