JF. Mi wero
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
En 2012, dos años después de una relación que duró 16, conocí a JF.
Ambos buscabamos trabajo.
La clásica conversación de los desempleados que coinciden en la caza de empleo.
Desde ese momento él me encanto.
Alto, 1.80; robusto, 33 de cintura; rubio; ojos verdes; una sonrisa que te derrite y un solo defecto: casado, heterosexual y mujeriego, bueno 3.
Nos agregamos en FB, y no volvimos a comunicarnos, sino hasta unos meses después que yo inicie una converación.
Él me conto que se estaba divorciando porque había embarzado a otra chava, pero que no vivía con ella y que extrañaba a sus 2 hijas ya que su ex-mujer no le permitía verlas.
Lo invite unas cervezas, y el acepto.
Llego a mi casa pues emezamos a tomar y a conocernos mejor: trabajo, familia, vida en general.
Le dije que soy bi, que me habia divorciado, que tenia novia estable y medio le conte del chavo con el que duré 16 años.
El me platico de sus problemas maritales, de sus papás y hermanos, de las viejas con las que habia cogido y esas cosas.
Ya entrados en los temas sexuales, pues pregunto que ¿Porqué me gustaban los hombres y las mujeres? Le conte como fué mi inicio, y como me gusta dar sexo oral.
Entre pregunta y preguta seguimos tomando, hasta que me di cuenta que el tenia lo que parecia ser una erección.
Él se percato de mi mirada, y solo me sonrio, siendo ese momento en que, arriesgandome, a su rechazo, o peor aùn, a unos golpes, que me acerque a él y agarrando su pierna lo bese.
Contrario a lo que yo esperaba, correspondio a mis besos, los cuales le propine por diez minutos, mentras acariciaba su tan deseado cuerpo, al tiempo que el empezo a jugar con mi pequeño trasero.
Le agarre ppr pimera vez esa verga que en sueños añore, no resulto ser tan grande como yo lo esperaba, por su complexión fisíca, sin embargo no fue decepcionante.
Me acerque a su oido y susurre: "¿quieres que te la mame? Y como única respuesta, agarro mi cabeza y la dirigió a su erecta verga, misma que mame con esmero para que no se arrepintiera.
Mi lengua subia y bajaba por ese falo, lamia sus bolas, y le di la mejor mamada en el monte perineo, él solo gemia y se retorcia de placer.
Tanto que me detuvo y me dijo: "quiero metertela".
Me emocione tanto, que no encontré el lubricante y después de ponerle el condón me puso en cuatro sobre la silla en la que estaba sentado, ensalibo mi ancioso culito y me fue penetrando, de a poco, ya que si bien cierto su verga no es muy grande, también es cierto que me podía lastimar.
Cuando mi culo se acostumbro a ese rico falo, me empezo a coger de lo lindo.
Su verga entraba y salia con tanta delicia que eyaculé sin siquiera tocarme, el al sentir mis espasmos anales, empezo acorrerse y solo decia: "no mames cabrón, no mames cabrón" Terminamos exahustos, yo con un poco de vergüenza porque tal vez se arrepentiria, sin embargo, para mi sorpresa no fue asi, me dio un beso y me agradecio.
Él continúo de mujeriego como siempre, pero a mi me daba verga una vez a la semana, y así duramos tres años, hasta que un día, sin explicación alguna dejo de hablarme.
Me bloqueo de FB y cambio su número de teléfono.
Acrualmente tengo una relación estable con mi novia.
Pero, me falta mi ración de verga.
Me gustaría encontrar algo estable con otro casado.
Tengo un año y medio, desde que JF me dejo, que no estoy con un vato.
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