LA NOCHE QUE CONOCÍ A MI PERRITA
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Conocí a Lara mi actual pareja en la discoteca, yo casi 31 años ella recién cumplidos 22 años, recién terminada sus estudios, alta, morena muy atractiva, al principio me rechazó, eso me hizo ser aún mas tenaz esa noche, sin imaginar que a partir de esa noche habría un antes y un después para ambos, finalmente terminé, al igual que ella con varias copas de mas, solos de madrugada tras marcharse mis amigos y sus amigas, del último pub que estuvimos, ahí la bese por primera vez, sin buscar nada mas en esa noche que un buen polvo no voy a mentir, como también ella.
Terminamos marchando en mi coche hacia mi apartamento, todo se fue desarrollando de lo mas normal, nos besamos ya en la sala de mi casa, de pie le sobe las tetas, ella me agarraba mi verga como digo los dos íbamos algo borrachos, además de que ella iba excitadísima, mucho mas que yo, por mi parte además de sus tetas había algo que estaba deseando agarrarle su culo, es un culo respingón redondo, perfecto, entonces fue cuando le quite el vestido aun de pie le di la vuelta y me deleite observando aquellas nalgas, aquellas piernas larguísimas, tire de ella sentándome en el sofá necesitaba tener esas nalgas sobre mi regazo, ella con su tanga negro, lo que dejaba todas las nalgas, bien descubiertas, comencé a acariciarlas a placer, ella estirada sobre mi regazo, así estuve varios minutos mientras ella suspiraba a mis caricias, nunca antes había hecho nada parecido, pero comencé a sentir la necesidad de darle unos azotes, le di uno ella no se opuso, seguía en su mundo sus ojos cerrados suspirando, lo que me dio pie a continuar.
Casi sin darnos cuenta en pocos minutos había pasado de unos suaves azotes, a unos azotes en toda regla mientras que ella no daba síntomas de revelarse sino todo lo contrario, ante mis ojos sus nalgas se iban enrojeciendo aquello me iba excitando por momentos, como nunca antes, las señales de mis manos en sus nalgas, hasta que paré mis propias manos me dolían cogí a Lara del pelo, obligándola a ir al suelo a mis pies ella seguía sin la mas minima oposición consintiendo todo aquello, terminó a mis pies sin yo habérmelo propuesto comenzó a lamer mis zapatos, la observe mientras yo me deshacía del pantalón, la retiré para quitarme finalmente todo, ahora fui yo quien la coloco de nuevo a mis pies, vi su lengua como pasaba por mis pies una y otra vez aquello tenia en mi un efecto de sentirme mas seguro para humillarla mas aún, la levante por el pelo Lara quedó de rodillas frente a mi, el tiron de pelos que le estaba dando era fuerte, sabia que le dolia, pero su cara, dios su cara tenia los ojos cerrados la boca semiabierta en vez de gritar o defenderse solo respiraba fuerte sin abrir los ojos como digo, yo repetiré jamas había hecho nada de eso, si había visto películas leído relatos, pero nunca me habían excitado de la forma como lo estaba en esos momentos solo que era una excitación, muy diferente no la de necesitar tener un orgasmo ya sino verla así, como nunca había visto hasta esos momentos a una mujer ni siquiera a mi esposa, verla tan excitada a la vez sin ser dueña de la situación, entregada totalmente sin saber que ocurriría después
Agarre mi verga, nada despreciable en erección 21 cms gruesa, aun no estaba a tope como digo y se la hice tragar que casi la atraganto pues se la hice tragar hasta los huevos y la agarre para que no pudiera soltar ni un centímetro, así termno de crecer mi polla en su boca, así la tuve largos segundos hasta que finalmente cuando estuvo durísima se la saque me la agarre con una mano en la base y los huevos con la otra su cabeza y mas que mamarmela me folle su boca, durante unos minutos, en esos momentos era un animal, termine sacándosela los ruidos que se habían producido por aquello habían sido guturales salvajes pero ella no había puesto un pero, tire de su pelo levantándome y levantándola la hizo colocarse casi como un ovillo a 4 patas en el sofá no a lo largo sino solo usando un asiento digamos y me arrodille su chocho quedó a la altura de mi boca desde atrás sin soltar su melena en una postura muy incomoda para ella, pero nada mas lamer su coño que estaba todo pringoso, ella se retorció una y otra vez aunque yo la mantuve firme por el pelo, hasta que termino corriéndose un par de veces, me retire ante aquel espectáculo, diciéndole, por primera vez, una frase y fue no te muevas zorra quiero ver bien ese coño como a quedado.
Lara no se movió tras sus gritos que casi unió un orgasmo con otro quedó paralizada ante mi la coloque ahora mejor le retire el tanga la abri de piernas y me dedique simplemente a mirar arrodillado desde atrás su coño rosado su entrepierna desde atrás toda pringosa de jugo y salivas toque su coño blandísimo tras los orgasmos, entonces tras deleitarme durante minutos, le dije no te muevas ni un centímetro trs ponerla en el suelo a 4 patas, ella quedó inmóvil mientras yo rebusque en mi pantalón de la cartera saque dos preservativos mientras le iba dando con la otra mano en sus nalgas de nuevo, termine colocándome frente a ella, le puse mi polla en su boca le dije cómela mientras abro el condon perra, ella obedeció, termine sacándole la polla de su boca me coloque el condon mientras le dije, venga colocate como una buena perra se guiro a cuatro patas, pase mi polla por su raja una y otra vez, entonces comenzó a gemir lo que me hizo seguir pasándola sin metérsela, hasta que sus gemidos no cesaban y su coño contaba que no fingia, se la metí, dando ella un enorme grito de placer comencé a follarla a darle con mi mano en su nalga con la otra le agarre el pelo, comencé a decirle que era toda una putita en la cama, que vaya perra había cazado esa noche, apenas termine las frases la tuve corriéndose como una loca, de nuevo, pero esta vez tras ella exploté yo, tras aquella explosión y relajamiento ella ante i sorpresa quedó, pegada a mi su cabeza ahora apoyada en el suelo, pero seguía obediente sumisa, entonces me retiré, la polla algo caída el condon colocado pero mal del ajetreo, me coloque frente a su cara y le dije sácame el condón y chupa mi leche, ella ante en realidad mi sorpresa interior, lo hizo saco el condón cuidadosamente y mi embolsada leche pasó a su boca ante mi mirada cuando termino le dije limpia mi polla solto el condon y comenzó con mi polla, entonces, fue cuando decidí ir mas alla.
La llevé al baño, allí como había visto, la hice quedar a 4 patas con su cabeza metida en el wáter, diciéndole así debes estar mientras yo me ducho, lo hice sin dejar de mirarla, salí me seque, me la llevé de nuevo al salón, mi cabeza era un torbellino intentado imaginar que hacer con ella en esos momentos, mientras la llevaba como a una perra a 4 patas cogida por su pelo.
La tumbe en el sofá mirando ella hacia abajo, vi su culo su espalda, fui a la cocina me serví una copa, abri uno de los cajones, allí tenia cuerda de tendedero de ropa no lo pensé, volvi a la sala, la ate con cierto miedo por si se negaba no hubo rechazo por su parte, fue una forma de atarla de novato de aprendiz pero eficaz la deje inmovilizada de pies y manos, pero ahora ella mirando hacia arriba como su cuerpo de tal manera que estaba atada y con las piernas abiertas enseñando bien su chocho, a la vez que yo sentado en uno de los dos sillones la observaba y bebia a la vez que le decía que vaya descubrimiento, saber que era toda una perra, que me iba a gustar educarla comencé a decirle todo aquello que había leído, además de todo lo que se me ocurria, y me producia como dije antes un enorme placer, hacer aquello, con ella, tanto o mas que un orgasmo, le dije que la haría obedecerme sin condiciones, estuve al menos veinte minutos, solo hablándole humillándola verbalmente sin estar en ningún momento a menos de dos metros de ella que era lo que habría de el sillón al sofá o menos, sin darme cuenta que aquello la excitaba enormemente, cuando finalmente termine diciéndole seguro que estas deseando probar que te de bien en esas nalgas de perra con mi cinto, para que sepas quien manda, en realidad se lo estaba proponiendo y esperando su reacción esta fue de silencio
Entonces me levante la desate de pies y manos y le dije colocate aquí perra ella obedecio se coloco de pie apoyada en la mesa ate su muñeca después a la parte alta de la pata de la mesa hice lo propio con la otra muñeca quedo de pie inmovilizada y ofreciéndome de nuevo sus nalgas, saque ante su cara el cinto de mi pantalón, un cinto ancho ella miraba mis manos sobre la mesa donde coloque el pantalón frente a ella viendo como salía el cinto, me coloque tras ella, le di el primer correazo inseguro nada firme ella gimoteo nada mas, el segundo fue mucho mas seco, ella volvió a gimotear, entonces empece a darle varios a ntervalos junto con mi humllacion verbal, hasta que solte el cinto tras 5 u 6 golpes, y se la metí tuve que poner mi mano sobre la boca de lara mientras la follaba, llego a morderme en la mano del gusto que sentía de sus gritos, mientras me la follaba, uno tras otro le sucedia los orgasmos, hasta que paré, al verla, que no podía mas la solte rápidamente de sus cuerdas, la puse de nuevo sobre el sofá mi polla estaba casi a punto entonces me coloque encima de ella totalmente ella incapaz de nada y puse mi polla entre sus tetas la agarre las dos apretándola contra sus tetas y me movi me corri entre gritos que creo escucharon mis vecinos, fue atroz, el orgasmo, Lara en todo momento inmóvil simplemente por que no podía mas estaba cansadísima fui al baño volvi limpie sus tetas y su garganta y pecho de mi leche, la cogi como un fardo y la llevé a mi cama, hacia mucho que no quedaba yo tan exhausto tras follar, pero jamas había quedado una mujer como había quedado en esos momentos Lara, en minutos se durmió.
Muy temprano nos levantamos ella, quería volver lo mas rápido a su casa ya había hablado por teléfono, con sus padres, no me dio su teléfono solo consintió llevarse el mio, crei no la volveria a ver a pesar de sus promesas, no me daba cuenta que en esos momentos ella estaba mas preocupada por sus padres que por otra cosa, finalmente cuando marcho, quedé mal, pero pronto pasaron mis dudas, nada mas terminar de comer me llamó, ahora si hablamos calmados, de todo lo pasado, la noche anterior deseaba seguir viéndome deseaba ser mi perrita como me dijo, que la educara, comenzamos ambos a practicar a aprender cada vez mas sobre el BDSM, hasta que 5 meses después decidimos vivir juntos, pero desde aquella noche nuestra vida sexual cambio radicalmente.
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