La mejor aventura con el chico del gimnasio, que termino siendo un profesor en mi clase.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola me llamo Pedro, soy de Venezuela.
tengo 20 años, soy de cuerpo marcado gracias a las horas en el gimnasio.
Tengo el rostro con un poco de barba, y unos ojos que son mi de color marrón claro, que siempre atrae a muchas personas,

Lo que voy a relatar paso hace un año, cuando conocí a un chico en el gimnasio, su nombre es José,.
Cada vez que yo llegaba al gimnasio el ya estaba allí entrenando, lo veía de una forma especial, ya que tiene el cuerpo un poco mas marcado que el mio, unas piernas muy voluminosas y unas nalgas que, humm.
Y su cara es mejor, bueno casi un modelo, pero no lo es.

Un día me cacho observándolo y me saluda de lejos, yo le regreso el saludo, desde allí no lo veo por el resto del entrenamiento.
Cuando salgo del gimnasio veo que esta en la parada del bus, voy y lo saludo mas de cerca:

P: hola, esperas el bus?
J: hola, si pedro a esta hora mejor pago un taxi, y tu lo vas a esperar?
P: no, voy al estacionamiento, porque me traje el carro de mi mamá.

J: a ok, dale pues nos vemos.

Me voy al estacionamiento y cuando paso de regreso el sigue allí esperando, y le digo que desde el carro que si no quiere que lo lleve al centro, porque aquí no conseguiría carro rápido y en el centro se le haría mas fácil.
El se niega al principio y yo le insisto.

P: anda, sube que de aquí no te vas a ir rápido y lo mas probable es que te pase algo antes de que te vallas.

J: esta bien, yo te digo donde me dejas, para que no se te haga tarde.

Se sube y arranco el carro rumbo al centro, en el camino hablamos, me dice que es profesor en la universidad.
Yo le digo que bien yo voy a comenzar pronto en esa universidad.
Y así estuvimos conversando, hasta que le pregunto donde vive, y me dijo un lugar que de casualidad queda a dos cuadras y media de mi casa; le digo que yo paso por allí para ir a mi casa que lo paso dejando; el se pone algo rojo y me dice que le da algo de pena, le digo que no tuviera pena, que lo hacia sin ninguna intención (por los momentos) y que así podemos conversar mas rato.

Lo deja cerca de su casa, desde allí nos hicimos amigos e intercambiamos números telefónicos.
Todos los días lo pasaba buscando para irnos juntos al gimnasio y de igual manera regresábamos juntos, algunas veces nos hibamos a cenar a un restaurante o a tomarnos algo.
Un día en el gimnasio en una conversación se toma el tema sexual.
y me pregunta si no tengo novia y le digo que no, porque a mi me atraen los hombres.
Le pregunto lo mismo, si el no tiene pareja; el me dice que no, porque igualmente la gustan los hombres y que yo le gustaba.

Me quede sorprendido con su respuesta, porque no pensé que el sintiera lo mismo que yo, de igual manera me gusta el.
Se me queda viendo por un momento y se aleja de mi, me imagino que no esperaba de igual forma esa respuesta de mi parte.
De allí no pude verlo por el resto del día.
Cuando salgo para irme me doy cuenta que esta otra vez en la parada del bus, y otra vez lo convenzo de que se venga conmigo.

En el auto gran parte del camino no hablamos, hasta que le toco una pierna y le pregunto que pasa.

J: nada solo no esperaba que tu también sintieras algo por mi.

No le digo nada y estaciono el carro, y me acerco a el y lo beso, el de igual forma correspondió a mi eso, pero lo beso como jamas he besado en mi vida.
El se aparta de mi y me dice que nos fuéramos que tendría problemas con mi mamá si llegaba tarde.

P: descuida estoy solo en casa, mis padres están de viaje y regresan la próxima semana.

J: a ok, esta bien.

P: si quieres podemos ir a cenar – a mi casa me imagino yo – a un lugar solos, que te parece?
J: esta bien, pero a donde, a esta hora los restaurantes estarán llenos.

P: a mi casa, si no te molesta?
J: no se, no quisiera molestar.

P: no vale, vayámonos.

El algo rojo me dice que si, y nos vamos.
Cuando llegamos a mi casa nos volvemos a besar y nos olvidamos de la cena y lo llevo a mi cuarto, nos desvestimos mutuamente y nos metimos a bañar juntos, sin dejar de besarnos.

Salimos de la ducha y nos dirigimos a mi cama, yo le menciono que soy activo, el me dijo que mejor porque e es pasivo, y baja besándome todo el abdomen, hasta llegar a mi pene, que mide unos 16 cm y comienza a hacerme la felación de mi vida, jugaba con su lengua, me besaba el glande, yo exitadisimo la agarro la cabeza y comienzo a embestirlo por la boca.

Después de un rato lo levanto y lo acuesto en la cama, cuando pienso hacerle una mamada, me detiene y le dice que no le gusta recibirla, así que lo dejo y me dirijo directo a su ano, comienzo pasandole la lengua, se la introduzco y al parecer le gustaba por la forma en que gemía.
Así estuvimos un rato, le introducía los dedos y gemía aun mas.
Hasta que me dice que me quería sentir dentro de el.
Así que busco un condón y lubricante en mi mesa de noche.
Me lo pongo y lubrico bien su ano introduciéndole un dedo con lubricante.

Quería comenzar con la posición de perrito para que no le incomodara mucho, y me dice que quería verme cuando lo penetrara, así que levanto una de sus piernas y me la coloco en un hombro y comienzo a introducirle la cabeza de mi pene, el me dice que no es su primera vez pero le dolía.
Así que fui mas despacio, hasta que entro completamente.

Así estuvimos hasta que su interior se acostumbro a mi pene, su ano estaba apretadizo todavía como si aun fuera virgen, pero le hice caso y seguí un vaivén lento de forma hermosa.
Luego comienzo a embestirlo un poco mas fuerte, y me acerco a el y lo beso.

Luego cambiamos a distintas posiciones, hasta que me dice que se venia y se vino de tal forma que su semen callo sobre mi pecho, ya que lo tenia de misionero; las compresiones que daba su ano sobre mi pene fueron tan fuertes que hizo que de igual forma yo me viniera.
Luego nos dimos la vuelta, quedando el sobre mi, todavía con mi pene dentro de el, y comienza a saltar como todo un experto.
Cuando se baja me quita el condón y me chupa el pene limpiando los restos de semen.
Luego sube y nos seguimos besando, pasando saliva y el resto de semen que quedaba en su boca.

Nos paramos nos fuimos a bañar otra vez y lo hicimos nuevamente en la regadera.
Se quedo a dormir en mi casa.
Al despertarme no lo encuentro en la casa, y en la cocina deja una nota con un poco de comida.
La nota decía que no quiso despertarme porque me veía tan bien haciéndolo y no quería molestarme, que desayunara que lo iba a necesitar y que nos veríamos en la tarde en el gimnasio, que tenia unas cosas pendientes y llegaba directo allá.

Pero esto no concluye aquí, aun falta mas.
Espero les halla gustado y también espero comentarios para continuar.