Ingenuo y cogido II: Chantaje
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por puntoalfa15.
Antes que nada una disculpa por el tiempo que tarde en poner la segunda parte, aquí les dejo el link de la primera para los que no ha tenido la oportunidad de leerla, agradezco los comentarios esperando les guste la segunda parte, excelente paja y venida a todos
Ingenuo y cojido 1; http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-22754.html
Juro que no podía pensar en otra cosa, debía seguir haciendo dibujos a lo estúpido en toda mi libreta, tan solo habían pasado 10 minutos que habían durado una eternidad, me quedaban otros 80 para tratar de mirarlo a los ojos, sin embargo por más dedicación que tuviera eso no iba a suceder.
– Sr. Vázquez, ¿Además de llegar tarde a mi clase piensa no poner atención?, supongo es un experto de la materia ¿no es así?
– Disculpe profe, solo que no puedo concentrarme, he tenido una mañana difícil.
Claro que fue una mañana difícil, no podía creer que mi martirio apenas comenzaba, si bien había sido mi culpa que el profesor del semestre anterior me haya metido una cogida que no permitió conciliar el sueño, no había sido mi culpa que terminara de nuevo con el cómo mi profesor de materia por otros 6 meses.
De igual manera ya no lo podía ver de la misma manera, ahora ya no era el profe Mejía, ahora era Sergio, un hombre delgado de no más de 40 años, con unos brazos de gym, un abdomen plano y ligeramente definido, unas piernas de ensueño y una verga de 20 centímetros, una verga que inconscientemente desde que vi bajo un short ajustado quise probar, de una u otra manera esa verga entro en mi garganta y en mi culo.
– ¿Sr. Vázquez, se encuentra con nosotros? De repente recordé que seguía en el salón de clases. ¿Piensa responder hoy o se lo dejamos de tarea?
– Disculpe profe, no escuche lo que pregunto
– No se preocupe, solo espero que escuche que se queda al final ya que tendrá tarea extra.
No pude decir nada, mi mente estaba en blanco y en realidad no sabía si aún estaba soñando con un terrible primer día de clases o en realidad esto iba rumbo al desastre, Transcurrió el resto de la clase, termino, los demás salieron del salón y solo me limite a permanecer sentado, Sergio se levantó, cerró la puerta y se acercó.
– Ramiro, las cosas son así, estas en mi grupo, bajo mis reglas y mis órdenes, no puedes cambiar de grupo ya que arregle que fuera así, no puedes dar de baja la materia ya que siempre será el mismo resultado, si quieres aprobar el semestre no es necesario que te diga que hacer, si haces las cosas a mi manera todo marchara de la mejor manera, ahora vete.
Definitivamente estaba más que loco y eso era un hecho, pero ¿Que podía hacer? Lo único que haría que sobreviviera seria convertirme en el mejor alumno, cosa la cual con el esfuerzo adecuado no resulto un problema, sin embargo todos mis trabajos del primer mes no pasaban del 7 de calificación, sabia hacia donde iba esto y no me agradaba, aunque una parte de mi sentía el deseo de que volviera a suceder.
Y ahí estaba yo frente al examen más fácil de la carrera hasta ese momento, salí del salón y al siguiente día no pude creer haber reprobado el examen. Soporte la clase con la peor mala gana del mundo, deje que salieran todos y me acerque a su escritorio.
– ¿Qué carajo es lo que te he hecho para que me salgas con tanta chingadera?
– Que no has tenido el valor de volver a negociar tu calificación, ahora si crees poder hacerlo de nuevo te veo mañana, ya sabes donde es, solo toca el timbre y listo; Si no llegas entenderé que deseas reprobar mi materia y posiblemente no avanzar en tu carrera.
Definitivamente no podía creer lo que me estaba pasando, toda la parte lógica de mi cerebro me pedía a gritos que no fuera, una parte de mi pedía mas de ese trozo de carne, pase media tarde con los ojos en el techo de mi habitación cuando de repente comenzó a sonar mi celular, 7 sonidos bastaron para decirme el numero de mensajes recibidos.
Vi la notificación y todos procedían del mismo remitente:
SI ACCEDES NO SOLO TENDRAS LO PROMETIDO, SI NO QUE TAMBIEN TENDRAS ESTO SOLO PARA TU DISFRUTE…
Ahí estaban 6 fotos de su verga, se veía tal y como la recordaba, 20 centímetros, esa forma que termina como un gancho hacia arriba y dura como el concreto. Comencé a recordar como simplemente había dejado ir todo ese tronco atraves de mi culo, de cómo había comenzado a bombear como si el mundo se fuese a destruir, de cómo esa verga entraba y salía de mi culo con gran facilidad, recordé el momento en que con ese verga gruesa, larga y dura tuve el mejor orgasmo de mi vida. Comencé a jalarme y de repente pare, como podía estar pensando en esto si no me gustaban los hombres, me fui a dormir, ese fue otro gran error.
Desperté demasiado temprano, tenía mis 17 centímetros a todo lo que dan, y con tal grado de calentura que me limite a levantarme, meterme a la ducha y salir directo a su casa.
Al llegar toque el timbre, abrió la puerta y ahí estaba tal como recordaba de aquella vez con una playera ajustada y unos shorts que no dejaban nada a la imaginación porque como seguro seria no traía ropa interior.
– Buenos días Ramiro, adelante pasa, vamos a la sala – Solo sentí su mano apoyada en mi hombro y como está bajo hacia mi cintura.
– Hola Sergio
– ¿Vienes a discutir los términos de tu calificación?
– No, vengo a pedirte que te dejes de tanta pendejada, en primer lugar no me gustan los hombres, segundo, no puedes reprobarme si yo demuestro que soy tan bueno como para pasar la materia, tercero yo tengo novia.
– ¿Terminaste de exponer tus motivos?, mira me gustaste y tú me diste pie para disfrutar esas nalgas tan ricas que te cargas, así que aquí las cosas pueden ser por tu gusto propio o ten por seguro que encontrare alguna forma de tenerte para mí como y cuando guste.
Definitivamente no esperaba una respuesta de esa clase y por supuesto que me dejo pensando en un millón de cosas, lo que prosiguió fueron 4 cosas, sentí sus brazos entrelazarse en mi espalda, sus labios sobre los míos, yo con el encima sobre su sillón y por ultimo mis labios respondiendo sus besos.
Pronto los besos subieron de intensidad y sus manos comenzaron a bajar hacia mi pantalón, de nuevo esas manos volvían a rozar por encima mi verga, la cual no tardo ni 2 segundos en ponerse lista para la pelea, sus manos abrieron el botón y después comenzó a bajar mis pantalones, subió con sus labios por mis piernas y paro sobre mi verga, primero pasaba la lengua y después le daba mordidas que me ponían cada vez más caliente, comenzó a subir por mi abdomen y junto con sus labios comenzó a subir mi playera hasta quitarla, nos fundimos en un beso tan pasional que sentía que estaba alucinando.
Solo se levantó, se quitó esa playera y bajo con dificultad los ceñidos pantaloncillos, dejando al aire esa verga que una parte de mi cuerpo deseaba, me levanto y me llevo hacia su recamara, solo atino a recostarme boca abajo y de repente estaba ahí de nuevo, su peso sobre mi espalda, sus labios en mi oído derecho, su lengua jugando con el lóbulo de mi oreja, mientras decía:
– No sabes cuánto he deseado volver a tenerte desnudo para disfrutar de ti, no sabes cuánto he deseado volver a meter mi verga de nuevo en tu culo mientras me pides más y más.
Solo sentía ese trozo de concreto rozando mi ano y moviéndose entre mi nalgas, una parte de mi deseaba tenerlo dentro y que me cogiera como un animal, se retiró y me coloco boca arriba, bajo por mi abdomen hasta llegar a mi verga, la cual solo devoro en un bocado, entraba y salía con tanta maestría que lo único que salían de mis labios eran los suspiros de placer que me generaba, de momento comencé a sentir uno de esos dedos que tenían la habilidad de hacerme doblar de placer cuando jugaban con mi próstata.
No recordaba cuanto placer había llegado a sentir en manos de Sergio, pero de algo estaba seguro, no podía negar que disfrutaba de esto, poco a poco fue dilatando para lo que era inevitable. Solo se acercó a mis labios y empezó a empujar su verga hacia mi culo, mis manos comenzaron a bajar por su espalda hasta llegar a esas ricas y redonditas nalgas que se gasta mi profe, las tome y las empuje hacia mí con fuerza, como resultado esa rica verga entro de un solo empujón hasta que sus huevos chocaron con mis nalgas.
Se detuvo un momento y después su verga comenzó a moverse lentamente hacia afuera y después adentro, salía hasta la cabeza y después entraba completa, comenzó en ese ritmo y fue subiendo poco a poco de tono, primero en velocidad, y después en fuerza, solo sentía como estaba a punto de partirme en dos. Saco su verga, me volvió a besar y después del cuello me llevo hasta ese rico trozo, apenas podía meterla en mi boca, jamás me había imaginado tragando polla hasta la garganta, debo admitir que me sentía tan caliente.
Estuvimos así unos 10 minutos hasta que me recostó y regreso a chupármela por otro buen rato, yo solo me limitaba a cerrar los ojos, paro y solo sentí sus nalgas sobre mi verga y como comenzó a hacer presión para que entrara dentro de su culo, solo sentí como iba bajando hasta que estuvo completamente sentado, comenzó a cabalgarme mientras subía y bajaba con mi verga a su gusto y placer, cuando abría los ojos veía como se la jalaba y ponía los ojos en blanco, yo sentía algo sabrosamente diferente. Sentía como su ojete apretaba mi verga, sentía como subía y bajaba y como con cada cabalgada estaba a un segundo menos de venirme.
Solo se limitó a levantarse y cuando menos lo sentí me coloco boca abajo, de nuevo volví a sentir su verga en la entrada de mi culo y de un estocada me ensarto hasta las bolas, me cogía con tanta fuerza que sentía que me hundía en la cama, bajo poco a poco el ritmo.
– Cojeme, cojeme duro hasta que me revientes el culo- Simplemente no podía creer haber dicho algo así
No dijo una sola palabra, solo se limitó a cogerme con tanta fuerza que casi me desmayo, se acercó a mi oreja y me dijo que ya se venía, de repente solo sentí como me llenaba con ese caliente y rico semen. Se quedó recostado encima de mí y sin sacar su verga me dio vuelta hasta que quede sobre él, comenzó a masturbarme hasta que me vine, no conté cuantos fueron pero estaba tan caliente que mi semen me llego a la cara. Me quede dormido. Desperté y no estaba en su habitación, me levante, encontré mi ropa y una nota:
Disculpa no esperarte pero preferí dejarte dormir, tengo varios pendientes, espero verte pronto.
Ya con la mente en claro decidí que no seguiría su juego y que todo había sido un error que definitivamente no se volvería a repetir, tome la nota que me dejo y en la parte de atrás escribí una nota, tome me ropa, me vestí y salí rumbo a mi casa, me encerré, decidí no comer y me quede dormido. Desperté a las 10 de la noche, más de 20 llamadas de Zaira, lo más seguro es que debió haber querido que saliéramos a algún lado, decidí encender la computadora para contestarle por inbox y evitar el drama. Revise lo que tenía que checar y me dispuse a abrir mi mail.
Definitivamente solo a mí me puede pasar tanto en tan poco tiempo, un mail con una dirección desconocida, archivos adjuntos, varias fotos y un video. Las 10 fotos eran mías con otro hombre al que no se le veía la cara mientras me daba por el culo y en el video se veía lo mismo, la única diferencia es que se escuchaba como pedía que me dieran verga. Se leía en el mensaje anexo:
NO QUIERES QUE TU FAMILIA, TU NOVIA Y LA UNIVERSIDAD SE ENTERE QUE TE GUSTAN LAS VERGAS Y QUE PIDES QUE TE REVIENTEN EL CULO, SUPONGO QUE SABES LO QUE SIGNIFICA Y EL PRECIO QUE TENDRAS QUE PAGAR POR MI SILENCIO.
P.D. AMBOS SABEMOS QUE TE FASCINA LA VERGA Y AUN NO LO ACEPTAS, YO HARE QUE PASES CADA SEGUNDO DE TU VIDA DESEANDO QUE UN BUEN TROZO TE RELLENE EL OJETE.
Cerré de golpe la computadora y decidí acostarme, definitivamente pasar una materia me había salido más caro de lo que creía. Y era mucho más que obvio que esto no iba más que comenzando.
Espero haya sido de su agrado, acepto los comentarios 😀
comos igue por favor