La primera vez que le chupé la polla a mi tío Javier. Mi yo de primaria
Yo a mis 10 años tenía a mi tío Javier, el hombres más cariñoso del mundo.
Advertencia: Quiero aclarar que todo esto es verdad, no culpo a nadie de lo sucedido aquí y solo quiero compartir mi experiencia con ustedes.
Buenas noches internet, me llamo Lolito y quiero compartir con ustedes la historia sexual de mi vida. Esta idea me surgió porque actualmente me estoy mudando me encontré mis diarios antiguos. Yo empecé a escribir estos diarios A LOS 10 AÑOS jajaja…
Cuando estaba en 5to de primaria nos dejaron una tarea sobre escribir una bitácora del crecimiento de una planta, a mi esto me encantó, siempre me encanto escribir. El caso es que un día vi que mi mama también escribía cosas en un cuaderno, su diario, así que yo decidí hacer lo mismo, escribir mi diario de TODAS mis experiencias. Voy a reescribir esos diarios a un lenguaje más atractivo y que ustedes puedan disfrutar y entender jeje.
Contexto: yo soy hijo único y siempre he vivido con mi madre y con mi tío Javier, mi padre murió cuando yo era muy pequeño, así que mi tío se encargó de ser mi figura paterna.
Yo he crecido en un entorno completamente gay, colegio primario solo de varones, colegio secundario solo de varones, siempre jugué futbol y todos mis amigos fueron varones, siempre rodeado de varones.
Mi madre trabajaba mucho y casi siempre llegaba tarde, es por ello que la persona que más se encargaba de mi era mi tío Javier.
Mi tío Javier es un señor de 50 y tantos años que siempre ha sido una persona maravillosa, siempre ha sido muy amable, muy atento y dedicado conmigo.
A día de hoy que tengo un poco más de edad caigo en que lo hacía para poder agasajarse con mis jugosas piernas. Este hombre siempre me ha dicho “Lolito, tienes las mejores piernas de todo el mundo” al principio cuando era medio inocente me decía eso, luego cuando estábamos en nuestra época indecente, yo ya muy experimentado, el me decía: “Lolito, tienes el culo más rico del mundo”.
En parte él también me impulsó a escribir este diario y mantenerlo en sumo secreto, así que la mitad del crédito de estos relatos le corresponden.
Sin más explicaciones aquí les contaré la primera vez que le chupe la verga a mi tío Javier, según mi diario de primaria.
Entrada 1: Le chupe el pene a mi tío Javier
Ocurrió un viernes, un muy mal día para mí. Habíamos tenido un partido contra el quinto C y nos habían dado una paliza, yo estaba muy triste por eso. Como siempre mi tío Javier fue a recogerme al colegio, caminamos a casa y pude contarle lo que había pasado y como me sentía, siempre lo hacía, siempre le contaba todo y él atentamente me oía, lo amaba mucho por eso. Mi tío me decía que siguiera esforzándome, que entrenando cada día con fuerza me volvería el mejor jugador del país, decía esto mientras me abrazaba con fuerza y me besaba en la mejilla, muy cerca de mis labios.
Cuando llegamos a casa fui a darme un duchazo, estaba completamente sudado por el partido de futbol. Cuando salí me dirigí a mi habitación para cambiarme, mi habitación era la única que no tenía puerta, pero no importaba porque en la casa solo vivíamos mi mamá, mi tío y yo.
Cuando me senté en mi cama para secar mi cuerpo vi a mi tío entrar a mi habitación, completamente desnudo y con una toalla en la espalda…
ACLARO que mi tío hacia esto desde hace mucho tiempo ya, cuando era más pequeño nos bañábamos juntos, el siempre me enjabonaba todo mi cuerpecito y yo siempre lo veía desnudo en la ducha o a veces cuando entraba a su habitación.
Mi tío me enjabonaba muy cuidadosamente las piernas, desde abajo, los pies, hasta llegar a mis nalguitas, desde pequeño me daba suaves masajitos en mi anito, la verdad se sentía muy rico
Esto lo hacíamos cuando mamá no estaba en casa, para nosotros era algo normal.
El punto es que mi tío había entrado para ver si ya me había bañado, grande fue su desilusión cuando vio que, si lo había hecho, sin él.
“Te hubieras esperado para que nos bañemos juntos” me dijo mi tío, yo le dije que no, que los adultos podemos bañarnos solos, yo siempre estuve obsesionado con ser un adulto.
Mientras me estaba secando el me dijo, “cómo están tus piernas, ¿no te habrás hecho daño?”, yo le dije que no, que estaba bien, pero él insistió en que mejor me daba un masaje para aliviar el dolor.
Mi tío siempre se preocupó por mis piernas, eran lo más importante de un futbolista después de todo y siempre me daba profundos masajes para aliviar el dolor, en esos momentos aprovechaba para tocarme el culo.
Entonces lo tenías a él sentado en la cama y a mi abierto de piernas frente a él recibiendo suaves apretones desde mis nalgas hasta mis pies, era increíble la escena. De vez en cuando sentía su enorme polla rozar mis nalguitas o mi pene también. La polla de mi tío Javier es enorme, tiene muy buena genética en ese aspecto.
“Espero que no le haya pasado nada a estas hermosas piernas, las piernas de mi pequeño campeón” dijo mi tío
“Estoy bien, gracias por el masaje tío Javier” le respondí sonriente
“de verdad no te perdono que te hayas bañado sin mi” dijo mi tío
“yo ya puedo bañarme solito, ya soy un adulto” le dije
“tu aun eres mi niñito hermoso” me dijo con una sonrisa, no me gustaba que me tratase así…
Estuvimos jugándonos así, mientras mi tío masajeaba mi cuerpo desnudo. Sentía como rosaba mi anito con sus dedos, se sentía rico en ese entonces, pero no se lo quería decir.
De un de repente mi Tío dijo algo que me interesó mucho:
“Aún eres mi niñito especial, quieres volverte un adulto”
El hombre vio el brillo de mis ojos, estaba emocionado, le sonreí y le dije que si quería.
Mi tío me dijo que los adultos se besan en la boca, oír esto me dio asquito, el insistía en ello, yo seguí negándome, pero él decía que quizá no estaba listo para ser un adulto después de todo.
Una vez más me tocó en el orgullo, así que le dije que si al final.
Mi tío me cargó y me llevó a su habitación, cerró la puerta y apagó las luces.
Nos sentamos en su cama, ambos desnudos, él me abrazaba y me acariciaba, susurrándome que tenía un lindo cuerpo, un lindo rostro, lo recuerdo bien.
Amo mucho ese aspecto de mi tío, es un romántico conmigo y me encanta
El hombre me dio mi primer beso, a mis 10 añitos, al principio me lo dio temeroso, un beso de labios.
Lo seguimos repitiendo una y otra vez, hasta que por fin el hombre entró en confianza y me metió la lengua hasta el fondo. Me devoró toda la boca.
Fue un beso muy especial para mí.
Luego de comerme la boca me dijo que ese era el primer paso, que para seguir teníamos que tener relaciones sexuales, eso hacen los adultos.
Me dio un beso más y me echó en la cama, nuevamente abierto de piernas estaba yo, completamente nervioso, les juro que no tenía ni idea de lo que se venía. Mi tío echó un poco de saliva en mi anito, esta vez me masajeó el agujero…
Dios…fue una sensación muy rara, sentí como su largo dedo entró en mi ano, dolió al principio
“Tio…que haces, duele…” le dije
“tranquilo Lolito, te estoy preparando, al principio duele, pero luego lo disfrutarás, ya veras mi niñito lindo” me dijo.
Sentí como su dedo recorría mi interior, pero no me había dado cuenta de que mi propio pene en ese momento se había puesto duro.
Mi tío se emocionó al ver esto y se metió mi pene a la boca, de una, lo chupó todo, sentí como su lengua caliente masajeaba la punta de mi penecito en ese momento.
Siguió tragándose mi pene hasta que nuevamente sentí algo extraño, un hormigueo recorriendo todo mi cuerpo que culminó en una gran calentura en mi polla, sentí como algo salía de mi pene, como una sensación de orinar casi. Fue mi primera eyaculación…y mi tío se lo había comido todo.
“te he chupado el pene mi angelito, ¿Te gustó?” me dijo
“se sintió raro” le comenté
“esto hacemos los adultos todo el tiempo, ahora que te vas a volver un adulto, es hora de que lo hagas tú también” me dijo
Yo estaba en shock, pero una vez más me besó y me dijo que todo estaría bien. Me sentó en la cama, acaricio mis tetitas, mi abdomen y muslitos y se paró en frente de mi.
Fue la primera vez en toda mi vida que vi su enorme polla BIEN DURA…era un tronco enorme que tenia una gotita en la punta.
Me dijo que abriera la boquita, obedecí y el hombre gentilmente metió su polla en mi boca.
Cogio mi cabeza y me la folló, tenia un sabor salado, no pensaba mucho en ello, estaba en un trance casi hipnótico, yo solo seguía chupando ese enorme tronco.
La velocidad aumentó, yo seguí chupando tanto como pude.
Cerré los ojos, sentí que la cosa en mi boca se hinchaba, no entendía que estaba pasando.
“Así es como se hace mi niñito hermoso, poco a poco yo te volveré todo un hombrecito” me dijo mi tío mientras jadeaba…
El hombre siguió follando mi boquita hasta que lo oí gemir fuertemente.
¿Qué era esto? sentí como un líquido bien caliente entró en mi boquita.
Mi tío sacó su pollón y me dijo que me tragué su lechita, yo estaba confundido, tardé en entenderlo e hice lo que pude para pasarme ese liquito viscoso
“saca la lengua” me dijo
Yo lo hice y me felicitó, me acarició la cabeza y me dio un besito en la frente.
Mi tío me acarició los muslos, ya llegaba la hora…
Pero lastimosamente no pudo ser en ese momento, oímos como sonaba la puerta, mi mama había llegado
Me llevó a mi cuarto y me dijo que me cambiara, que no comentara nada de lo que había pasado, sería nuestro secretito
Yo obedecí…
Gracias por leer mi relato, espero que te haya gustado mi primera vez chupándosela a mi tío y espero que te gusten mis próximas historias
Si deseas compartir conmigo no dudes en escribirme. Un besito.
Espero pronto cuentes la continuación, que se oye excelente esta historia.
gran relato como sigue amigo
Buen relato
Como sigue?