La primera ves con mi primo
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Estuve pasando unas vacaciones en una casa de campo donde mis tíos, ellos me alojaron en el mismo cuarto con mi primo que era dos años mayor que yo.
Esa noche lo vi desnudo y me causo curiosidad su verga tan grande, yo lo miraba disimuladamente y el como que se dio cuenta y se volteaba y quedaba de frente lo que me excitaba y hacia que volteara la mirada hacia otro lado.
La noche siguiente cuando nos acostamos estaba haciendo una tempestad y tronaba, a mi me asustan mucho los truenos así que cada ves que sonaba uno yo brincaba, el se arrimo a la cama donde yo estaba y e dijo tranquilo primo no es para asustarse con los truenos yo estoy aquí a tu lado, es mas me voy a acostar en la misma cama contigo para que te tranquilices. Efectivamente se metió en la cama debajo de las cobijas conmigo.
Yo me voltie hacia la pared, pero los truenos me hacían brincar, el se arrimo y me apretó fuerte y me dijo tranquilízate yo te tendré así abrazado mientras dure la tempestad para que controles los nervios.
La tempestad siguió y yo seguía brincando, el se apretó mas contra mi y al hacerlo su verga rozo mis nalgas, me quede quietico, entonces el me dijo te apretare mas ya ves que te has tranquilizado, lo que el no sabia es que yo en ese momento sintiendo su bulto sobre mis nalgas estaba que me derretía, nunca había tenido relación homosexual, pero no se que me pasaba en ese momento, yo seguí brincando inclusive con truenos que no eran fuertes, el debió percatarse de esto porque comenzó a hacer movimientos con su pelvis y sobarme fuerte su verga por mis nalgas yo no proteste y el se arriesgo a bajarme lentamente el pantalón de la piyama y bajarse el de el, sentí su verga ya dura y calientica entrando entre mis nalgas y posando su punta en la entrada de mi culito.
En ese momento sonó un trueno y en el brinco que di sentí que me penetro un poco, creo que grite de dolor, el me tapo la boca y comenzó a acariciarme, yo en ese momento sentía un gran dolor en mi culito y no me atrevía a mover, pero el se fue pegando mas y mas yo sentía que se me desgarraba mi ano, con ganas de gritar pero me contenía no fuera y me oyeran.
Me saco la verga y se unto de saliva los dedos y me unto mi culito con ella, sentí que me refrescaba, pero nuevamente embistió y comenzó de nuevo a metérmela, yo lloraba del dolor que sentía, que me daban ganas de apartarme de el, pero el me agarraba y no me jaba zafar, así que me la fue metiendo lentamente hasta que sentí sus pelotas sobre mis nalgas, se quedo quietico, para mala fortuna mía sonó otro trueno y en brinco que di sentí como satisfacción y no dolor con el movimiento que hice.
Seguí moviéndome y el dolor se me fue transformando en placer, hasta que sentí que su semen me lleno todo mi interior.
De ahí en adelante durante todo el tiempo que estuve allá dormíamos juntos y fueron muchas cosas ricas las que hicimos.
como sigue