La historia de mi primo y yo (Primos Gay), como dos inocentes niños pasan a ser amantes gay Insaciables. Parte 2 (Piel con piel).
Esta mi historia con mi primo, dos niños inocentes que poco a poco van descubriendo los placeres sexuales y terminan convirtiéndose en amantes gay insaciables a escondidas de todos. (Primos Gay)..
La historia de mi primo y yo, como dos inocentes niños pasan a ser amantes gay Insaciables.
Parte 2 (Piel con piel).
Leer, antes la primera parte. https://sexosintabues30.com/relatos-eroticos/gays/la-historia-de-mi-primo-y-yo-como-dos-inocentes-ninos-pasan-a-ser-amantes-gay-insaciables-parte-1-los-inicios/
Hola, que tal. Esta es la segunda parte de mi historia de mis vivencias de la infancia. Mi primo y yo habíamos descubierto un parecer muy distinto a lo que hubiéramos tenido antes para ese entonces era lo mejor de lo mejor de los placeres y aun nos faltaba descubrir muchísimo más cosas de adultos. Realmente en el principio el tomo más la iniciativa de hacer ese tipo de cosas, por lo que siempre él tomaba el rol que más le convenia y lógicamente siempre tomaba el papel de hombre y me hacía tomar a mí el papel de su mujercita. Al principio todo fue algo muy superficial, porque al tener poca edad nuestras mentes no podían imaginar más allá de lo que se podía hacer y sentir sexualmente. Nos limitábamos a rosarnos sobre la ropa, eso sí, bien escondidos y organizados porque anteriormente ya nos había descubierto mi prima y no podíamos darnos el lujo de ser vistos nuevamente, por lo que éramos bien cuidadosos en ese aspecto para no ser descubiertos y seguir jugando nuestro juego secreto.
Como ya había contado en el relato anterior. Mi primo siempre andaba pendiente a que nadie nos mirara para torcerme las nalgas o cuando los adultos se distraían el me llevaba en algún lugar para estar solos, completamente escondidos, él me tomaba de la mano y llevaba en algún lugar donde nadie nos mirara y rápidamente se ponía atrás de mí, se acomodaba el pene entre mis nalgas y empezaba a hacer esos movimientos pélvicos contra mi culo, por ratos con sus manos me abría las nalgas para volver acomodar su pene entre ellas, se podía tardar varios minutos en esa posición, le gustaba demasiado usaba mi culo afeminado lástima que en ese momento todo era por encima de nuestros short de licra. Otras veces, siempre que nos juntábamos con nuestros amiguitos él proponía jugar a las escondidas con la intención de escondernos y llevarme con él, siempre me tomaba de las manos o caminaba atrás de mí y todo el camino hacia el escondite se pasaba untándome su pene entre mis nalgas.
Mientras jugábamos a las escondidas nos desaparecíamos por 2 o 3 rondas, según nuestros amiguitos mi primo y yo nos habíamos vuelto buenos en las escondidas ya que no aparecíamos, jijiji. Lo que no se imaginaban era no nos importaba realmente jugar a las escondidas, mas bien solo era una escusa para irnos lejos y guardarnos para que mi primo usara mi culo una y otra vez. en una ocasión, nos tocó escondernos nuevamente. Los niños corrieron todos a sus distintos lugares. Pero mi primo me dijo. -Ven vamos a otro terreno. Me tomo de la mano y corrimos hacia dos terrenos aledaños de donde estaban los demás, recordando que esos terrenos cerca de la casa de la abuela eran unos ranchitos pegados al bosque. Corrimos y nos metimos dentro del terreno, jamás aviamos entrado allí, pero nuestras ganas de hacer puerquesas nos obligaba a tomar más aventuras, lógicamente nuestra abuela o tías creían que jugábamos cerca con los demás niños y tomando esa mentira nos guardábamos en otros lugares más favorables para nosotros. En esa ocasión llegamos a un lugar que parecía una casita hecha por tablas, se veía como que alguien dormía allí, por suerte había una especie de catres con colchas. Mi primo muy feliz me jalo hasta esas colchas ya que no podía más estaba muy necesitado de mi culo. Todo el camino me tocaba las nalgas y me jalaba para untarme su pene. Una vez allí se posiciono atrás de mí, me tomo de la cintura y me dio la primera restregada de pene erecto. Se sentía muy duro. Entonces se dejó caer en el catre jalándome sobre de él. El quedo en una posición boca riba y yo de la misma madera sobre de él. Se daba el lujo de que al ser más alto y fuerte que yo podía manipularme a su antojo. Entonces me tomo las nalgas y las abrió para que su miembro quedara lo más adentro posible de culito afeminado, después me rodeo mi cintura con ambos brazos, empezó hacer movimientos pélvicos de penetración. Movía su cadera de abajo para arriba de una manera muy suabe, cada minuto que pasaba nos relajábamos más, disfrutaba cada rose de su pene entre mis nalgas, en ocasiones su pene quedaba atorado en mis nalgas, ya que no corríamos el riesgo de ser descubiertos y eso era algo muy cómodo. Por ratos el volvía a abrirme las nalgas para volver a acomodar su miembro. Pasaron creo 10-15 minutos de estar así, cuando el me pido que me acostara boca bajo, una vez estando boca bajo, él se subió encima de mí, puso todo su peso sobre mí y sus rodillas las puso sobre mis pantorrillas, volvió abrir mis nalgas para poner su pene en su tan amado postrecito afeminado y metió sus brazos bajo los míos, haciendo una especie de llave de lucha. Me aprisiono completamente y empezó a hacer los movimientos de penetración en contra de mi culo, era tanto el rose y movimientos que mi ropa comenzó a subirse a mis hombros al igual que su ropa de él, llego el momento que nuestras pieles, su abdomen y mi espalda se pegaron sin ropa, solo piel con piel, y eso hizo que se aumente el placer, mi primo al sentir eso, puso su playera de forma rara, saco su cabeza del cuello y se pasó la parte de abajo sobre su nuca, quedando como una especie de chaleco sobre él, de tal manera que no le estorbara y me subió mi playera hasta mi nuca, quedando mi espalda y su abdomen completamente al descubierto. Se la paso otro buen rato así. El ya hacia ruidos extraños que tiempo después entenderíamos que se llaman gemidos. Realmente la pasaba bien con mi culo a su disposición. Tan cómodos y felices estábamos que se no olvido completamente el juego de la escondidas. Jijijiji. 👉👈 cuando nos dimos cuenta de que había pasado el tiempo, nuevamente salimos del terreno un poco preocupados, porque todos pensarían cosas sobre nosotros.
En el camino mi primo me dijo que le gusto hacerlo así, que su estómago y mi espalda queden en contacto sin ropa, el me dijo que quería que algún día hiciéramos una pillamada, lógicamente tenía sus intenciones. Jiji. Él estaba mejorando en su rol del hombre ya que al terminar toda la tela de mi short lo tenía metido entre mis nalgas de una manera muy profunda, mientras platicábamos yo me acomodaba el short y haciendo esto le dije que igual me gustaría la pillamada. Cuando llegamos, todos los amiguitos se habían ido nuevamente. Y mi mamá me llamo para irnos a casa.
Habían pasado los días y le mis papas iban a salir a una noche de baile yo no quería y se me ocurrió decir que mejor quería ir a dormir con mi abuela. Mis padres aceptaron sin problemas y yo muy feliz de imaginar que mi primo quedaría muy feliz con la noticia. El fin de semana había llegado y todo estaba planeado, para nuestra mayor sorpresa la mama de mi primo saldría al mismo baile y lógicamente su hermana, por lo que solo nos quedaríamos solos con mi abuela. Todo salió perfecto, mi primo me dijo que pusiera el short más delgadito que tenga y eso hice, me dejaron en la tarde noche en casa de mi abuela y llevaron a mi primo de igual forma, nuestros papas se despidieron y nos dejaron, lógicamente mi prima nos miró algo extraño, pero sin llegar a pensar lo que estaba ocurriendo. A los pocos minutos de que estábamos solos con la abuela, vimos algo que jamás habíamos visto. Mi abuela tenía dos perros, ambos machos. En el momento que estábamos jugando con mi primo con la intensión de perdernos de la vista de mi abuela. El perro más grande monto al perro chico y empezó a hacer los movimientos pélvicos, mi primo y yo supimos de qué se trataba desde el primer momento. Ambos quedamos con la boca abierta de asombro. Mi primo me dijo – ya viste, el perro grande es el que usa el culo al chico, ya vez como el más grande debe ser el hombre. Al momento en que me acariciaba la nalga. Esos perros no dejaban de romperse el culo, en ocasiones el perro chico intentaba montar al grande pero no tardaba y nuevamente lo usaban de hembra. Estuvimos allí un rato viendo como el perro grande disfritaba y le rompía el culo al perro chico. Asombrados de como el pene el perro asomaba y se subía en el perro chico. Mi abuela salió y miro la escena, enseguida nos intentó engañar diciendo que los perritos estaban jugando. (Lógicamente nosotros ya sabíamos de qué se trataba). Jijiji. Y le dijimos que parece divertido.
Ya cayendo la noche. Mi primo no dejo de pensar en los perros, a cada rato me decía que me lo haría como los perros. Como a las 8:00 de la noche mi le dijimos a mi abuela que queríamos ver TV, y prendimos la tele, se estaba transmitiendo un programa romántico que nos llamó la atención. Donde muchas escenas sexuales pasaban. En una la mujer estaba en la cama boca bajo y el tipo se subió encima de allá. Cuando paso eso, al mismo tiempo volteamos a vernos con una sonrisa pícara de saber lo que estaba pasando. Ambos estábamos acostados en la misma cama, el atrás de mí y por ratos me untaba su pene, sin que la abuela sospechara, yo arqueaba la espalda para que mi culo queda más a la disposición de mi primo. La pareja hacia algo que nunca habíamos visto. Le dio un beso en boca y se veía que ambos lo disfrutaban. Mi primo tenía el pene pardo de tantos pensamientos sucios y me tocaba el culo disimuladamente a cada rato que podía. Realmente mi abuela ya andaba en una edad donde estaba casi todo el tiempo distraído, De pronto mi abuela nos dice que ir a comprar, apenas piso la calle. Mi primo fue a ver que se haya ido y como la tienda estaba a varias calles, aprovechamos cada momento. Mi primo me pidió que me pusiera como el perrito chico y él se puso atrás de mí. Fue la primera vez que estábamos así, él se subió su ropa como ahora ya costumbré e hizo lo mismo con mi ropa y estando en 4 el dejo caer su peso encima de mí y se sintió muy rico. Nuestras pieles pagadas y de nuevo con el pene de mi primo saba mi culo como un loco. Estábamos tan bien cuando de pronto me jalo de la barbilla y me beso la boca. Fue nuestra primera vez en experimentar eso. Las piezas del rompecabeza empezaron a unirse. Estaba completamente en 4 con la espalda arqueada para darle mi culo a mi primo lo más rico posible, su pene de él estaba a reventar en medio de mis nalgas haciendo movimientos pélvicos, yo moviendo el culo, nuestro calor de nuestras pieles juntas y habíamos descubierto los besos en la boca. Estábamos tan en lo nuestro cuando la puerta sonó, desperados ambos bajamos nuestras playeras y nos sentamos bien. Pero no logre acomodar mi ropa y termine el short metido en el culo.
Mi abuela se acostó para ya descansar, como a las 9:30 de la noche, se no ocurrió una idea, a cada rato le decíamos a mi abuela querer ir al baño. Yo iba primero y mi primo venia atrás de mí. Cuando cerrábamos la puerta él me tomaba de la cintura para coger mi culito afeminado por encima de la ropa, abrazarme rodeando sus brazos en mi cintura yo sentía que él estaba loco por mi culo y movía más el culo para que su exitación aumentara. Solo que ahora el me mordisqueaba el cuello o de plano me giraba el cuello para besarnos en todo el tiempo del acto. Ya no nos importaba que mi abuela se encontrara a unos escasos metros. Hicimos varias veces lo mismos, hasta que el decidido sentir lo que se siente que te usen el culo se puso enfrente de mi y me dio el culo, yo lo rose por primera vez, pero no paso mucho tiempo cuando me pido cambiar, entonces me giro y hizo lo que más le gusta, usarme le culo. Pasamos haciendo eso toda la noche. mi primo estaba muy excitado que se atrevió hacer algo toda vía más grande. Volvimos a decir que iríamos al baño, pero esta vez mi abuela estaba dormida, y el con la voz baja cerca de mi oído me dijo. -La abuela ya de durmió, no bajamos de la cama lentamente y con pasos silenciosos nos dirigimos en el baño, estaba por entrar cuando el me jalo de la cintura y me llevo hacia la cocina. Ya que estaba más lejos y fuera de la vista del cuarto. Cuando llegamos allí. Él se tocó el pene, pero esta vez se bajó completamente el short y se empezó a tocar de arriba para abajo. Sinceramente fue sorprendente lo que vi, su pene estaba muy desarrollado para nuestra edad, aproximadamente 16 a 17 cms de largo, la cabeza de su pene era muy grande parecía un hongo, jijiji y la piel que rodeaba la cabeza lo cubría, de hecho, estaba deforme porque el agujero de la piel quedaba a un lado del su cabeza por lo que no era tan fácil descubrir su clande, realmente era algo que me iba hacer sufrir más adelante. Jijijijiji calculaba que tendría 14cms de circunferencia en la parte pegada a la cabeza y el tronco estaba mucho mas ancho y para acabarla tenía una curvatura hacia arriba. Era un pene muy grande y raro, la verdad no lo creía ya que el mío realmente era un pene de niño. Ese pene que tenia mi primo fácilmente seria deseado por muchas señoras adultas jijijiji. Y era todo para hacer sufrir a mi culito afeminando.
Mi primo y yo aun siendo hombres, nuestras nalgas son grandecitas, son redonditas la verdad es que se forma el cachete, aparte somos blanquitos de color, probablemente tendríamos rosadito el culito, juraría que cualquier adolescente sexoso o hombre, si vieran con una peluca y una ropa femenina, verían a unas señoritas con el culo desarrollo y de verdad que no dudaría en cogernos. Jijiji. El trasero de mi primo era un poco mas grande que el mío porque era más grade que yo de estatura, pero nunca me hubiera imaginado que su pene este así. En ese momento ya teníamos entre 11 a 12 años.
Volviendo al acto. El jugaba su pene y me jalo. Quedamos de frente y el me empezó a besar la boca. Mientras jugaba mis nalgas, él tenía el pene erecto afuera era una imagen que nunca olvidare, a los pocos minutos el metió su mano dentro de mi short y yo intente zafarme porque era algo que nunca habíamos hecho. Pero en ese momento el me tomo de las cinturas y me jalo hacia él, restregándome su pene, esta vez solo mi shortito impedía que su pene este en contacto directo con mi culo. El se inclinó y me jalo hacia el. Me dijo que me recostara en el piso y me dijo al oído, mientras me los mordisqueaba el mismo tiempo. – voy a quitarme la playera y la pondré en el suelo, y tu harás los mismo, quiero que te pongas boca bajo, me di cuenta que los perros no tienen ropa y se divierten mejor, hemos perdido mucho el tiempo, primita. Me recosté boca bajo ya sin playera y el se subió encima de mí, me aprisiono con sus rodillas, me las puso sobre mis pantorrillas y con un brazo rodeo mi cuello y con el otro, sorpresivamente me bajo el short a la fuerza, casi queriéndomelo arrancar, yo estaba nervioso, pero deje que el hiciera conmigo lo que quería. Cuando el me bajo el short, me pidió que tomara mis nalgas con mis manos y que las abriera. Yo solo hice lo que me pidió. Estando es esa posición tomé cada una de mis nalgas y las abrí al mismo tiempo que el con su mano, puso su pene encima de mis nalgas y enseguida empezó con sus movimientos pélvicos. En esta ocasión nuestros cuerpos empezaron a sudar, como a los 10 minutos de estar así, mi primo me jalaba la barrilla para besarme la boca, por ratos el me mordisqueaba la nuca y el oído, y me decía entre respiración agitada y cortada, con voz baja. – hay primita, como me encanta usar tu culo, quiero que siempre seas mía. El gemía y cada vez tenía la respiración más cortada me abría las nalgas para restregarse más, me jugaba el culo, lamiaba mi espalda. Mi primo había encontrado un cofre del tesoro con tanto placer, habíamos tardado un buen tiempo cuando de repente él se quejó y sentí mi culo mojado con un líquido muy caliente y baboso que dejaba pegajoso mis nalgas, ambos nos quedamos quietos y él dijo que sintió algo rato y muy rico, como si en su pene tuviera cosquillitas, cuando se quitó sobre de mí, mi culo estaba lleno de lo que al parecer seria liquido preseminal, lógicamente fue su primera eyaculación de mi primo, era trasparente y muy abundante. Pero a esa edad pensamos que era orina. Realmente me lleno el culo y las nalgas de ese liquido espeso y pegajoso, el se puso la ropa y yo la mía. Pero al regresar al dormitorio, sentía el culo raro, baboso, y pegajoso. Pero no tuve de otra que ir a la cama, al parecer la abuela jama se despertó, como a los 20 minutos, no podía dormir por el baboso y pegajoso liquido en mi culo, decidí ir al baño a limpiarme, me bajé de la cama despacio, con la intención de no despertar a nadie. Estaba en el baño, cuando de repente siento la respiración en el oído de mi primo que me dijo – igual yo no puedo dormir. En lo que me baja el short y ya con el pene tieso a todo lo que da me abrió el culo y me restregó nuevamente el pene el en baño, aún no había limpiado ese líquido y al parecer me volverían a volver a llenar las nalgas de eso. Paso 15 minutos de tanto acto cuando mi primo se volvió a venir, esta vez fue menos cantidad. Entonces el me pego las nalgas de tal manera que sonó fuerte. Yo tuve miedo de mi abuela, pero al parecer el ya no le importaba. Por último, me dijo -estoy loco por tu culo y se fue. Me limpie el culo y regrese a la cama.
A la mañana siguiente al despertar mis padres fueron por mi sin imaginar todo lo que viví la noche anterior. Cada vez mi primo tomaba más experiencia a tal manera de eyacular en mi culo sin ropa y eso que aún no sabíamos ni imaginábamos que un pene podría meterse dentro de un culo y mucho menos el placer que se siente la romper y penetrar un rico y afeminado culo.
Necesito saber que paso después uwu
como continua por faovr
Por favor te ruego quiero saber mas
Buenísima historia