Las aventuras de Pelusita

mientras me echaba champú tenía los ojos cerrados mientras me masajeaba el cabello mientras el agua caía fuertemente de la regadera. Cuando siento algo puteandome la espalda, me lavo y quito el jabón de los ojos y me sorprendo al ver al sr Ramón detras de mi completamente desnudo y con su pipí muy g.
Hola me llamó Alan y vivo con mi familia que a pesar de ser humilde es muy numerosa, abuelos, tíos y demás, mi núcleo principal esta conformado por mi papá y mamá, 4 hermanos mayores, 3 hombres y 1 mujer.

Siempre me molestan mucho por no parecerme en nada a mi familia, pues todos ellos son morenos y yo por el contrario soy blanquito y con ojos verdes, algo incomprensible para mí, siempre que preguntaba me decían que era por una enfermedad que afectaba mi piel.

No entendía mucho pero a veces escuchaba de la gente del barrio, que decían que yo era un cacho aunque no comprendía que significa eso exactamente.

En fin, me molestaban algunos y otros me tenían mucho cariño, siempre me juntaba con los chicos más grande, porque a pesar de mi edad me gusta el fútbol y soy muy bueno ello.

Una tarde de tantas salí a jugar como siempre con los chicos grandes, jugamos mucho esa tarde tanto que termine hecho mugre con toda mi ropa, sabía que me regañarian y castigarian por ensuciar mi ropa, al no tener muchos recursos tenía que cuidar mucho lo poco que tenía.
Manuel uno de los chicos que jugaba me vio preocupado —¿Pelusita qué tienes?— preguntó

— Es que si llego así de sucio a casa me van a regañar— haciendo mis pucheros de costumbre.

—No te preocupes, ven a mi casa la lavamos y la ponemos en la secadora— me sugirió Manuel quien era un chico Moreno de 16 años algo alto.

—si por fa, hagamos eso— acepte felizmente y nos fuimos a su casa que era más grande que la mía, al llegar nos recibió un hombre alto Moreno oscuro y bastante robusto, sus brazos se veían como los de los Super héroes de la tele.

—Manuel, ya terminaste de jugar y este pequeño ¿quien es? — preguntó el señor intimidandome un poco.

Manuel respondió con mucha confianza— Papá es Alan, al que llamamos pelusita, el niño que juega fútbol brutal, vine para lavar su ropa y sacarla para que no lo castiguen en su casa— el señor me miro un rato de manera extraña.

—este el famoso pelusita, mucho gusto soy el Papá de Manuel, me llamó Ramón — Me dijo alborotado un poco mi cabello.

—Mu mucho gusto sr Ramón— estaba algo nervioso sin embargo el señor se comportaba muy simpático conmigo incluso medio caramelos aunque sentía que me miraba mucho.

—Manuel busca una toalla para pelusita mientras el se quita su ropa para lavarla—dijo el señor Manuel salió corriendo a buscar la toalla, estábamos en la sala de la casa.

—pequeño quitate la ropa para lavarla— me dijo el señor Ramón

—pero me da pena— nunca me había desvestido delante de desconocidos antes.
—tranquilo no pasa nada solo quiero ayudarte para que no te regañen— dijo acercándose a mi y acariciando mi mejilla —eres muy lindo pelusita— me sentía nervioso pero al mismo tiempo muy bien, tome confianza y me fui desvistiendo quedando en ropa interior que era color azul unicolor, solo sentía que el sr. Ramón me miraba mucho, en eso llegó Manuel con la toalla y me envolvi en ella, mientras el papa de Manuel se llevaba la ropa a lavar.

Manuel prendió la TV y nos pusimos a ver Naruto un rato, Hasta que regresó el papa de Manuel.

—Hijo tu mamá llamó, que le lleves el monedero a la peluquería que lo dejó y lo necesita— dijo casi ordenándole.

—Que flojera papá pero esta bien, pelusita saldré un rato y regresó mi papá estará pendiente de tu ropa ¿No es cierto papá?— preguntó mirando a su papá

—Claro hijo yo cuido a pelusita mientras vas ahora apurate que la peluquería es algo lejos— Manuel se fue rápido con el monedero de su madre dejándonos solos.

El sr. Ramón se sentó a mi lado, me ofreció galletas mientras me hacía preguntas del anime y yo le respondía emocionado a todas sus dudas de Naruto siempre acariciaba el cabello y me decía que era lindo.

—¿pelusita no te gustaría bañarte? así te vas a tu casa limpiecito y seguro hasta te premian por llegar tan limpio— me preguntó me quedé pensando un rato y ciertamente me pareció su idea. —si sr. Ramón dígame donde esta el baño —

Se levantó y me llevo hasta el baño de su cuarto —bonito cualquier cosa que necesites estaré en la habitación— me dijo y salió del baño.

Yo me desvesti entre a la ducha, cerré la cortina y empecé a bañarme. Al ratico siento que abren la puerta, era el sr ramon — pelusita voy a orinar rapidito ya no aguanto— simplemente contesté con un ok mientras me echaba champú tenía los ojos cerrados mientras me masajeaba el cabello mientras el agua caía fuertemente de la regadera. Cuando siento algo puteandome la espalda, me lavo y quito el jabón de los ojos y me sorprendo al ver al sr Ramón detras de mi completamente desnudo y con su pipí muy grande y apuntando hacia mí

—Nene no te pongas nervioso, es que me dio mucha calor y decidí bañarme contigo para ahorrar agua— yo me estaba tampoco mis partes por vergüenza y no sabía que decir se movió por un lado mio robándome con su gran pipí mientras se molaba con el agua de la regadera.

—Pelusita no tengas pena los 2 tenemos lo mismo somos hombres, es más dejame enjabonarte — tomó el jabón y se arrodilló para enjabonarme, yo no sabia que hacer ni que decir, solo siento que pasa el jabón por mi cuerpo empezando por mi pecho y bajando poco.
—nene asi quedaras limpiecito— mientras me empezó a enjabonar mis bolitas con mucho cuidado, luego pasó a mis piernas, para luego voltiarme y seguir con mi espalda, mi pipícito se había parado y se sentía bien que me enjabonara pero seguía tampandome.

—Sr Ramón me da mucha pena que me enjabonee— mientras intentaba tapaba mi pipí parado.

— no te preocupes bebé somos hombres y cuando sentimos rico se nos para mira el mio como esta— voltiandome de nuevo frente a él, poniendo el jabón en mis manos y acercando mi manita a su gran pipi.

—bb enjaboname tu a mi ahora bb— con mi mano en su cosota que sentía muy dura y casi no cabía en mis manos me guiaba para que lo enjabonara, rodiandolo con mi manita y subiendo a bajando.

—uffff Ahhh que rico enjabonas sigue así — yo seguia haciendo lo mismo lo que me había indicado ya lo hacía solo por alguna razón me gustaba hacerlo y me sentía bien con las cosas que me decía.

Hasta que derrepente me tomo de la cintura y me acerco a él, empezando a besarme y a meter su lengua en mi boca, como el estaba arrodillado su miembro pasaba entre mis piernas y por el jabón sentía como resbala.

—mmmm que rico estas bb me tienes a mil mi pequeñito— mientras yo intentaba respirar por sus besos bruscos, me apretó más hacia el, y mi pipícito se empezo a frotar con su abdomen mientras el seguía pasando su pipí entre mis piernas con sus brazos me presionaba mucho contra él y sentía muchas cosquillitas en el estómago y algo que me estaba gustando al ratico ya me movia solo hacia él.

—eso mi pequeñito así Muévete asi— mientras me apretaba y masajeaba las nalgas— que nalgon eres bb, me encantaste desde que te vi ahora eres mio—

—Ayy señor, mmm ayy— empecé a gemir bajito mientras con un dedito Rosaba la entradita de culito— mmmm ayyy mmm— seguía gimiendo bajito.

Derrepente empecé a sentir una presión en mi pipí como si fuera hacer pipí y al mismo tiempo unas cosquillas intensas mientras me movia más rápido y más intenso— ayyy aaaaaahhh señor ayyy— teniendo fuertemente comp una especie de electricidad por todo el cuerpo aferrándome más al señor Ramón que gruñia fuertemente y sentía su miembro cada vez más duro y grueso entre mis piernas hasta que me separa de él y se levanta rápido para hacer unos movimientos con su mano en su pipí acercándose a mi cara y con su mano libre acercándome más a su pipí tanto que la punta de su miembro tocaba mis labios.

—ahhhh grrr bb uffff aqui viene tu lechita ufff— soltando unos chorros fuertes color blanco que recorrieron mis labios y llenaron mi cara.

—abre la boca— me ordenó cacheteandome con su pipí, yo por su tono de voz como molesto abri la boca y luego introdujo la cabeza de su pipí en mi boca —chupa comp un caramelo— me daba algo de asco pero aún así lo hice después de un momento me adapte al sabor y ya no me molesto tanto.

— que rico bebe— saco su pipí y se volví a arrodillar— ahora eres mi noviecito, pero no puedes decir nada porque Manuel se molestaría y tus papas te regañarian— yo solo afirmaba con la cabeza aunque no sabia bien a que se refería pero sabia que si alguien se enteraba seguro me pegarian pero en el fondo sentía que me había gustado.

Luego de eso salimos del baño, nos vestimos bajamos a la sala donde me tuvo sentado en sus piernas mientras me seguía besando hasta que escuchamos la puerta y me bajo de sus piernas rápidamente alejandome Manuel había llegado el resto del rato siguió normal como si nada hubiese ocurrido, hasta que estuvo lista mi ropa y me fui, antes de irme el señor Ramón se me acerco a mi oído y disimuladamente me dijo que regresara mañana a la hora que juegan fútbol yo solo asentir me despedí de Manuel y regrese a mi casa muy confundido no sabia que había pasado en realidad pero estaba claro que sentí muy rico y que quería volver a sentirlo…..

Continuará