La primera vez -2-
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por 1391.
En la tarde me encontraba tocando la puerta de la casa de Kaqui, cuando salio su mama, le pregunte como seguía Kaqui, y si era necesario que yo me quedara, no, hoy no es obligatorio que te quedes ya que yo estaré aquí, OK, hasta mañana, regrese para la casa y me puse a estudiar que por los acontecimientos ocurrido, no había prestado ni atención a las clases pensando en todo lo acaecido, recriminación, reproche y si se enteran los amigos, todo esos me daban vueltas en la cabeza, las dudas y no saber a quien preguntar que era lo mas jodio.
Al siguiente día, volví y toque la puerta, me extraño que Kaqui preguntara quien era, soy yo, y note el ruido de la mirilla de la puerta para ver quien era, no comas mierda y abre, se abrió la puerta y para mi sorpresa se encontraba vestido con un prenda de lencería de un tejido fino, elegantes, con unos bordados, guarnecidos de encajes. Era suave, sedosa, ligera y semitransparente, con una tanguita delgada en la parte trasera que deja al descubierto los glúteos, y de calzado tenia unos tacos altos que casi me alcanzaba. ¿Te gusto como estoy? Y así dio una vuelta para que reparara lo loca que estaba. Por eso tenia que estar seguro de saber quien era, esta ropa es de mi mama, ¿me queda bien? Si mija, tu como siempre tan desamorado, y que yo siempre estoy pensando en ti,
Por eso voy a saludar con un besito a la que me da placer y dolor, y así ya se encontraba de cuclillas sacando los botones, consiguiendo que la pinga saliera disparada chocando sobre su rostro, el ya como un consumado experto inicio sus pases de lengua del tronco a la cabeza, pasando su lengua por el frenillo rodeando todo el prepucio hasta embutirse toda la cabeza, paro y me dijo vamos para la cama, se levanto, agarrando el rabo con una mano salio taconeando delante, sus nalgas se movían con un ritmo provocador, comentándome, hoy vas a gozar mi culito, pero por favor no me la metas toda yo te voy a ir avisando hasta donde no me lastime, así que no seas malito y compláceme, me puse un lavado para que no te embarres y este todo bien limpio, voy a ver como me va con la cremita como me recomendó el medico, entrando al cuarto, me dijo siéntate, se emparejó apoyando su cabeza sobre mi barriga y emprendió su labor, esta ves se centro en el frenillo con un conducta de lengua dirigida para hacerme estallar con una descargar fenomenal, la fue recibida en su boca que bebió apasionadamente.
Se levanto y me trajo una coca
Y volvió a su posición, hablando hasta por los codos de todos los sueños, proyectos que el tenia, de los deseos para que lo quisiera, pero entre frase y frase me seguía acariciando la pinga y alguno que otros besos en la cabezota, y el miembro comenzó a erguirse, entonces tomo la pomada y me pidió que le echara la pomada en el culito, y así mientras el chupaba le introducir su medicina, me pidió que me acosté de lado detrás de el, el separo el hilo dental de la tanguita, después cogiendo la pinga con la mano se presento la cabeza en su gruta, levantando su nalguita con la mano, por favor ve induciendo lentamente ese trozo de carne que va hacer mi perdición, emprendí a hacer presión, y milímetro a milímetro iba entrando, el hacia algún movimiento para lograr la entrada, le pregunte ¿te duele mucho?
No tanto, pero siento que me estas de barrenando mi culo, pero sigues, que por ahora aguanto, si ya te la metiste toda, que va solo esta la cabeza adentro, espera un tiempito para que me la sigas metiendo y así mi ano se va adaptando a ese monstruo y pueda dilatar, para llegar a soportar y tragarse ese pinga, mientras sentía el perfume de su ropa, la suavidad de la tela al rozarme, estaba a mil, me le acerque a su oreja y le murmure, así es como tu querías estas, que te estuviera clavando lentamente, ay si, pero por favor sigues así, estas logrando que alcance las puertas del paraíso, inicia su meneo de rotación, adelante y atrás, habiendo adquirido mas confianza, se relajo y entro unos centímetros mas, tenia mas soltura, se la saque echándole mas crema, que bien le estaba entrando, hasta que se la empuje hasta la mitad, medio grito, pero siguió su oscilación, me pidió ponerse boca abajo con su almohada para levantar su culito, súbete y insértame como tu sabes hacerlo, no lo hice así, lo puse como los perritos,
Y así obtenía ver toda su lencería roja, su hilo dental fuera de su culo, lo encañone metiéndola lentamente, gozas sufriendo así, eso es lo que tu querías, pues ya casi lo obtienes, unos bombeos y ya casi los huevos tocaban sus nalgas, realizado siiii, pon la almohada, que ahora voy arriba de ti, inicio el un bamboleo, como un columpio en zigzag, mientra tanto lo mordía en el cuello y le decías los peores calificativos y ya la pinga entraba hasta el fondo de sus entrañas, y el muy remaricon emprendió a astringir su ano, contraer y estrecharlo, esta prontitud hicieron que iniciaran las convulsión con la eyaculación, (pienso que este mover de su culo era a que el también eyaculaba con el roce de la almohada, ya que sus manos se encontraban a los lados) quede un tiempo en esa posición con la pinga dentro de su culo, el estaba noqueado, no podía gesticular palabras – que fuerte fue esto – observaste como te la tragaste toda la pinga y aun demandabas mas, que capacidad de culo tienes, es que soy muy caliente, mañana te voy a dar una sorpresa, ahora no porque me duele algo mi culito y no quiero que se me lastime, aunque ya soy un señor maricon. No hace falta que lo digas, eres una loca total.
Déjame ordenar todas estas ropas, guardarlas y lavar, lo que tengo que hacer por ti, si quieres leer en el cuarto de mami hay las revista que a ti te gustan, si a mami le gustan las mujeres y a mi los hombres, cosas de la vida, ¡no¡ mañana nos vemos, tengo que estudiar, hazlo conmigo, no eso es imposible porque vamos a terminar cogiendo.
Continuara
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