La casa de pueblo de mi suegro 2

No podía imaginar la semana tan especial que me esperaba en la casa de pueblo de mis suegros .
Tras  el encuentro que había tenido con mi suegro, apenas me atrevía a mirarle a la cara por la vergüenza que sentía. El, tampoco me dirija mucho la palabra, de hecho, es bastante parco en palabras, por lo que tampoco nadie sospecho de lo ocurrido.

Una mañana, recién levantados, estaba con el móvil en el sofá, y mi mujer en la cocina con su madre charlando. Mi suegro, seguía en su habitación.

Les escuche decir que se iban al mercado, que ponían ese día en el pueblo,  a comprar un poco de fruta y cosas para comer.

Mi mujer me vino a decir esto y mi suegra aviso a su marido que se iban.

Se marcharon. Yo me quedé en el sofá, si soy sincero, un poco expectante. No sabía si mi suegro aprovecharía para decirme algo de lo ocurrido, que se arrepentía, que no contase a nadie…. algo por el estilo.

Como si me hubiese leido6la mente, ahí apareció mi suegro. Sin camiseta y con unos boxers de tela, los cuales le venían un poco anchos, por la tripa que tiene.

– Hola, súbete conmigo a la andana, me dijo.

Yo me quedé helado. No sabía como reaccionar, que pretendía… Vi que se marchaba e iba hacia la andana.

Para subir a la andana, hay una puerta frente al comedor. Vi como la abría, y como subía.

Yo lo seguía, dubitativo. He de decir, que mi pene había empezado a crecer. No sabia muy bien que intenciones tenía.

Cuando fui a subir las escaleras, iba a cerrar la puerta de la andana, and cuando escuche desde arriba:

– Deja abierto, así, si vienen, las escucharemos.

Subí, ya con más seguridad en la que iba a pasar.

Miraba hacia arriba mientras subía, y veía a mi suegro apoyado en la baranda del hueco de la escalera.

– Ven, ponte aquí. Así si vienen, las escucharas.

Me puse donde me indicaba, justo donde el estaba. Me puse de espaldas a el, apoyado sobre la barandilla

Sin mediar palabra, bajo mi pantalón corto. Mi pene duro, enseguida salió disparado.

El, a su vez, se bajo el bóxer y empezó a masturbarse, rozando con su capullo los cachetes de mi culo. Yo lo notaba detrás mio, como rozaba su capullo, como lo restregaba

Yo solo podía buscar con mi culo su capullo. Me gustaba sentirlo, quería algo más, pero el seguía detrás mío masturbándose..

Yo me tocaba, me movía, casi suplicandole que me hiciese algo más

– Ábrete el culo, me dijo.

Ufff, eso me excito mucho, a la vez que me dio un poco de miedo. Querría meterme la? Me iba a follar? Ummm

Separe mis dos cachetes con mis manos. Me recosté un poco más sobre la barandilla. Lo que aprovecho mi suegro para meter su capullo entre mis cachetes y comenzar a restregarlo sobre mi ano.

Así siguió un poco más. Hasta que lo escuche gruñir y gemir. Su capullo pegado a mi ano6, notaba como seguia masturbándose.

De repente, un chorro de semen empezó a caer sobre mi ano. Notaba como movía su capullo alrededor de mi ano, mientras salía su semen, y me lo iba restregando. Yo seguía con mi culo separado, tb gimiendo, Muy excitado por lo que estaba sucediendo. Cuando termino de correrse, se subió el bóxer, y se marcho …. Dejándome ahí, excitado y sucio de su semen