LAS HIJAS DE LAURA Y NURIA, otra historia
Pensé que había que contar la historia completa.
Yo soy Elena la arquitecta, mi hermana dio por terminada esta historia pero considero que faltaríamos si no lo contamos todo, sobre todo esta parte final. Ya vivimos todas en los casitas que diseñe y que nuestras madres mandaron construir en la finca, son unas casas muy apañadas con unos jardines delante muy bonitos.
Nuestras madres cuando el tiempo esta bueno suelen sentarse allí en el jardín a charlar un rato, se sirven un wiskey y allí se sientan a ver el panorama. Les hace mucha gracia ver a primeras horas de la noche y ya cuando las niñas están acostadas y dormidas como nos llegan visitas de los chicos africanos, no siempre los mismos, según ellas parece que hay un puticlub por la zona y no paran de entrar y salir hombres, sobre todo el de mi hermana la chica y Vane que puntualmente llegan los dos hermanos en pelotas en pelotas se van, no tienen el menor pudor ni aun a sabiendas de que estamos allí, después de un rato empezamos a ver como la luz del baño se enciende y siempre nos decimos lo mimo, ya van a lavarse el coño o el culo, o la boca o todo a la vez que es lo mas probable, esto es contado por muestras madres.
Tuvimos un problema legal con dos de nuestros empleados mas antiguos, uno es Andrés, ya habéis oído hablar de el, estos llevan en la finca mas de veinte años y ya con sus ahorros han vuelto a su país, el problema no es ese ni mucho menos, si el que querían llevarse a sus hijas mayores de edad en contra de su voluntad, las dos hijas mayores que son nuestras puericultoras y que a diario llevan al colegio a nuestras hijas, una es Sonia y la otra Luna, son estupendas y de una belleza grande, altas y muy bien formadas, como se dice vulgarmente están muy buenas. Además ellas han estado con nosotras desde la guardería y en el colegio y son españolas de nacimiento.
A las dos y en mas de una ocasión las he visto a brazo partido pegarse unas palizas con algún chico y practicar también felaciones a mas de uno, ellas también nos han visto a nosotras, ningún inconveniente con eso.
Estaban mis madres de viaje y me baje al jardín a tomar el fresco de la noche una noche de abril, mis dos niñas ya dormían y el trasiego de hombres aun continuaba, yo aquel día no estaba por la labor, estaba muy tranquila.
Dando un paseo vi a Sonia que se acercaba, la llame y se sentó conmigo y estuvimos hablando un buen rato. Se sentían ellas dos Sonia y Luna muy felices de haberse quedado con nosotras, somos como sus hermanas me confeso.
Cuando vio que salían hombres de las casas de mis hermanas, no se sorprendió, le pregunte que que le parecía aquello, es estupendo me dijo. Le pregunte que se decía de nosotras entre ellos y las familias, unas putas pensaran que somos. Se rio, los hombres están muy agradecidos del bien trato que aquí se les tiene y están muy contentos de que vosotras quieran follar con ellos, están muy felices. Le pregunte si había tenido ella alguna historia con algún chico, me conto que solo con blancos pero que tiene curiosidad por follar con algún negro, tal cual me lo dijo. Le pregunte por Luna, hay me sorprendí un poco, resulta que es común en algunas familias que el padre o algún hermano se las folle, eso si por el culo, la virginidad tiene un precio importante a la hora de contraer matrimonio, en su caso no fue así.
Me dijo que se hablaba mucho entre los africanos cuando hacíamos fiestas y que hacían tal o cual cosa y que os follaban varias veces a todas las que estaban allí, a algunas un montón de veces, le confirme que así es y que a veces nos han follado veinte veces en la noche a cada una, se sonrió y me dijo para mi sorpresa, me gustaría asistir a una fiesta de esa, y no te vas a sentir incomoda, a fin de cuentas son vecinos tuyos, a Luna también le gustaría, cuando hagamos algo os lo digo, en eso quedamos.
También me dijo que me había visto en el colegio morearme con alguna chica y que eso le llamada mucho la atención, pero que no lo había hecho nunca, le dije que nadie mejor para darle placer a una mujer que otra mujer, me dijo estoy húmeda, a lo que le conteste que era un buen comienzo.
Tenia serias dudas si dar el paso pero al final me decidí, quieres probar le dije, me miro en silencio un par de minutos y me dijo que si, pero si me siento incomoda paramos. Nos fuimos a mi casa, son solo unos pasos hasta allí, me cogió de la mano, ya en casa nos servimos una copa y seguimos charlando un ratito.
Que tal estas, pregunte, seguimos adelante, asintió, así que subimos a mi habitación, nos metimos en la ducha y el agua cálida nos relajo mucho, empezamos con unos piquitos en los labios, quizás con algo de timidez que fueron subiendo de nivel, luego ya nuestras lengua se entrelazaron, después de unos minutos nos secamos y nos fuimos a la cama, Sonia es espectacular, ya nos habíamos visto desnudas, no era la primera vez, en el gimnasio o después de algún partido de baloncesto, pero ahora estaba en mi cama, nunca había estado con una chica negra, la besé intensamente en sus carnosos labios, sus pechos duros y sus pezones de azabache me hacían perder el sentido, bese su vientre y sus muslos y la bese en su vagina, la mire y me dijo sigue, termine de abrir sus piernas y hundí mi boca en su chocho negro y rosa, una verdadera delicia, al cabo de unos minutos se corrio intensamente, ahora me toca a mi me dijo y me devoro por completo.
Entre polvo y polvo me conto que nunca lo había echo por detrás de forma satisfactoria, que sentía nada y que fue con un compañero de clase, blanco pero con un pene pequeño, pero que tenia interés en hacerlo. Si te dejas hacer le dije, te hago yo algo por detrás y ya me dices si te ha gustado o no. La habitación estaba en penumbra, la puse boca abajo y le lamí su culete duro y prominente, una delicia como todo en ella, me lubrique un dedo y con suavidad se lo metí, se estremeció, al poco le metí dos y ya empezó a jadear, la cosa pintaba bien, le pregunte si le gustaba y asintió con la cabeza, tenia a mano unos plugs anales que llevan con nosotras muchos años y que de chicas nos dieron buenos resultados, fui de menor a mayor y su ano no oponía ninguna resistencia, así que fui hasta el mayor y poco a poco también le entro sin dificultad.
Quieres que te folle por detrás le pregunte, volvio la cara y dijo como?? abrí un cajón de la cómoda y saque de el un arnés con una polla de silicona, vale me dijo. Me lo coloque y se rio, es negra me dijo, la lubrique bien y comencé a follármela muy lentamente, iba notando como poco a poco se le iba metiendo toda, al final se abrí por completo y se la metí entera, empezó a tener temblores y a apretar su nalgas, estos son orgasmos anales me pregunto, le dije que si y contesto me encanta. Luego ella se lo puso, estaba de pie y se miro al espejo, ahora parezco uno de los negros con sus pollas negras y grandes.
Ya empezaba a amanecer cuando nos estábamos dando los últimos besos de esa maravillosa noche cuando se abrió la puerta de golpe y entraron las dos niñas y se metieron en la cama con nosotras, se alegraron de ver a Sonia allí y nos comieron a las dos a besos, en la mesilla de noche estaban los plugs y el arnés, y las niñas nos dijeron, habéis hecho cosas de chicas, yo le dije que si, Sonia se escondía bajo las sabanas, fui muy divertido, repetimos muchas veces.
Esto me lo conto Nuria y os lo voy a relatar. Estaban todas las niñas, es decir las dieciséis en la casa grande jugando y Nuria estaba en su despacho trabajando, como siempre, por entonces las niñas tienen ya cerca de los siete años, bajo una de ellas a buscar ayuda, una de las chicas había tenido un problema, allí estaban todas alrededor de la interfecta que ella como todas las demás se habían metido un plug en el ano y a esta en cuestión se le había atascado y no era capaz de sacarlo, era el grande del todo, así que con paciencia Nuria le fue hidratando el ojete hasta que poco a poco salió, lógicamente Nuria les dijo que eso debían lubricarlo muy bien antes, no solo el plug sino también el ojete, que podía decirle nos conto luego.
Al principio del verano organizamos una fiesta, merienda les decimos nosotras al anochecer. Estábamos todos las hermanas ,as Vane y también nuestras tías y la beata de Mila, también se apuntaron Sonia y Luna, nuestras madres se llevaron a las niñas de excursion.
Cada una nos pusimos un modelito, Mila como siempre en pelotas, total para lo que le va a durar, Sonia y Luna se pusieron un conjunto blanco de intimísimi precioso, yo dudaba que vinieran, pero allí estaban. Llegaron los chicos en tropel, un montón de ellos dispuestos a follarnos a todas a saco, la sorpresa fue grande cuando vieron a las chicas negras se pusieron como locos y unos cuantos se fueron hacia ellas y las desnudaron enseguida, les tenias ganas parece. Mila de rodillas rezando y con dos pollas delante decía, perdóname dios pero la carne es débil y estas están muy duras, y se las chupo a los dos, en un rato estábamos todas en las hamacas a cuatro patas y los chicos follándonos el culo, tenia a Sonia a mi lado y me dijo, me lo estoy pasando genial, me alegré mucho, así estuvimos hasta el amanecer.
En una fiesta de cumpleaños, el octavo de la niñas , paso algo que ninguna de nosotras se esperaba, resulta que se nos extraviaron en la casa dos niñas, una era de las mías, Nuria me dio el aviso, como no daba con ella y las demás solo hacían mirarse de reojo me fui disparada al atico, allí estaban las dos desnudas y los dos chicos que estaban allí con sus pollas en sus bocas, no dije nada, al ratito bajaron.
Otro acontecimiento que hubo por aquellas fechas se lo adjudico a nuestra madres, veníamos del cine todos y todas, es decir nuestra dieciséis, niñas mas catorce entre niños y niñas, los dos chofer del autobús, las puericultoras , Sonia y luna y nosotras ocho, estos movimientos son un problema logístico importante, al cine fuimos y solo ver esa jauría de niños y niñas difíciles de controlar, aunque los tenemos dominados, de allí al McDonald , mogollón de happy mils y luego otro montón de helados, acabamos todas reventadas, nuestras madres se quedaron en casa a disfrutar de la paz del momento, o eso creíamos.
Llegamos de vuelta casa quizás un poco antes de lo previsto, aparcamos el autobús en la puerta y se fue bajan el personal, yo entre la primera en casa y vi a dos de los Daneses en el salón lamiándose el cipote, intuí lo que pasaba así que me volví y le dije a mis hermanas que las mamis gua gua, me entendieron a la primera, una de mil hermanas les dijo cada mochuelo a su olivo y las niñas y los niños se fueron cada uno para su casa unos con sus madres y otros con las puericultoras.
Subimos yo tres de mis hermanas y allí estaban nuestras madres siendo folladas por los perros, había dos abajo, dos tumbados y dos montándolas, así que aun les quedaban dos para terminar la faena de la tarde, yo me puse muy húmeda y le dije a mis hermanas si nos uníamos, así que nos desnudamos y entramos en la habitación, nos pusimos a cuatro patas nos dimos unos cachetes en las nalgas y acudieron los cuatro de momento que nos montaron y nos penetraron enseguida, unos minutos después estamos todas mas que folladas, nuestra madres aun se dejaron follar una vez mas y cayeron derrengadas al suelo.
Ya lo próximo será las nietas que me parece que vienen finas.
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