Jóvenes en crecimiento II

Las aventuras sexuales entre Josué y Brandon continúan..

Como les comenté anteriormente Brandon y yo empezando nuestra relación, que aunque nos amábamos mucho, el sexo era a base de su humillación hacia mí lo que nos encantaba.

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J: Amor, ¿ no has querido hacer algo más cuando cogemos?

B: Te estás aburriendo o, ¿ Ya no quieres estar conmigo?

Le dí un beso profundo.

J: No seas idiota, sólo es que no sé,c disfruto mucho, esa vergota te sigue creciendo, pero últimamente he querido ver como humillas a otros, yo te amo y quiero seguir amándote, pero quiero abrir nuestra vida sexual a todo.

B: Eres un putito. ¿Solo quieres verme coger con otros o quieres que te coja también?

J: De todo mi amor, pero es que quiero hacerlo con alguien en especial.

B: ¿Con quién?

J: Con Luis.

Luis era el chico más sexy y hermoso del colegio, era uno de nuestros amigos del grupo que teníamos. Era de tez morena, pero moreno como bronceado, su boca era hermosa con una sonrisa perfecta, su nariz era un poco grande pero no para ser narizón, sus ojos eran de un café muy oscuro haciéndolo parecer de ojos negros. Su cabello era negro y con el mismo estilo Bieber que todos llevábamos. Era un poco más alto que nosotros, medía 1.78.

B: No, estás loco, vos sabes que Luis tiene novia, ese mae no se va a dejar hacer nada.

Pasaron los días y empecé a hablar más con Luis, lo invité a mi casa a jugar videojuegos y tontear un rato.

B: Te parece ir el domingo a la casa, no va a haber nadie y me aburro mucho sólo.

L: Mae sí, vamos yo me apunto a lo que querás hacer.

Luis era bastante cariñoso conmigo, nunca me trató con el famoso ustedeo, siempre fue bastante informal por lo que se me hacía lindo.

Llegó el domingo y llamó a mi casa, era extraño verlo sin uniforme, pero no me molestó lo que ví. Fuera de clases siempre usaba shorts, pero el que llevaba ese día era de los de jugar fútbol por lo que su bulto se marcaba más claramente, una camisa un tanto ajustada pero no tanto, y su hermosa cara sonriéndome.

L: ¿Pura vida?

J: Pura vida, ¿Vos?

L: Todo bien, andaba jugando bola, aunque me resbalé y me abrí feísimo y ahora me duele toda la ingle.

J: ¿diay? Tené cuidado, que luego te lastimas peor.

Empezamos a jugar videojuegos, mientras hablábamos, entre tanto que hablamos yo aprovechaba cuando se desconcentraba para verle el bulto. De pronto le dije:

J: Mae y ¿como vas con la novia?

L: Diay mae, bien, pero no me suelta nada, no me deja tocarle nada, puro beso y cuando llego a la casa llego todo mojado porque me deja con ganas.

J: Mae eso sí es feo, pero mae , ¿no ha pensado en terminarle y buscar alguien más?

L: Mae no, es que si la dejo voy a tener que buscar otra y luego si me sale igual de mustia que hago.

J: Sí tenés razón.

L: Bueno dejando de lado eso, mae, vieras como me duele la ingle, todo alrededor de la picha me duele.

J: ¿Te ayudo con algo?

L: Mae ocupo que me sobe para ver si se me calma un poco.

Yo feliz me acerqué y puse las manos cerca el short para que guiara mis manos. La llevó unos 12 cm arriba de su pene, empecé a frotarlo suavemente, el se se retorcía de dolor, sin embargo, lo que estaba viendo y tocando me encantó, su cara estaba llena de diferentes expresiones y cada vez tocaba más fuerte para que soltara algún quejido.

L: Ay mae, sí ahí, me duele demasiado ahí.

Donde estaba tocando era cerca del tronco de su pene había bajado mucho mi masaje. Empecé a masajear para aliviar su dolor cuando comencé a notar su erección, le estaba gustando lo que hacía.

J: ¿Te importa si me pongo encima tuyo para poner más fuerza?

L: Sí sí, dale.

Me puse de espaldas a el, poniendo mi culo sobre su abdomen sin dejar  caer todo mi peso, y empecé a ejercer más presión.

Empezó a gemir de dolor cada vez más. De pronto sentí que agarró mis nalgas muy duro. Cuando se dió cuenta de lo que hizo me quitó de encima.

L: Mae perdón de verdad, yo no quería hacer eso, mejor me voy.

Salió disparado de mi cuarto y no me dijo nada más.

Pasaron los días y le conté a Brandon lo que pasó.

B: ¿Y se le sentía grande?

J: No la toqué mucho, pero se veía paradísima y cuando me tocó las nalgas fue lo mejor.

Más tarde ese mismo día Luis me escribió un mensaje de WhatsApp.

L: Mae no he dejado de pensar en lo del domingo, de verdad perdón, es que yo te conté lo de mi novia y tocarme ahí tan cerca hizo que pensara que era ella la que me tocaba.

J: Tranqui, de verdad, vos sabes que queda entre nosotros, pero, ¿Te gustó por lo menos?

L: Para ser sincero sí, tenés las nalgas pequeñas, pero están todas duritas. De hecho mae, no sé si será muy raro querer que me las enseñes.

J: ¿Seguro? No quiero que te sientas incómodo luego.

L: Mae no, tranquilo, es que vea. – me mandó una foto de su bulto duro- ya no aguanto esta picha me reviento y verle las nalgas tal vez me calme.

J: Ok ahí va.

Saqué una foto de mis nalgas, son blancas y duras, se veían bastante firmes, apenas para que alguien pueda lamerlo y luego meterme su mástil duro.

L: Mae, están muy ricas, la verdad es que están mejor que las de mi novia.

J: ¿No quieres venir y comerme el culito?

L: Mae no sea raro, yo no soy así, no sé, es que sí me excita pero es que yo no soy gay.

J: Mae, vea le voy a contar algo, pero no le diga a nadie.

L: A ver diga.

Mis amigos, incluido Luis no sabían de mi y de Brandon, por lo que procedí a contárselo a Luis para que accediera a coger con nosotros.

J: La vara es que Brandon y yo somos novios, y bueno ya cogimos y todo y nos encanta la verdad, el igual quedó enamorado de mi culo y me humilla con esa pichota que se carga.

L: Yo no sabía que ustedes eran gays, ¿ Desde cuando empezaron en esa vara?

J: Hace unos meses, pero ya estamos aburridos, queremos más picha, y la verdad es que usted nos gusta mucho.

L: Entonces son novios, pero¿Quieren coger conmigo?

J: Sí pero si no quieres tranquilo, podemos seguir siendo amigos si no te molesta.

L: no, al contrario, vea. – me envió otra foto de su bulto duro

J:  Mae que rica, ¿y si quieres coger entonces?

L: Sí, vengan el sábado a mi casa.

J: Listo ahí te veo rico.

L: Rico tú.

Llegó el sábado y antes de ir a casa de Luis calenté un poco a Brandon puesto que no sabía a qué íbamos.

J: Amor, ven, quiero hacer algo.

Lo lleve a mi cuarto, lo senté en la cama, le bajé el pantalón y empecé a masturbarlo.

B: Amor vamos, ya nos vamos.

J: Primero dame lechita y nos vamos.

Lo chupé con fuerza mientras lo masturbaba se retorcía como un putito.

B: Ahhhh mi amor, que rica boquita de putito. Ahhhh sí, que rico zorrita mía.

Se vino con 3 grandes chorros inundando mi boca, nos besamos pasándole su semen entre besos.

Nos dispusimos a irnos. En unos minutos llegamos donde Luis, este nos recibió con una gran sonrisa, y sin camisa. Su torso era hermoso, era delgado pero tenía esas famosas V que se les hacen a los hombres, lo que se me hizo súper excitante.

Entramos directamente a su cuarto los tres.

Los senté a ambos en la cama.

J: Amor, te traje a coger.

B: ¿Amor? Mae deje de decirme así.

L: Bran no te hagas el tonto, ya sé que cogen, y que son novios. -puso su mano en la pierna de mi novio-

J: Mi amor, quiero que seas puta de Luis, quiero verte sometido.

L: Ven. -dijo agarrando su bulto-

Luis se quitó el short dejando a la luz su pene, era un falo digno de admirar para tener poca edad su tamaño era hermoso, 16 cm de carne jugosa, sin circuncidar, unos huevos grandes y empezando a emanar pelos negros.

Brandon se agachó y empezó a mamar a Luis, yo me dispuse a desnudarme. Una vez listo, empecé a mamar el culo de Brandon, su culo era más grande que el mío, un anito rosadito rodeado por unos cinco pelos, me excitaba pensar que un día iba a tener el culo lleno de pelo y que podía olerlo sudado cuando yo quisiera.

B: Ay mi amor, sí, metemela, hazme tu puta con esa verguita.

Brandon se había entregado ante su lado sumiso, su cuerpo se curvaba de la manera más femenina posible, su culo en alto, sus piernas casi cerradas, y su boca lleno de una gran verga que le producía arcadas cada que Luis empujaba su cabeza para que comiera todo su falo duro.

Seguidamente y antes de penetrar a mi novio virgen de culo, me dispuse a darle mi pequeña verga a Luis, se la comía fácil debido a mi tamaño, pero lo hice disfrutar mucho, le gustaba sacarla de su boca y escupirme la verga. Una vez bien mojada, me dispuse a tratar de desvirgar a mi novio.

Me puse detrás de él y me incliné y le susurré.

J: Me encanta que te sientas tan puta como yo.

Y lo metí de una sola estocada.

B: Ayyyy amor, ya, ya, sacala, por favor.

J: No, te gusta y lo sé, sólo es dolor, tu culito deseaba verga, siento como se está abriendo.

L: Sigue mamando para que no te duela.

Era una escena hermosa, yo penetrando a mi novio mientras este se retorcía del dolor, y mamaba la verga de mi amigo más guapo.

Luis hacía una cara hermosa cuando gemía, sus gemidos eran de macho pero tiernos a la vez, ese hombre me volvía loco.

Estuve metiendo y sacando mi pene del culo de mi novio, mi pene se hinchó como nunca lo había visto, el ano de mi novio era tan apretado que provocaba más excitación en mí.

Me dispuse a sacarlo para que pudiera descansar un poco. Sin embargo Luis rápidamente tomó mi lugar y le metió su verga grande.

Mi novio gimió fuerte, yo le puse mi verga en la boca y lo puse a mamar. Su cara era hermosa cuando mamaba, me veía con cara de dolor y placer, gemía aún cuando tenía toda la boca llena de verga. No duré mucho, saqué mi verga de su boca y me vine en su cara.

L: Deme de esa lechita.

Chupé con mi lengua mi propio semen y se lo dí a Luis en la boca, tomó mi cara, escupió el semen que le había dado, lo restregó por toda mi cara y luego me dió una cachetada.

L: Ahora soy dueño de los dos, Brandon tiene un culo muy rico y apretado, y tú seguro eres una puta más grande que él.

J: Sí, tienes que ver como soy cuando de verdad soy sumiso. Escupeme más.

Nos besábamos y entre más saliva intercambiábamos más me escupía y más me cacheteaba.

L: Ay siiiii, zorras, putitas, son mías nada más mías, quiero sus culitos y sus lechitas en mi boca siempre.

B: Ayyy me vengooo, sí, ahhhhh, ahhhhh, ahhhhhhhhhhh.

Brandon manchó todo el piso de semen, mientras que Luis sacó su pene del culo de mi novio, dando como resultado una deliciosa imagen del ano de mi novio expulsando toda la ieche que Luis depositó en él.

No dí mas tiempo y empecé a comer la leche caliente de Luis directo del ano de Brandon, sabía entre una mezcla de semen con un poco de sabor a sangre, de seguro desgarramos a Brandon después de tal cogida.

Los tres quedamos rendidos, nos acostamos los tres y nos acurrucamos. Terminamos dormidos como por una hora y media.

Me desperté y vi sus hermosas vergas flácidas, me di cuenta que los amaba a ambos, y me negué a escoger sólo a uno, así que los hice a ambos mis novios, los tres disfrutábamos de nuestros cuerpos mientras crecimos.

Llegamos a tener 18 años, y habíamos estado juntos por ya 4 años, habíamos conocido a un chico llamado France, del que éramos amigo, era bastante apuesto por lo que nos propusimos conquistarlo y permitirle usar nuestros cuerpos como meras putas.

Hasta aquí este relato, en el próximo sabrán más sobre France y sus aventuras conmigo, Brandon y Luis.