La cama fue testigo de la primera vez (10)
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Byron es un chquillo menor con 5 años de edad, su piel es blanca en demasía, tanto así que cuando se ruboriza se colorea su cuerpo, se caracterizaba en ese entonces en sólo tener sus manos cogidas a su verga por fuera rozándosela, al mínimo descuido o cuando se sentía según él solo, se metía sus dos manos por dentro de la pantaloneta y comenzaba a estirarsela y a girársela, sabía que andaba con José, lo que presumía que era ya un culión, debo reconocer que hasta ahora me gusta Byron, su pelo es rubio y tiene un culo muy parado tanto así que le llamamos "culo de avispa" o "badea" por lo blanco y la suavidad de deslizar sus piernas al andar.
En cierta ocasión estando en el río con mis amigos llegó con su sobrinito Alexander, se desnudo sin reparos, nadando y flotando en el agua se podría apreciar su verga blanca parada parecía periscopio de bien larga y parada para su edad, calculo 10 u 11cm, luego se volteba para dejarnos ver su culo blanco brillar con el agua y la luz del sol… en verdad, era rico verlo.
Esto que comento sucedió hace 3 años, cuando mi país se encontraba en elecciones, llegaban los candidatos y claro, el pueblo salía de sus casas a escuchar sus propuestas, una noche, a dos cuadras cerca de mi casa en las 5 esquinas se monta el escenario y estaba jugando con mis amigos, recolectando papeles, calendarios, adhesivos y demás objetos, cuando nos acercamos cerca de los políticos noto que delante mío se coloca Byron y me le acerco colocandole mi mentón barbilla sobre su pelito y ahi mismo respirando, poco a poco le acerco mi verga a su culo puntiagudo que notaba sudor por las rajas que delataba su pantolenta blanca sin interiores (tipico de un niño que pasa sólo masturbandose) mi verga deseaba salir de mi pantaloneta al sentir ese culito puntiagudo, Byron no se dió por enterado hasta que comencé a rozar mi verga en su espalda y me inclinaba buscando su culo, giró su cara me miró pero no me dijo nada, segui haciendo esos movimientos repetidamente, Byron se calentó, se puso colorado y estiraba su verga rápidamentye cuando le hacía la punteada, puso su mano estirada delante de su verga que se notaba estirada en su pantaloneta girandola a todos lados… quería culiar. Como estabamos rodeados de chicos, no se notaba.
Pasaron poquisimos minutos, estaba muy caliente y de pronto comienzo a exalarle mi aliento en su cuello con mi nariz y con mi boca en su pelo, me metí disimuladamente mi mano en mi verga y la estiré porque estaba enroscada y aproveche para puntearla a Byro, en eso llega ÑUCO con su mamá afortunadamente ella no mira la escena pero ÑUCO sí.
Al oído le dije a Byron:
– Avispa… vamos a mi casa, tengo algo rico para ti.
– ¿Qué es Vladimir?
– Es una sorpresa, vamos te va a gustar.
– No sé… si me dices aqui voy contigo.
– Mmmm digamos que es algo rico de comer.
– ¿Qué comida?
– Culeo… culiemos
Byron quedó pensativo, estimulé al disimulo rápidamente en cogerle su verga masturbándosela, sólo ÑUCO veía eso, veía también cómo lo abrazaba a Byron y lo llevaba a mi pecho disimulando juego, pero era para arrecharlo, le volví a preguntar:
– Te va a gustar… es rico
– No sé… Vladimir
– No hay nadie en casa, solitos los dos
– Mmmm… se van a dar cuenta
– Salimos corriendo
– ¿Quieres ir conmigo?
– Anda animate ¿si?
– Bueno, un ratito.
Corrimos y llegamos a mi casa viendo hacia atrás que no nos vieran, afortunadamente llevaba copia de llave y abrí, a media luz en mi cuarto, le bajé su pantaloneta, estaba parada su verguita, era rica y suave su piel, era un putito rico, al bajar su pantaloneta vi su culo paradito que pedía verga, lo puse a filo de cama en cuatro boca abajo, le pasé la lengua, chupaba su culito, se dilataba, le metí dos dedos y comenzaba a moverce y a gemir, era rico ver sus movimientos, chupaba su culo, trataba suavemente de mordisquearlo, él se excitaba, chupaba sus nalgas con mis labios las succionaba, es que lo que más me gusta de Byron es su culo, escupí el huequito vi cómo mi saliba se chorreaba, le puntee mi lengua, movía los pies, lambia su coxis, le dí la vuelta y noté en su mirada el deseo de culiar, le chupé y lambí sus bolas, empecé a desforrarle su verga, vi su cabecita blanca, chupé poco a poco hasta llegar a sus bolitas, Byron gemía más y más hasta que no pudo más y se orinó, lo cogí rápido y botó el liquido en el piso, me bajó la pantaloneta mientras yo me sacaba la camiseta, me senté en "nuestra cama" Byron se arrodilló lo llevé a mi verga y empezó a mamarla sin yo decirle, pensé que eso le hacía José.
Cuando sentía que me iba a salir la leche saqué mi verga de su boca que estaba con líquido preseminal, lo puse posición perrito, hice que se agache y me dió su culo con sorpresa noté que poco a poco mi verga entraba sin dificultad en ese delicioso culo blanco, su culo era ya "cajón" pero Byron sentía placer y me pedía que lo culee con fuerza, era muy arrecho, con la verga adentro lo alcé un poquito con mi brazo y con la otra mano le jalaba la verga, se movía más, era rico para ambos, cada vez era más mi gustito hasta que le dejé parte de mi leche adentro y la restante en su espalda blanca y rosadita.
Nos levantamos y nos besamos estirando nuestros labios y metiendonos la lengua en nuestras bocas. Byron se fue al baño a limpiarse, mientras orinaba me acerqué y le froté la verga para luego inclinarlo y seguir dándole verga, lo dejé que se limpie. Yo sacaba mi sábana llena de leche, cuando por la ventana vi a ÑUCO observando… ¡Qué error… tan arrecho estaba que me olvidé de correr las cortinas! Le pregunté:
– ¿Que viste ÑUCO?
– Poco
– ¿Cómo asi? ¿Y tu mamá… cómo te soltó?
– Me dio permiso de jugar con Adriancito y los chicos… pero su mamá no lo deja salir ya, creo que no le gustan esos canditatos y tiene miedo a que pase algo malo.
– Te vi con Byron y los seguí… es rico lo que hacen.
– ¿Quieres hacerlo?
– Si.
– Espera que se vaya Byron
– Lo haremos rapidito para que tu mamá no note tu ausencia larga ¿Ok?
– Si, Vladimir
Byron salió del baño lo tumbé en la cama le culié su verguita, se la mamé un ratito más para que sintiera placer y dejarlo picadao para otra vez como así sucederá, lo vestí no sin antes olerle su pantaloneta que olía a miado y a semen, le aconsejé que saliera por la puerta del galpón, así lo hizo y estando en la calle corrió.
ÑUCO entró, se desvistió y vi su verguita parada, le dije: ¡Ven superman! estabamos sudando, le di verga por el culo y la boca confieso que no me salia leche, le enseñé a mamarme la verga, lo besaba luego de eso, lo voltee le chupé su culo, esa sensación la sintió por primera vez, fue más su gemido cuando le mamé la verga, esa verga que me desvirgó, su gesto era de placer, aprendía el arte de culiar.
Lo puse filo de cama, otra vez le introduje mi verga de 17cm, con la idea de botar leche pero no lo conseguí, metía y sacaba mi verga y nada, lo hacía cada vez más rápido y con fuerza de acción pero nada… me monté encima de su espalda, puse mi verga roja adolorida sobre la raja de su culo, nuestros cuerpos chorreaban sudor, el espejo reflejaba la escena, ÑUCO le gustaba ver eso.
Estiró sus brazos, sobre ellos, los míos que sobresalían, besaba su nuca y su pelo lambia su espalda, me di la vuelta, me culió la verga, me puse filo de cama y me penetró luego vi que corría al baño a orinarse, le pasé mi lengua por su culo dilatado, ÑUCO era parte de mi promiscuidad.
Nos vestimos y salimos de mi casa, afortunadamente estaban a media faena politica, la gente seguía aglomerada, nadie se percató de nuestra ausencia. Byron frecuentaba mi casa con la idea que le preste mis juguetes, cerraba mi cuarto y en minutos lo tumbaba y le daba verga por el culo y él también rozaba su verguita en mi culo, enese tiempo Stalin, Byron eran mis culiones, él salía de mi habitación a jugar con sus amiguitos luego que le corría verga, a veces al otro día iba a mi casa con el pretexto de devolverlos, sabía que lo hacía para que lo siga culiando, nos encerrabamos eran pocos minutos de culeo para que no sospechen, a veces le sobaba muñequitos por su culito antes de penetrarlo con la idea de dilatar su culo, al principo no se dejaba pero lugo lo hizo cuando yo me los metía.
Mi vida sexual se hacía promiscua, culiaba con muchos chicos, me cuidaba de los comentarios, siendo cordial con todos y ayudando en lo que pueda a las personas. Pronto narararé otra de mis historias sexuales reales con Adriancito y Alexander.
Muy bueno.