Juegos de niños
De cómo jugando con mi vecinito acabamos jugando con su papa.
Yo tenía 10 años cuando mis padres cambiaron de domicilio y fuimos a vivir en una casa más amplia (un primero segunda de dos pisos por rellano). En el primero primera vivían un matrimonio de unos 35 años con un hijo de mi edad. Pasaron unos días y una tarde sobre las 5 sonó el timbre, salió a abrir mi madre y oí una voz infantil que decía «buenas tardes señoram, está el niño? Soy su vecino y vengo a ver si quiere venir a merendar y jugar a mi casa. Fuimos a su casa donde su madre nos preparó leche y galletas. Después de la merienda nos fuimos a su salón donde tenía montado un circuito de Scalextric y estuvimos un buen rato jugando. Cuando se hizo la hora me despedí y el niño me dijo mañana otra vez vale? . Y así fue cada día durante unas semanas. Un día la madre de mi amigo nos dijo que tenía que dejarnos solos porque tenía que salir. Una vez se marchó mi amigo me dijo que te parece si jugamos a un juego que se me ha ocurrido? . Yo contesté me parece bien. El juego en cuestión consistía en que hacíamos una especie de lucha y el que perdía había de acariciar el pene del ganador. Durante bastantes días aprovechábamos cada vez que nos dejaban solos pa jugar a lucha y al posterior peaje al que cada vez sumábamos más alternativas como chuparnos el pene, besarnos, acariciarnos el culito aunque nunca se nos ocurrió llegar a penetrar nos. Un día que pensábamos que estábamos solos, como siempre empezamos nuestro juego. Llevábamos en ello un tiempo cuando oímos lla voz del padre de mi amigo que, con voz ronca, dijo «que estáis haciendo» . Nos quedamos mudos . Su padre insistió en sus preguntas y,finalmente y con voces entrecortadas, le explicamos que era un juego y en que consistía. Observé un enorme bulto que había ido creciendo en la entrepierna del padre de mi amigo lo que me dejó muy sorprendido. Fue entonces cuando dijo «parece un juego divertido, que os parece si jugamos loos tres». Dijimos vale y el dijo «de acuerdo pero jugaremos sin ropa». Así pues nos desnudamos y comenzamos la lucha de los dos contra el. No fue sorprendente el hecho de que casi siempre perdíamos, momentos que aprovechaba para tocarnos, masturbarnos y chuparnos el pene. Seguimos así varios días hasta que en una ocasión en que, como casi siempre, perdimos la batallita nos dijo «ahora vamos a hacer otra cosa yo me acuesto y vosotros os vais metiendo en la boca mi pene y le dais lametones y veréis que pasa». Así lo hicimos alternandonos hasta estando en mi boca comenzó a salir un liquido a borbotones. Quise retirarme pero me sujeto con fuerza la cabeza hasta que dejaron de salir los chorros de líquido. Para aliviar la sensación de ahogo que tenia comencé a tragar el líquido. Al principio me dio un poco de asco por notar un sabor desconocido pero poco a poco me gustó mucho y lo trague con fruición. Te ha gustado? Me preguntó. Yo bajé la mirada y dije si señor mucho. Mi amigo dijo papi yo también quiero hacerlo. Al poco rato tuvo una nueva erección y la puso en la boca de su hijo hasta que le llenó la boca de líquido que mi amigo trago sin dejar salir ni una gota de su boca. Ese fue nuestro juego durante un tiempo. Un día nos dijo «hoy haremos una cosa nueva» . Hizo poner a su hijo a cuatro patas y comenzó a chuparle todo el culito en especial el ano hasta que, de pronto, le metió un dedo dentro. -«te duele cariño?» Un poco papi pero también me gusta y quiero que sigas haciéndolo. Me quedé helado cuando vi que aproximaba su enorme pene al ano de me amigo tras ponerle un líquido viscoso y comenzó a empujar poco a poco a pesar de que mi amigo le decía que le hacía daño.Pocio a poco fue entrando hasta que la introdujo casi toda. Comenzó un vaivén hasta que comenzó a gemir y finalmente estalló. A todo ello mi amigo había dejado sus protestas y también gemía de placer. Cuando se retiro , del ano de mi amigo salió un buen chorro de líquido blanco marrón (imagene caca de mi amiguito) . Quedaron relajados y abrazados mientras yo manoseaba mi pene. Al poco rato el padre de mi amigo me dijo » ahora te toca a ti* y dicho y hecho.Me puso como perrito me embadurno de líquido viscoso y recuerdo dolor y un gran placer. Al acabar solo quería volver a hacerlo. Y así fue. Casi cada día lo fuimos haciendo y, con las limitaciones propias del paso del tiempo lo hemos seguido haciendo has la actualidad y seguimos.
Es mi deseo que esté relato,real por otra parte, les haya satisfecho
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