la colonia de los machos (ficcion)
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por leeyoungjee.
Hola mi nombre es Julián, mido 1.70, soy delgado y un poco rellenito en algunas zonas de mi cuerpo (nalgas, piernas y un poco de panza jaja), piel blanca, tengo 20 años de edad, soy enfermero técnico salido de un CBTIS, soy mexicano y soy bisexual, desde los 7 años de edad supe que a mi los niños y las niñas me gustaban, claro no cualquiera, para mi era fácil enamorarme de mis amigos y amigas y sentirme atraído y cachondo al tenerlos cerca de mi, desde pequeño vi coger a mis padres en mas de una ocasión y bueno ya tenía ideas de lo que quería hacer y que me hicieran lo niños y niñas que me gustaban jaja, bueno sucede que termine mi carrera técnica hace un año pero al final de la carrera no quede con intención de ejercerá debido a que aunque me parecía un trabajo interesante, me sentía mas atraído por la idea de estudiar licenciatura en educación primaria
bueno en resumidas cuentas mis padres y mis familiares pasaron por una situación económica muy difícil por lo que no solo no podían apoyarme para continuar mis estudios universitarios sino que además se encontraban en un gran riesgo de ser embargados por deudas que nunca pudieron pagar, bueno muy a mi pesar decidi darme de baja en la universidad y comenzar a buscar trabajo en mi municipio para ejercer la enfermería después de mucho buscar me contrataron por parte de la jurisdicción local para ser vacunador, mi trabajo consistía en ir casa por casa con las direcciones ya anotadas de los niños menores de edad a los que les faltaban vacunas y también de vez en cuanto pasar por colonias enteras vacunando adultos con vacunas que les faltaran, bueno el caso es que este trabajo a pesar de no ser mi favorito por las exigencias tan fuertes que tenían mis supervisores conmigo y mis compañeros y el hecho de que cargar con una hielera de 10 kgs, una mochila y dos tablas sujetapapeles, me parecía entretenido trabajar en campo, el estar encerrado todo el dia en un solo lugar me parecía algo realmente aburrido, bueno el caso es que pasaron los meses, mis padres iban saliendo del atasco económico que tan cerca había estado de embargarnos y yo ya me había hecho mas a la idea de que tal vez ya no seguiría estudiando y me quedaría trabajando como vacunador.
Un dia me recibieron en el trabajo con la noticia de que se me asignaría la colonia el polvorín, realmente no recibi la noticia con muy buena cara debido a que en aquella zona vivan muchas personas de bajos recursos, era una colonia de gente malviviente, había muchos pandilleros, los compañeros y compañeras anteriores siempre habían actuado de manera extraña después de trabajar en aquel lugar, a veces desde el primer dia, intente negociar con la supervisora y explicarle la razón de mi negativa para que me entendiera y me dejara continuar en mi zona la cual le había asignado a un nuevo vacunador, pero por mas que lo intente ella se cerro completamente a mis explicaciones, fue entonces que decidi tratar de negociar con alguno de mis compañeros para cambiarles la zona incluso se lo pedi a los que estaban destinados a comunidades rurales, realmente preferia ir a un rancho a una hora y media que arriesgarme en el polvorín, bueno el caso es que ninguno de mis compañeros me quisieron ceder su zona a pesar de que incluso les ofreci a algunos de ellos hacerles uno que otro favor personal, todos teníamos conocimiento de lo mal que estaba esa colonia, seguido aparecían noticias en los periódicos en los que hablaban acerca de asesinatos, violaciones, robos y otros crímenes que o eran llevados a cabo por los habitantes en las colonias vecinas u ocurrían en la misma colonia, para que se den una idea los camiones urbanos no llegaban hasta ahí, es mas dejaban a los pasajeros a unos 2 kilómetros de la colonia, si mi situación económica hubiera estado mejor y no necesitara de verdad el trabajo la verdad es que habría puesto en su lugar a la idiota de la supervisora y me hubiera ido en ese mismo momento, pero pues la vida es curiosa y no podía darme ese lujo, asi que de mala gana acepte, tome mi equipo y partí a tomar un camión que me dejara al menos cerca del polvorín, cuando por fin baje del camión empezó la escalada todoterreno en medio de piedras, material de desecho de construcción, tierra y mucha basura hacia la colonia
al llegar me di cuenta de que las casa eran más pobres de lo que se rumoraba, muchas no tenían puertas sino que solo estaban cubiertos los huecos con pedazos de herrería, portones viejos o trozos de madera, algunas tenían cubiertos los huecos de las ventanas con plástico y no había nada de pavimento o de perdido firme en la calle era como si estas casa estuvieran en pleno monte, muchos niños corrían sucios por las calles, algunos incluso iban solo con camisa y sin nada abajo, sus vergitas se movían al al aire y algunos desprendían un fuertes olores a excremento y orines, me sorprendi al ver que no solo los niños estaban en la calle con sus madres, señoras muy humildes, despeinadas y con caras que reflejaban el hambre de la colonia sino que también empezaron a salir hombres de las casas, ancianos y hombres salían de las casas o se asomaban por las “ventanas” por donde pasaba, incluso chamacos de 13 y hasta 18 años salían a verme en una actitud retadora y me estudiaban con la mirada, bueno el caso es que después de la impresión decidi que lo mejor seria hacerme el pendejo, no verlos a la cara ni encontrar sus miradas de ceño fruncido, extrañeza y miedo, decidi fingir que iba bien concentrado leyendo mi listado de niños, depues de tanto caminar por ese terreno tan mal trecho, sentirme como alguien que pronto será linchado, cargar mas de 10 kilos en mi espalda y el fuerte sol que quemaba mi cara decidi parar en una casa la mas ordenada que encontré.
Afuera se encontraba una chica lavando en una tina con un tallador y un peine, era una mujer joven como de 16 años, morena, delgadita, cuando me miro me di cuenta de que si se maquillara un poco seria muy linda a pesar de que conforme se fue acercando pude apreciar que su rostro tenia la piel dañada, con una especie de salpullido (muchos granitos diminutos)
-buenas tardes, vengo de la jurisdicción a vacunar niños, estoy buscando a la niña Isolda reyna campos, su mama se llama Roberta campos y la niña tiene, 4 años, la conoces?
-buenas, oiga pero haber como dice que se llama la chamaca?
– Isolda y su madre Roberta
-jaja fijese que no las conozco esque aquí siempre no hablamos de apodo, ni sabemos como se llaman de verdad todos.
-Pero mire alla, alla y allla me dijo señalando rápidamente con su dedo a mis espaldas hay chamacas chiquillas.
-bueno muchas gracias, oye disculpa y aquí no hay niños,
-porque?
-pues como no hay nombres en las calles ni números y traigo muchos niños que no tienen direcciones claras registradas, pues quería ver si no habrá de casualidad uno de ellos aquí.
-no fijese que……
-quien es!!!!!!!!! Grito un hombre con voz ronca desde el interior de la casa
La mujer me grito casi en la cara –que de la jurisdicción vienen a vacunar niños!!!
me sonrio y voltee a ver a la puerta de la casa que estaba cubierta por una sabana, cuando la cortina se abrió vi salir a un hombre de unos 27 años de edad, era moreno claro, tenía el cabello revuelto y con remolinos en la cabeza como si fueran cuernos, venia rascándose la cabeza y venia solo en trusas, unas truzas aguadas le cubrían un pedazote de verga , era muy peludo, tenía una ligera barba, mucho vello en el pecho que bajaba hasta su estómago sin panza y se perdía en su calzón, de cuerpo se le veían uno fuertes brazos que aunque sin mucha definición si que eran anchos y macizos, piernas anchas, venia descalzo y se notaba que había estado durmiendo y se acababa de parar de la cama ya que venia con los ojos encandilados.
-buenos dias me dijo dándome la mano y bostezando
-buenos días, su mano era grande, fuerte y pesada y sentí como estaba empapada de algo que ya se había secado, mi imaginación no tardo en andar y supuse que era semen.
-que se le ofrecia me dijo en un tono entre serio y amable
-que esta buscando a una chamaca que se llama Isolda y a una mujer que se llama Roberta y me preguntaba que si teníamos niños aquí, dijo la mujer con una gran sonrisa
-o pos!! Dijo el hombre viendo a la mujer y sonriéndose,
-pues tu nomas dime chamacona y ya sabes le ponemos relleno a la rosca y vi como se abalanzo sobre la muejr cubriéndola con su cuerpezote peludo, de espalda vi como sus nalgas no estaban nada mal, eran firmes y rellnitas, se le notaba un poco de vello en todo el trayecto y la truza al estar un poco corrida mas hacia un lado dejaba ver mas cachete peludito, la mujer se reia y trataba de zafarse, le ponía las manos como no queriendo en el pecho y en el estomago
-zos estate quieto tio!!!
-tio?
-fue ahí que mi excitación subio al nivel de turbo, no podía dejar de ver a esa pareja agasajanose frente a mi, sentí muchas ganas de participar, pero logre regresar al mundo real y di un leve tosido después de componer mi cara
-ya estese tio que dira el enfermero?!
-jajaj, ós apoco dice algo, dijo el hombre mirándome fijamente y riendo con cara picara
-no yo nada dije dibujando una leve sonrisa que me salio muy forzada y timida
-mire la casa que busca esta para alla, con la magos alla vive la chamaca que necesita encontrar, la chamaca vive con su abuela porque su mama se fue desde ya hace varios meses.
-muchas gracias, me dice alla verdad en la casa con los chivos.
-si esa mera
Al voltear a ver de nuevo al hombre me di cuenta de que la mujer se había metido a la casa y que mientras el hombre miraba hacia el horizonte se metia la mano por encimaa de la truza y se rascaba el pubis velludo, baje la vista y vi su gruesa mano dentro, se escuchaba como los vellos eran rascados sobre la piel y la verdad me super excite de nuevo, cuando volte a ver al hombre me di cuenta de que me miraba con curiosidad
-perdón chavo, me da comezón jajja
-jajja si no se preocupe, se lo que es eso…….., gracias y hasta luego
El tiro una leve risa y se despidió de mi , me di media vuelta y me dirigí a donde me había dicho, de reojo pude ver como el seguía parado ahí y se seguía masajeando la parte baja de su cuerpo, llegue a la casa de doña magos y me dispuse a hacer mi trabajo, toque la puerta y salio un chico de 15 años, llevaba un shorts blanco, con el pecho descubierto y estaba empezando a llenarse de vellos, era alto tal vez 1.75, tenia el pelo corto casi al raz de la cabeza y venia descalzo, sus brazos y pernas eran gruesas y tenían muchos vellito dorados,
-buenos días, vengo a vacunar a la niña Isolda
-abuela! Que se viene a chingar a Isolda jajajjaja grito metiéndose dentro de la casa y riendo, rápidamente se esccucho un llorido dentro de la casa y la voz de una anciana ronca que gritaba
-a pinche chamaco cabron, culero, cállate la boca,
El chico se seguía riendo dentro de la casa, salio una anciana con una niña pequeña en brazos y detrás de ella se abrían paso por la cortina que servia de puerta el chico de 15 años, una niña de 10 y un pequeño de 3
-buenas diga dijo la anciana con su voz ronca y seria
-buenos días señora vengo de la jurisdicción a vacunar a Isolda
-mire aquí esta la cartilla me dijo la anciana acercándome una cartilla de vacunas con calcomanías y muy arrugada
-bueno si le falta la vacuna si gusta se la ponemos ahora mismo.
-es tomada o como
-no es inyectada
-y se me va a enfermar
Después de mucho explicarle y Re explicarle las cosas la anciana acepto que se le pusiera la vacuna a la niña, prepare todo y me dedique a hacer mi trabajo
-mira Isolda, te voy a dar un piquetito, podía ver como el chico de 15 años estallaba en risa
-con una jodida chingada jose manuel o te callas el ocico o te me vas de aquí cabron
Continue con la niña
-mira es un pellizquito si, es una aguja grandecita pero no te va a doler si no te mueves, si te mueves te voy a tener que dar otro piquete, y vi como el chico se reia para si mismo, estaba seguro que el muy caliente se imaginaba otra cosa, después de vacunar a la niña me despedi y pude ver como antes de que me diera la vuelta para seguir mi camino mientras jose manuel se metia a la casa su hermana se le acercaba por detrás y le daba un tiron a su shorts y echaba a correr detrás de la casa dejándome una vista paronamica de sus hermosas nalgas eran lampiñas pero grandes y muy apachurrables, en el momento en el que mi mente se disponía a viajar por mis fantasias imaginando tantas cosas jose manuel se dio la vuelta desesperado para subirse el pantalón y pude ver una verga peluda una cabeza circuncidada y dos huevotes con un largo teciopelo de vello, mi rostro se descompuso en deseo y me empece a masajear el bulto detrás de la hielera que llevaba al frente, jose manuel se subio su ropa me miro, con cara de preocupación y al verme ganoso me sonrio, se dio la media vuelta y entro a la casa, sobándose la verga sobre el shorts.
Ya para ese momento estaba que me cocia de deseo y no aguantaba mas, me recompuse de la calentura, oculte mi erección de 17 cms bajo mi hielera y Sali de ahí, me sentía desesperado, caliente, cansado, sediento por el calor, el sudor de mi cuerpo me ponía aun mas arrecho, mi ano por tanto sudor se sentía mojado, sentía la friccion de mis nalgas una con la otra, sentía el vello en mi culo rasparme y calentarme aun mas, incluso sentía dilatado el ano, a pesar de no haberme tocado con nada, me sentía abierto como si mi ano, estuviera recién cogido, realmente me sentía mal y bien al mismo tiempo era una sensación muy confusa, la culpa de todo la tenia esta maldita colonia con tanto macho en ella, me sentía en esos momentos deseoso de pene de una verga de hombre que me hiciera suyo, que me recorriera con su cuerpo velludo y que me manoseara bruscamente como solo un macho sabe hacer.
Camine solo la primera calle de la colonia ese dia y cuando me fui de ahí saludando a todos y diciéndoles hasta luego a las personas que me habían tratado de buena manera, me di cuenta que en una de las esquinas de la colonia cerca de un corral estaba el hombre que me indico la dirección de la niña que no lograba encontrar, llevaba un pantalón de mezclilla, tenis, una camisa de tirantes y me chiflaba levemente me saludaba con la mano y me indicaba que me acercara, al principio senti demasiada desconfianza ya que como ya les conté esta zona estaba llena de pandillas y había un largo historial de crímenes, pero estaba tan caliente que decidí acercarme y salir corriendo de ahí en caso de ver algo extraño, me acerque hacia el y me dijo que lo acompañara mientras me sonreía y se masajeaba el pene sobre el pantalón, en ese momento supuse que se dio cuenta de los mucho que me había gustado su cuerpo y decidi seguirlo para que me ayudara a bajarme la calentura, lo segui por un espacio de 4 minutos mas o menos y llegamos a unas tapias alejadas de la colonia en las que había un perro amarrado a la entrada con una cadena de 7 metros, la verdad en cuanto lo vi me atemorize y el animal comenzó a ladrar y gruñir mostrando todos sus dientes
-no te preocupes es mío no muerde si me acompañas.
-que es esto??
-son unas tapias que no acabaron de construir hace algunos años unos que vivian en la colonia
-y que hacemos aquí?
-nadie viene para aca y uso este lugar para que viva el chato (refiriéndose al enorme perro)
Y con un tono de su voz ronca y sexy me dijo – y para desetrezarme un rato
Al instante comprendi que tenia ganas de follarme dentro de la casucha en ruinas, se abrazo al animal y me dijo pasale yo lo detengo, mientra el lo tomaba del cuello y el perro ladraba yo entre en la casa era un pasillo largo con muchos cuartos pequeños a los lados en total conte 5 hasta que llegue al de el final donde había una colchoneta negra en el suelo, un bote de veneno de insecto en las esquina, una caja de botas, dos cojines grandes y viejos de una antigua sala y una silla de metal, deje mis cosas en la esquina con el veneno y me quite el chaquetin de enfermería, me sente en a silla de metal y poco depues escuche sus pasos acercándose al cuarto,
-lo encontraste solo
-si pues era el único cuarto con cosas
-y como te fue con la vacunada compa
-bien ya me falta menos
-muchas gracias
-ya sabes para lo que se te ofrezca, dijo riendo levemente y sobándose el bulto
-me imagino que debes tener hambre dijo en tono burlon, y mucha sed
-si le dije un poco nervioso, mirando sorpendido su paquetote que estaba super crecido bajo su pantalón
Se acerco hasta la silla en la que estaba sentado y se quito la camisa, ahí estaba de nuevo su hermoso cuerpo desnudo y velludo, sus axilas levemente sudadas que difundían por la habitación un leve olor a sudor, me acerque hasta el, sobe sus pectorales, su estomago, sus flancos y la espalda, y empece a besar su pubis, con mis labios le daba leves tirones a sus bellos, el comenzo a respirar agitado, y a jalonearse el cinto y el pantalón lo detuve y empece a mamar el dedo medio de su mano derecha, sabia a semen seco, jaja , este macho era sucio pero me gustaba, en ese momento no razonaba, me dejaba llevar por el instinto y el hambre de macho que sentía, le quite el cinturón y lo lance a un lado de la colchoneta, baje su pantalón y puse mi cara sobre su pene los aspire hondo, olia a orina, a semen, sudor su cuepo despedia un leve olor a cigarro y alchol que lo aderezaban todo y me ponían aun mas desesperado, le quite la truza y pude ver ese trozo de carne babeante, era del color de su piel, media mas o menos 21 cms era mas grueso que el mio,
sus testículos parecían dos huevos de gallina de rancho con vellos recortados, colgaban mucho hacia abajo, el vello en su pubis era largo sin llegar a ser tupido, estaba rizado y enmarañado por los restos de semen seco, su pene tenia vellos en la parte baja, su cabeza era circuncidada y morada, un hilo de semen caia hacia sus huevos, no aguante y abri la boca lo mas que pude me entro la mitad y empece a mamar como si fuera un becerro, el solo gemia y acariciaba mi cabello, comenzó a tomar mi cabeza por detrás y al decirme fondo enterraba su pene dentro lo mas que podía, me dejaba respirar hondo por unos segundos, de nuevo decia fondo y me lo metia hasta dentro, me gusto mucho darme cuenta que no solo era un macho sino que era un caballero, decidi darle un regalo, lo sente en la silla metalica, me inque en el suelo me quite mi camisa blanca, mis pantalones negros, quede solo en bóxer ajustados y también me los quite de espaldas a el, pude ver como me miraba hambriento y ansioso, me di cuenta de que se mordía le labio superior levemente y empezaba a jalar su verga, me tomo de las nalgas y las amazo como una plastilina delicada.
mi ano estaba empapado de sudor y senti vergüenza de que el tuviera asco por el olor, pero senti como se inco en el suelo y me hundió la lengua, me hizo tocar el cielo de un solo golpe, fue genial lamia mi sudor de entre mis nalgas, tallaba mi vello anal con sus labios y lengua y casi me vengo cuando me empezó a jalar la verga, para ese entonces yo ya gemia por lo alto, me dio miedo que no oyeran y me tape la boca
-no te preocupes, aquí nadie viene, estamos solos, bien y puedes bramar y nadie te oirá
Esa respuesta me excito y empece a gemir de nuevo al ritmo que mi cuerpo me lo ordenaba, recordé el regalo que quería darle y lo hice sentarse de nuevo me arrodille y tome su pene lo mire y le di lengüetazos, aspire aire y lo hundi hasta el fondo de mi garganta, hice presión como queriendo hacer gárgaras y oia como el gemia, empece a mover rápido la cabeza y a fingir una rápida penetración y el tensaba todo el cuerpo y apretaba mis brazos que estaban sobre sus piernas, su pene comenzó a contraerse y me disparo semen, en ese momento me lo saque hasta dejar solo su cabeza dentro de mis labios y recolecte su semen, era caliente, amargo, con esa consistencia que tanto me gusta, abri la boca y se lo enseñe, frente a su mirada sorprendida me lo trague y me sente sobre sus piernas, sentía como sus vellos me acariciaban el trasero y su pecho velludo se repegaba a mi costado, tomo mi pene con las manos izquierda y empezó a pajearme con mis propios liquidos, eramos una imagen extraña, el sentado en la silla de metal y yo bre el de lado mientras el me pajeaba con su mano izquierda, hubo un momento en el que mis liquidos se secaron y fue cuando el se escupió en la mano y comenzó a masturbarme, me acerque a su boca y lo bese de piquito, el me tomo con la mano derecha de la cabeza y me metió la lengua hasta el fondo, yo gemia como perra y me termine viniendo en su mano, cacho todo mi semen en su mano y cuando pensé que iba a metérmelo en la boca, vi como se lo chupo todo y lamio su mano indeciso, su pene se sentía como una barra de metal caliente bajo mis nalgas, caliente y peluda, el se quedo gimiendo abrazándome en la silla de metal, me solte y me arrime a la colchoneta, volte a verlo y le pregunte con una sonrisa.
-puedo
-claro estás en tu casa me dijo sonriendo y bañado en sudor
Me recosté en la “cama” boca arriba, puse mi cabeza al borde de un cojin y enrosque otro bajo mi cadera, me abri de piernas y empecé a masajear mi ano, el me vio masajeándome y empezó a hacer lo mismo con su pene, me moria de ganas de que subiera sobre mi pero, al parecer el disfrutaba viéndome hambriento, entonces me meti dos dedos y solte un fuerte gemido, sentía mis paredes calientes y mojadas abrirse y cerrarse apretando mis dedos, el se levanto de la silla, tomo la caja de zapatos y saco una tira de condones con un bote de vaselina, me arrimo la vaselina
-engrasa bien el hueco, me dijo con una sonrisa
Tome la vaselina y empece a untármela, meti un tercer dedo y segui gimiendo, quería que el me ayudara pero se limitaba a ver y masturbarse frente a mi, junte los cinco dedos y me los meti lo mas adento que pude que fueron mis nudillos y gemia entre dolor y placer y fue cuando el se inco y me cubrió con su cuerpo, me metió el pene hasta la mitad supongo porque no sentía sus huevos y me abrazo pegaba su pecho contra el mio y sentía su cuerpo fuerte y rigido como madera sobre mi, me abrazo y me dio un beso, me sentía realmente en el cielo, protegido, frágil, querido, de pronto senti un tiron y su pene completo se undio en mi,
-aghhhh, agghhhhh, aggggghhh, esperate, esperate!, era lo que le gritaba ahogado
-mmmhhh delicioso, decía en mi oreja, su voz era diferente, algo fría pero llena de deseo
Empezó el vaivén, sentía que moria, que me acuchillaban el ano, ya había recibido vergas como la suya antes pero nunca de un tiron, por mas que intente salirme un poco y por mas que le pedi clemencia, el solo gemia sobre mi, me abandone a lo que pasara pues nada mas me quedaba, gemia y gritaba entre pujidos y solo me abrazaba muy fuerte a su cuerpo, sus vellos me acariciaban mientras su pene me destrozaba por dentro, pasado un buen rato el empezó a gemir fuerte y me descargo dentro, su semen fue como medicina, me senti levemente aliviado y cuando pensé que se saldría me enterro su pene hasta el fondo, me quede ahí pujando de dolor y placer mientras el me masajeaba mis nalgas y chupaba mis pezones, mi rostro estaba lloroso, sentía moco tratando de escurrir por mi nariz y de nuevo el empezó a empujar su enorme pene sobre mi, ahora mas lento y sacando un poco de su pene de mi adolorido ano, empece a disfrutar de verdad, sentía sus huevos chocando con mis pompas y empece a abrazarlo fuertemente a mi cuerpo gemiamos juntos,
-te esta gustando dijo el entre pujidos
-si si ahora si, metela mas
Me la metió mas y sentí de nuevo una punzada de dolor, pero no se lo dije, pronto quede completamente acostumbrado y disfrute como una loca, gemíamos, nos insultábamos y yo empecé a empujar su cadera haciendo fuerza con mis manos sobre su enormes nalgas, hasta que sentí que me venía, sentía el semen queriendo salir de mi pene y fue cuando empecé a gemir y gritar más aun
-si si si aaaaaghh
Y el con un pujido de macho me disparo dentro del culo su semilla, se quedo tendido a un lado de mi, hasta que despacio me lo saque de entre las piernas y me abrace a su cuerpo.
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