LA NUEVA FAMILIA DEL PEQUEÑO MARIO PARTE 12 (DESNUDOS) 

Esa fue la primera noche de sexo consentido, ambos habían disfrutado de aquel encuentro y esto apenas acaba de comenzar. .

Emmanuel fue el primero en despertar, bostezando, estiro un poco todo su cuerpo, se froto los ojos y luego, su mano derecha apretó fuertemente su dura verga, la cual estaba así, por la erección matutina. 

Sintiendo su vejiga llena, lentamente salió de la cama, busco su bóxer entre las sabanas y en seguida fue al baño a orinar, cuando termino de liberar aquel liquido amarillento fue a la cocina, el café estaba hecho, pero su esposa Natalie no se encontraba en la casa, pues ella había salido al gimnasio como siempre acostumbraba. 

Emmanuel quería ver, cuál sería la reacción del niño en cuanto despertara y lo viera acostado a su lado totalmente desnudo, así que apresurado subió al cuarto del pequeño Mario, una vez que estuvo ahí, cerró la puerta con seguro, aunque no era necesario, ya que su esposa tardaría en regresar a casa, pero él quería estar completamente seguro, bien dice un dicho “hombre precavido, vale por dos” 

Emmanuel casi enseguida se quitó el bóxer, dejo caer al piso su única prenda tenía puesto, luego, cautelosamente se subió a la cama para no despertar a su pequeño hijo, Mario aún seguía dormido, por lo que Emmanuel lanzo las sabanas hacia los pies y de inmediato abrazo al pequeño, de tal manera que fue acomodándolo en posición de cucharita. 

Escupió una buena cantidad de saliva para lubricar su verga, luego puso saliva en el culito de su pequeño hijo, acomodo su hombría entre aquellas pequeñas nalguitas y cuando logro ubicar aquel culito, empezó a empujar lentamente. 

Al estar Mario dormido, su esfínter estaba relajado, por lo cual facilito la entrada de aquella verga, aunque el culito de Mario estaba húmedo, el dolor se hizo presente y esto hizo que el niño empezara a despertar. 

Ante estos movimientos, Mario fue saliendo de su profundo sueño, estirándose un poco, terminó de despertar, en ese momento se dio cuenta que su padre aún seguía en la cama, girando un poco la cabeza, se encontró directamente con los enormes ojos de su padre, quien sonriendo le dijo. 

Emmanuel: ¡bueno días campeón! ¿dormiste bien? 

Mario: ¡si papi, dormí muy bien! 

Emmanuel: ¡yo también dormí muy rico contigo! 

En ese momento Mario recordó lo que había sucedido anoche, entonces llevo su pequeña mano hacia su culito, el cual estaba mojado y tenía dentro, la punta de la verga de su padre; fue ahí donde él se dio cuenta del porqué, siempre despertaba con el culito pegajoso, un poco adolorido y además con su ropita interior manchada con una especie de líquido blanquecino. 

El cayo en cuenta que su padre lo cogía por las noches, pero lo raro de todo esto, era que él no recordaba nada al día siguiente, pero no le presto mucha importancia, al contrario, ahora había aclarado su duda. Mario se acomodó nuevamente en posición de cucharita y tomando el brazo de su padre le dijo. 

Mario: papi, ¿me puedes abrazar? 

Emmanuel: ¡claro que si mi amor! 

Mario: ¡papi! ¿te puedo preguntar algo? 

Emmanuel: “si dime campeón” 

Mario: ¿Por qué estas desnudo? Jijiji 

Emmanuel: ¡ah, pues porque me gusta dormir así desnudo, como tu estas! 

Mario: es verdad, jijijijiji  

Después de esas preguntas hubo un total silencio, El padre del niño empezó a empujar su cintura suavemente, para este momento el dolor se había ido, por lo cual, Mario paraba más las nalguitas, para permitir más la entrada de aquella verga. 

Emmanuel, al ver que su pequeño niño estaba despierto y receptivo ante dicha situación, quiso llevar ese acto sexual a otro punto, donde los dos participaran en el coito, pero desafortunadamente, se escucharon unos golpes en la puerta y al mismo tiempo se escuchó gritar la voz de Natalie “bajen a desayunar”  

Emmanuel tapo la boca de su hijo y mientras seguía cogiéndolo, le susurraba al oído. 

Emmanuel: ssshhh, ¡por dormir desnudito, se metió mi verga en tu culito! “es tu culpa” 

Mario: ¡sí! jijijiji 

Emmanuel: ¡esto no lo debe de saber mami! “será nuestro secreto” 

Mario: ¡si papi, prometo no decirle nada a mama” 

Emmanuel: ¡bueno hay que cambiarnos y bajar con mama! (dándole un beso) 

Natalie había regresado rápido del gimnasio, pues ese día había amanecido nublado y lloviendo, entonces por cuestiones del clima que se aloco, ese día no abrieron, pues creyeron que nadie asistiría. 

Ese día, Emmanuel tampoco fue a la oficina, por lo cual se quedó en casa trabajando; cerca del mediodía, Emmanuel se acostó en uno de los sillones, prendió el televisor y se cobijó con una frazada, pues por cuestiones del clima, lo ameritaba. 

Mario al ver a su padre recostado en el sillón, fue acostarse con él, Emmanuel de inmediato le abrió espacio a su pequeño hijo, el cual enseguida lo cobijo; Mario se pegó sus nalguitas al paquete de su padre, luego empezó a mover su pequeño trasero, frotando aquella verga que ya empezaba a ponerse morcillona. 

Emmanuel: ¡mi amor, no te muevas así! 

Mario: ¿Por qué papi? 

Emmanuel: ¡porque se me va a parar la verga y se va a querer meter en tu culito! 

Mario: ¡como anoche! Jijijiji 

Emmanuel: “exacto, así como paso anoche” ¿Dónde está tu mama? 

Mario: ¡está en la cocina preparando la comida! 

Emmanuel: ok 

sin perder tiempo, Emmanuel metió su mano en el pijama de su pequeño hijo, ahí empezó a tocar sus pequeñas nalguitas, en un solo movimiento, bajo de un tirón su pantaloncito, haciendo que ese pequeño trasero quedara expuesto, enseguida, él se bajó el pants por la parte de adelante y libero su verga. 

Mario sintió, como aquella gruesa verga iba despertando en su totalidad, la cual se acomodó entre medio de sus nalguitas, enseguida, Mario sintió los movimientos de la cintura de su padre, aquella verga se movía al compás de vaivén entre las nalguitas del niño y escupía cada vez más, abundante liquido pre seminal. 

Emmanuel: ¡mi amor, mira lo que has hecho! 

Mario: ¿Qué hice papi? 

Emmanuel: ¡me has parado la verga, ahora se va a querer meter en tu culito! 

Mario: ¡si quieres, puedes meterla un poquito! 

Emmanuel: ¡ok, pero si viene mami, te quedas quietecito! 

Mario: ¡si papi! 

El pequeño agarro la verga de su padre, luego la guio a la entrada de su culito, una vez que estuvo ahí, empezó a empujar hacia atrás, para que entrara, pero al no haber lubricación ni dilatación era difícil, pero Mario no desistió y continúo intentando. 

El culito de Mario ya estaba demasiado húmedo, la gruesa verga de su padre, se había encargado de mojarlo con abundante liquido pre seminal, con sus movimientos, la cabeza recorría toda su rajita entre sus nalguitas; Emmanuel nada más se quedó quieto, disfrutando del roce de aquellas redondas nalguitas, él sabía que no lograría penetrarlo ahí, pero dejo que su hijo jugara con su verga, así, él iba ganando más confianza con el pequeño. 

Una vez más, Mario acomodo la punta de esa gruesa verga en la entrada de su culito, empujo un poco hacia atrás y su esfínter se empezó abrir, sin retirarse, el pequeño se quedó quieto unos segundos, luego continúo empujando suavemente su culito hacia atrás, haciendo que la punta de esa verga, entrara en su totalidad. 

Emmanuel, nunca tuvo la intención de cogerse ahí a su pequeño hijo, el solo quería que el niño participara por voluntad propia, pues solamente así, ya no tendría que dormirlo para cogerlo a cualquier hora; además este acto que estaba sucediendo le encantaba, pues el pequeño había tomado la iniciativa y su culito, ya se estaba adaptando a las dimensiones de esa gruesa verga. 

No había prisa para terminar con ese coito, solo tenían que ser cuidadosos por si se aparecía Natalie, pero, aunque llegara cerca de ellos, jamás se imaginaria lo que estaba sucediendo debajo de aquella frazada. 

Mario, continúo moviendo su pequeño trasero hacia atrás y hacia adelante, tratando de meter cada vez mas de aquella verga, Emmanuel solo se limitó a quedarse quieto y estar alerta por la presencia de su esposa. 

Pero aquel morboso momento, lo tenía ya muy excitado, estaba tan caliente que pronto empezaría a transpirar, además aquel culito tan cerrado le estaba martirizando la verga, en ese momento, él quería cogerlo con total libertad, pero sabía que no podía, así que dejo que el pequeño se divirtiera solo por un rato. 

Mas tarde, sin poder resistir más las travesuras de su pequeño hijo, apretó fuerte a Mario; Cerrando los ojos, Emmanuel se mordió los labios para no gemir, su cuerpo tembló un par de veces y su verga, empezó a expulsar varios chorros de leche, Mario sintió como su padre había acabado, por lo cual se quedó quieto esperando a que él se recuperara. 

Cuando Emmanuel estuvo tranquilo, dio un beso en la mejilla a su pequeño y luego le dijo al oído. 

Emmanuel: ¡gracias mi amor! ¿te gusto? 

Mario: ¡si papi, me gustó mucho! 

Emmanuel: ¡voy a salir de ti, aprieta fuerte el culito para que no salga mi lechita! 

Mario: ¡si papi, lo que tu digas! 

El pequeño apretó fuertemente el culito, para mantener la leche de su padre dentro, luego ambos se acomodaron la ropa y así se quedaron por un rato más viendo la TV, como si nada hubiese sucedido. 

Emmanuel estaba feliz, ahora su pequeño niño era su cómplice y desde ese momento empezaría a enseñarle cosas sobre el sexo, pero en realidad Mario ya sabía más de lo que él se imaginaba, solo estaba esperando la oportunidad para demostrárselo a su padre. 

En la noche, cuando Natalie estuvo profundamente dormida, Emmanuel salió de su cama, rápidamente fue a la habitación de su pequeño hijo y una vez que estuvo dentro, despertó a Mario. 

Emmanuel: ¡hola mi amor, mami ya se durmió! ¿puedo dormir contigo? 

Mario: ¡si papi! 

 

Quitándose la única prenda que llevaba puesta, dejo caer el bóxer al piso y se metió a la cama de su pequeño hijo.  

 

CONTINUARA….. 

 

 «saludos de su amigo @Angelblacks» y pido una disculpa por la demora, recuerden que estoy en telegram