La adolescencia, "Mi mejor experiencia sexual"
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por libreatodo.
Hola, todo transcurrió normal durante un año casi en que compartimos desde juegos, chistes, secretos, cama, sin malicia alguna, pero un día se dio así de simple y aquí les comento como sucedió.
A mis 13 años, casi los 14, sucedió la siguiente experiencia que la considero la mejor de mi adolescencia, en mis relatos anteriores habrán notado que he comenzado desde pequeño con mis experiencias, y bueno existieron muchas experiencias muy buenas para mí, pero en algunas pues que no hubo sexo totalmente.
Regresando a la historia a esa edad siempre fui muy caliente como todos, había un primo lejano 1 año menor que yo, siempre lo vi como mi hermano menor al que no tuve, por eso y algunas razones de economía de su familia, casi siempre estaba en casa, yo estudiaba la secundaria, el termino la primaria y ya no siguió estudiando, así que pues tenía tiempo de estar siempre en casa.
Se los describo, el amable bajito de estatura, bonito cuerpo, algo nalgoncito sobre todo se le notaba cuando usaba shorts, su nombre real lo omitiré lo llamare, Teo porque así le decíamos sin embargo ese solo era un apodo, según esto porque cuando comenzó a hablar a los camiones de carga de tierra así los llamaba, pero es otra historia.
Como todos los niños en ocasiones nos peleábamos por causas sin razón, pero después nos contentábamos, etc. compartimos, desde juegos, carritos, etc., hasta la cama porque él, se quedaba en casa sobre todo los fines de semana, entre semana no siempre se queda ahí, porque yo me tenía que levantar temprano por la escuela y decía que yo no lo dejaba dormir.
Como comente siempre nos vimos sin malicia, o al menos de parte mía, porque pues yo siempre supe lo que quería y me gustaba en lo sexual, sin embargo el pues Teo, era como mi hermano y había aprendido que a los hermanos se les respeta, por eso jamás tuve intención alguna de tener sexo con Teo.
Cuando me pedían hacer algo en casa, Teo siempre me ayudaba, como dije casi vivía en casa, bajo esta situación vivimos casi un año, cuando yo iba a cumplir los 14, una noche de fin semana como cualquier otra sucedió algo inesperado para mí.
Esa tarde, vimos películas como de costumbre, era una tarde calurosa y nos fuimos a dormir como a las 11 de la noche, ambos dormíamos en short solamente, no recuerdo de que hablamos antes de dormir, en fin nos quedamos dormidos, recuerdo que desperté como a la una o dos de la mañana, no sé porque pero sentí que alguien me tocaba mis órganos sexuales, por encima de short y claro me moví por inercia propia.
Desperté y me quede sorprendido, no supe que hacer así de manera rápida, pues era Teo quien e estaba tocando mi pene, primero me molesto quise regañarlo, pero también debo aceptar que me gustaba, pues tenía mi pene a todo lo que daba de erección y era agradable sentir que alguien me lo acariciara, así que me hice el dormido, de un momento a otro pensé que estaba soñando o algo así.
Después de mi movimiento el dejo de tocarme, pero como me hice que estaba dormido y volvió a tocarme y constate que no era sueño, Teo me estaba tocando y como dije me sorprendió, me molesto, pero también debo aceptar que me gustaba, así que lo deje seguir.
Sentí como trataba de meter su mano bajo mi short, yo no me movía, hasta que logro bajar un poco mi short y metió la mano por debajo de mi short y toco mi pene y mis bellos púbicos que en ese entonces pues creo que no eran tantos jejejje, que delicia y placer sentir una mano mas chica que la mía y ajena a la mía en mi pene, y ante eso no pude evitar que se me saliera un suspiro de la excitación que ya tenía, y tome su mano y le pregunte ¿Qué haces?.
No me respondió solo se voltio y me dio la espalda, yo estaba tan excitado, que ya para ese entonces la molestia se me había quitado, así que solo me acomode de tras de él, lo abrase y pegue mi cuerpo junto al de él, lógico que mi pene quedo a la altura de su hermoso y suculento trasero y comencé un movimiento de frotación de mi pene sobre su hermoso trasero, así encima de nuestras ropas.
Teo no objeto nada, solo estaba inmóvil, como no opuso resistencia comencé a acariciarle en todo el cuerpo y pasar mi respiración por su espalda y cuello, ante eso dio un pequeño suspiro por lo que seguí haciéndolo, lo sentí todo mío.
Después baje mis manos a sus glúteos lo acariciaba y comencé a bajarle el short, que por cierto los usaba algo apretados y sentí como suspiraba y levantaba sus caderas para que yo pudiera bajar con facilidad su short, debo aceptar que no sé porque jamás se me ocurrió esa idea y tenía un cuerpo y esa piel que a cualquiera desea, todo esto mientras lo acariciaba, cuando ya le había bajado su short, le pregunte ¿estás seguro que quieres esto?.
No respondió con palabras pero asentó con la cabeza un sí, entonces comencé a poner mi pene en medio de sus dos glúteos, ohohohohoh que emoción, que placer sentir su calor, su piel suave y tersa, pensé que como era posible tantas noches que habíamos dormido juntos, y yo no había descubierto todo ese hermoso cuerpo y esa parte de mi gran amigo Teo.
Total seguí frotando mi pene en medio de sus glúteos, Teo se movía al ritmo de mis movimientos, que delicia ya estaba más caliente que no se imaginan, puse un poco de saliva a en medio de sus glúteos y a mi pene e intente penetrarlo, era la primera vez que lo intentaba y Teo se movió, al sentir que intentaba introducir mi pene, a lo que le dije no te muevas y me dijo en voz baja pero me dolió, le dije está bien tratare de ser hacerlo despacio y me dijo está bien.
Seguí así un buen rato hasta que de pronto la emoción me gano y eyacule como nunca entre sus glúteos y me dijo te orinaste, le dije que no que solo era semen, pero seguía casi igual de firme en mi erección, así que solo lo limpie y seguí intentando penetrarlo hasta que lo logré, metí en su anito virgen hasta ese momento la cabeza de mi pene solo emitió un quejido pero pequeño, que no era tan grande imagina un tamaño de pene normal para mi edad, el me dijo que le dolía pero poco, deje de moverme y le dije que no se moviera, hasta después de unos minutos, y ohohoho que delicia sentir la presión que su ano me hacía alrededor de mi pene, yo sentía estar en la gloria.
Después de unos minutos el comenzó a moverse hacia atrás y hacia adelante, y yo comencé a seguirle el ritmo ya para ese entonces estaba seguro que era solo mío, pero me dijo que ya no entre mas, pero con su movimiento y el mío cada vez entraba mi pene un poquito más hasta que nuestros cuerpos se unieron totalmente, y todo mi pene lo tenía dentro de su culito que apretaba rico y que yo disfrutaba por ser el primero en entrar ahí.
Aumentamos el ritmo de movimientos y sentí como el temblaba y suspiraba, y mientras lo acariciaba comencé a masturbarlo al tiempo que le mi pene entraba y salía de su ano, ohoh que delicia, cada vez mas rápido y yo igual, hasta que de pronto nos detuvimos los dos vibrando y nos corrimos juntos, era su primera eyaculación y eyaculó en mis manos, que delicia ambos disfrutamos el sexo, para él su primera vez, para mí primera vez dentro de su hermoso y apretado culito y fue un placer que haya sido así.
Después de disfrutar en lo sexual, nos quedamos así un rato pero sin palabras, luego nos fuimos a bañar y seguimos durmiendo, francamente no nos preguntamos cómo llegamos hasta eso, mi problema fue al día siguiente que mi madre nos llamo a desayunar, me levante y me dirigí al comedor, poco después llego Teo, pero la verdad es que yo no podía mirarlo a los ojos, me sentía feliz pero mal como si me iría a acusar de lo sucedido sobre todo porque era menor que yo.
Después de desayunar, me dijo que yo no tenía la culpa, que el había querido que así fueran las cosas, solo que no sabía como decírmelo, sobre todo porque no sabía cómo reaccionaría yo pero que siempre había deseado que pasara, y buen eso me hizo sentirme más tranquilo, ahora sabia que jamás diría algo o me acusaría de lo sucedido, creo que mi preocupación era muy notoria que mi madre me pregunto si algo me pasaba, solo respondí que no.
Saben nomas de recordar esa noche tan hermosa, me pone muy feliz, porque fue mi mejor experiencia, en casa en mi cama la cual seguiríamos compartiendo, por algunos años.
Espero le agrade mi experiencia solo escribo tal como lo viví y considero que: La o mi adolescencia "Mi mejor experiencia sexual"
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