Historias de sexo gay (maduros y jovenes) «El niño caliente»
Esta es otra historia, ahora de un niño de 10 años que se dejó llevar por la calentura con un desconocido de internet. .
Esto lo contaré en primera persona, mi nombre es Diego, cuando esto pasó yo tenía 10 años, mi cuerpo es delgado, con una cinturita delgada y femenina, mis nalgas redonditas y paraditas, tengo lindas piernas, piel clara, cabello castaño claro, ojos verdes, labios lindos y rosaditos, bonita sonrisa, en fin, soy un chico lindo y en ese entonces media 1:30cm.
Vivo en un estado muy caluroso del país México, en el puerto, por esa razón siempre me la pasaba en shorts cortitos y con playera sin mangas, era verano y mis padres siempre salían a juntas de negocios ya que tienen un negocio de vienes raices, una vez no consiguieron niñera para mi hermanito (Javier de 8 años) y para mi, así que no querían salir porque sus negocios eran en las noches y siempre llegaban al amanecer un poco pasados de copas, en esa ocasión sus clientes insistieron y ellos al no poder rechazar ese negocio aceptaron, salieron pero nos dejaron miles de indicaciones, al día siguiente se dieron cuenta que yo ya estaba grande y que bien podía hacerme cargo de mi hermanito por las noches, al final solo era estar al pendiente que tomara sus pastillas para dormir ya que era hiperactivo (pero esas se las daba mi mamá antes de irse), se les hizo costumbre dejarnos solos a los dos y como vivimos en una zona la verdad muy bonita, de gente de dinero, en una casa bastante grande, pero al ser muy tranquila, tu puedes andar en la calle a altas horas de la noche y nadie te dice nada. Al principio llegaban como entre 2 y 3 de la madrugada pero como ya estaban confiados de mi, ya siempre llegaban como a las 5 o 6 de la mañana que era la hora a la que mi hermanito se despertaba.
Yo siempre fui un niño muy caliente, veía porno gay en mi celular ya que al ser mis padres personas de dinero, me compraban todo, en una ocasión me metí a un chat justo del estado donde vivo ChatGayVe…, primero solo veía las conversaciones hasta que me atreví a hablar y poner un hola (en mi usuario solo puse mi nombre y un 10). Como nadie me hacia caso, puse «Hola tengo 1-0 años y estoy caliente» de inmediato me llegaron muchos mensajes preguntando si de verdad tenia esa edad, yo trataba de seguirle la platica a todos porque eran muchos mensajes pero no podía, así que algunos dejaron de escribirme y otros solo decían que no me creían, me sentí triste hasta que un hombre (ActivoPoprVrgon) me mandó mensaje, comenzamos a platicar, yo le conté que tenía 10 años y nunca había estado con alguien, solo le había chupado el pene a un amiguito de la escuela pero nada más, le conté que me gustaba ver videos porno gay de maduros con jovencitos imaginándome ahí, siendo penetrado por un maduro, el me contó que si yo quería el podía enseñarme pero debía ser esa misma noche, aún eran como las 10 y mispapás apenas iban a salir, yo le conté que mis papás se iban y quiso que lo invitara a mi casa pero le dije que estaba mi hermanito y si se despertaba iba a contárselo a mis papás, me propuso ir a un motel, le dije que por lo que veo en la tv, no creo que me dejen entrar, el dijo que no me preocupara, que tenía a un amigo taxista que nos podía llevar y tambien nos iría a recoger, yo lo estuve pensando mucho hasta que me decidí y le dije que si, pero sería en la madrugada para que ya no estuvieran mis papás y los vecinos no me vieran salir, le di mi número de WhatsApp y nos despedimos.
Antes de salir de casa mi mamá me mandó a bañar, al estar en la regadera, me sentí muy nervioso, todavía estaba dudando si ir o no, era muy arriesgado pero yo estaba por demás excitado, no se como pero cuando me di cuenta ya tenia mi dedo en mi hoyito lleno de jabón penetrándome muy despacio, eso me excitó aún más y me confirmó que mi aventura tenía que sucedes a como de lugar.
Pasaron unas horas después de que mis padres se fueron, me hablaron por teléfono diciendo que iban llegando al lugar y que ya me durmiera, les dije que si, de inmediato me puse la ropa que el me dijo. un short (el más cortito que tenga) fue un short blanco de algodón muy cortito que dejaba ver bien paraditas mis nalguitas (si n ropa interior como el me ordenó) una playerita de futbol americano blanca, de esas de muchos hoyitos pero con un estampado muy chiquito en la espalda, así que de frente se me veía el cuerpo casi desnudo, unos tenis Nike blancos de botín y una gorra azul pero puesta hacia atrás, me mandó whats y me preguntó que como iba, le conté y no me contestó, me mandó un audio diciendo que ya me quería tener con el, su voz era muy ruda y áspera, como de un macho y de inmediato me calentó mucho más.
A la 1 am me dijo que ya iba en camino al fraccionamiento donde vivo, me puse muy nervioso, por un momento me preocupé de lo que iba a hacer pero regresó a mi la calentura así que me asomé a que mi hermanito estuviera bien dormido, tomé mi celular, mis llaves y me salí de la casa caminando en dirección a la avenida donde quedamos de vernos, a esa hora muy pocas luces alumbraban la calle y aunque eran solo unas casas de distancia para llegar al letrero de piedra (C- ORO) del fraccionamiento el camino se me hiso eterno sobre todo esperando que ningún vecino me viera.
Al llegar me recargué en el letrero de piedra, no pasan coches, de repente pasaba uno que otro pero yo me escondía atrás del letrero, yo era muy bajito y delgadito así que me era fácil esconderme. De pronto me llega un whats, era el, me decía «ya llegué, no te veo», mi corazón comenzó a latir demasiado rápido, mis piernitas me temblaban, a pesar de que hacia mucho calor, de repente me entró un frío tremendo, sentí que me desmayaba, imagínense, un niño pequeño de 10 años en la oscuridad de la madrugada en la calle esperando a un hombre maduro que pronto le quitaría la virginidad, tenía miedo pero estaba emocionado a la vez.
Un taxi se paró frente al letrero, lo manejaba un señor gordo pero no le vi bien la cara porque tenia la luz apagada, del taxi se bajó un hombre como de 1.85 de altura, un cuerpo bastante macizo, no era muy marcado pero si era hermoso, moreno claro, con una playera negra sin mangas, con los brazos muy fuertes y gruesos llenos de tatuajes, de echo se le veían tatuajes también en el cuello, pantalón de mezclilla, ojos delineados de negro, cabello negro alborotado pero lo hacia ver interesante, tenía un pco de barba (de esa que salen de unos días), en fin era hermoso macho, se asomó a donde yo estaba y salí por fin de mi escondite, Al verme se le iluminaron los ojos y me dio una mega sonrisa, yo me quedé viendo todo su cuerpo y me dio la mano, «Mucho gusto Diego, soy Martín el del chat», yo le respondí con un hola entrecortado por los nervios, me tomo de la mano y me subió al taxi como si fuera su novia, me trató con tanta amabilidad. El taxista ni volteo ni nada, aunque yo llevaba la cabeza agachada en todo momento por vergüenza (gran error porque no supe ni por donde íbamos). Martin no dejaba de decirme sin pena ni nada lo hermoso que era, me besaba las manos, los brazos, las mejillas y en un momento me besó los labios muy sutil pero muy tierno, eso me encantó y sonreí, durante el camino que fue muy poco me trató de calmar diciendo que todo iba a estar bien, el me acariciaba mis piernas, eso de inmediato hiso que se me pusiera dura y el solo se rió, me comenzó a acariciar la verguita sobre el short y al darse cuenta que no llevaba ropa interior se emocionó y fue ahí donde tomó mi rostro con su enorme mano y me plantó un beso de lengua tan caliente que yo apenas podía con esa sensación.
Al llegar al motel, me dio miedo de que no me dejaran pasar pero el me calmó diciéndome que no me preocupara, los vidrios del taxi eran polarizados así que no nos veían por fuera, el taxista solo bajó la ventanilla de su lado (solo muy poco, aparte después me contó Martin que ese es su amigo y el lleva a mucha gente ahí, que ya lo conocían y no le hacían preguntas), el taxista se metió hasta la entrada (el como estacionamiento dela habitación) y se bajó la cortina atras de nosotros, nos bajamos y Martín bajó una maleta negra del taxi, le dijo al señor que regresara a las 3:30 por nosotros, nos subimos las escaleritas para la habitación y el taxista se fue.
Martin abrió la puerta y encendió la luz, no era particularmente lujoso ni llamativo pero estaba bien, lo importante es que ya estábamos ahí, me dio la mano y llevó hasta la cama, su agachó ya que el era muy alto y me tomó con las dos enormes manos rasposas de hombre, una en cada mejilla mía y me dio un beso aún más intenso que el que me dio en el taxi, comenzó a tocarme sobre la ropa por todo el cuerpo, yo era inexperto pues era mi primera vez así que yo solo me dejaba querer. Me puso mis brazos al rededor de su cuello y me abrazó por la cintura, me levantó y me cargó, sin dejar de besarme y tocarme, me dejó de besar y meter su lengua hasta mi garganta, se me quedó viendo con gran lujuria, me aventó ala cama, se quitó la playera y vi su cuerpo musculoso lleno de tatuajes y una perforación en el pezón, sacó un cigarro, lo prendió din dejar de verme, yo en la cama tumbado casi desnudo, sin dejar de ver a ese macho frente a mi enorme y fuerte fumando y diciéndome con una voz de furia y gruesa «Ahora si pinche putita, vas a ser mi vieja».
Continuara…
Espero que les haya gustado, se que es algo largo pero quería que supieran todo el contexto, ya que el antes, durante y el después de la perdida de la virginidad de un nene es siempre importante. Tengo muchas otras historias, algunas reales que me han contado o me han pasado y otras fantasías.
Pondré la segunda parte muy pronto. Mi Telegram es @Dani_dan123 por si gustan historias o material.
Sigue contando así está bien. Me gusta largos así son mejores
Vaya decepción dejarlo cuando a penas iba a iniciar lo bueno.
POR FAVOR, NECESITAMOS SABER COMO CONTINÚA. ESCRÍBELO RÁPIDO PLEASE. BESOS.
Me gustaría saber más sobre ese día además el ID no funciona xd para contactarte