Las cabinas privadas II
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
La mayoría de veces que iba ha aquel lugar era solo los fines de semana. Pero me cuerdo que un día laboral fui y comencé a vivir la obsesión de la mayoría de gays que iban ha aquel lugar y porque lo hacían. Me cuerdo que fue un lunes y eran casi las 5.00 p.m y no había nadie.
Como de costumbre pedí mi peli y realmente estaba buena. Ya estaba en la mitad de la peli cuando de repente alguien llego y raudamente entro a su cabina. Ni me dio tiempo para saber quien era, ya que estaba bien concentrado en la peli. Al terminar la escena donde un militar musculoso le daba una buen polvo a su colega la cual me excito tanto que casi me corro, cuando de repente oigo un gemido agudo del otro lado y pude escuchar que el tío estaba viendo una peli hatero ya que el quejido de una mujer es inconfundible me dio tanto morbo querer saber quien era mi amigo de a lado cuando sin querer se cayo el la botella de agua mineral y moje el piso. Cuando me agache a recoger la botella pude observar un hueco que era algo notorio y de esa forma podía yo saber quien era el vecino. No se como me arme de fuerza y me agache para observar por aquel hueco.
Si que se podía ver quien era el vecino y de lo que hacia en esos instantes. Ay Dios mío…
Que rica pija tenia el muy condenado en ese instante se estaba dando una paja que se denotaba su excitación hay me baje el pantalón y luego la trusa y me metí dos dedo en el ano para acompañar esa escena no se como el tío se percato que lo estaba observando que sin mediar palabras se subió el calzoncillo y el pantalón y fue a mi cabina. Por su reacción yo temía lo peor. Pero cuando me vio con la nalguita tan rica no pude y se me abalanzó encima y me dio unas buenas palmadas en el trasero que me hicieron dar un grito. Eso te pasa por mirón sabes que es malo estar espiando. Luego el muy pendejo me sopeo tan rico y le escupía a mi ano, para después introducir sus dedos haciendo que mi ano dilate para que me penetrara su vara en el culo.
Era tosco conmigo. Pero eso lejos de asustarme me excitaba mas, sigue papi, sigue fueron mis suplicas. Quieres más mi puta, te lo voy a dar. Y me dio unas cuantas palmadas más. Pero estas eran unos pocos más suaves que las anteriores. Saco un condón y se la puso, yo no voltee para nada el hacia todo. Gracias a dios que el condón tenia algo de lubricante sino me hubiera dolido la penetración. Después de un buen tiempo que lucho por penetrarme. Este entro haciendo sin antes hacerme dar un gemido agudo de dolor y luego vino las embestidas. Hay en cada embestida sentía que me iba a partir el alma hay luego poco a poco sentí placer. Cuando me puso las piernas en el hombro me pude dar cuenta que este tío, si sabia como hacer que gozara ya que sentía como en algunas embestidas giraba la cadera para que sintiera menos dolor , en un impulso el cambio y me penetro de costado hay sentía bien cada centímetro de carne en mi ano .
Luego de darnos unos apasionados besos y sentir su olor de macho dominante, el tío se vino en ese instante sentí que ese chorro de semen caliente invadió mi esfínter era abundante y se derramo en el piso. Luego volver a darnos unos besos y que el tío me masturbara para completar bien esa noche de pasión, el me cito para otro día en un motel donde si que me hizo gozar riquísimo hasta que conocí a su hijo que tenia una señora pinga que también como el padre me dieron unos i buenos polvasos. Que le digo me llevaron hasta el cielo.
Ojala les guste opiniones a: rescueme140@hotmail.com
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