LA PRIMERA VEZ CON MI ESCLAVA
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Tras mi divorció continué tanto con mi búsqueda, como con mis esclavos, hasta hace casi 5 meses, había tenido durante años, tantos mensajes y citas similares, que no iba con ningún tipo de miras, me encontré en un parque, con un marido, totalmente rapado al cero, de 49 años de edad, fue directo, como yo, aunque yo estaba en guardia si me iba a decir como tantos que su esposa no sabia nada que al final simplemente era un maricón sumiso ni siquiera esclavo, pero no fue así, le dejé hablar primero, que me explicara su historia.
Su mujer tenia su misma edad, rellena de carnes una mujer normal madura, me lo expuso todo claro, buscaban para cada dos semanas, desde el sábado en la mañana hasta el domingo tarde o incluso noche, seria mía, los demás días de él pero se referia a follar el con su esposa normalmente, simple su esposa se calentaba con las sesiones, durante los siguientes días digamos estaba caliente para follar, hasta que volvia a necesitar otra sesión por supuesto en la sesión entraba follarmela como que él estaría presente en todo momento, grabandolo para ellos.
Acepté todo, incluido ser grabado, la primera vez, que fui, fue al sábado siguiente, a su casa, allí la conocí tal como ellos quisieron llegué sobre las 9 de la mañana, ella estaba esperando con una bata fina negra, sentada en un sillón en el salón, todo despejado una mesa pequeña donde ordenado había gran cantidad de utensilios, fusta pala de cuero pinzas cera, pesas de distintos tipos, sobre una de las paredes, cancamos puestos perfectamente para colocar las correas e inmovilizar, perchas de presión para sus pechos, todo tipo de correas para inmovilizarla pies y manos.
Cuando terminé de observar todo, mientras su marido instalaba la cámara de video, preparándola, cuando termino, me dijo si había desayunado le dije que no, me invitó, entonces le dije a su esposa, tu quieta ahí, tal como estas, ella quedó sentada, fuimos a la cocina allí tomamos ambos café y tostadas, charlando los dos, nos lo tomamos con tranquilidad los dos, ella ya había tenido varios AMOS, en estos años, finalmente terminamos, le dije que saliera él antes y preparara todo para empezar a grabar, salí, quedándome en la puerta de entrada cuando empezó a grabar, fui hacia su esposa, sentada en el sillón, la cogí del pelo con fuerza, ella empezó a dar grititos, ven aquí zorra, la arrodille del pelo comencé a quitarle la bata apareció con un body negro le saque sus dos gordas tetas, comencé a darle de abajo arriba con fuerza en las dos tetas, una tras otra una y otra vez, que delicia escuchar sus gritos, hasta que la hice levantarse sus tetas marcadas por mis dedos, subió la llevé hasta la pared, le coloque muñequeras le coloqué las tobilleras, ella vuelta dándome su culo
Comencé con la fusta, pronto tuve que colocarle el bocado, le daba golpes muy espaciados, seleccionando el lugar largamente disfrutando de como quedaba la nalga marcada, su marido grababa mas o menos cerca, su body metido por toda su raja del culo, la solté, me senté cogiéndola del pelo hasta colocar sus nalgas entre mis dos piernas la inmovilice con ellas comencé a darle con mi mano, escuchaba como terminaba echando babas por su boca entre el bocado por el dolor, la solté cogí la crema hidratante se la extendi sobre sus nalgas por hoy estaban ya bien servidas, la puse a 4 patas me senté, tras coger un cigarrilo la deje descansar mientras yo fumaba, su marido la grabo desde distintos angulos como sus nalgas, cuando termine volvi a cogerla, volvi a colocarla sobre la pared inmovilizándola de nuevo ahora mirando hacia mi, le di varias bofetadas, le escupi varias veces, en la cara, comencé a coger las pinzas comencé por uno de sus pezones, es toda una perra experta, en sus ojos vi el miedo y el placer, se la coloque después la otra, sufria y gozaba por igual, comencé a colocar pesas le abrí el body por la parte del sexo se la subi quedando por su sintura como si fuera un ancho cinturón, comencé a colocar una pinza, aquí era menos experto pero si muy teorico busque el lugar idóneo, la pincé estudie su cara su farfulleo, al yo subir y mirarla esta perfecto pensé le coloque el otro, empezando con las pesas, se las coloque la solté le coloqué un collar una correa, la hice caminar con las pesas, como sufria y a su vez gozaba con su castigo, su marido atento a lo mas minimo, la tuve unos 6 u 10 minutos lo mas así hasta que comencé a quitarle todo, la inmovilicé esta vez en la pequeña mesa retirando lo que aun quedaba, la puse en el centro, atada a ella mirando hacia arriba, cogi la cera la encendí, comencé a depilar con maestria su pubis, sus gritos, el olor a vello quemado, la deje totalmente peladita, nada mas que le di cera ahí., cuando terminé le coloque la percha en las dos tetas comencé a presionar, ahí terminó la parte sadica, masoquista.
La deje libre de todo el body seguía como ancho cinturón la hice ir al baño a 4 patas cogida por la correa, le metí la cabeza en el wáter y allí la deje, dando un gran descanso a todo y que fuera asimilando ella lo vivido hasta esos momentos sabia que eso era unos grandes momentos de placer para el esclavo o esclavo solo consigo mismo, reviviendo cada momento anterior.
Salimos su marido y yo, nos volvimos a sentar en la cocina, empezaba a hacer calor, era verano, me sirvió una cerveza él otra y pedí su opinión, estaba muy satisfecho con lo hecho hasta el momento, me dijo que era experto que no se había equivocado, me habló de otros tanto buenos como malos que habían tenido, charlamos casi media hora, cuando le dije que no grabara pues lo próximo era que íbamos a salir él y yo, la llevé al dormitorio allí la inmovilice diciéndole que me iba con su marido, a tomar una copa después al volver pensaba follarmela.
Alli la dejé inmovilizada con los ojos vendados sobre la cama desnuda y fuimos a tomar una caña y una tapa su marido y yo, volvimos casi una hora después, comenzó el a grabar yo la hice ducharse, a ella tras desatarla y que volviera a 4 patas a la habitación, así lo hizo cuando llegó yo estaba desnudo soy un hombre dotado pero aun ho la tenia dura, la levante del pelo haciendo me la comiera, la hice colocarse de pie apoyada la cabeza sobre la cama me puse detrás comencé a meterle mi polla a sacársela entera una y otra vez, su marido al lado grabando, una y otra vez se lo hacia hasta qu la muy perra se corrió, cuando se corrió se la saqué y me sente en la cama ella de la misma postura me la comio, comencé a decirle que tenia un culo muy gordo que me la iba encular, la hice ponerse a 4 patas en la cama.
Estuve lubricándola largamente con mis dedos hasta que consegui meterle casi toda la mano en su culo, ella gritaba, con la otra le acariciaba yo el coño me puse a un lado su marido cogiendo buenos planos hasta que termine por seguir pues veía que la perra se iba a correr de un momento a otro como asi fue, pero nada mas correrse la agarre fuerte y la encule sin importarme nada de ella, comencé a darle como antes en su coño le sacaba toda volvia a metérsela toda, la muy puta estaba disfrutando a gusto pues le estaba dando con mis dedos en su coño a su vez, como imagin pronto volvió a correrse como una perra, yo tenia ganas de echarle ya una buena lechada, decidi que se pusiera tirada en la cama mirando hacia arriba le hice hacerme una paja con sus tetas, me corri en ellas y su garganta,
Cuando me corrí la mandé a la cocina a 4 patas se pusiera allí como una buena perra en un rincón y allí quedo, sentada.
La tarde tras la comida y estar los dos traquilos un buen rato, fue una tarde de humillaciones, finalmente estuve follandola tal como habíamos quedado su marido y yo esa noche hasta la madrugada, le di dos buenos polvos, me marché esa madrugada quería dejarlos disfrutar el domingo a los dos, volveria dos sabados después a darle una nueva sesión.
Esta fue mi primera vez con mi perra.
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