Jugando con mi vecinito 2
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por fuegoactivo.
Después de que el forense presento al juez que nosotros, Juancito, mi vecinito y yo habíamos sido violados, y que el juez mandara preso a quien lo había hecho; el doctor habló con mis padres y les pidió para que yo quedara con el, que me mandaría a la escuela y me enseñaría a trabajar y a tener modales correctos, como nosotros éramos pobres mis padres accedieron a su petición, era una oportunidad para que yo tuviera una buena enseñanza.
Así que quedé viviendo con él, también hablo con los padres de Juancito para que pudiera venir a jugar conmigo cuando quisiera, y ellos también accedieron a tal pedido.
Entonces yo ya me quedé y al otro día apareció mi madre con un atadito de ropa para mi.
Cuando llegó a la casa del doctor la recibí yo con un gran abrazo beso, el doctor ya me había comprado unos pantaloncitos cortos y unas camisas, unos zapatitos mocasín negros.
Venga cuando quiera Sra. Esta es su casa le dijo el doctor a mi madre.
Una vez que se fue, el doctor me llamó y me dijo.
Ven acá pícaro, ayúdame a desvestirme, paso a paso. Con el sentado en la sale, le quito su saco, la corbata, luego la camisa, después afloje el cinto y le abrí la cartera, lo descalce y quite sus calcetas, y desde ahí abajo tire de la manga de sus pantalones para sacárselos, el levantó su cola y eso permitió que pudiera sacarlos con facilidad,
Cuando saque sus pantalones por la cartera de su calzón apareció su pito grandote, enorme que salto hacia afuera, quítate la ropa me dijo, una vez que lo hice, me tomo de la mano y nos fuimos al baño,
Bájame el calzón, vamos a bañarnos juntos, te gustaría?
Si, le dije mientras miraba ese armatoste que tenía como pito, era mucho más grande que el del supuesto violador.
Nos metimos en la tina y el abrió el grifo, el agua tibia caía sobre nosotros, mi cara a la altura de su pito,
Lávalo bien, tienes que acostumbrarte, que el sexo se hace siempre limpio,
Le enjabone muy bien su pito y sus huevos grandotes y peludos, el se sacó el jabón y luego me dijo.
Ahora puedes tomar la mema, dale chúpamela
Apenas entraba la cabeza en mi boquita, me la metí y succionaba con mi lengua como si fuera un chupete
Lo haces muy bien, me decía mientras el se enjabonaba todo el cuerpo y también mi cabeza y mi cuerpo, cuando se agachó para enjabonarme quedé con mi cabeza entre sus piernas el me alzó un poco y quedé colgado de su pito en mi boca me tomó de las piernas y me alzó hacia el enderezando su cuerpo, y me empezó a lavar mi culito. Luego me lo chupo de una manera que me hacía gemir y me retorcía que cosa más agradable me estaba haciendo, me sentía en la gloria, luego se metió mi pito y mis huevitos en su boca y succionaba mientras con jabón en sus manos me metió dos dedos de una, yo me ahogue, me dolió mucho, tomando su pito con mis manos lo saqué de mi boca y pegué un grito
Perdona me dijo, seguido a eso. Salimos de la ducha me secó todo mi cuerpo y se secó el también, me alzó y me llevo a su consultorio, me supo en la camilla boca abajo, tomó crema y me dio masajes en mi colita, dejando mucha crema en mi culito. Tomó un aparato y me dijo esto te va a adaptar para que puedas recibir mi pene con placer. Lo fue metiendo en mi culito, era fino parecía el pico de ave y tenía unos tornillos. Media unos 10 cm. Cuando lo metió todo comenzó a mover los tornillos e aquellos se iba abriendo dentro de mi recto, lo hizo hasta que yo dije un leve hay, el paró, me dio vuelta, quedando de espaldas, se sentó al costado de la camilla y comenzó a besarme, lentamente pero profundo, metía su lengua en mi boca, yo tome su lengua entre el paladar y mi lengua y comencé a succionarla, a él le agrado mucho que hiciera eso, y comenzó a mover nuevamente el tornillo hasta que nuevamente apareció mi hay. En que paró nuevamente.
Así me alzó y me llevó en brazos hasta la cocina, me sentó en un banco que tenía un hoyo en el medio. Ahí quedo el aparato que sobresalía apenas de mi culito, almorzamos, me llevo al baño para que me lavara la boca y el también lo hizo, y luego nos fuimos a su dormitorio.
Al caminar eso se movía dentro de mi pero no me dolía, al contrario me agradaba.
El me acostó sobre su cuerpo y le dio otras vueltas al tornillo luego nos dormimos una buena siesta. Así como me puso sobre su pecho así me desperté encima de él
Eran las cinco de la tarde, el me puso unos pantaloncito grandes no se notaba que tenía aquello en mi culito y nos fuimos a caminar por el centro del pueblo, luego entró a una casa de ropa y compró ropa de varón y de nena,
Otra vez va a donar ropa a los huérfanos le pregunto la empleada.
La de varón es para él, la de nena si es para donar.
Al rato le dije. Tengo una sensación rara en mi culito, vamos a casa.
El sonrió y me llevó a la confitería. Pidió permiso y me llevo al baño, me sentó en el wáter y dijo. Haz fuerza para que salga todo, no sentía que saliera nada pero si sentía que caía algo en el agua. Luego, me limpio, apoyo mi cola en la lavabo y me lavó muy bien mi culito. Me secó con su pañuelo y salimos, tomamos un refresco, agradeció el servicio, pagó y nos fuimos para casa, en el camino me dijo que tenía que ir a la escuela y que al otro día hablaría con la dirección para que continuara los estudios, ya que con todo el lio que se generó yo había dejado de ir.
En cuanto llegó, me dijo, cámbiate y me dio la ropa de nena era un sostén, una blusa calada y una pollerita que apenas cubría la mitad de mis nalgas, tomó un colorete de su meza de luz y me pintó los labios. Ahora eres mi nena, mírate al espejo, te gusta?
Respondí afirmativamente con la cabeza, al mirar mi colita en el espejo, vie el aparato que aún tenía metido en mi recto.
Mi colita estaba bien redondita y paradita de tanto ejercicio sexual que había tenido, entonces la pollerita se levantaba y verdaderamente con mis 7 años era hermosa mi colita
Ya era casi de noche así que cenamos. Nos higienizamos la boca y el me llevó al consultorio, aflojó el tornillo y me sacó el aparato, de inmediato, metió su pito comenzó a bombear fuertemente, solo sentía placer, no sentía ningún dolor, se ve que sabía adaptar culitos. Era hermoso como ese armatoste entraba y salía de mi culito y hacía que mi pitito se parara y quedara súper duro.
Tomándome de la cintura siguió bombeando mientras íbamos a su dormitorio, dos acostamos y estuvo dándome como media hora, luego. Sentí que aquello parecía agrandarse dentro mío, palpitaba y sentí los chorros de semen dentro mío.
Así nos quedamos dormidos hasta las 5 de la mañana en que sus movimientos me volvieron a despertar, estaba nuevamente bombeando. No se, pero pareciera que yo me dormí con su pito dentro y ahí quedo toda la noche.
Hoy espero que venga tu amiguito para jugar con el.
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