La primera vez fue el inicio de la adicción
Después de haber tenido mi primera cogida por un hombre (anterior relato) fue el inicio de algo que se volvería una adicción, que me den rico por el culo.
Había pasado una semana desde que me cogieran por primera vez, me dolía mucho el culito pero la experiencia de ser cogido era algo que me era muy difícil de olvidar, todos los días me masturbaba pensando en ese momento muy rico, ya sea cuando recién me despertaba o cuando me bañanaba me masturbaba imaginando qué más pudimos haber hecho ese día, pero como solo fue cosa de una vez el señor que me cogio tenia que buscar a alguien nuevo y eso hice.
De la misma manera que hice la última vez, lo estuve planeando por unos días hasta que llego el momento. De nuevo solo en casa, desnudo y platicando con el próximo qué me cogeria, esta vez era un chico de 28 años, moreno, una estatura de 1.70 y buena forma. Una vez le dije que ya estaba solo en casa me dijo que iba en camino, algunos minutos después escucho qué tocan la puerta, yo desnudo voy a recibirlo, apenas me ve entra rápido, cierro la puerta y es cuando empieza la acción.
Seguíamos en la entrada y el me estaba besando, yo dejándome solo gozaba mientras qué el besaba donde quería, mi boca, cuello y pecho, luego me dijo
Chico: Vamos a tu cama, ya quiero hacerte mio
Sin poder decir una palabra por lo caliente qué estaba lo guíe a mi cuarto, cierro la puerta, bajo la cortina y prendo el aire acondicionado, ya con la ambientación de estar un poco a oscuras y con el aire fresco pasando por mi cuerpo desnudo me acuesto mientras el se quitaba la ropa, una vez desnudo se acerca a mi y me empieza a chupar mi verga, esa era la primera vez que alguien me la chupaba y me sentí en la gloria, solo soltaba pequeños gemidos mientras me apretaba los pechos, después de un rato fue mi turno y yo se la empecé a chupar, ya extrañaba sentir una verga dentro de mi boca y me la metía todo lo que podía en mi boquita, ya una vez llena de mi salí a su verga es que íbamos por la cogida y así fue, me coloque boca arriba mientras el me alzaba las piernas, poco a poco empiezo a sentir su verga dentro mio y de a poco se empieza a mover hasta que alcanzamos un ritmo y lo que se escuchaba en el cuarto eran mis gemidos y los sonidos de como me cogian
Yo: Aaah qué rico, no pares, me encanta como me coges
Esas entre otras palabras salían de mi mientras me cogia en mi cama a la vez que el me chupaba los pecho, yo me sentía en el cielo y no quería que parara. Después de mucho tiempo el quizo cambiar de posición y me puso boca abajo, acostado en la cama siento como en esa posición me empieza a meter la verga y siento que me entra más profundo y gemia más, mientras qué me daba nalgadas y me besaba el cuello, creo que los vecinos abran pensado que se estaban cogiendo a una mujer pero realmente era un chico de 13 al qué se estaban cogiendo y lo estaba gozando como nunca y así fue como después de mucho tiempo que me estaban cogiendo duro en mi cama qué hasta la cama sonaba de tanto que me estuvieron cogiendo siento como su semen se descarga en mi culito.
Yo: Ay si papi, llename, quiero toda tu lechita adentro mio, dejame preñada.
Ese día hice mucho ruido y en el siguiente relato sabrán porque y las consecuencias de ello.
Espero que les haya gustado mucho, que se masturbaran rico y nos vemos en el próximo relato.
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