LA FAMILIA DANKWORTH KELLY IX

Secretos que se van descubriendo….

Capítulo 9.-

Dentro de la familia Dankworth Kelly, siempre había una excusa válida para compartir amenamente, beber un poco de más, tocar algún instrumento, en fin , parece que la filosofía que mantenía unida a la familia era:

«Pásalo bien, diviértete, y disfruta cada segundo».

Aunque su lema familiar era:

«Ama y protege a los tuyos hasta tu último aliento, y a los ajenos con tu alma misma de ser necesario».

Tras la llegada de Patrick, Alexander, Jackson y Reginald, se hizo una pequeña celebración, además, no podían dejar pasar por debajo de la mesa que ya hasta el hijo de Patrick, Christopher, tenía su anillo y brazalete de protección.

Gracias a estos, el temperamento de Christopher sería más sosegado, más con la imagen de hombre joven que los lobos visualizaban, dejando fuera el comportamiento aniñado. También el brazalete y el anillo tenían la propiedad de proteger a su portador ante cualquier enemigo.

Al terminar de llegar, todos estaban completamente desnudos, Patrick había puesto esa norma, y todos, incluso él, la tenían que cumplir.

Así prepararon la comida, sirvieron la mesa y se sentaron a comer.

Antes de la cena, Patrick había dicho que quería decir algunas palabras, y que esperaba que todos lo atendieran…

Adelante, le dijo Randolph, tienes toda nuestra atención sobrino.

Gracias tío… Pues… Como ya todos saben, desde que Maggie murió físicamente, me vine a vivir aquí, huyendo de todo posible contacto con el mundo, queriendo proteger a mi hijo de cualquier cosa que pudiera suceder si seguíamos en Snow Hills.

Hubo momentos en los que éramos muy felices, él y yo solos, padre e hijo viviendo juntos, una escena normal luego de enviudar.

Con el tiempo pasaron cosas que no entendía, por ejemplo, cada vez que veía a Chris, o lo tenía cerca, su aroma a duraznos maduros me volvía loco.

No era que me desagradara, sino que me excitaba a tal punto que de alguna forma tenía que desahogarme, luego, tras la visita de papá y mamá, luego la de Jackson y Chiu, se me aclaró el panorama, entendí entonces que había cosas que debían darse y cada vez se acercaba más el día.

Cuando por fin llegó el día en que se dió la oportunidad, el día del cambio, no sólo cambié yo, sino también él, y sé que no cambiamos sólo físicamente, sino también en cuanto a la manera de vernos el uno al otro, actualmente veo a Christopher y me veo reflejado en él, como si hubieran pasado muchos años, no puedo negar que lo amo, es mi único hijo, mi cachorro; pero sé que él elegirá con quién vaya a tener una vida de pareja, una convivencia, hijos, y demás cosas.

Pero siempre, siempre, podrá contar conmigo, para lo que sea necesario, no importa el qué, todo lo que me pida, yo se lo daré.

Y si esa persona está sentada a esta mesa, quiero que sepa que no me opondré en darle todo mi apoyo, eso sí, si esa persona le llegara a hacer daño, se las verá conmigo, nadie tiene ese derecho. Ni siquiera yo que soy su padre.

Bueno, espero no haberles aburrido, sólo son cosas que deseaba decirles. Ahora sí… ¡A COMER!

AAAAUUUU… Aullaron todos al unísono dándole palmadas a la mesa.

Luego de compartir amenamente durante la cena, cuando el reloj de la sala daba las 23h00, Christopher sintió mucho sueño y se despidió de todos para irse a dormir, diciendo que estaba muy cansado.

Patrick lo abrazó y le dijo:

Recuerda, amor, despierto o en sueños, sigues siendo mi hijo, y nada más el sueño se torne desagradable, piensa en mi y ahí estaré.

Gracias papá, así lo haré.

Anda hijo de mi vida, duerme bien y descansa. Mañana nos espera un día bastante ocupado con la carpintería. Ah… Por cierto, se me había olvidado… Dijo Patrick levantándose de la silla para ir a su habitación de donde volvió con una pequeña caja de madera que tenía talladas las iniciales MB.

Ábrelo, era de tu madre, esas son sus iniciales, estoy seguro que a ella le encantaría que tú lo usaras.

Al abrir la caja, Chris vio una cadena de oro blanco con un dije de ópalo dentro de un círculo de diamantes.

Ehhh… No sé qué decir…

Jajajaja dile que te gusta, y deja que te lo coloque… Jajajaja bromeó Alexander.

¿Te gusta?

Es hermoso papá… Pero… ¿No es muy femenino?

Bueno, se puede modificar, pero me alegra habértelo dado.

¡GRACIAS PAPÁ!

Déjame ayudarte a ponértelo.

Christopher se dió media vuelta dándole la espalda a Patrick, quien con sumo cuidado le colocó a su hijo la cadena y el dije que fueron de su esposa. Cuando estuvo listo, Christopher giró nuevamente hasta quedar cara a cara con su papá.

¡Gracias Papá! Le dijo abrazándolo emocionado.

Me complace mucho que te haya gustado, y hay una leyenda que contaba tu madre respecto a esta cadena. Según ella, si nunca deja tu cuerpo, cuando estés en peligro, el dije brillará tanto que hasta las más siniestras sombras se apartarán y luego vendrán a quien lo lleve dones y ayuda que no sabía que tendría.

¿En serio?

Jajajaja eso suena a supersticiones filipinas, dijo Alexander.

Pues, supersticiones o no, Maggie nunca corrió peligro mientras lo usaba. Dijo Patrick.

Pero la tuvo que picar una maldita serpiente, lamentó Reginald.

Sí, pero en ese momento, quien lo llevaba puesto era Christopher, Maggie se lo había colocado, la serpiente iba a atacar a Chris, y se desvió hacia Maggie. Aclaró Patrick.

Chris no salía de su asombro ante lo que iba escuchando. Luego, supersticiones filipinas o no, comenzaron a hablar de otras cosas y le dió mucho sueño. Se despidió nuevamente, y dijo que se dejaría el collar puesto.

Antes que te duermas… Hay algo que necesito conversar contigo hijo…

¿Conmigo? Pero… Tengo sueño papi. ¿Podemos dejarlo para mañana?

No, durazno hermoso, necesito hablar contigo lo más pronto posible, no puedo esperar a mañana.

Bueno, pero déjame que me lave un poco la cara para quitarme este sueño…

Anda, te espero.

Christopher se acercó a la cocina y tomó agua clara para lavarse la cabeza, mientras, los adultos hablaban en la mesa casi murmurando para que Christopher no los pudiera oír.

¿En serio va a seguir durmiendo en esa habitación de cuando era apenas un niño pequeño? Preguntó Reginald.

Jajajaja… Pues… Si alguno de ustedes se anima, podemos hacer algunos trabajos de remodelación, si les parece, a ver… ¿Quién está dispuesto a ayudar? Levanten la mano. Dijo Patrick levantando la suya.

Cuenta conmigo, dijo Phillip, nada me gustaría más que ver algunas paredes que construyó mi padre caer… Jajajaja…

Te acompaño en eso, dijo Alexander. ¿Te animas Randolph? Nosotros trabajamos muy bien juntos.

Por supuesto que sí, y si es para demoler todo y volver a construir, más todavía… Jajajaja.

Perfecto, Neil, papá, Jackson, sé que cuento con ustedes.

Aunque… Hay una casita detrás de los establos. ¿Por qué no acondicionamos esa? Preguntó Neil.

Esa casa es un peligro, dijo Jackson, si no se demuele completamente, se le va a caer encima a quien entre en ella.

Pues… Creo que como Christopher ya no es un nené, es apropiado que tenga su espacio, y su habitación sería la de los cachorritos… Dijo Patrick acariciando suavemente el abdomen de Jackson.

Yo voy a ver cómo está esa casita de la que hablamos, dijo Neil, levantándose de la mesa, recogiendo su plato y todo lo que había utilizado para comer para lavarlos. Cuando los estaba lavando Jackson le dijo que era mejor mañana, con luz de día, así podrían ver dónde iban a pisar.

Jajajaja río Phillip, nosotros vemos perfectamente claro en la oscuridad más absoluta Jackson. No tengas cuidado. Es más, si quieres, vé con él y le muestras las fallas que dices.

Perfecto, voy contigo entonces entonces Neil, dijo Jackson levantándose e intentado recoger los demás platos desocupados para lavarlos.

¡HEY! Deja eso así cariño, le dijo Patrick. Yo me encargo, tú vé con mi tío Neil, y nosotros nos ocupamos de arreglar todo esto.

Gracias amor. Dijo Jackson dándole un beso breve a Patrick en los labios.

Así Jackson y Neil tuvieron una excusa válida para poder ir a conversar respecto a lo que Neil había dicho temprano y salieron de la cabaña a la casita que habían mencionado.

Mientras tanto, ya Christopher se había terminado de espabilar y se acercó a la mesa.

¿Listo? Le preguntó Patrick.

Pues sí, ya no tengo ni un poco de sueño.

Perfecto, acompáñame entonces…

Los demás comenzaron a reír y hacer bromas respecto a que Patrick y Christopher iban a salir de la cabaña para conversar.

Patrick sólo los miró, sonrío con cierta complicidad y salió detrás de su hijo.

Ok, ven conmigo, hay algo que quiero mostrarte cachorro mío.

Ambos se fueron bordeando la cabaña y llegaron a un terreno donde había unas bases y unas columnas.

¿Qué es esto? Preguntó Chris.

Aquí es donde pienso construir tu casa hijo, para que vivas aquí con quien decidas tener una vida de pareja.

Jajajaja… No me esperaba eso tan pronto. ¿Eso era lo que no podía esperar?

No, ven… Y así llevó Patrick a Chris cerca del bosque, al ver el lugar, Christopher recordó lo que había pasado con Randolph horas antes. Era exactamente el mismo lugar y aún se sentía el olor de ambos.

¿Ocurre algo cachorro?

Ehhhmm… Papá…

Dime, hijo mío.

Hay algo que…

Shhh… Tranquilo, no necesitas decirme nada mi tesoro. Ya lo sé, sé que no eres virgen, sé que estuviste con mi abuelo y con mis tíos, pero eso no me quita las ganas enormes de coger contigo amor.

¿Cómo te enteraste?

Jajajaja… Olfato Alfa y además, he desarrollado una habilidad, aún estoy aprendiendo a controlarla.

¿Habilidad?

Sí, puedo leer las mentes de todos. Y tanto tú, como Randolph y Neil estaban pensando recurrentemente en eso.

Pero…

Shhhh… Tranquilo. Ven, acuéstate junto a mí…

Christopher no fue capaz de decir que no a su padre, y se acostó junto a él.

En ese momento Patrick comenzó a acariciar los pectorales de Chris e iba descendiendo hacia su abdomen. Haciendo que la verga dura de Chris diera un respingo y haciéndolo gemir suavemente.

Después se ubicó encima de su hijo y comenzó a besar su cuello, lentamente, sin prisa alguna, el lobo Alfa adulto iba recorriendo con besos y suaves mordiscos la piel del joven cachorro Omega.

Te amo hijo mío, tanto que daría mi vida por ti…

Yo haría cualquier cosa por ti papi.

Uffff… Como quisiera que hicieras conmigo lo que hiciste con Randolph, pero con un pequeño giro cachorro mío…

Ahhhh… ¿Qué cosa papi?

Uffff… Quiero que tu verga sea un coño hijo, un coño de mujer, pero quiero que sigas siendo hombre en el resto del cuerpo… ¿Harías eso por mí? Decía Patrick abrazando a su hijo entre sus poderosos brazos.

Poco a poco la verga de Cristopher se fue metiendo en su pubis y dejando emerger un coño perfectamente humano en el cuerpo de un hombre joven, velludo y musculoso de aspecto muy varonil.

¿Así está bien?

¡WOW! ¡ESTÁS PERFECTO HIJO! Dijo Patrick asombrado. Comenzando a lamer incesantemente ese espléndido coño caliente y húmedo que tenía ante él.

Ahhhh… Papá… Aaaaaaaaahhh… Que ricoooo… Aaaah… Era lo único que podía decir Chris ante la magistral comida de coño que le daba su padre, quien resoplando por la nariz iba dándole más y más placer a su hijo mientras con los dedos de la mano derecha iba estimulando el coño canino de Chris y con la izquierda iba apretando los pezones del Omega haciéndolo retorcer de placer, tanto que colocó sus piernas encima de la espalda de Patrick y colocando sus manos bajo la suya elevó las caderas para que Patrick tuviera acceso total a sus dos coños y a su culo.

En seguida Patrick comenzó a alterar las lamidas entre estos manjares notando cómo se entregaba más cada vez su hijo. Metía y sacaba sus dedos de uno u otro agujero, y Chris pedía cada vez más.

Luego de varios minutos y unos cuantos orgasmos de Chris, Patrick se ubicó en un 69, donde él seguía comiendo como desaforado el coño humano de Chris y éste iba comiéndose la verga que le había engendrado, con más ganas que las que había experimentado en sus contadas experiencias con sus tíos y su bisabuelo. Patrick sí sabía cómo hacerlo acabar, una y otra vez, y seguir disfrutando del sexo que estaba teniendo.

De pronto, sin decir nada, se ubicó cara a cara con su vástago y de un sólo embiste, metió hasta el fondo del coño humano de Chris su enorme y caliente verga haciéndolo gemir fuerte… Sin darle tregua, comenzó a bombear fuertemente el coño con su verga, que parecía un ariete queriendo derrumbar una enorme puerta.

Sus cuerpos sudaban copiosamente, sentían el rocío de la noche caer suavemente sobre ellos, pero igual el calor del verano y el sexo se hacían sentir.

Ahhhh… Papáaaa… Voy aaaaa aaaaaaaaahhh… Aaaaaaaaahhh… Uuuufff… Aaaaaaaaahhh…

Yo también hijoooo… Bufff… Uuuufff… Aaaaaaaaahhh…

No bien habían acabado, Christopher se puso en cuatro patas y se convirtió en loba, Patrick también pasó a su forma de bestia, un inmenso macho Alfa adulto, con una impresionante musculatura, aún más imponente que Ulises, y de una sola estocada metió su descomunal verga canina dentro del coño de la loba joven de pelambre negra brillante.

¿Te gusta verdad? ¿Te encanta llevar verga…?

Ahhhh… Me encantaaaa tu vergaaaa Papáaaaa…

Aaaaaaaaahhh… Cuando quieras acabar, hazlo, amor mío.

Préñame papito… Andaaaaa… Aaaaaaaaahhh…

Te voy a dejar bien preñada lobita hermosa… Uffff… Aaaaaaaaahhh… Aaaaaaaaahhh… AAAAAAAAUUUUU… AAAAAAAAUUUUU… AAAAAAAAUUUUU…

Anunció Patrick que había acabado y quedado abotonados tan sonoramente que hasta en el último rincón de los bosques se podía haber escuchado, seguido por Chris quien no se quedó atrás.

Luego de que pasó el abotonamiento y volvieron a sus formas humanas, regresando la verga de Cristopher, completamente flácida, Chris se recostó encima del cuerpo de su padre y le dijo:

Papá…

Cuéntame…

¿Entonces, no te molesta que no hayas sido tú quien me haya desvirgado el coño?

Jajajaja… Para nada, es más, me encanta como te mueves cuando te monto, y cuando te estaba cogiendo en forma humana, eres perfecto hijo. Dijo Patrick besándolo en la boca.

Después de ese beso, Chris comenzó a limpiar la verga y las bolas de Patrick con su boca mientras él le hacía lo mismo en el coño canino y el culo.

Cuando terminaron Patrick le dijo:

Sé que debes verte con Ulises, mantén los ojos bien abiertos, no creas que vas a encontrar lo que viste en el sueño anterior, ya él obtuvo de ti lo que quería y no necesita disimular ni ser encantador contigo, este collar, el brazalete y el anillo, rompen el control que él tenía sobre ti. Así puedes ser tú mismo, no su marioneta.

Pero… Hay algo que no sabes papá…

¿Que estás preñado de él y nosotros?

Christopher abrió los ojos a más no poder.

Sí, todo forma parte de una profecía, lo sé desde que mordí a mi papá. Todo ese conocimiento vino a mi.

Entonces… ¿Es cierto?

Cada palabra. Pero no hace falta que sus cachorros nazcan, puedes hacer algo, no recuerdo qué… Pero alguien se llevará los cachorritos antes de nacer. Lo que sí tengo claro, es que no debes, por nada del mundo, quitarte ni el collar, ni el brazalete, ni el anillo. Ellos serán una especie de armadura para ti.

¿Eso es posible? Lo de los cachorros aún no nacidos… Y… Eso de la armadura… Jajajaja… No sé qué tan cierto sea.

Sólo debes creer que puedes hacer las cosas y verás cómo se dan.

Jajajaja… Hasta escalofríos me dan.

Bueno, cachorro, ya cogimos, te mostré y te dije lo que tenía pendiente, ahora vamos a la cabaña, necesitas verte con mi abuelo. Dijo Patrick cargando a su hijo en brazos y llevándolo a toda velocidad a la cabaña.

¿Ya volvieron tan pronto? Preguntó Reginald asombrado.

¿Pronto? Preguntó Chris.

Sí, no fueron ni cerca de dos minutos desde que salieron a conversar.

Jajajaja… Tiempo relativo… Río Phillip.

Ahhhh… Ya entendí, dijo Reginald.

Antes de las 23h30, ya Chris dormía profundamente acomodado como pudo en la que siempre había sido su cama, completamente desnudo, ya que entre el calor del verano y el sexo que había acabado de tener y el celo, no se hallaba cómodo arropado. Poco a poco, en sueños fue saliendo de la cabaña y caminando hasta dejar de oír las voces de los mayores. En ese momento sacudió su cabeza y se convirtió en bestia, de esa manera pudo correr más rápidamente para ir a verse con su Señor. Iba recordando cada una de las palabras de Niel, de Patrick, de Randolph.

Tan rápido como pudo saltó el arrollo, cruzó hacia el bosque, pasó el río y siguió hasta donde se había encontrado la noche anterior con Ulises.

Al llegar al sitio, todo estaba en su lugar, pero era diferente. La casa donde había dejado la leña estaba sucia y daba señales de abandono, tal como él recordaba haber visto ese lugar estando despierto. Incluso, el tronco de árbol donde había estado cortando leña Ulises estaba cubierto por musgo y hongos. Prosiguió y se topó con un lobo de pelaje gris, pero se veía muy viejo, como acabado, su pelaje estaba ralo , y caminaba con mucha dificultad.

Ehhh… Disculpe…

Hola hermosa…

Ehhh… Hola…

Imagino que vienes buscando a Ulises… ¿Verdad?

Ehm… Sí, a eso vengo.

Pues, sigue caminando, lo encontrarás en una cueva, después de las bayas espinosas.

Gracias señor…

Byron… Lord Byron.

Hasta luego señor Byron.

Hasta luego hermosa… Jijijiji…

Chris siguió su camino y llegó donde Byron le había indicado. Observó a Ulises en su forma de bestia durmiendo fuera de la cueva. Cuidadosamente se acercó y comenzó a lamerle el hocico para despertarlo.

Ulises gruñó suavemente, abrió los ojos poco a poco y cuando vió claramente, se irguió en sus cuatro patas.

¡Perrita! Pensé que no vendrías… Dijo Ulises moviendo la cola en señal de alegría.

Pero aquí estoy mi Señor.

Jajajaja… Disculpa que no te esperara en la casa, decidí estar más en contacto con mi lado salvaje.

Está bien mi Señor.

Por cierto, antes de tu llegada, por aquí estuvo tu padre, Patrick… Jajajaja… Él no será Omega, pero es toda una hembra en el sexo conmigo… Jajajaja… Bueno, en realidad no hay ningún Alfa que se resista a ser la hembra sumisa de un Alfa Supremo, y menos si ese Alfa Supremo soy yo jajajaja…

Te contaré cómo se dió…

Fue poco tiempo, pero fue interesante… Él llegó justamente aquí, donde me encuentro reposando. Me dijo que si quería tomarte a ti, él se ofrecía en tu lugar… Jajajaja. Yo le dije que no hacía falta, que ya tuve mi ración de ti, que YO te hice mi hembra, y que llevas dentro mis hijos. Él no me creyó. así que… Pero mejor no me ahorro detalles…

Después del sexo que tuviste con Chiu Wong, tu padre llegó aquí, como te comenté, completamente desnudo, y me dijo:

Abuelo, he venido a pedirte que por favor no vayas a hacer nada con mi hijo, sabes que yo debo ser quien reclame la virginidad de su coño y de paso, preñarlo.

Jajajajajaja… ¿Para eso viniste?

Sí, vengo a ofrecer mi cuerpo por el de mi hijo.

¡Puaj! Tanta ternura da asco…

Puedes cogerme si quieres, hacerme lo que desees, pero no toques a mi hijo, por favor.

Jajaja… Crees que tú vas a impedir que yo, un Alfa Supremo, me coja a tu hijo… Interesante…

Sé que no es posible que yo te lo impida, pero… Por favor, te lo suplico, permite que sea yo quien le rompa el coño por primera vez. Así como mi papá me rompió el culo a mi cuando yo era un niño de seis años.

Jajajaja… Vamos a ver qué tanto amas a tu hijo.

Yo cambié a mi forma humana, y tu papá se quedó impresionado al verme, ví como en seguida se le puso durísima la verga, no paraba de chorrear, y se postró de rodillas ante mi. Jajajaja. Tan sumisas todas las perras… Jajajaja.

Sin que yo le dijera nada comenzó a mamar mi verga grande y gruesa, estaba como desesperado; se la metía hasta el fondo de la garganta, sintiendo arcadas, lo cual es normal que suceda, todos desean ser la hembra de un Alfa Supremo. Jajajaja. ¿Verdad que sí perrita?

Sí mi señor, usted es imposible de resistir…

Jajajaja… Así mismo es. ¿Quién es la puta que me va a hacer padre? Decía Ulises mientras le rozaba con las garras de su pata derecha trasera el coño a Chris.

Yo, mi Señor. Ahhhh…

Jajajaja… claro que sí… Te sigo contando puta. Cuando ya tu papá llevaba unos cuantos minutos mamando mi verga, cambió a forma canina, no bestia, ya yo estaba listo para cogerlo, sin necesidad de decirle nada se puso a cuatro patas ofreciendo su hermoso culo de hombre lobo adulto… Bufff… Mira como me babea la verga de recordar, ve mamando mientras te sigo contando perrita… Ahhhh… Así… Eres toda una hembra sumisa de mi propiedad… Ahhhh… Que puta tan golosa eres perrita… Ahhhh… Ricoooo…

Cuando se puso en cuatro patas, le metí de una vez mi verga en su apretado culooooo… Bufff… es extremadamente apretado y caliente… Ahhhh… Que rico mamas perrita… Ya te voy a acabar en el hocico… ahhhh… Patrick se movía, como si de salvar su vida y la tuya se tratara, así estuvimos unas dos horas. Yo tuve que hacerle creer que había acabado dentro de su culo, porque mi semilla la tengo guardada para ti perrita… Te voy a dejar varias veces hoy, vas a tener muchos cachorros míos… Aaaahhh… Me vas a hacer acabar mujer… Quiero que todos los hijos míos que paras te den vergaaaa… Ahhhh… porque tú vas a ser su puuuutaaaa… Aaaaaaaaahhh… AAAAUUUU… AAAAAAAAUUUUU…

Aulló Ulises llenando la garganta de Christopher con su leche de Alfa Supremo.

Uffff… Te puso caliente saber que me había cogido a tu padre… Jajajaja. Dijo Ulises reponiendo fuerzas después de la mamada.

Mucho mi Señor.

Bien… Bien… Eso me gusta… Que mis perras sepan que conmigo no deben ser celosas. Total, siempre les voy a llenar el culo, el coño y el estómago de mi leche… Jajaja. Y… Cuéntame perrita… ¿Vienes preñada de Randolph como te dije? Jejeje…

Jajajaja… Por supuesto que sí mi Señor…

¿Lo disfrutaste?

Mucho mi Señor.

Que bueno, porque ahora vas a ser mía nuevamente, y mañana será el turno de Neil, durante el día claro, y cuando duermas, será mi turno de volverte a preñar, para que después lo haga Patrick y después yo nuevamente… Así será como cierre tu celo, con más cachorros míos que de cada uno de ellos… Jajajaja… Ponte en posición, que ya te voy a montar, he estado guardando mi semilla para tí perrita.

Ehhh… Sólo hay un pequeño detalle mi Señor…

¿CÓMO DICES? ¿UN DETALLE?

Perdóneme mi Señor… Pero…

¿PERO QUÉ PUTA? ¡HABLA DE UNA MALDITA VEZ! ¡HABLA!

Es que… Hoy me montaron tanto el tío Randolph como Neil… Y también mi papá, cada uno acabó dentro de mi unas tres veces por lo menos. Dijo Christopher sollozando del miedo que le daba el comportamiento de Ulises, jamás se imaginó que le fuera a tratar de esa manera.

¡MIERDA! ¡MALDITA SEAS! ¡Eres igual que todas las perras en celo… Te dejas montar por cualquiera, y ahora vienes llena de dos de mis hijos! ¡Y DE MI NIETO! ¡AHORA NO ME SIRVES! ¡VETE A LA MIERDA!

Pero… Mi Señor… Yo hice lo que usted me pidió…

¿PEDIRTE? JAJAJAJA… Estuvo bueno eso. Yo te di unas órdenes específicas, ¡ÓRDENES! ¿ENTENDIDO PERRA? ¡Y NI SIQUIERA ESO HICISTE BIEN! Dijo Ulises dándole un zarpazo en el rostro a Christopher y poniéndole patas arriba mientras le oprimía el tórax con una de sus enormes patas.

Mi Señor, me lastima…

Aaaayyy… ¿Te lastimo? ¿En serio? Jajajaja… Aún no sabes lo que es ser lastimada perra inmunda… Dijo Ulises abriendo las fauces dispuesto a morder el cuello de Christopher para matarlo, cuando de pronto, del cuello de la loba joven, se vio un destello que en seguida se convirtió en una luz muy brillante que hizo que Ulises se separara asustado.

¿Qué es eso? ¿De dónde sale esa luz?

Apenas se vio libre Christopher, se paró sobre sus cuatro patas sacudió todo su cuerpo, y comenzó a decir:

En este preciso momento llamo a todos aquellos lobos, Alfa y Omega, que por alguna razón u otra, ya no se encuentran en el plano de los vivos, familia lejana, cercana, amigos, conocidos, a todos ustedes los llamo, para que vengan en mi auxilio, sean de donde sean, estén donde estén, vengan, vengan mí, y junto con ustedes a este tirano venceré.

JAJAJAJA… ¿Invocando muertos en un sueño? Y me llamas tirano, cuando tú te entregaste a mi, sin yo obligarte perrita.

Vengan, padres, madres, tíos, tías, primos, primas, todos de quienes forma parte mi legado, amigos, amigas y conocidos de mis familiares, así no les haya conocido cuando vivían, vengan… ¡AYÚDENME!

Tras decir esto, Christopher se irguió sobre sus patas traseras, y desde los más recónditos lugares de la tierra comenzaron a llegar las almas de quienes habían sido convocados por él entrando cada una en el cuerpo de Christopher haciendo que luciera realmente imponente, su torso canino cambió para dar paso a unos enormes pectorales extremadamente potentes y voluminosos, le salieron unos dorsales y espalda super desarrollados, además de un abdomen plano completamente marcado; sus piernas traseras y delanteras de lobo se convirtieron en piernas y brazos humanos con músculos muy desarrollados que terminaban en patas y garras de lobo, su cabeza permaneció completamente de lobo al igual que mantuvo su cola y la coloración de sus ojos, pero el color de su pelaje, que cubría su cuerpo, cambió a un tono similar a la miel. En su entrepierna se veía una enorme funda canina que guardaba una verga descomunal y debajo de ella colgaban unas enormes bolas de mayor tamaño que las de Ulises. Después de la transformación Christopher le dijo:

¡MI NOMBRE ES CHRISTOPHER ALEXANDER JOHAN DANKWORTH PATRICKSON! Y tú, Ulises Alexander Sigrud Dankworth ya no tienes ningún poder sobre mi.

Esto no es posible… ¡YO SOY TU AMO! ¡TE HICE OMEGA! ¡MI OMEGAAAA! ¡SOY TU DESVIRGADOR! ¡ME PERTENECES!

¡NO!

¿Cómo te atre…

Mientras tanto, en el mundo real, Jackson y Neil se encontraban en la casita donde habían decidido conversar…

Jackson, necesito que sepas algunas cosas.

A ver si entiendo Neil, primero me llamas brujo, y de paso a toda mi familia, pero ahora quieres que sepa cosas que usarás para convencerme de quién sabe qué… ¿Es correcto?

Neil miró desencajado a Jackson y le dijo:

Ehhh… No, es respecto a Chris y todos los lobos.

Ahora sí tienes mi atención.

Que bueno, entonces te explico… Dijo Neil sacando el libro que le mostró a Christopher y enseñándole el texto que le había mostrado a Chris.

¿Todo esto es cierto?

Ahí es donde entran tus habilidades…

No entiendo…

Coloca tus manos sobre el texto y deja que se vea lo que está oculto.

Poco convencido de las palabras de Niel, Jackson hizo lo que le pedía. Entonces comenzó a mostrarse todo lo que estaba sucediendo en el sueño de Chris.

«Un Alfa preñable, convertido en Omega, llegará oníricamente, vestido con una armadura poderosa, invisible a sus ojos y los de su desvirgador, le hará frente y hará la invitación a las almas de todos los lobos, así como a la Reina del Gehenna, para que vayan en su ayuda.»

No entiendo ni media palabra. Dijo Jackson.

Yo tampoco, dijo Neil.

Yo sí, dijo Patrick desde la puerta. Pensé que venían a coger, pero veo que no.

Jejeje… Aunque en mi condición, nunca es demasiado el sexo, dijo Jackson.

¿En serio quieres más verga? Preguntó Patrick.

Todas las que quieran cogerme.

Jajajaja… Pues aquí estamos nosotros también, dijo Phillip, quien acababa de llegar con Reginald y sus otros hermanos.

Vengan todos, que ahora es cuando hay Jackson para todos, dijo Jackson poniéndose en cuatro patas con el coño fuera.

Christopher, aún en su sueño, comenzó una nueva invocación. En este momento acudo a ti, Lilith, Reina del Gehenna, en el nombre de todos los que escucharon mi llamado y se encuentran dentro de mi, así como en el mío propio, tú que eres la madre de todos y cada uno de los monstruos, así como de los demonios, tú que fuiste quien curó las alas de Lucifer, tú que eres la primera mujer, la primera rebelde, la primera bruja, creada del mismo barro que Adán, pero mucho más inteligente que él, tú que eres la diosa de la iniciación, de los iniciados, de la muerte y de la trascendencia, la misma que atendió el parto de mi madre en tu Reino, acudo humildemente ante ti, rogando por tu ayuda para que me ayudes a vencer a este ser terrible que está en frente de mi…

¿QUÉ HACES?

Por eso te pido Lilith, Reina y Señora de la noche y de todas las criaturas a las que la humanidad teme: QUE TRASLADES ESTE SUEÑO AL PLANO DE LA REALIDAD, que los hijos y demás descendientes de Ulises Alexander Sigrud Dankworth, acudan a mi y hagan que pague por todas las cosas terribles y el daño que ha causado. ÓYEME MADRE, REINA Y SEÑORA… OYE MI RUEGO Y VEN A MI… A cambio te doy sus crías que llevo en mi vientre, para que te guarden y te protejan.

¡NOOOO! ¡CÁLLATE! ¡NO SABES LO QUE HACES!

Después de esos gritos de Ulises, sólo se escuchó silencio, durante unos segundos que se hicieron eternos… Interrumpido por un viento huracanado que trasladó el sueño de Christopher al plano real. Al cesar el viento, aún entre la polvareda, apareció una mujer hermosa, de figura delgada y encantadora, con una piel pálida, prácticamente blanca como la luna, que contrastaba con su larga y brillante cabellera negra; la que por delante cubría sus voluptuosos senos hasta llegar a sus amplias caderas, pero por detrás arrastraba sobre el suelo. Sus ojos, completamente negros, como hechos de ónix resplandeciente, rodeados por enormes pestañas negras, luciendo un inmenso par de alas de plumas de ónix, al igual que las uñas de sus manos y pies, las cuales parecían garras, completamente desnuda, y que daba la impresión de pisar sobre brasas ardientes sin quemar sus delicados pies ni su larga melena a medida que iba caminando.

Vengo por lo que me ofreciste… Le dijo a Christopher. Yo los tendré en mi reino. De esa manera se acercó a Christopher, le acarició el abdomen y extrajo los fetos de los cachorros de Ulises para trasladarlos al suyo.

Ya tengo lo que me pertenece, ahora tienes lo que pediste. Por cierto, hermosa estampa temporal príncipe de los lobos, aunque puedo hacer que de ahora en adelante esa sea tu imagen bestia, igual que la de tus hijos, y sus descendientes.sí que así sea. Diciendo estas palabras, se acercó y acarició completamente el cuerpo de Chris mientras murmuraba algo que no lograba descifrar el joven lobo. Listo, dijo cuando terminó de acariciarlo y recitar. De ahora en adelante eres un Alfa, pero también puedes ser preñado y llevar en tu vientre tus hijos y del hombre con quien decidas tener una vida, incluso, puedes preñar a otros Omega. Por cierto, se nota que tienes los dones de tu madre, dijo Lilith haciendo una reverencia ante Christopher haciéndolo sonreír. Me alegra ver el talismán que le hice funciona perfectamente en ti, no dejes de usarlo. Y cuando desees hablarme, sólo piensa en mi y vendré a ti. Ahora sí, debo irme, ya vienen a ayudarte.

Gracias Lilith.

Gracias a ti querido…

¡MALDITA! ¡TE LLEVAS A MIS HIJOS! ¡MALDITA!

¡CALLA DE UNA PUTA VEZ! Le gritó Lilith a Ulises. Y ya que no eres un perro obediente, me llevo conmigo toda la magia que hay en tu ser. De ahora en adelante sólo podrás verte como humano, no podrás volver a ser bestia, ni tendrás el don de la telepatía, además, me llevo tu fuerza sobrenatural así como todo lo que te hizo el ser despreciable que eres, ya que no supiste utilizar los dones que te otorgué. Vivirás como un simple mortal desde hoy en adelante Ulises Alexander Sigrud Dankworth, y vas a envejecer al igual que ellos, pero al morir no irás a reunirte con ningún lobo, sin Valhalla, ni Paraíso, sino que pasarás la eternidad entre almas atormentadas de humanos, en el abismo eterno, ni siquiera en Hel. Pero… para que no digas que fui cruel, hasta que el sol comience a emerger el día de mañana, tendrás tu fuerza, la vas a necesitar… Jajajaja.

Y así, tras lanzar la maldición sobre Ulises, como llegó, desapareció, llevándose en el vientre, los cachorros de Ulises.

Ni bien se había ido Lilith, cuando se escuchó un concierto de aullidos que se aproximaba.

Ya vienen Ulises, ¿tienes algo que agregar antes? Le preguntó Christopher.

JAJAJAJA… ¿Crees que van a poder conmigo? Ya escuchaste lo que dijo Lilith, hasta que amanezca tengo mi fuerza. Pobre idiota… Lamento decirte que vas a quedar huérfano pequeño… Jajajaja.

Ya veremos.

Apenas dijo esto Christopher, se escucharon pisadas cercanas. Toda la manada estaba a pocos pasos de donde ellos se encontraban, cuando Ulises, en su forma humana, intentó escapar corriendo torpemente.

Lamentablemente para él, se desorientó y fue a parar precisamente donde se encontraban los que serían sus verdugos.

Hijo mío… Por favor, no dejes que me suceda nada… Por favor… Suplicaba de rodillas agarrando a Randolph por las piernas.

Jajajaja… ¿En serio eres tú? Pero mira nada más. Estás asustado… El gran Ulises Dankworth, el gran lobo feroz, está aterrado.

De pronto Ulises gruñó, pero su gruñido ya no intimidaba. Recordó que sólo contaba con su fuerza y levantándose le dió un puñetazo en la mandíbula a Randolph, a quien logró derrumbar.

¡BASTA! Gritó Reginald. Interponiéndose entre Ulises y Randolph.

Jajajaja… Reggie… Reggie… Siempre tan atento y protector de tus hermanos… Jajajaja. Y sólo te hacían a un lado mientras eran cachorros, ninguno jugaba con el pequeño Reginald… Jajajaja. Y luego ibas a buscar consuelo en mi verga… Uffff cómo te gustaba mamarla, ven, mira como está, dura, lubricada, como a ti te gusta hijito… Ven y has feliz a tu papito…

Al darse cuenta que las palabras de su padre no hacían efecto en él, y que sus insinuaciones sexuales sonaban huecas, Reginald supo que algo había cambiado en Ulises.

Ya no tienes poder sobre mí… Le dijo Reginald lanzándole un puñetazo directo a la mandíbula, haciéndole girar la cara y escupir sangre.

¿CÓMO TE ATREVES A GOLPEARME?

Mejor vamos a preguntarte a ti, querido padre… ¿Cómo te atreviste a manipular a tus propios hijos? ¿Qué ganabas con hacer que nos distanciáramos? ¿Qué propósito tenías al obligarnos a tener sexo contigo? Sin importar si ya éramos adultos además. ¿Qué necesidad tenías de hacer creer que habías muerto? Y ahora… ¿Golpeas a Randolph y haces comentarios sarcásticos contra Reginald? Responde Ulises Dankworth. Le preguntó Leopold.

Jajajaja… No tengo que responder ni explicar nada.

Entonces… No nos queda de otra que hacer contigo lo que siempre hiciste con nosotros… Dijo Alexander.

¿Darles amor y cariño cuerda de traidores?

¿Amor? ¿AMOR? ¿A qué le llamas amor papá? Tú nunca nos quisiste, siempre fuimos receptores de tu verga y más nada. ¿Amor? ¡Ja! Dijo Phillip.

Bueno señores, creo que llegó la hora de darle su merecido al lobo feroz de los Dankworth, dijo Christopher acercándose a la manada en su forma humana.