La cama fue testigo de la primera vez (2)

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola de nuevo, gracias por haber publicado mi primera parte, esto estimula a desarrollar la narrativa de mi vida, con vuestro gesto amigos de sexo sin tabúes, confirman con el sello de la verdad a seguirles mostrando la historia real de mi vida.

Soy Vladimir, tengo 19 años, y os escribiré mi verdadera historia de hace cuatro años en la que mi apasionado Manuel (ÑUCO) me enseñó el honroso camino gay.

Mi vida cambió desde aquella tarde en la que ÑUCO y yo nos desvirgamos, ya no pensaba en mi profesora y las revistas pornográficas en las que veía las imágenes de las chicas lo veía a ÑUCO, y me hacía con él haciendo todas esas posturas, estaba picado, tenía rabía conmigo mismo, porque no pude vaciarle la leche en su culo roto, por las noches pensaba:

¿Estará boca arriba, abierto de piernas con el pene alzado, sus labios finos y su nariz brillosa llena de saliba.? Aquella saliba que quiero ponerle en el culo para culiarlo o follarlo mil veces.

¿Estará boca abajo con el culo semi descubierto y frotado con la tela lisa de su pijama y sus manitos abiertas como llamándome para que lo culee?

¿Estará pensando en mi cuando se le para la verga, recordará lo que hicimos, me pedirá más verga… cuándo será ese rico día en que nuestras vergas se froten nuevamente como a él le gusta?

¿Se acordará de mí cuando cague la mierda y se acuerde de que por ese culo entró mi verga virgen o cuando orine recordará el mame de mi verga en la suya?

Y terminaba masturbándome y diciendo durante el gustito de leche salida:

¡¡¡ ÑUCO eres mío, mío!!!, ¡¡¡dame tu culo!!!, eso es ¡¡¡¡miiiioooo!!!

Mi atención era desde la distancia, pues tenía miedo que hablase de su culo roto, pero a pesar de todo, ÑUCO cambió mi vida, nació en mí el sentimiento de celos cuando lo veía jugar con otros niños a las luchas, cuando jugaba con las niñas y niños a las escondidas, cuando abrazaba a otros niños para quitarles su pelota de fútbol e inocentemente su picha se pegaba al culo de esos niños que forcejeaban para no dársela, ÑUCO se convirtió en mi obsesión.

Antes de aquel día, nuestras vidas eran diferentes, pero ahora se convirtieron en una necesidad de culiar. Me sentí algo tranquilo cuando aquel día lo vi jugando en el portal de mi casa, me acerqué, dirijíó su mirada y se reía en forma picaresca.

No dejaba de mirarle su culo en esos shores de tela ligera, cómo se amoldada su creciente verguita y sus pelotitas, era apasionante ver cómo se movía su pelo con su sonrisa bien formada por esos finos labios sensuales, parecía que estaba oliendo el sudor de su piel al contacto con la mía, eso hacía parar mi picha y rápido iba al baño a botar la leche para después arrepentirme de no tenerlo allí para que la reciba con su boca y frotarle mi verga en su culo:

¡¡¡ AAAHHHHGGG !!! ¡¡ÑUCO CÓMO TE DESEO!!! ¡¡¡VEN, RÓMPEME EL CULOOO, CULEA, CULEA, CULEA, CULEA!!!

Desde ese día, a solas en el baño de mi habitación, cuando estaba pujando para que saliera la mierda me ilusionaba pensando que esa tripa de mierda era la verga de ÑUCO que me la introducía y cuando la estaba expulsando exclamaba:

¡¡¡¡ ÑUUUUCCOOOOOOOO!!! ¡¡¡MÉTEMELA, CULÉAME, CULÉAME SOY TUYO!!!! me metía el dedo más grande en mi mano y lo pasaba por la raja de mi culo lo olía y fantaseaba pensando que olía el culo de ÑUCO.

Lo mismo hacía con mi verga cuando se paraba, creía que debería estirarla más y más. Cuando botaba el miado, la agitaba con fuerza hasta quedar un tanto morada producto de mi arrechera: ¡¡¡ ÑUCCOOOO!!! ¡¡¡ FUISTE MÍO Y SEGUIRÁS SIENDO MI MUJER!!! Le decia a mi verga que pronto iba a tener ese culo de nuevo, dejaba de orinar y con mi dedo olía el miado pensando que era el miado de la verga de ÑUCO, fantaseaba con mamarsela y hacerlo pujar… me angustiaba de no poder tenerlo.

No podía estar con él, pues era temporada de vacaciones escolares de invierno de lunes a viernes la pasaba en la casa de mi finca. Los fines de semana pasaba reparando articulos sencillos del hogar gracias a que un primo me enseñó y visitaba periodicamente su taller para ganarme unos pesos. Fue así como pude entrar a ganarme la confianza de la mamá de ÑUCO me pidió que le arreglase la licuadora, alli estaba ÑUCO sonriente luego de 15 días como si no hubiera pasado nada, ese día no le cobré nada a la señora y me gané su voluntad de vecina, el único pago significativo era de estar junto a él. Lo lamentable es que no podía culiarlo en su casa pues es muy pequeña y de patio estrecho, la señora no salía de la casa y ordenaba a ÑUCO hacer los mandados, era hijo unico, y no salía más que con su mamá, esa tarde de domingo me llamó para que le arregle las visagras de una nevera pequeña, cuando llegué me esperaba ÑUCO sonriente con sus herramientas para el trabajo y se sentaba junto a mí yo disimuladamente me paraba y le ponía mi verga parada en su nuca y cerebelo, ÑUCO no se daba cuenta, luego colocaba mi aliento en su oreja y muy silenciosamente exclamaba un ¡¡AHHH!! él no se movía, se reía y sentía cosquillas y su piel poco a poco se puso de gallina, era un putito en proceso de fabricación, ganamos mucha confianza en esa ocasión, tanto así, que en forma rápida y disimulada le sobé mi mano a través de su pantaloneta de fina tela blanca que me excitaba, el se volteó y se sonrió pícaramente y pasó su lengua a través de sus finos labios disimulando sed y botando esa saliba que me excitaba de aquellos labios sensuales y piel canelita.

Al siguiente sábado en la mañana fue la señora al taller para indicarme que la visagra se defectuó por una travesura de ÑUCO, fui con mi primo un ratito y al observar que no era mucho el defecto, me dejó dando las indicaciones y que comprara el repuesto, pues mi primo tenía que salir al centro a reparar un motor congelante y luego vendría a revisar cómo dejé el trabajo. Cuando ÑUCO se sentó junto a mí, no pude resistir ver que se le salía la punta de su verguita por la pantalonetita (short) que tenía un roto de costura producto seguramente de sus masturbaciones, mi verga se paró y con mis dedos me acerqué disimuladamente a frotársela y rápiadamente en impulsos a tratar de desforrarla con suavidad, vi que se le paraba, me veía y se sonrojaba, sentí que le gustó pues se sonreía, su piel se iba haciendo de gallina, se dejó por ratitos, trataba de acercarse más a mi y me ayudaba con su mirada avisando que su mamá no nos viera, eso hacía que me enamore más y crecia nuestra futura ansiedad gay en formación.

Desde ese momento, ÑUCO me abrazaba, se montaba en mi espalda nos reíamos y jugabamos sanamente en la presencia de su mamá naciendo en ella la confianza hacia mí, creyendo que yo era el hermano mayor que ÑUCO nunca tuvo ni tendrá por sus problemas de ovario.

Mi vecino Felipe que tiene mi edad me invitó a jugar futbol en una cancha construida por los chicos en el verano ubicada en la playa del río, ÑUCO que estaba conmigo me preguntó si lo podía acompañar al río pues sólo salía con su mamá al río y sólo así jugaba con sus vecinitos cuando sus madres lababan la ropa, ahora era diferente, por lo que le dije que le pidiera permiso a su mamá, fue corriendo y por la ventana su mamá me daba el permiso.

Dimos nuestros primeros pasos cuando súbitamente se apareció Adriancito, hermano de Felipe junto con sus amiguitos Elvis y Michael que tendría un año más o menos que ÑUCO, para pedirnos que les permitieramos ir al río ya que si ÑUCO va ellos también querrían hacerlo, aceptamos siempre y cuando nos obedezcan y llegando a la playa los niños se lanzaron al río. Mientras me colocaba la venda en mis pies y piernas pude observar el culo de ÑUCO punteado hacia el sol mientras jugaba con la arena, su licra e interior moldeaban las curvas de su culo, se formaba una gran raya del orto que se chupaba con el interior y la licra y me excitaba cuando la arena rozaba su pecho pasando por el ombligo hasta llegar a su verga abultando aún más su figura.

Felipe y yo reíamos al ver cómo los niños jugaban a las luchas y de repente sólo yo pude interpretar que ÑUCO y Adriancito lo hacía diferente que Elvis y Michael puesto que cuando caía boca abajo Adriancito se quedaba quieto y ÑUCO disumuladamente movía su verguita en forma lateral para que no sepamos que lo estaba culiando, Felipe no se daba cuenta y reía inocentemente, más aún cuando ÑUCO quedando de espalda sobre la arena Adriancito también se caía boca arriba con las piernas abiertas sobre ÑUCO… como especie de espalda sobre pecho, estando así, pude ver cómo disimuladamente ÑUCO le abría el culito por al lado del calzoncillo de Adriancito, este se dejaba y se reía, arrastrándose luego en vueltas para hacerlo otra vez dentro del agua, pensé:

¡¡ Aprendió de mi este arrechito!!! ¡¡¡Hoy nuevamente será mío tu culo!!!

Empezamos la partida de futbol playero, se acercó ÑUCO pidiendome que le sacara la licra porque tenía mucha arena dentro, se la saqué y disimuladamente pasé mis dedos por su culo sacándole la arena.

Durante el descanso para otro partido vi sólo a Michael y Elvis jugando en la arena, me asusté, recorrí la maleza y pude ver cómo ÑUCO le penetraba la verga a Adriancito que se quejaba en posición boca abajo al filo de un tronco, pude ver en práctica de ÑUCO todo lo que le enseñé, se sacaba saliba de la boca y se untaba en su verga y escupía saliba en el culito de adriancito, habían empezado recién a culiar tras seguramente buscar un lugar apropiado en esa cuevita con tronco cruzado. No era la primera vez que lo hacián, eso me confesó ÑUCO cuando le rompí el culo, vi por primera vez el culo blanco de Adriancito como soportaba el roce de la verga canela de ÑUCO, se sostenía Adriancito con sus manos y pecho al tronco, ÑUCO le deciá: ¡¡¡ Culea Culea Culea !!!! ¿¿Quieres más??? ¿¿Te gusta mi verga ??? a lo que Adriancito respondía ¡¡¡ Si Si métemela !!!! ¡¡¡ Ay Ay despacio!!!!. ÑUCO le pasaba la lengua por el culo y se lo olía, tal cual le había hecho hace 15 días.

Luego ÑUCO se tiró en el tronco y le dijo: Adrian, yo soy valiente y no me quejo, méteme la verga y verás que no siento. Fue entonces que conocí la verguita chiquitita de Adriancito, blanca y sucia por la basura del tronco, se pasó sus manos para limpiarsela y se la iba undiendo, Andriansito era el que gemía ¡¡¡Hmm me duele mi verga!! y ÑUCO le respondía virándose boca arriba: Ya vez, mi culo es más fuerte que tu picha, ya no me duele, mejor culéame la verga que sólo eso sabes… y vi como al culiar el culo virgen de Adriancito se ponía de punta se movia para todos lados su pelo rubio se movía y sus piecitos bien formados hacían hueco en la arena.

Volteate Adrián, ¿Quieres darme los huecos de arriba? Adriancito no espondió y ÑUCO lo puso boca arriba sobre el tronco pasándole torpemente su verguita sucia por la oreja, el oido, la naríz y cuando se disponía a metersela en la boca Adriancito lo hizo a un lado y se levantó un poco desconcertado.

Conocí la nueva faceta de ÑUCO, me paré detrás, estaban de espaldas desnudos, orinado parados, voltearon y se asustaron, estaban risueños y con cara de preocupación disimulada, no dijeron palabra, me sonreí, se vistieron y los tres nos sentamos en la playa, les pregunte:

¿A Elvis y Michael también les gusta culiar? ÑUCO contestó que muy poco, a lo que Adriancito cuya casa esta junto a ÑUCO dijo que él empezó todo esto del culeo viendo a su hermano Felipe culiar a su novia en su cuarto, le frote la verga a todos enseñándoles así culiar y les gustó, pero que por el culo sólo le enseñó a ÑUCO y a Michael… Elvis es muy chillón y miedoso.

Los abrace a cada uno con mi brazo y les dije con cariño y confianza topandoles la cabeza: Es normal que lo hagan dos personas que se quieren, no se preocupen, yo también los quiero y les juro que este será nuestro secreto, nadie lo sabrá, ellos se levantaron, agradecieron y se fueron alegeres a seguir jugando.

En el agua entre tanta gente sólo le metí el dedo al culo y dije: Te felicito, eres muy valiente, nadie puede contigo, eres el mejor de tus amiguitos… ÑUCO sonrió y me abrazó con confianza.

Un sábado, los padres de ÑUCO invitaron a toda mi familia, a una fiesta de bienvenida de su tío migrante en España, llegó la fiesta, secretamente tomaba vasos de cerveza y fumaba cigarrillos que me pasaba ÑUCO, Michael y Adriansito. La señora en confianza le pidió a mi hermana que le prestara algunos CD de musica actual, me ordenaron traerlos, ÑUCO me acompañó y creí la oprtunidad tan deseada, se me daba, desde que entré lo ví y sentí la piel de gallina, excitado, me puse caliente, él se sentó a esperar los CD para llevarlos pero yo hacía ademán que no los encontraba, mi mente tenía muchas ideas pero la angustia no me hacía coordinar cómo empezar a estimularlo sexualmente para luego en corto tiempo llevarlo a la cama y culiarlo, el tiempo era mi enemigo porque si me demoraba, se iban a dar cuenta y cualquiera entraba a la casa, así que se me salió en ese momento darle la revista pornográfica a ÑUCO, él se reía y yo detrás de la consola veía todos sus movimientos: Se rasacaba la nariz, bostezaba, exalaba, hasta que de pronto vi que se frotaba la verga con su muñeca y disimuladamente con los dedos se ladeaba para sobarse el culo, en ese instante y sin pensarlo más le sobé mi culo por su boquita, le pregunté:

¿ÑUQUITO… quieres culiarme el guebo y el culo?. Se calló segundos, miró a la puerta y se sonrió luego miró hacia abajo su verguita parada, respondiendome con la mirada baja: ¡¡¡¡No sé…!!! Le frote el pelo, dije a ÑUCO que me esperara, que siguiera viendo la revista, rápido pensé en llevar por lo menos 2 CD a la fiesta, les dije que me me demoro un poco porque los estaba probando ya que algunos estaban dañados.

Llegué un poco cansado a donde ÑUCO, cerré con llave dispuesto a todo, escondí la revista pornográfica, dejé unos CD en la mesa. Conciente que sabía que tenía poco tiempo, no se resistió y lo conduje a "nuestra" cama, aún recuerdo sus sábanas con estampados de los superhéroes, corrí la ventana discretamente, una lampara con poca luz salía del velador. Esta vez le pedí que me desnudara y yo lo desnudara a él, así lo hizo, vió mis pelos de las bolas y la picha bien parada y cuando me tocó hacerlo primero le quité la camisa y su interior, me arrodillé, lo besé en las tetillas, comencé a pasarle la lengua desde el ombligo hasta llegar a su boca en donde con mis labios oprimí los suyos con pasión y entrega total, luego lo viré y desde el coxis le pasé la lengua por su espina dorsal hasta llegar a su pelo que comencé a olerlo con loca pasión y a mojarlo con mi saliba, él estaba calientito, y tenía los ojos cerrados. Le baje suavente los pantalones mirando su cara, no estaba nervioso, estaba ardiente, quería culiarme, lo sentía deveras, tanto así que cuando llegó el momento de bajarle su calzoncillo y olerlo, vi su verga parada con un poquito de orina, empecé a mamarle, pasarle la lengua por las pelotas, olerle el culo y ensalibar sus tetas. El me dijo que me acostara que queria culiarme la verga y lo dejé, lo apreté mientras se movía, su cara la puse en mi pecho, con una mano le ayudaba a moverse y con la otra le introducía en su culo.

Me dijo que me virara y así lo hice, me puse a filo de cama, sentí su verguita que trataba de introducirmela, le dije que esperara que iba a ver vaselina, se le baje un poquito el forro de su verga y antes de ponerle la vaselina le oli por unos segundos su verga y su culo. Su verga entró toda sin hacerme efecto, se desesperaba, me dijo: ¡¡¡¡Quiero que pujes como yo!!! en verdad estaba arrecho era otro ÑUCO desde la primera cojida, ahora tenía confianza de valiente y eso me gustaba porque la tarea se hacía más fácil.

Para no decepcionarlo disimuladamente pujé y exclame como él lo hacía, se cansó y lo puse en mi cama boca arriba, le mamé su verga para que se parara, me puse encima de él y le dije que con sus manos abriera mi culo y de un sentón me posé sobre sus pelotitas, él gritó su desforre y yo emití una exalación, en verdad, no me salió sangre en ese momento, pero dejó la huella de la irritación y la exitación cuando horas despues fui a cagar y vi un pequeñisimo hilo de sangre.

Ganaba tiempo y lo puse en cuatro filo de cama con su culo parado, estaba sudado, colorado, pase mi nariz y mi lengua y luego sin pensarlo mucho introduje poco a poco mi verga desgorrada sobre su culo, suavemente, hasta sentir la mitad de mi verga en su culo, giré para todos lados y acordé lo que había visto en el río con Adriancito: su culito blanco, tierno y jugoso de sudor, así que le puse más empeño a mi faena.

Por el espejo del armario se veían nuestras siluetas culiando y le dije a ÑUCO: Mira cómo te estoy culiando, ¿Te gusta? vió al espejo un poco cansado y me respondió que sí. ¿Eres valiente? me dijo ¡¡ si !! Con fuerza le volví a mandar el resto de mi verga por el culo, esta vez sólo escuché ¡¡¡Huummm!!!, le pregunté ¿Quieres más? dijo ¡¡¡ siiiii !!!!, ¿Quién es tu culión favorito? me respondió ¡¡ Túuuuu !! y nuevamente se la introduje toda hacia adentro, ahora fue un ¡¡¡Ahhhhh!!! seguido por primera vez y para satisfacción mía de un ¡¡¡ Ricoooooo !!! eso fue causa para que repetidamente sacara y metiera la verga de su culo hasta que por fin salió mi leche con un ¡¡¡ choc choc !!! que la embarré en los cachetes de su culo y el otro poco que me quedaba le cayo en la espalda. Le di la vuelta, abrió su boca y empece a introducirsela, casi se afixia por ser su primera vez y vi sus labios sensuales llenos de leche, la quité con mis labios, mientras eso sucedía ÑUCO tenía cerrado los ojos y se apreciaba una leve seriedad en su boca con un sudor cómplice en todo su cuerpo.

Fuimos al baño en el espejo juntamos nuestras caras y vimos nuestras sonrisas, era maravilloso, con su boquita hizo una "o" en el espejo y sobre ella hice otra "O" me dijo: ¡¡¡ Así está tu culo, soy valiente !!!! le respondí: ¡¡ Si mi supermán!!!

Desnudos culiabamos otra vez en el baño, lo puse al filo de la ducha y le introduje levemente por el tiempo dos veces mi verga, el hizo lo mismo conmigo y sentía sus pelotitas en mi culo, lo tuve apretado a mi segundos y yo disimulaba con ¡¡¡ Ahhh !!! ¡¡¡ Ahhhh !!! ¡¡ superman !!!! ¡¡¡¡ superman!!! ÑUCO le gustaba oir eso.

Nos vestimos, nos secamos y le pregunté que si le dolía la verga y me dijo que un poquito sólo cuando se frota el calzoncillo, le puse vaselina y le dije que disimule y juegue con los amiguitos, esto que hicimos siempre será nuestro secreto y que me sentía orgulloso de él, mi supermán salido de la sábana de mi cama.

Al retornar nadie estaba pendiente de nuestra ausencia, por tanta multitud, que daba a la acera ya que la casa era pequeña, en eso, se acerca mi hermana con la vecina y me piden que me regrese y traiga hielo de mi refrigerador, sacando el hielo vi en la puerta a ÑUCO y Adriancito, se acercaron y me pidieron que les preste la revista pornográfica, les dije que era para mayores y si querían verla se las prestaba un cuarto de hora porque tengo que cerrar, les dije que ambos vayan llevando este hielo avisen que está duro sacar el resto y que me tomará media hora pues le estoy hechando agua al refrigerador y regresen pronto para que puedan verla, en instantes se acercaron y los conduje a mi cama ÑUCO se reía y se tumbó en mi cama con confianza, no así Adriansito que estaba receloso, lo jalé y lo senté y muy rápido vimos unas imágenes, le pregunté a Adriancito si le gustaba una y me señalo ¡¡¡ Esta… es muy rara!!! le dije ¿Quieres hacerla? se rió timidamente, le dije que es muy rápida y muy rica. No esperé su respuesta pues ya vi su verga parada, le baje su cierre o cremallera y también le hice a ÑUCO pero éste se bajó los pantalones e interiores, me desnudé, me acosté sobre la cama boca abajo ÑUCO se subió con su verga rojita sobre mi culo y yo jalé suavente la verga de Adriancito a mi boca y mamaba oliendola a la vez, vi su cara de gusto y gemía, con mis manos libre iba bajándole los pantalones a Adriancito metiendo mis dedos en su virgen culo blanco lleno de sudor y con perfume infantil de aquellos niños delicaditos, luego me paré, mientras ÑUCO observaba, a mi Adriancito lo puse filo de cama, me sorprendí porque se dejaba llevar… gemía… le gustaba, seguramente ya tenían confianza en mí y nuestro secreto y querían aprender más por eso lo de la revista pornográfica.

Le sobé mi verga canela en su culo blanco, al principio le estaba gustando y lo penetré tantito de mi cabecita de verga que sólo hizo ¡Hmmm!!! ÑUCO seguia atrás de mi con su verga en mi culo y eso era un movimiento de locos, nos reíamos cuando nos mirábamos al espejo. Nos vestimos rápido, ÑUCO hizo una "o" en el espejo, luego sobre Adriancito hizo otra "o" y yo hice la "O" y salimos a la fiesta con el hielo.

Al siguiente día me encontré con Adriancito él me sonrió y le pregunte ¿Te gusto? ¿Quieres hacerlo? y me contesto que ¡¡ No seee..!! con una sonrisa picara avergonzada, sólo hice el ademán de llevarme la mano a mi verga y decirle: ¡¡ Esto es tuyo!!! Adriancito se alejó sonriente como si nada. Días después ÑUCO se acercó a que le arreglara su pelota rota, le dije que podríamos ir más seguido al río con el permiso de su mamá para enseñarle nuevas cosas o en mi finca donde tengo un vena o guato de plátano para introducirselo en el culo, ÑUCO se asustó, luego se rió y aceptó la invitación. Allí estaba yo montado con mi culo roto sobre su pelota rota.

En la próxima historia real contaré cómo le rompí el orto blanco de Adriancito en mi cama.