La vez que me cogio mi mejor amigo
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Psicobear91.
Hola he pasado muy gratos momentos leyendo muchos de los relatos de esta página y el día de hoy he decidido relatar una de las historias que recuerdo con mucho orgullo.
Por motivos de privacidad cambiare mi nombre real siendo Dante el protagonista que recree esta historia que me ha marcado.
Soy Dante tengo 25 años, mido 1.63 cm, peso 90 kilos, gordito, uso lentes desde los 10 años, piel morena clara, realizó ejercicio todo los días por lo que estoy piernudo, también tengo un trasero gordito, que me han dicho es uno de mis principales atributos físicos, el típico gordito, descubrí mi sexualidad a muy temprana edad y eso me ha dado pie a vivir muchas aventuras.
La historia que les quiero contar sucedió hace un año con el que es mi mejor amigo, se llama Mario, tiene 30 años, Piel morena clara, mide 1,68 y pesa como 85 kilos, usa lentes, los lentes en particular es un atractivo que me puede matar en un hombre.
Nos conocemos desde hace dos años, somos buenos amigos y hemos platicado de nuestras vivencias sexuales y personales, conocido a nuestras parejas, solo hemos tenido sexo en la ocasión que les contaré a continuación.
Era un lunes por la tarde, como todos los días, yo platicaba con Mario acerca de un sin número de cosas, en este momento, tenía meses desde que Había tronado con mi última pareja y me la pasaba el mayor de los tiempos navegando atreves de los diferentes sitios pornos buscando bajarme la calentura típica de mi edad.
Mario me estaba contando de un proyecto personal que traía entre manos y me pregunta que haríamos este fin de semana, cómo era costumbre, cada sábado íbamos al cine y a comer.
M: que se te antoja hacer wey?
D: no se, la verdad no está ninguna película buena en el cine, igual vamos a comer.
Pensé que había acordado la reunión por lo que puse play a un video donde un gordito era penetrado por otro gordito y en un momento estando entre la calentura y la fantasía, me imaginé a mi mejor amigo penetrandome y haciéndome gemir de placer, este pensamiento hizo que me metiera dos dedos en mi ano, llegando a venirme manchando un poco mi panza y un poco el pelo que tengo en el pecho.
Me sentí un poco culpable al pensar en mi mejor amigo como un objeto sexual, ya que nunca habíamos pensando en tener un contacto sexual.
Ya más repuesto del orgasmo ocasionado pero aún caliente por la idea de poder ser cogido por mi mejor amigo, tome la decisión de hacerle una propuesta, con la certeza de que rechazaría.
D: oye ya se que hacemos el sábado
M: a donde quieres ir?
D: pues, tú y yo no tenemos novios y la verdad estaba pensando que si vamos a coger un rato, si no quieres no hay problemas y tan amigos como siempre.
Aparecían los típicos tres puntitos de la conversación, situación que me sorprendió porque nunca pensé que el pudiera considerar mi ofrecimiento.
Después de 2 minutos me aparece una respuesta que me dejo helado
M: wey, te considero mi mejor amigo, pero si he cogido con mis amigos y la neta hace rato que no me cojo un culo como el tuyo.
D: ok, igual y vamos a comer y al hotel.
M: bien, wey vamos michas, solo tú compras los condones porque no tengo.
D: no te apures aquí tengo, espero y no te queden grande.
Jajaja.
M: cabron, me van a quedar chicos, jajaja.
Seguimos platicando y bromeando de otros temas y no volvimos a hablar de nuestra cita.
Esa semana, me masturbaba diario pensando en cómo tendría el pene mi amigo, ya que en el tiempo de conocernos nunca habíamos hecho mención del tamaño, también en la semana compre un lubricante, ya que soy un poco estrechó y quería estar listo para recibir el miembro de mi amigo completamente.
Llego el sábado a la hora acordada, mencionó que somos de Guadalajara, nos vimos en la plaza universidad y platicamos acerca de nuestras actividades de la semana.
Íbamos caminando hasta llegar al hotel.
M: De verdad quiere que te coja?
D: La verdad si.
traigo condones y lubricante.
M: Bueno wey, pero me gusta hacerlo rudo.
Entramos al cuarto de hotel y empezamos a desvestirnos, por primera vez puede ver el miembro en estado flácido de mi amigo, 12 cm aproximadamente y sin circuncicion.
Me quede hipnotizado por ese pito que deseaba ser mamado.
Acerque mi boca a ese pedazo de carne que palpitaba deseando disfrutar de mi boca, tenía un sabor salado y un olor penetrante que hizo que mi verga se erectara al momento.
M: Que rico! Sigue! Ahh! La voz de mi mejor amigo se entre cortaba por los gemidos que inundaban la habitación combinados con los sonidos ocasionados al succionar ese miembro Moreno, llenándole de saliva cada centímetro.
M: No mames, que rico la chupas cabron! Yo chupaba con más fuerza esa verga que me tenía como perro en celo, también lengüeteaba los huevos peludos, después subí buscando su boca y me puso un alto.
M: Cabron, yo no beso, solo cojo.
D: Cojeme ya!
M: Te la voy a dejar ir toda, voltea
El se levanta para ponerse el condon, le tomó el condon de la mano, lo abro y se lo empiezo a poner con la mano, luego vuelvo a chuparle el pito con el condon puesto.
Yo estoy deseando que me penetre con esa reata y me parta en dos.
M: ponte en cuatro puto!
Me pongo en cuatro como perro obediente levanto mi culo para que pueda ver perfectamente mis dos pedazos de carne.
Siento una nalgada fuerte en mi nalga derecha, que queda marcada al contacto con la palma de la mano de Mario.
D: ahh!
M: Te dije que me gustaba rudo cabron y ahora te la dejaré ir toda.
Levantó más mis dos nalgas y las abro ligeramente para que vea mi hoyito rosado, apretado, palpitante de macho.
D: Te gusta?
No escucho una respuesta, solo siento como la punta de la verga busca alojarse entre mis glúteos, siento un pequeño empujón y mi ano se cierra al sentir la cabeza tratando de atravesar la entrada.
D: Me duele! Ponte lubricante
M: No cabron te la dejaré ir toda para que te acuerdes de mí
Siento una nalgada que me hace soltar nuevamente un grito de dolor y placer, ese momento Mario toma la oportunidad y logra meter la cabeza dentro de mi hoyito, siento dolor y le pido que la saque pero no le importa, solo desea perforar con su verga.
Logró sentir cada centrimetro de su miembro en mi adolorido recto, se detiene para que mi culo se acostumbre a su pedazo de carne.
Pasan unos minutos y cuando él siente que mi culo se ha amoldado a su reata empieza a moverse, empiezo a gemir nuevamente pero ahora de placer, siento una descarga eléctrica en todo mi cuerpo, deseo que esa verga este dentro de mi por siempre, gimo más, mucho mas, cuando siento como Mario me pone una mano en la boca para callar mis gritos de placer.
M: Callate cabron! Se nota que te gusta mi verga!
Me quita la mano y la pone sobre mis nalgas, buscando impulso, yo solo siento cuando la saca toda dentro de mi para volverla a meter sacando gritos de mi parte, el cuarto huele a sexo, esa combinación deliciosa entre cuerpos sudados, saliva, látex y precum.
Durante ese tiempo, nos entregamos al placer, no nos importaba ser amigos, en ese instante el era mi macho y yo ese facilitador de placer mediante mi hoyito estrecho.
Nalgadas, gemidos, gritos inundaban la habitación, entregados al placer de dos hombres que buscan complacer el deseo de sexo.
M: Me voy a venir!
D: Dámelo en la boca, quiero probar tus mecos! Dame tu lechita!
Saco su miembro de una vez dejando a mi Agüero abierto y palpitante, puso su pito en mi boca y lo empece a mamar como becerro, lamiendo cada parte de su pito, solo escucho entre gemidos que se va a venir y siento su néctar caliente cayendo en mi boca, garganta, aun sentí deslizar sus mecos saliendo por las comisuras de mis labios.
Me trague hasta la ultima gota, limpiándome los restos de semen de mi rostro, mis labios y bigotes están manchados de blanco.
M: wow que rico estuvo!
D: y tú qué no querías jajaja.
Terminamos de vestirnos, saliendo de ese lugar que fue testigo de cómo mi mejor amigo se convirtió en una de las mejores cogidas que he tenido.
Ha pasado el tiempo y aunque nunca hemos vuelto a hablar acerca del tema y seguimos viéndonos constantemente, aún recuerdo ese sábado que me penetro salvajemente
Eso es todo, espero les haya gustado y cualquier comentario estoy a su disposición.
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