La ventana del señor
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Fabio4.
Hace mucho tiempo cuando tenía como 25 años, iba camino a la azotea a lavar mi ropa, en las escaleras están las ventanas de los vecinos, cuando en la última, mire que tenia las cortinas abiertas, no es raro, pero sin querer mire dentro y quedé sorprendido al ver al vecino, un señor como de 45 años, casi güero, desnudo, acostado en su cama jalándose la verga, y que verga!! me quedé pasmado y mirándolo como 3 segundos y luego reanude mi camino, no quería que me viera, y antes de subir la siguiente escalera y perder de vista la ventana, el señor volteó y me vio, solo medio segundo pero me vio.
sentí que me puse rojo pero subí a lavar mi ropa, una vez que termine, me daba pena bajar, no quería que me viera, así que me asomé y vi la cortina abierta pero no estaba ya él, así que me apresuré a bajar y no lo vi, al llegar a mi casa el corazón me latía fuerte y rápido, me daba pena encontrármelo en el edificio, sin embargo me puso cachondo lo que vi, el es muy alto, como de 190 m.
siempre anda en bicicleta por lo que tiene un cuerpo muy bien formado, con músculos marcados, velludo y muy bien parecido, tiene una esposa chaparrita, blanca, con un cuerpazo que siempre me ha gustado y un par de veces me ha atrapado mirándole el culo y solo sonríe.
como es muy deportista, el siempre anda en shorts mostrando sus gruesas piernas velludas y ya algunas veces le había mirado discretamente el bulto que se notaba bastante por lo delgado de sus shorts de ciclista, pero esta vez se lo vi en todo su esplendor y me dejó perplejo.
no se que me pasó pero busque algo mas para lavar y volví a subir, la ventana estaba ahora cerrada y me desilusioné un poco y de todos modos subí a lavar mi ropa, al bajar la ventana seguía cerrada, y justo cuando iba pasando por la puerta, esta se abrió de golpe y ahí estaba el señor de pie, con playera y shorts donde se podía apreciar su gran verga a medio parar, iba descalzo y me miró a los ojos con una media sonrisa, yo me quedé quieto por la sorpresa, no sabía que hacer
– hola vecino – me dijo tranquilamente
– ho-hola.
– dije muy nervioso
– hace calor, quieres un vaso con agua? – supe que la pregunta era solo un pretexto, y aventurándome con los nervios de punta, acepté, me dijo que pasara y cerró la puerta en cuanto entré, me dijo que tomara asiento en lo que él iba servir el agua, así que me senté y lo espere, en menos de 10 segundos ya me estaba dando el vaso con agua y se sentó en un sillón frente al mío
– lavando ropa eh?
– si claro, hay que aprovechar el calor que hace
– jajajaja bueno tú ya me viste como lo aprovecho
– eeeeerrr.
no se a que se refiere
– aaah claro que sabes, la ventana estaba abierta – me dijo con una gran sonrisa al tiempo que abría ligeramente sus piernas, dejándome ver que no traía calzoncillos debajo del short y pude verle en todo su esplendor sus huevos y su verga que descansaba del lado, inmediatamente cerró sus velludos muslos sonriendo de nuevo
– creo que me está confundiendo
– no te estoy confundiendo, vi que te quedaste parado en la ventana mirando, y háblame de tu
– es que me sorprendió ver eso
-qué cosa?
– pues la ventana abierta y tu masturbandote como si nada
– te molestó?
– no, para nada, solo me sorprendió
– Y te gustó lo que viste?
– pueeeesss.
esteeeee, no.
– yo creo que si te gusto, sino porque estas aquí sentado?
me atrapó, no sabía qué decir, entonces se levantó y caminó y se quedó parado enfrente de mi, una gran carpa se levantaba en sus shorts verdes justo enfrente de mi cara, yo no podía quitar mis ojos del gran bulto y clarito vi como le empezó a crecer más debajo de sus shorts, alce la mirada y el sonreía, entonces sin dejar de mirarlo a los ojos, nervioso y tembloroso, con las manos tome los bordes de su short y se lo deslice hacia abajo, su verga apareció como resorte y me golpeó en la barbilla, el sonrío todavía más, mire hacia abajo y me encontré con una verga como de 20 cm, blanca y gruesa, con vellos güeros muy finos y abundantes, no me resistí y la tomé por la base llevándomela a la boca de inmediato, su cabeza como de hongo traspaso mis labios y mi lengua la recibió gustosa, tenía un sabor increíble, y mientras con una mano le acariciaba los huevos mi otra mano subía y bajaba y mientras entraba una y otra vez su vergota en mi boca, luego subí mis manos Y le acaricie Su velludo y marcado abdomen, el se quitó la playera y entonces lo vi completamente desnudo, musculoso, velludo, macho! me calentó tanto verlo así, que empecé a mamarsela más fuerte y profundo, no sé cómo le hice, pero me metí toda su vergota hasta el fondo, sólo sus huevos quedaron fuera, podía sentir la punta de su macana hasta fondo de mi garganta, gimió largo y profundo, con las manos me tomó de la cabeza y comenzó a cogerme por la boca, me metía su enorme pito una y otra vez hasta el fondo haciéndome tener arcadas llenas de saliva, la misma que le escupí de nuevo sobre su verga, mi mano resbalaba de arriba a abajo a lo largo de su gran palo, mientras me dediqué a chuparle los huevos y mirarlo directamente a los ojos, de repente se dio la vuelta y se metió a la recámara dejándome sentado en el sillón con la cara llena de sus jugos y confundido, en 10 segundos salió, su miembro se balanceaba de un lado a otro, y en la mano traía una tanga blanca, me la dio y me dijo:
– póntela putita
– como?
– te hagas, sé que te gusta
ya estaba muy caliente así que me levanté y me desvestí completamente, el seguía mis movimientos de cerca explorando mi cuerpo
– y además te rasuras! se ve rico – me dijo señalando mi pene, pues llevaba depilado el pubis, entonces me puse la tanga que me quedaban muy ceñida
– es de tu esposa?
– jajajaja, si, te queda bien, date Vuelta, uffff, que ricas nalgas tienes,! – me dio un par de nalgadas y se arrodilló y comenzó a lamerme las nalgas mientras con una mano me apretaba el bulto que parecía que iba a reventar la tanga, me las apretaba y me las mordía, a mi me dio mucho morbo traer la tanga de su mujer, la cual por cierto me encantaba
– no creo que se me vea mejor que a tu mujer
– es diferente – entonces me metió la lengua en el culoooo!! sentí que se me doblaban las piernas, me saco la verga de la tanga y comenzó a masturbarme al tiempo que también me metió un dedo en mi culo, me puse súper caliente y movía las nalgas para que me entrara más su grueso dedo, luego me empino en el sillón y me hizo la tanga a un lado para meterme esta vez dos de sus dedos mientras con la otra mano me jalaba mi verga de arriba abajo, yo gemía de placer y quería más, estire mi mano y le agarré su gruesa macana y comencé a masturbarlo, y de pronto, sentí un potente orgasmo que me hizo gemir como puta, pero de mi verga nada salió, tuve un orgasmo anal y fue deliciosoooo!!!
después con sus fuertes manos me dio la vuelta y me separo las piernas haciéndome la tanga a un lado, mi verga estaba durísima y descansaba en mi estómago mientras él le daba unos cuantos jalones a su gruesa verga y me preparé para lo que venía, ni siquiera me acordé de un condón cuando sentí su glande hacer presión sobre mi ano y sentí delicioso, y cuando la cabeza entro por completo sentí un dolor super ricoooo!!! dolía muy cabrón pero quería más, no me pude contener y gemía como loco ( o loca jajajaja)
– tú estás sano, verdad?
– me crees si te digo que si?
– jajaja bueno
– y tu?
– también, solo cojo con mi mujer y los dos estamos sanos
– entonces métemela todaaa – le grité, Y al instante me la dejo ir hasta el fondo, sólo sentí cuando sus velludos huevos chocaron con mis nalgas, me dolió un chingo! le dije que se quedara quieto por que me dolía, pero después de un rato el dolor se convirtió en un placer enorme!! y gemí largo y fuerte, me sentí lleno y muy caliente
– cogeme cabrón cogemeeeee!!
– que rica putitaaaaa
– siiii soy tu putaaaa cogemeeeee
mientras me bombeaba, comenzó a masturbarme, sentía riquísimooo mientras me abría el culo con su grueso fierro, yo ya estaba sudando y quería mas, así que lo acosté y me puse a mamarle su verga, se la escupí y le chupe sus bolas, luego me le subí y lo monté, me fui sentando poco a poco hasta metérmela toda, me di unos sentones bien ricos en su vergota mientras mi verga bien parada resorteaba al ritmo de la montada que le estaba dando a ese delicioso macho, el agarró mi verga y me la pajeó al ritmo de los sentones que me daba, luego me di la vuelta y volví a montarlo, dejando mis nalgas a su disposición, me las apretaba y nalgueaba y yo me sentía de lo mas zorra brincando sobre su tieso mástil que me entraba hasta el estómago
– así te coges a tu mujer? – le dije mirándolo a los ojos
– mas o menos – me respondió con una sonrisa – te he visto mirándole las nalgas, te gustan las mujeres?
– clarooo!! me encantan sus nalgas!!
– qué lástima, ella solo coge conmigo, y no sabe que me gustan los nenes como tu, así que te pido discreción
– no te apures, yo no digo nada
luego me puso en cuatro y me chupo el culo a conciencia, me metió sus gruesos dedos y luego poco a poco me fue metiendo sus 20 cms de carne hasta el fondo, en esa posición se sentía deliciosoooo!! me daba nalgadas mientras su vergota entraba y salía de mi apretado ano
– si si si si asííííí.
!!!
– eso putitaaaaa, cómetela toda!! qué rico culito!!
– también le das por el culo a tu mujer?
– no se deja, dice que la tengo muy grande
– no sabe lo que se pierde!! que rica vergaaaa!!
luego me dio la vuelta y se puso mis piernas en sus hombros y me penetro de una estocada hasta el fondo, hasta estrellas vi!! qué vergaaaa!! la imagen del señor desnudo, velludo y escurriendo sudor montándome fue demasiado, comencé a venirme sin tocarme, chorros y chorros de semen salían de mi verga y le salpique su velludo abdomen y el mío, con eso se calentó tanto que me la sacó y la empuñó y con un par de jalones, de su gruesa verga empezaron a salir varios disparos de su caliente semen que me cayeron en el pecho, estómago y verga, parecía que se estaba orinando!! me dejó todo batido y de lo caliente que seguía, me embarré toda su leche en mi, mi semen y el suyo se mezclaron y no resistí la tentación de llevarme un par de dedos a la boca, sabía delicioso!! el resoplaba recuperando el aliento y se acostó a mi lado, yo me levanté y le limpie su verga con la boca
– la próxima vez te quiero con liguero y medias putita
– solo que sean de tu mujer por que yo no tengo jajajaja
– si, ahí tiene algo de eso jejeje
me despedí acariciandole la verga y el me dio una nalgada, me salí de su casa con las piernas temblando pero feliz, pensando en la próxima vez.
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