La vida de Nicolás 24: fiestas navideñas parte 1
ropa nueva, humillación en publico y mucho sexo, es lo que nos espera en estas fiestas de diciembre, acompaña al pequeño Nicolás en sus aventuras .
Junto con diciembre llegaron sus fiestas, un fin de semana antes de la posada del club, fuimos a comprar ropa nueva para nicolás y para mí, nos fuimos temprano el domingo al centro comercial, para comprarle unos calzoncillos con diseños navideños.
Vamos hijo, ya nos tenemos que ir. – le grite a Nicolás para que se apurar en vestirse.
Ya voy. – me grito desde su habitación.
Le dije que se pusiera ropa cómoda y fácil de quitar porque nos íbamos a probar mucha ropa, ambos íbamos con un pants deportivo y camisas holgadas, una vez llegamos nos dirigimos a la tienda de ropa infantil, buscamos pantalones blancos y unas camisas que hicieran juego, después de unas horas, le compré 2 pantalones blancos, de tela no muy gruesa y 2 camiseta con estampado navideño y una camisa blanca con un chaleco rojo.
Antes de ir a comprar su nueva ropa interior pasamos a compara la ropa que yo ocupaba, al igual que el también me compre un pantalón blanco, pero de mezclilla gruesa y unas camisas.
Muy bien hijo, ve a buscar 3 calzoncillos navideños en lo que yo voy por tus suspensorios nuevos, porque los que tienes te quedan chicos. – lo mandé a la sección navideña y me dirigí al área deportiva.
Buenas tardes, señor, le puedo ayudar en algo. – se me acerco un joven de unos 23 años, que ayuda en la tienda.
Hola, si por favor, estoy buscando suspensorios infantiles. – le comento mientras busco entre los aparadores.
Muy bien, ¿Qué deporte practica su hijo?
Por el momento ninguno, son por comodidad. – al momento que le dijo eso le giño un ojo, para ver si entiende de que hablo.
Hooooo, en ese caso, creo que la mercancía que busca no está exactamente en esta área. – me contesta con un giño él también.
Antes de ir a la bodega, escojo un suspensorio color azul celeste, y le hablo a Nicolás para que se acerque con nosotros, ya que iba a cerrar la puerta momentáneamente para poder ir a la bodega, cuando llega trae un paquete de calzoncillos, se notaba que estaba nervioso como no queriendo que vea el paquete.
Haber nico, déjame ver si escogiste la talla correcta. – le pedí el paquete para ver que compro.
Si, son la talla correcta, ya vámonos, creo que vi a un compañero. – era obvio que no quería que lo viera.
Señor, ya vamos por lo que busca. – se acerca el muchacho para decirnos que lo sigamos.
Pasamos a la bodega trasera, nicolás iba en medio de nosotros, con su paquete de calzones bien agarrado, era obvio que estaba ocultando algo, cuando llegamos el joven, saco unos paquetes de una caja y los coloco sobre una mesa, si bien eran calzoncillos del tamaño de un niño tenían diseños muy diferentes a lo habitual.
Estos son los modelos base, lo tenemos en diferentes colores. – nos hace la indicación que nos podemos acercar ver.
Papi, estos calzones están un poco raros. – dejo el paquete en la mesa para poder agarrar uno de la muestra.
Aja lo sabía, tenemos un trato, nada de bóxer hasta los 15 años, así que ahorita yo voy a escogerte unas trusas. – le pase el paquete al joven para que se lo llevara.
Pero… hasta ivan usa bóxer ¿Por qué yo no puedo? – me reclamo.
Porque es tradición familiar y también porque hicimos una apuesta. – le explique brevemente.
Sacamos varios modelos del empaque, al final me gustaron 2 modelos, uno era como una trusa común, pero esta estaba totalmente libre desde el pene hasta el ano, parecía un puente, la otra no estaba tan convencido, era como un suspensorio común, pero era como una bolsita con la forma del pene y los testículos.
Disculpa, se puede medir este, es que no estoy seguro si se le vea bien. – le pregunte al joven
Si claro, pero aquí no hay vestidores. – me contesta con una sonrisa pícara.
No es problema, aquí se lo va a probar, vamos hijo, quítate el pantalón. – le pase el suspensorio
Que, claro que no, no quiero que me vea desnudo, mejor me lo pruebo en la casa. – se agarró el pantalón y su cara de puso roja de los nervios.
Claro que no, estos calzones son caros y pienso comprarlos si no te quedan bien.
Sabia que no lo iba hacer por iniciativa propio, así que me acerque a él y con un poco de fuerza le empecé a bajar el pants, nicolás lloraba y me rogaba que por favor no lo obligara a hacer eso, le baje el pantalón hasta la rodilla dejando a la vista su trusa con estampado de Superman, le pedí que se terminara de quitar todo, con vergüenza nos dio la espalda y se quitó, los zapatos, el pants y su calzón, se bajo la camisa lo más que pudo, para que no le viéramos su pene y nalgas.
Pero que bonito hijo tiene señor. – comente el joven mientras se sobaba su pene erecto sobre el pantalón.
Gracias, pero lo que tiene de lindo lo tiene de desobediente, toma hijo, póntelo, quiero ver cómo te queda. – le paso el suspensorio
Lo agarra y en un movimiento rápido se lo pone, le quedaba bien, se amoldaba a la forma exacta de sus genitales y el color blanco de la tele resaltaba con el color azul de los elásticos, le pedí al joven que los fuera cobrando y a Nicolás que se pusiera el pantalón, que se iba a llevar puesto ese modelo, cuando salimos de la bodega fui a buscar un nuevo paquete de calzoncillos navideños, escogí uno con 3 diseños diferentes, uno era blanco con muñecos de nieves, uno rojo con la cara de santa Claus y una café con estampados de Rodolfo el reno.
Una vez que pague todo, el joven me dio su número telefónico personal, por si llegaba ocupar algo y me comento que él tenía un amigo que era el que hacía todo tipo de diseños en ropa interior por si me interesaba, le agradecí y nos fuimos de la tienda, me di cuenta de que nicolás caminaba un poco raro.
¿Qué tienes hijo, te molesta algo?
Si, la tela que pasa por el medio de mis nalgas, me incomoda al caminar. – se trataba de jalar la tela, pero no podía, ya que era una tela muy delgada y fina.
Pues si quieres vamos al baño, para que te la quites y te vas sin trusas a comer. – le pase la mano rápidamente por el pene, y note como se le paro rápidamente.
Papá, no hagas eso, nos pueden ver. – se tapó rápido
No muy convencido se quedó con el suspensorio puesto y nos fuimos a comer pizzas, después de eso nos fuimos a la casa y no hubo novedad hasta el día de la fiesta navideña en el club, donde teníamos que ir con el pantalón blanco.
Después de llagar de la escuela, nicolás estaba ansioso por ir a la fiesta navideña del club, le dije que se pusiera la ropa nueva, incluido los calzones navideños que le compré, pero sin que el se diera cuenta le escondí el calzoncillo blanco, entonces solo tenia dos opciones el rojo con la cara de santa Claus o el café con Rodolfo el reno, antes de llegar la hora, quería disfrutar de un momento agradable con nicolás y ver si se animaba a irse con algo metido dentro.
Nico, ven vamos a bañarnos en mi cuarto. – le hable para que viniera a mi habitación, donde ya lo esperaba desnudo.
Papáaaaa, no encuentro mi calzón blanco de los nuevos que me compraste. – me grita mientras entra a mi habitación vistiendo solo una trusa blanca.
No te preocupes, ahorita la buscamos y si no te pones una de las otras.
Me acerque a él y lo levante en brazos, coloco sus piernas alrededor de mi cadera, quedando cara a cara, así que empecé con darle unos besos en el cuello para ir calentando el momento, como iba subiendo pude sentir como su pequeño pene infantil se iba poniendo cada vez más duro en sus calzoncillos, al entrar al baño lo baje para que se pudiera quitar su prenda intima y poder meternos en la bañera, era todo un gusto y excitación ver su pequeño y blanco cuerpo luciendo su pene de 11 cm con la cantidad de prepucio adecuada, me metí primero a la bañera para que él se pudiera sentar sobre mí.
Mmmm hijo, hace mucho que no nos bañábamos juntos. – lo acomode para que mi pene quedara en sus nalgas, pero sin penetrarlo.
Yase papi, a mi me encanta pasar tiempo contigo de esta manera. – pasaba mis manos por su pecho jugando con sus tetillas y bajando para agarrar su pene.
Sin dejar de lado que nos estábamos bañando, le empecé a pasar el jabón corporal para ir aprovechando el momento, delicadamente le fui metiendo un dedo en su ano, y por instinto soltó un leve gemido mientras intentaba separar las piernas lo mejor que podía, una vez que terminamos de lavar nuestros cuerpos, nos paramos para poder lavar nuestro cabello, así que lo volví a cargar.
Mmmmm espera mmmmm. – me decía al sentir como mi pene iba entrando por su culito.
Mmmm si solo un poco más hijo, mmmm si. – sentir como sus esfínteres aprietan mi pene era como el paraíso.
Una vez logre meterle mis 20 cm, lo deje quieto para que se acostumbrara a la posición, tenia los cachetes rojos por la sangre que acumulada por la excitación, lo recargue contra la pared para tener mejor firmeza, y lo empecé a penetrar lentamente.
Hijo, ve poniendo el shampoo, o se nos va a hacer tarde. – movía mis caderas de tal manera que no se fuera a caer mientras lo sujetaba de sus pequeñas nalgas.
Mmmm si, ya voy haaaaa . – le había pasado la cabeza del pene por su próstata.
Empezó a tallar mi pelo mientras yo lo sostenía firmemente y de vez en cuando trata de acelerar las embestidas, pero cuando lo hacia dejaba de lavar mi pelo, así que deje que terminara de hacerlo y así poder terminar su cogida en la cama.
Mmmmm listo papi, ya terminé, ya me puedes bajar. – me pidió mientras relajo su cuerpo haciendo que pesara un poco más.
No no, espérate haaa. – cuando se relajo hizo que mi pene se doblara.
Perdón papi, pensé que ya habías terminado. – se volvió agarrar como antes.
Agarre una toalla y nos enrolle en ella, nos íbamos secando mientras llegamos a mi cama, deje caer a Nicolás en la cama dejando ver su cuerpo brillar por la humedad, su pene semi erecto por susto de hace un momento, pero su culito se veía abierto, así que sostuve sus piernas y se la deje de ir de una sola y hasta el fondo.
Haaaaa, mas lento papi. – puso sus manos como para evitar que se la metiera más profundo.
Pero si ya estas abierto, no pasa nada.
Empecé a con una penetración rápida y profunda, Nicolás solo gemía con cada estocada que le daba, me encaba esta posición porque deja ver todo su puerto y gestos mientras me lo cojo, empecé a masturbarlo mientras colocaba sus piernas en mis hombros y bajé para besarlo.
Su cuerpo se estremeció al sentir mi mano juagar con sus testículos que ya estaban pegados al cuerpo, lo que indicaba que estaba a punto de llegar al orgasmo, aproveche esas señales para jugar con su cuerpo, mientras le daba un rico beso en la boca, con una mano subía y bajaba su prepucio y con la otra jugaba con sus tetillas, las apretaba y estiraba.
Mmmm yaaa papi mmmm. – todo su cuerpo se tenso indicando que estaba teniendo un orgasmo.
Hooooo si hijo, así aprieta tu culo siiiiiii. – sentir como su interior se contraía apretando mi pene hizo que tuviera una gran eyaculación, solté como 5 chorros dentro de él.
Haaaa, haaa, que bien se siente tu leche dentro de mí. – se sobo el vientre conde decía que se sentía caliente por mi semen.
Ya sabes que es todo tuyo hijo. – le di un ultimo beso y me salí de él.
Rápidamente nos quitamos el aroma a sexo y el a liberar el semen que le deje adentro, nos apuramos a cambiarnos para irnos a la fiesta del club, me puse la ropa que me compre ayer, pantalón blanco, con una camisa blanca igual, pero con un chaleco verde, fui a ver como iba nicolás y al entrar a su habitación, lo encuentro todavía desnudo.
Hijo, pero que paso, ¿Por qué sigues desnudo? Acaso quieres un segundo round. – lo mire mientras apretaba mi pene sobre mi pantalón.
Nooo, es que en verdad no encuentro el calzón blanco que me compraste ayer. – aunque no me molestaba ver su cuerpo desnudo, se nos estaba haciendo tarde.
Lo voy a buscar abajo, tu sigue buscando aquí y si no lo encuentras para cuando suba, te pones uno de los otros dos.
Si está bien.
Baje las escaleras, solo para fingir que lo buscaba, ya que yo lo había guardado en mi habitación desde ayer, fui al cuarto de juegos y agarre un vibrador en forma de bala inalámbrico, para jugar con él un momento antes de irnos, cuando regreso lo veo inclinado con las nalgas al aire, dejando ver su ano un poco abierto y rojizo por la cogida previa, el vibrador ya tenía lubricante así que aproveche la posición y se lo metí en un solo movimiento.
Haaaaa. – salto del susto y se llevo las manos a sus nalgas. – no papá, sácamelo. – ya sabia que era, pues no era la primera vez que lo usaba.
Solo un momento, en lo que te terminas de cambiar. – lo prendí en potencia media y su cuerpo reacciono al instante.
Se doblo al sentir las vibraciones en su recto y su pene se volvió a poner duro, con algo de incomodidad se levanto y camino hasta su cajón, saco la trusa roja que tenia la cara de santa Claus a lo largo de las nalgas y un pino navideño en la parte donde va el pene, el color resaltaba con su piel, se puso la camisa roja que le compre y por ultimo se iba a poner el pantalón.
Ya papi, solo sácame el vibrador y estoy listo. – tenía el pantalón en los tobillos y se bajo la trusa dejando ver, un pequeño cordón que salía de su ano.
No todavía no, te lo vas a llevar puesto, por haberme lastimado hace un momento, en el club te lo saco. – le subí el calzón y le di una fuerte nalgada.
Aush, no papá ya te conozco, no me los vas a sacar y me vas a hacer que ande con el en toda la fiesta. – se voltio y me contesto con cara de molesto.
No veo cual es el problema, si antes te gustaba salir de esa manera. – empecé a discutir con él.
Nunca me a gustado realmente. – se veía molesto, pero su pene seguía parado.
Se nos va a hacer tarde, así que vámonos o te quedas. – subí la intensidad al máximo.
Soltó un leve gemido y se dejo caer al piso, con cara de molesto sabia que no lo iba apagar hasta que no hiciera lo que quería, se levantó se subió el pantalón y sin decirle nada como era de tela delgada el color y un poco del diseño del calzón, una vez que se acomodo la ropa, apague el vibrador y nos subimos al carro, durante el camino iba jugando con el interruptor lo prendía un momento y lo apagaba, justo antes de llegar a la caceta de acceso al club, lo prendí de golpe a máxima intensidad.
Mmmmmm haaaa. – soltó un gemido justo cuando baje la venta para identificarnos.
Hola maestro, nicolás está bien, se ve un poco rojo de la cara. – me decía el guardia de seguridad.
Si, han de ser los nervios, acuérdate que es su primera fiesta en el club. – le conteste mientras le entregaba mi identificación de socio.
Tiene razón, pasen que se diviertan. – me decía mientras me entregaba mi tarjeta.
Busque estacionamiento y encontré una más o menos cerca del salón de eventos, justo cuando me termine estacionar, nicolás me reclamo por haber hecho eso y que le sacara de una vez el vibrador, estaba por acomodarse para bajarse la ropa, cuando un carro se estaciono aun lado.
Jesús, nicolás, que bueno que pudieron venir. – nos saludo un amigo mientras se bajaba con su familia.
Hola si vamos llegando. – me baje del carro no sin antes apagar el vibrador. – ahorita vamos al baño y te lo saco. – le dije a nicolás mientras lo tomaba de la mano.
Al entrar al evento, nos ubicaron en una mesa junto con otras 2 familias, yo me puse a hablar con los adultos y nicolás con los niños que están ahí, después de un tiempo se le olvido que traía el vibrador ya que me pidió permiso para ir a jugar.
Justo antes de que saliera del radio de la señal lo prendí en el nivel más bajo por lo que se detuvo, se esta por regresar cuando unos niños lo jalaron del brazo, para que se fueran jugar, más de una vez vino a pedir que se lo sacara, pero justo cuando nos íbamos a ir al baño, venia otro niño y se lo llevaba a jugar.
Ya iban 2 horas del evento y la animadora llamo a todos los niños para ir jugar unas competencias de fiesta, nicolás se veía muy feliz jugando y yo feliz por él, la primera competencia era de beberse un vaso con agua y darles una vuelta y que cayeran en la mesa otra vez, nicolás ya había estado tomando agua antes y más la de ahorita sabia que iba a querer ir al baño.
Los juegos fueron pasando uno a uno hasta que solo quedaron 5 niños, nicolás ya se miraba incomodo por la presión en su vejiga, pero no quería ir al baño, así que me estuve esperando hasta que consideré que ya estaba por acabarse el juego, el cual consistía en reventar globos sentándose en una silla.
Vamos niños, solo un ultimo globo y tenemos a un ganador. – grita el animador y todos los adultos aplaudimos y gritamos en apoyo de los niños.
Veo como nicolás lleva la ventaja y corre lo más rápido posible para reventar su globo, gusto cuando da un pequeño salto para tener impulso y aplastar el globo, prendo el vibrador a máxima potencia, haciendo que Nicolás suelta un quejido justo cuando se revienta el globo y se sienta.
Muchas felicidades, al pequeño que acaba de ganar. – se acerca el animador y apago el vibrador para que no lo escuche. – hola pequeño como te ….. – se queda en silencia mientras baja la mirada al piso. – creo que tuvimos un accidente, ¿Quién es el papá, de este niño? – se aleja mientras un charco se empieza a formar bajo la silla.
Soy yo. – levante la mano para que me ubicaran.
Me voy acercando lentamente, mientras los niños que estaban jugando se empiezan a burlar y reír porque nicolás se había orinado en los pantalones, me paro a un lado del animar me entrega el premio que se ganó.
Perdón papi, por favor no te enojes. – sabia que estaba mal, pero me excitaba ver como se avergonzaba nicolás.
No te preocupes, todo se puede limpiar. – le di la mano para que me acompañara a la mesa.
Cuando se levanto dejo ver un gran charco de orina en la silla de madera, junto a ello la orina empezó a bajar por sus piernas, lo que hacía que el pantalón se transparentará completamente dejando a la vista su hermoso calzón rojo con la cara de santa Claus en las nalgas.
Jajajaja miren el bebé usa trusas con dibujitos. – grita un niño desde el otro lado del salón.
Llegamos a nuestra mesa que estaba justo a un lado de la pista de baile, nicolás se iba a sentar, pero lo detuve, ya que no quería que ensuciara los cojines con su orina, así que lo deje parado un momento.
Hijo, espera no te sientes, deja voy al carro por un cabio de ropa. – lo deje parado mientras iba al carro, no sin antes prender el vibrador en potencia media.
Nooo, papiii no me dejes. – no termino de decirme que me quedara cuando sintió el vibrador prenderse.
Cuando llegue al carro, busque la maleta con ropa que siempre traía y esta vez si había ropa de Nicolás, no era precisamente algo cómoda, pero le iba a servir, agarre el cambio completo ya que la camisa también se le había mojado, me la lleve en una bolsa plástica.
Quería ver que tanto se iba a dejar nicolás que la exhibiera, iba a tratar de cambiarle la ropa ahí mismo, pero si no se dejaba me lo iba a llevar al baño, cuando llegue un niño lo estaba molestando, riéndose de él.
¿Que está pasando aquí? – pregunte con una voz muy fuerte.
Haaaa, nada yo solo. – el niño no pudo contestar.
Ven hijo, vamos a quitarte esa ropa. – me senté en una silla y lo acerqué a mí.
Que, aquí. – me mire con tristeza y mucha vergüenza.
Si no pasa nada. – le empecé a quitar la camisa que traía.
Jajajaj al bebe todavía lo cambia su papá, de casualidad también usas pañal jajajaja. – era un niño grosero
Nicolas me miro con preocupación, pues sabia que si usaba pañal, una vez que le quite la camisa le iba a quitar el pantalón, pero lo vi muy preocupado y con ganas de llorar fuertemente, así que mejor me lo lleve al baño, por sorpresa el niño nos siguió hasta el baño, una vez adentro saque la ropa de la bolsa y metí la camisa, le pedí a nicolás que se quitara los zapatos y las calcetas, las guarde y procedí a quitarle el pantalón que ya estaba todo húmedo, lo deje ahí parado con su trusa mojada, mientras el niño veía todo sin decir ni una palabra.
Hay hijo, si que te mojaste esta vez, ve hasta caen jotas todavía. – levanté el pantalón y lo exprimí en el lavamanos.
Guardé el pantalón y procedí a quitarle el calzón, el niño veía detalladamente como le iba bajando esa húmeda y delicada prenda, Nicolás se tapo su pene con las manos, ya que por el frio de la orina su pene se había contraído en gran medida, dejando a la vista una gran cantidad de prepucio y sus testículos pegados al cuerpo, en un movimiento rápido le saco el vibrador y lo envuelvo en su trusa mojada y lo guardo con el resto de la ropa.
Jajajaja tiene pito de bebe. – se rio a carcajadas al ver el pequeño pene de nicolás.
Nose de que te ríes, si tú lo debes de tener igual. – le conteste mientras agarraba unas toallas de papel para secarlo y poder ponerle ropa seca.
Mientras lo secaba a Nicolás se le para el pene a sentir como le pasaba la mano por sus genitales y nalgas, pareciera que al niño también ya que al ver el pene de nicolás se tapo el suyo, una vez seco le pase la ropa que le había llevado, al ver la ropa que era me volteo a ver con tristeza.
Era lo que había hijo, me imagino que no te quieres quedar desnudo, ¿verdad? – le dije al ver su cara triste.
No. – me contesta muy desanimado.
Agarra primero la camisa que una deportiva que le llegaba hasta media nalga y era un poco ancha, después se pone su trusa, que era una negra con el logo de Batman en las nalgas y la cereza del pastel era el short blanco que le quedaba muy ajustado haciendo que le viera el logo en las nalgas.
Vamos a recoger el premio que te ganaste y nos vamos. – le di la mano y nos fuimos caminando al salón.
Cuando entramos varias personas se nos quedaron mirando como preocupadas por nicolás, llegamos a la mesa y nos despedimos, agarramos el regalo y nos fuimos a la casa, al llegar Nicolás esta triste y un poco enojado conmigo.
¿Qué tienes hijo? Ya paso todo, cambia esa cara. – le decía mientras le apretaba el muslo.
Noooo, ya sabes que no me gusta que me hagas ese tipo de cosas y más después de… – se quedo en silencio como recordando lo que le paso.
Pero no pasa nada, quiero que todos vean tu hermoso cuerpo, así como le veo y lo disfruto yo. – le empiezo a agarrar el pene, para que se tranquilizara un poco.
Mmmm, no ya déjame, a mi no me gusta que me desnudo otras personas. – me quita la mano de su entrepierna.
No me rindo y durante el camino lo fui tocando para que se relajara hasta que me dejo bajarle el short para tener mejor acceso a su pene, yo ya estaba más que excitado así que me apure a llegar a la casa, para seguir con esto.
Justo cuando llegamos a la casa, Nicolás sale corriendo a su habitación y se encierra, así que no me que de otra más que masturbarme en mi habitación, al día siguiente las cosas estaban más calmadas, y nos empezamos a alistar para la fiesta navideña de la escuela, le prometí a Nicolás que no iba hacer nada extraño en esta fiesta.
Antes de irnos le pregunte si no me dejaba metérsela rápido, para bajarme las ganas mañaneras, el acepta y antes de cambiarse nos acostamos en su cama, lo pongo de perrito y lo empiezo a preparar, cuando estuvo listo se la fui metiendo poco a poco, sabia que le gusta tanto como a mi tener sexo, así que le fui preparando el cuerpo, tocaba sus zonas de placer, para que disfrutara el momento, plash, pash, sonaba mi cuerpo al chocar contra sus nalgas, le di la vuelta sin sacarle mi pene, y justo en esa posición acelere las embestidas, no dure mucho y le solté mi semen dentro de su culo.
Hooooo si hijo, siente a tus hermanitos dentro. – le grite mientras el tensaba su cuerpo igual.
Haaaaa. – cada vez eran más intensos sus orgasmos, después de cada uno terminaba fatigado casi sin energía.
Rápido nico, se nos hace tarde, ponte la ropa. – me salí de él y me acomodé la ropa.
Aaaaa, ya voy. – se bajo lentamente de la cama buscando su ropa.
Se iba agachar para sacar sus calzoncillos, pero le temblaban las piernas así que le dije que yo lo buscaba, me aproveche del momento y agarre la trusa que tenia libre desde el pene hasta las nalgas, no se dio cuenta y le ayude a ponérsela, la acomode el pantalón y el se puso la camisa.
Durante todo el camino estuvo tranquilo sin decir nada, hasta que sintió dos cosas y me mira con cara de sorprendido.
Papá, no fui al baño antes de salir, todavía tengo tu semen adentro de mí. – me decía mientras se tocaba le trasero con las manos.
No te preocupes vas al baño ahorita que lleguemos. – me reía internamente por su comentario.
Si tienes razón. – se calmo un poco y vi como se tocaba el pene sobre la ropa. – pero que. – se bajo un poco el pantalón, viendo la trusa que le había puesto.
¿Qué paso ahora hijo? – voltie a verlo ya que estábamos en un semáforo rojo.
Porque me pusiste estos calzones, había muchos más. – se bajó un poco más el pantalón dejando ver como la tela no cubría nada, solo estaba de adorno.
No te gustan, se te ven bien. – estire la mano para agarrar su pene.
Se dejo tocar un momento, hasta que se acordó que estábamos en la calle, se subió el pantalón y durante todo el camino se fue quejando que no le gustaban esos calzoncillos y que nunca se los iba a poner otra vez.
Cuando llegamos se fue corriendo al baño, para despejar su intestino de mi semen, yo me fui a abrir el salón, para que los niños pudieran entrar y salir cuando quisiera, me fui a buscar a Saul, para platicar con él y preguntarle si tenias noticias de Tadeo.
Pobrecito, si tuviera un hijo solo me gustaría que otros hombres y niños lo vean, no mujeres, que asco, aunque de todos modos jamás le haría pasar algo así
Me gustaría que lo exhibieras más con niños, que ande totalmente desnudo frente a ellos.
Uff espero la siguiente parte es son mis relatos favoritos
Muy buenos todos los relatos, impacientes esperamos el siguiente, sigue asi !
Ya quiero ver el siguiente ojalá esté para navidad lo de espero con ansias