La historia de Julio Capítulo 8

Vamos con los últimos capítulos, parece que Julio ya lo tenga todo organizado.
Capítulo 8

 

Cuando volvimos a casa todo se volvió a la normalidad. Nunca le dije a mis hermanos lo que se pasó y lo de que hablamos con papi esa noche. 

Y a él, después de prometerle que si me hubiesen obligado o hecho algo malo pronto se lo iba a decir, le pedí que no dijera nada a ellos y que iba a pedirle permiso para hacer mis cosas.

Obviamente no necesitaba de esto porque ellos bien sabían lo que hacía, pero a él le dije que sí.

“¿Me perdonaste ahora?” me preguntó Tomás con ojos bajos cuando estuvimos los tres en nuestro cuarto

Le dí un beso en la boca y dije “Sí pero no hagas más estas cosas” y él me respondió con otro beso diciéndome sí 

“Que cosas? Que hizo?”

“Nada, algo entre nosotros. Pero no me hizo nada de daño a mi, no te preocupes” contesté rápido antes que le surgiera echarle la bronca porqué me hizo algo a mí.

Esa misma noche estábamos solos hasta tarde en el cuarto porque Pedro se fue a cenar a casa de su novia, así que aprovechamos para satisfacer lo que nos había faltado entre nosotros los seis días pasados.

Nos quitamos la ropa, nos besamos por mucho tiempo, nos chupamos en posición de 69 hasta que él se explotó en mi boca, yo aún no.

Después de unos segundos, sin moverse de esta posición se echó un poco para atrás besándome el culo y los huevos, moviendo toda su lengua mientras me tocaba y movía lentamente la polla.

No tardé mucho en vaciar mis huevos entre mi barriga y su pecho. Después de medio minuto me hizo caer a lado y lamió mi abdomen, y yo a él, y se dió la vuelta quedándose a mi lado.

“No me das el beso de intercambio hoy?” pregunté yo

“Es que acabo de besarte el culo Lulito, te da asco que no?”

“Uh no es por tanto, no me gustaría hacerlo a alguien más pero no me da asco si me besas después de esto!”

“Ohhh que bien! Me haces más feliz” dijo él. No paramos de mover nuestras lenguas antes de 10 minutos, hasta que yo volví duro. Pero no hicimos nada más sino quedarnos así abrazados hasta que él se quedó dormido.

Le puse su pijama delicadamente, lo cubrí y me fui a mi cama.

“Que tal tu noche?” pregunté a Pedro cuando muy despacio entró al cuarto. Ya había dormido un rato pero recién me había despertado.

“Ahy que haces despierto a esa hora? Pues me fue muy muy bien”

“Has hecho algo con la Viky?” pregunté, su novia se llamaba Victoria

“Que sí, hice mucho jeje”

“Oh quieres decir sexo? Lo de meterla adentro?”

“Sí, y fue mucho mejor esta vez!” su cara tenía algo de muy feliz

“Quiero que nos enseñes un día! Pero no lo hacemos, solo saber. Porfaaaa” dije yo

“Vale jajaja pronto lo haré” contestó, parecía casi borracho pero sin tomar alcool

“Nosotros dos también hicimos algo, fué muy bueno después de estos días”

“Jajaja ya me enteré entrando al cuarto, hay un fuerte olor a corrida!

Después de esto nos fuimos los dos a la cama.

Unos días después, en los que ya se había empezado la escuela, me encontré solito a casa con papá para la comida. No cocinaba tan bien que mami pero bueno tampoco estaba mal.

Después de comer, cuando ya me estaba llendo a mi cuarto, me preguntó “Aún sigues haciendo lo que hacías a tus hermanos?”

“Sí, recien lo hice, esta mañana a Pedro, y ayer a Tomás”

“Wow, cada día entonces. Y dime, ¿les has pedido permiso a ellos o de escondida aún?”

“Se lo he pedido y me dejan que haga lo que quiera, así que ahora lo hago de despiertos también, y dicen que soy muy bueno en hacerlo.” Todo lo que decía estaba en la sutil línea entre verdad y mentira.

“Oh que bien, un día encontrarás un chico que le gustará eso, pero no de momento vale? Igual te gustará mucho que te lo hagan, verás, es algo muy divertido”

“La verdad, pero esto también tiene que quedarse un secreto que nunca le dirás que te dije, le pedí a ellos que me hicieran lo mismo y aceptaron, no se si les gusta, igual no, pero lo hicieron para que sea justo hacia mí”

“No me digas, en serio? ¿Le has pedido que te la chuparan y ellos aceptaron? Los dos? Vamos estás de broma mi hijo! Jajaja” dijo él

“No, es verdad, pero Pedro dice que la corrida le da mucho asco, así que él no quiere acabar, solo chupar, pero me dá igual lo hace muy bien”

“Pues claro es algo pegajoso y baboso. Pero espera, y Tomás?”

“A él no le da asco, dijo, así que me la chupa hasta el final como hago yo”

“¡Huevadas! No lo puedo creer que mi hijos jueguen al incesto!”

“Que es incesto?” pregunté

“Bueno es hacer sexo entre los de la familia. Pero bueno si es algo que os divierte y no os hacéis daño prefiero que no buscáis nadie afuera y lo hagáis entre vosotros. Igual, si necesitas hacerme preguntas sobre el tema sexual no dudes en preguntarme. Pues, del tema omosexual no lo sé mucho de verdad, pero en lo demás me puedes decir o preguntar cualquier cosa, vale?”

“Vale. Entonces ahora te pregunto esto: ¿Me la puedes chupar por favor?” dije yo de repente

“¡Ahy pero mi niño! no me pidas esto por favor, me da pena decirte no, pero es que…yo…” dijo él en vergüenza 

“Papi te tomaba el pelo! No quiero esto, tranquilo, además ya ellos me lo hacen”

“Maldita sea! Qué chiste malo! Ya sabes que me daría pena rechazarte!”

“Jajaja me encantó tu cara cuando te lo pedí! No te voy a preguntar de chuparla o dejarte mamar por mi, tranquilo. Por cierto, ahora huele mejor la tuya?”

“Creo que sí. Ahora uso un jabón antibacterial. Si solo quieres oler eso no me da pena o vergüenza” dijo él

“Creo que es mucho mucho mejor Papi” dije después de agarrarla y olerla por la punta, y no sentir ningún olor molesto. Lo raro es que no me dió la ganas de ponerla en mi boca, ni un poco, y me alegré de esto.

“Bueno, sentir que me la tocas y hueles ya suena un poco a raro la verdad, pero sé que ya lo hiciste pues está bien”

“La verdad es que yo no lo hice, solo Pedro y Tomás lo hicieron, y cuando Tomás me dijo de acercarme a oler o chupar le dije que no. No quería hacerte mal a tí, y creo que tampoco deseaba hacerlo”

“Ah que buen hijo, y hijos que tengo, déjate abrazar mi niño!” dijo él cerrando en sus brazos

“Me alegro mucho por tu abrazo papi, pero, si no quieres lo de incesto, tirate para arriba tus pantalones!” 

“Jajajaja que bobo! Ni me enteré que aún la tenía afuera!” 

“Pero por favor, te lo pido, ahora que ya sabes todo, no dejes que se enteren que sabes, que piensen que nos hayas pillado o descubierto, si lo haces todo se acabaría”

“Vaya te lo prometo ahora mismo! Gracias por decirme todo, acordate lo que te dije, bueno?”

“Vale. Lástima que no tenemos mucho tiempo libre los tres en casa sin nadie de vosotros. Sería más simple”

“Uhm, claro claro. A ver si puedo hacer algo sobre esto…”

Un par de días más tarde, un sábado por la mañana en el que mamá tampoco trabajaba, papá dijo si estaba bien que llevara mami y Lali a ese centro comercial 1 ora y media lejano, y llevar las dos a ver esa película que les gustaba. Eso era decir que teníamos que comer y cenar solos, pero podíamos ordenar algo para llevar.

Pedro, el mayor, dijo que no había problema e igual Viky estaba de boda de su prima y no podían verse igualmente, después que papi le preguntó si tenía citas ya.

“Ten cuidado de tus hermanos Pedro” dijo papá antes de salir, y mientras me daba un beso me dijo de baja voz “Aprovechad de este día, con cuidado! Lo hice para vosotros”

Se fueron por la mañana sobre las 10 y en el momento en el que vimos el coche irse Tomás ya se había quitado toda su ropa, haciendo que Pedro y yo explotamos en risas, así que él dijo “Que pasa? Ya casi no podemos estar así en diario”

“Vale, tienes razón, lo que dió risas es lo rápido en lo que hiciste ¡loquito!” dijo Pedro, mientras se quitaba él mismo la ropa, igual que yo

“Ya que vamos así, nos duchamos juntos como vez pasada?” propuse yo

Aceptaron sin dudar. Esa vez la ducha fue mucho más larga de la vez anterior. Durante esta, Pedro primero nos enjabonó cada parte del cuerpo, luego nos enjuagó y, con un poco de agua corriendo, nos besó todo el cuerpo, desde la cara hasta los tobillos, desde la boca hasta la polla, desde el cuello hasta el culo. 

Cuando acabó fue nuestro turno, hicimos lo mismo que él, pero los dos juntos, fregando bien y dulcemente haciendo cosquillas en las axilas, entre las nalgas, donde Tomás se quedó más tiempo, y en la polla, donde me quedé más yo. 

En todo eso Pedro no se empalmó, mientras que nosotros dos sí. Nos subimos hasta sus pezones y ahy empezamos los dos juntos a besar y chupar ellos, hasta tirando un poco con los labios. Nos enteramos que esto le gustaba, y en un momento hasta sentimos su polla crecer hacia nosotros.

Ahora nos secamos y salimos del baño, nos fuimos al cuarto. “Un momento” dijo Tomás, y acercó su cama a la de Pedro

“Nos podemos dejar un rato así solo de cariño? Lo echo mucho de menos!” pidió Pedro, así que nos ponemos uno por lado a él bajo de las mantas acariciándonos cada uno, yo en su corazón y Tomás cerca de su cara.

Después de un tiempo me puse igual que Tomás y les dí a los dos un beso en la boca antes a Pedro y luego a Tomás, pues otro a Pedro igual y con lengua a Tomás.

Igual Tomás le daba a él en la boca. 

Después de unas veces así, Pedro también abrió su boca y muy pronto se volvió en un beso único en tres, mientras con las manos Pedro nos apretaba a él.

Esto nos calentó muchísimo y la mía y la de Tomás estaban muy erectas, mientras Pedro se había vuelto floja después de la ducha.

Pedro se paró un momento y preguntó “Queréis que os beso un poco el culo a los dos juntos? Solo un rato, ¿queréis?”

Claramente dijimos que sí, nos pusimos de rodillas en la cama y empezó con besos muy fuertes a los dos, pues se quedó un rato en Tomás y luego en mi también. Me dió muchos golpes con la lengua, parecía que me la metiera hasta adentro por lo que sentía. 

No sé cuánto sigo así pero fue genial, hasta creo que  grité en un momento, me sentía igual que cuando me corro, pero sin correr.

Sentí unos besitos más dulces en el agujero, y luego le oí a Pedro decir “Pues ¿que decís, voy bien?”

Nos volteamos y Tomás dijo “Voy bien? si les haces esto a Viky te va a casar!”

“¡Mira! Esta es la única cosa que nos haces que te hace empalmar. Te gusta, ¿verdad?” dije yo. Tomás estaba tan caliente que ni se había enterado

“Ahm pues creo que sí, es que me parece como lo que hago a ella pero con el culo, hasta me gusta más. Besar o mamar me da igual pero esto con vuestros agujeros está muy bueno!”

“Quizás te guste recibirlo también, quieres probar?” dijo Tomás. 

“No sé, nunca probé. Puedes?” dijo él

Pedro aceptó y se puso él encima de la cama. Después de un par de minutos Tomás comendole el culo, le preguntó “Pues? Que tal?”

“Uhm, nada, no me molesta pero tampoco me gusta. Prefiero que sea yo haciendolo.”

“Nos puedes explicar como se hace sexo ahora?” dije yo un poco impaciente

“Bueno, no se como explicar, creo que es algo natural”
“Intentalo!” dije yo otra vez

“A ver…yo me pongo como si fuera la mujer, vale? Tú Julio eres el macho. Donde nosotros tenemos la polla ellas tienes el coño, y tú pones tu polla en la entrada, así” dijo empujando mi polla y poniendo la punta entre sus huevos y polla floja, la agarró en puño y dijo “Pues cuando esté adentro la pones más adentro y la sacas un poco, luego adentro y sacas un poco, todo así cómo haces con mi mano ahora. Un poco despacio y un poco más rápido. Pero con la chica tienes que ponerte el condón!”

“Para no salir papá, es cierto!” dijo Tomás

“Esto seguramente, y también si lo haréis con chicos, para seguridad de las enfermedades”
“Oh entonces necesitamos estos para hacer sexo nosotros?” pregunté desconsolado

“No, entre nosotros no, estamos seguros, lo podemos hacer sin eso. Pero aún no, ya dije esto!”

“Lo sé, lo sabemos, no te preocupes, pero ¿cómo se tiene que poner en el culo? No tenemos coños!” dije yo

“Es que yo no lo sé, nunca lo hice en el culo! Creo que es igual pero pienso que sale más difícil entrar. Creo que tiene que ser un poco con lubrificante algo como aceite no sé y luego la empujas adentro”

“Un aceite es algo como esto?” dijo Tomás llevando en mano un aceite para el cuerpo que me ponía yo cuando se secaba mi piel por el viento “Y donde se pone?”

“En el culo y encima de la polla creo. Pero pienso que tienes que abrir las piernas así” dijo Pedro

“La pongo así?” Tomás la puso donde dijo él, en su culo y en mi polla que estaba por ejemplo

“Creo que sí, y luego le pones la punta así en el agujero y despacio la empujas hacia adentro

“Así?” dije yo, y sabiendo que no pasaba nada porque era difícil de entrar, empujé como dijo él para probar

“Ahi! Joder has entrado!” gritó Pedro

“No! Disculpa! Que hago? Que hago?” me asusté por lo que hice

“Sácala un poco…ahi..despacio..ahi…” 

“Pero…pero cómo, así? o toda?”

“No, ya está adentro, ponla dentro un poco más…despaaaacio!” dijo Pedro, Tomás no hablaba “Saca otra vez, despacio.”

Me sentí muy caliente y asustado a la vez, cuando me dijo de ponerla adentro otra vez, y otra más, mi calentura fue al maximo y solo dije “No!” y mi corrida salió no sé cuanta adentro de Pedro.

Seguramente sintió esto y me dijo “Ahora muy despacio sacala…así…lentamente…ahí…bien”

Me puse arriba de él con lágrimas diciendo “Disculpa hermano, no quise hacerlo, no quise. Te hice daño, te hice daño!”

“No pasa nada, tranquilo, estoy bien, no me dolió mucho como pensaba… Pero nunca lo hagáis entre vosotros, vale?”

“Promiso. Nunca hasta que lo digas tú. Perdona nos para pedirte esto y se acabó así. Fue nuestra culpa” dijo Tomás de pié y mirada baja como si él que le había hecho esto fuera él no yo.

“Vente aquí loco hermano, no pasó nada, yo tampoco imaginaba que entrara así fácilmente. Pero sabes qué significa esto? Aunque sea por un rato solo, Lulito perdió su virginidad. ¡Y mi culo también! Jajaja”

Nos quedamos así por un buen rato sin hacer nada más.

“Te duele mucho? ¿Quieres que te ponga una crema o te masajee un poco?” preguntó Tomás

“Con qué me quieres masajear? Con tu polla? Hoy no gracias, otro día jajaja” 

“Pero no, digo con la mano que dices…cómo que otro día?” contestó Tomás

“Sé que quieres hacer lo mismo tú también, no es así?”

“No, no quiero hacerte otra vez daño, ya te lo hicimos hoy”

“Primero no me habéis hecho daño, creo que es normal un poco de dolor cuando lo haces por primera vez. Segundo, no pienso que duela mucho si ya estás abierto un poco. Si consigo hacerlo me gustaría que los dos de vosotros sean iguales. Si quieres, obvio”

“Cómo puedes ser tan bueno y dulce hermano?” dije yo, sin parar mis lágrimas

“Ahy mis niños sois mis tesoros.” 

Después de comer jugamos los tres juntos a la play, sin ponernos ropa, igual no había mucho frío en casa y encima el radiador nos calentaba los dos

“Sabés, creo que tu calentura que emanas la has heredado de papá. La noche que pasé en su cama me abrazó y me pareció cocer en sus brazos!” dijo Pedro mientras jugaba con Tomás atrás de él abrazándolo.

“Cuando se la has chupado habéis arriesgado la fusión entonces” dije yo sin pensar que Pedro no sabía

“Chupar??que?” dijo él

“Sí, lo hize la última noche, se la he chupado por un rato, y Julio estaba muy enfadado conmigo. Y hasta hice otra cosa mala a ti”

“Pero cómo pudiste hacerlo?”

“Lo sé fue algo equivocado hacerselo a 

él sin permiso, la misma cosa que me hizo tratar mal a Julio esa vez. Lo siento” sigo Tomás

“No no eso, bueno también, pero quiero decir como pudiste hacerlo si olía muy mal!” dijo Pedro

“No estás enojado? Y no me preguntas que te hice?”

“Ya lo sé que hiciste, me había enterado pero no dije ni hice nada porque estaba curioso de ver si se enteraba papá. Pero después me quedé dormido así que la habrá quitado sin enterarse. Pero enserio cómo pudiste chuparla que asco!”

“Ya no sabía así de mal el día siguiente, bueno, la  noche. Lo siento por lo que hice solo era de broma, está bien si no se ha enterado”

“Sí, se ha enterado estaba muy sorprendido porque tenía en la mano tu polla dura de la mañana y la movía. Pero no le dió asco por que no olía de nada. Encima se lo he dicho que le olía mal la suya y ahora ya le huele mejor” dije todo en seguida

“Y como sabes esto? Entonces le hiciste lo mismo que hice yo?” preguntó Tomás

“No. Él mismo me pidió que se la probara para comprobar si estaba mejor. Además le he dicho lo que hacemos, bueno solo que se la chupaba de dormidos y que vosotros lo hacéis para que sea igual que lo que hago yo, y dijo que le está bien porque está mejor entre nosotros que con alguien más. Solo me dijo que os lo pidiera de permiso, porque le conté que lo hacía de escondidas.”

Pedro no hablaba, y Tomás después de un rato dijo “Pero estás seguro que le esté bien esto? No se ha enojado o algo?”

“No, para nada, sorprendido pero no enojado. Pero no sabe de besos y todo lo demás.”

“Ahy cabroncito! Me diste ganas, puedo besarte el culito Lulito?”

“Sí claro” dije yo

“Tomás, si quieres me la mamas mientras tanto?”

“Ni lo pidas, ya voy!” dijo él, y en unos segundos ya habíamos dejado al partido a la play y sus lenguas se estaban moviendo.

Yo en la cama en el borde con el culo hacia afuera y Pedro en rodillas en el suelo chupándome el culo. 

No podía ver como se puso Tomás para mamarla porqué estaba tan abandonado a lo que me hacía Pedro que ni me podía girar para mirar.

Ya había recibido esta chupada de culo un rato de Pedro y unas veces de Tomás pero esa vez fué diferente, me parecía que sus labios y su lengua me subieran hasta al estómago. Su lengua se movía desde mi agujero hasta la base de mi polla que por cierto estaba dura como roca,

De repente Pedro se levantó, me dió la vuelta y me levantó las piernas, apolló su polla a mi agujero y me dijo “No te preocupes no me voy a vengar…Tomás, chupa y lame mi polla y su culo juntos”

Podía sentir en mi culo la presión de la punta de Pedro moviéndose encima de mi agujero mientras Tomás movía su lengua, y me encantaba.

Levanté un poco la cabeza y alcanzé un pezón de Pedro, que estaba tieso con los brazos encima de mí.

Lo chupé fuerte, tiré con los labios y él gritó de placer,así que mientras chupaba ese con la mano agarré el otro apretando un poco. Gritó otra vez y hasta su polla se puso más dura presionando entre mi agujero y mis huevos, me la sentía como adentro.

Sigue haciendo así hasta que con su mano se la agarró y la colocó justo a punto de mi agujero, me pensé que iba a ponerlo adentro pero no se explotó toda su corrida ahí, mientras Tomás lamía y chupaba. 

Unos segundos más tarde Tomás se subió y me dejó caer en la boca todo lo que tenía mientras Pedro se desmayó en mi pecho.

“Tengo hambre!” dijo Pedro de un rato, y nos fuimos todos a la cocina para almorzar.

Mientras comíamos un helado Tomás preguntó “Que tál tu culo? Te duele?” 

“No, la verdad que no me dolió mucho como pensaba, pero será que no soy tan estricto, quizás si lo hicierais vosotros os hacéis daño, por eso no quiero”

“Lo que hicimos ahorita fue genial, me encantó tu lengua y la suya con tu polla que me presionaba ahy que bueno”

“Ahy Tomás, aún la tienes dura desde eso?” dijo Pedro

“Jajajaja no se me paró ahorita pensando a lo de antes”

“Volvemos al cuarto? Aqui está más frío” dijo Pedro

Nos acostamos en la cama abrazados y acariciandonos y, como que Pedro seguía empalmado, Pedro dijo “Quieres probar con él como hacer para penetrar? Pero cuidado a que no entre, vale?”

Me coloqué como antes con las piernas arriba, igual de como se había puesto Pedro en la mañana, Julio se puso y me puso a mí el aceite y colocó la polla en mi entrada, aunque me enteré que la tenía muy despegada sin presionar, se le veía con miedo.

“Muy bien, así que lo tendrás que hacer si lo haréis en futuro. Ahora intenta conmigo si es igual” dijo Pedro, colocándose de misma manera que yo, se puso aceite en él mismo y sigo diciendo “Apúntala directo en el agujero, bajando un poco con la mano porque la tenéis que se va pa arriba. Bien, así, ahora empuja como para entrar. No pasa nada”

Yo me puse atrás de Tomás, sentía su corazón en mil latidos en ese momento

“Vaya no te preocupes, presiona, empuja un poco, no pasa nada…así…ahy..así ya está…uhy” dijo Pedro, cuando la polla consigo entrar

“Pero así te duele has dicho no hoy! Te hago daño no quiero!” dijo Tomás

“Está bien no duele tanto, solo mueve despacio hacia fuera, así, bien, y ahora adentro y cada vez…uhy…cada vez entras un poco maáaas…” 

“Te duele, te duele!” dijo Tomás oyendo Pedro

“No, solo poquito, pero igual es algo raro en el estomago, sigue si no pued

o te…uhy…te digo”

Sigo así por casi un minuto, no mucho pero igual más que yo, hasta que dijo “Pedro creo que estoy”

“No tengas miedo, ponla adentro más que puedes” respondió Pedro jadeando

“Ahhh” dijeron los dos en el último golpe de Tomás que puso lo más interno que podía.

Sin decírselo, la sacó muy despacio como hice yo, nos pusimos los dos en el pecho de Pedro que dijo “Viste? Lo conseguimos todos. Ahy mis niños que día genial pasamos”