Iniciado en el Vapor
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Desde que era chico, mi papá tenía la costumbre de ir a jugar football todos los sabados, acabando su partido nos dirigiamos a unos baños que se encontraban cerca del lugar en el que viviamos. Pasó el tiempo y yo deje de acompañar a mi padre al vapor, hasta que regresamos cuando yo tenía 15 años, y se volvió algo habitual ir minimo dos veces al mes. Cuando tenía 18 años mi papá fallecio, y yo deje de ir hasta los veinte años, continúe con nuestra rutina de asistir pero esta vez minimo una vez al mes. Un sábado llegue como de costumbre al vapor que acostumbraba ir, pero me dijeron que todas las cabinas se encontraban ocupadas, y no había tiempo estimado o aproximado para que saliera alguno de los clientes, enojado tome mi maleta y sali del lugar. Empeze mi recorrido para llegar a mi casa, iba molesto ya que para mí era un lugar para desestrezarme y como quería hacer tiempo para llegar a casa, empeze a caminar metiendome entre las calles. Pase no más de cinco cuadras y encontre otros baños que yo desconocía, me alegre pues encontraba un lugar perfecto para pasar un rato agradable, sintiendo el calor y el agua recorrer mi cuerpo, pague mi boleto, y solo había lugar en el área genereal, pero eso a mi no me importaba, ya que lo que buscaba era ya relajarme. Empece a recorrer el nuevo lugar, lo vi en buen estado, con instalaciones limpias y entre a la cabina que me asignaron. Me quite la ropa y me coloque una toalla en la cintura. Entre al lugar y a pesar de ser pequeño, no me importo, entre al vapor y había un joven al rededor de 25 años sentado, junto a él un señor como de 50 años y recostado en el piso un hombre como de 35 años, por lo que sin problema me podía recostar en una banca sin molestar a nadie. Paso el tiempo y sólo quedabamos el joven de 25 años y yo. Me sente sobre la banca y el joven me empezo a hacer platica, hasta que entro un señor como de 40 años y pregunto si había problema con que aumentara la intensidad del vapor. Yo por mi parte no puse objeción alguna, ya que iba a pasar a las regaderas, por lo que salí, me di un baño, al regresar al vapor la intensidad de calor era mucha, por lo que salí del lugar, al lado se encontraba el vapor seco, entre y se encontraba todo oscuro, ingenuamente pense que era un desperfecto del lugar, ahí se encontraban más personas y no había espacio para sentarse, yo hasta ese momento no note nada extraño, y como habían personas recostadas en el suelo, yo decidí tambien acostarme, extendí mi toalla, me recoste boca arriba, pero el goteo de agua acumulada en el techo me obligo a cerrar los ojos. Era relajante eso para mí, por lo que un momento me dormí. Pero algo me hizo despertar, la persona que se encontraba a un lado de mi, mestaba masturbando y yo ya tenía mi pene en plena erección, intente alejar la mano de la persona, pero algo dentro de mi me excitaba, ese hombre no quito la mano, y me masturbaba con más fuerza, yo lo único que hice fue detenerle la mano, como estaba adormilado y el lugar era oscuro no podía distinguir muy bien, pero cuando mis ojos se acostumbreron vi a un hombre al rededor de 40 años, de piel blanca, muy alto, cabello castaño corto, con una cara que realmente me cautivo entre niño y hombre asustado, enmarcado por unos ojos color aceituna, un cuerpo que se veía marcado por el ejercicio, y un pene de al rededor de 19 cm. Yo en ese momento me deje llevar por el momento, asustado, porque no sabía como reaccionar, pero al levantar mi cabeza me percate que se trataba de un sauna gay. Veía a hombres maduros en su mayoria masturbando o mamando a otros hombres, y siendo penetrados. Esta imagen me prendío al máximo y desperto en mi una nueva curiosidad. Empece a acariciar a mi nuevo "amigo" hasta llegar a su pene, el cual empece a masturbar con torpeza ya que hasta ese momento que tenía 20 años nunca había tocado otro pene que no fuera el mio. El señor se acerco a mi e intento darme un beso el cual no correspondí, pero él entendio, y me susurro al oido: -Nunca antes había asistido a un lugar así, pero al verte recostado despertaste en mi una ternura y un deseo incontenible, tu cuerpo de hombre en desarrollo, moreno, delgado pero con un poco de musculo y ese pene que tienes sin circunsición, que al ver me hipnotizo y no pude resistir el tocarlo. yo le conteste: -Yo nunca había estado con otro hombre pero me excitó mucho esta situación, y al verte me gusto mucho tu cara de niño haciendo una travesura. Él me contesto: -Yo tampoco había estado con otro hombre, es más soy casado y amo a mi mujer y a mi hija, pero no se que siento al verte quiero tenerte conmigo para siempre, pero se que no se puede quiero conservar siempre en mi mente tu olor, tu forma, pero sobre todo quiero llevar siempre tu sabor. Al termino de esa pequeña charla, me abrazo con ternura e intento besarme nuevamente y esta vez le correspondí el beso con la misma pasión con la que besaba a mi novia. Se alejo de mí y pense que había terminado todo, pero se incorporo para realizarme una mamada de campeonato, se notaba su inexperiencia, pero al cabo de un rato fue tomando un ritmo que me estaba dando un placer hasta ese momento desconocido para mi. Se recosto a mi lado dejando su pene a una altura considerable de mi cara y yo intente devolverle el favor e inicie tambien con una mamada, que no duro mucho tiempo porque saco su pene de mi boca y expulso su semen en mi pecho, se acerco hacia mi y me dio un beso lleno de placer y agradecimiento. Se subio encima de mi y empezo a rozar mi pene con su ano, pero al no tener condon, no intentamos una penetración, él me dijo que quería que acabara en su boca y se dirigio a mi pene, empezo con una super mamada y yo lo ayudaba bombeando su boca, pasarón unos 5 minutos y expulse una cantidad de semen que hasta ahora no recuerdo haber expulsado, él se bebio mi semen como si fuera un regalo, me miro a la cara y sonrio y me beso nuevamente como queriendo que ese momento no acabara. Se incorporo se dirigio a la regadera que se encontraba dentro, pasaron unos minutos en los que yo trataba de asimilar lo sucedido, y me levante para darme un regaderazo y salir para verlo, pero cuando salí ya no se encontraba en las regaderas, lo busque en el otro vapor y tampoco se encontraba ahi. me lave con gran rapidez mi pene y me dispuse a salir, me seque y fui a mi cabina para cambiarme lo más rápido posible, paso enfrente de mi y me miro y me sonrio, me termine de vestir lo más rápido que pude y avente todo dentro de mi maleta, sali corriendo del lugar, pero por más que lo busque no lo encontre. Seguí asistiendo a ese mismo vapor, con la esperanza de encontrarme nuevamente con mi "amigo" desconocido, pero han pasado dos años y no lo he vuelto a ver, pero en donde se encuentre, le estoy totalmente agradecido, ya que me regalo el mejor orgasmo de mi vida. Espero les haya gustado mi relato y les envio saludos desde México DF
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