Laza

Mi primera vez con un adulto, .
Laza
Llevaba 2 años trabajando en esa empresa, ese día me dijeron que me cambiarían de máquina, a mis espaldas estaba un rolador de nombre Laza, en su línea decían que era gay, un tipo delgado pero fibroso, la segunda semana comenzó a hacerme plática, me platicaba cosas normales hasta después de casi un mes empezó a tirarme rollo, no me haré de la boca chiquita, de niño fui influenciado por vecinos mayores, ellos me hacían tocamientos y me arrimaban sus enormes vergas sin llegar a penetrarme, eso provocaba en mi un gusto por la verga, volviendo a lo de Laza,
Ya después de medio año, me invitó a su casa, estaba nervioso pero a la vez exitado, salimos del turno y tomamos en transporte sentados en diferentes asientos, el me había dicho donde bajarme, para que no hubiera sospechas, así que cuando llegamos al lugar indicado me levanté y baje del transporte, detrás de mí bajaron otros 2 compañeros y Laza, camine varias cuadras y cuando llegue al lugar indicado, miré a ambos lados, Laza ya estaba tras de mi y abrió la puerta, entramos y sin preámbulo puso película porno en su vídeo y saco unas cervezas, comenzó a tocarme la verga diciendo, tienes buen paquete, me desnudo y el hizo lo mismo, pude notar una enorme verga curva, depilado completamente y su cabezota goteaba babita, Laza me miró y me dijo, no te vayas a rajar, se puso de rodillas y comenzó una mamada descomunal, se tragaba mis 17 CM como si nada, se la sacaba de la boca y la escupía para después metérsela por completo, le dio un trago a la cerveza y se volvió a meter mi verga en la boca, eso me provocó una sensación muy placentera, siguió mamando un buen rato hasta que se detuvo, me colocó un condón y se embarro mucho gel en el culo, se subió al sillón y con una mano dirigió la punta de mi verga a su culo, se la fue ensartando poco a poco, después empezó un sube y baja muy rico, me daba unos apretones a la verga haciendo un placer que jamás había sentido, que rico me abre papi, la tienes muy gruesa, cuando estaba completamente ensartado, movía el culo en círculos y decía que la sentía muy bien, quería coger todos los días está verga, me hizo acabar después de 30 minutos de cogida, cuando se levantó le dije, quiero que me cojas, su verga estaba completamente tieza, me dijo, no creo que aguantes que te meta mi verga en ese culito virgen, le dije, es virgen pero ha sido manoseado desde niño, y quiero sentir una verga adentro, Laza me dijo, si empiezo a meterla no me detendré hasta venirme, te estoy avisando antes de empezar, no me detendré aunque grites, mi calentura era más grande que el temor o el dolor que pudiera causarme, le dije, no me rajo, quiero que me la metas con cuidado y haz que sea placentero,
me dijo que me pusiera acostado con las piernas abiertas, se colocó un condón y colocando mucho del gel que el se había puesto antes, me levanto las piernas colocándolas en sus hombros, apunto con una mano la cabezota en mi entrada y empezó a empujarla, sentí la presión en mi culo, hizo varios empujoncitos leves y de pronto me empujó media verga adentro, primero sentí un enorme dolor, pero no dije nada, pensé, yo me lo busque ahora me aguanto, Laza comenzó a entrar y salir de mi culo lentamente, solo hasta la mitad, pero unos minutos más tarde me la enterró por completo, otro dolor enorme me hizo fruncir la cara y el culo, Laza gimió fuerte diciendo, si papi tu eres un macho muy rico y tú culo es mío de ahora en adelante, tomo el teléfono, hizo una llamada diciendo, oye amor ven a la casa, estoy con un macho muy rico,
minutos después entro un hombre muy mayor de unos 50 años, se desnudo por completo, tenía una verga igual de larga que Laza pero más gorda, se subió al sillón y Laza comenzó a mamarsela sin dejar de bombearme su verga, solo fueron unos minutos, yo sentía mucho placer con la cogida, no gemia, solo disfrutaba, entonces el tipo se colocó un condón y le dijo a Laza, déjame sentir ese rico culito, Laza me desencorcho y el tipo se colocó en la misma posición, me la empezó a meter y por lo grueso sentí dolor nuevamente, el no se detuvo hasta que sus base se pego a mis nalgas, mientras Laza se quitó el condón y me puso su verga en la mano, se la empecé a masturbar hasta que el tipo le dijo, ponle un condón a tu macho, quiero su verga adentro, Laza se agachó y nuevamente me hizo una mamada hasta que la tenía bien dura, me puso el fondo, mientras hizo esto el tipo no dejo de cogerme, el placer de ser penetrado y que alguien te mame la verga al mismo tiempo fue algo muy cachondo, Laza le embarro gel al culo del tipo, y sacándome la verga, me dejó acostado en el sillón, se montó y solito empezó a enterrarce mi verga, comenzó a cabalgarme unos minutos, se detuvo y se levantó, me dijo, ponte detrás de mí, quiero que me des unos topes hasta el fondo, se colocó en recargando su torso en el respaldo y levantando el culo, lo penetre fuertemente haciendo que gimiera fuerte, Laza se colocó frente a el y le dio un beso de lengua, cuando se separaron el tipo abrió la boca y Laza le escupió adentro, se trago la saliva de Laza y le dijo, métele la verga a tu macho, Laza se puso otro condón y me detuvo para penetrarme, me dejó un espacio y me dijo, papi, vas a sentir muy rico esto, espero que dures un buen rato, le enterré la verga a su amigo y cuando retrocedí me enterré la verga de Laza, la palabra sentir rico era estúpida para el placer que sentía al bombearme yo solito, Laza comenzó a palpitar su verga adentro de mi hasta que lleno su condón de mecos y el tipo manchó el respaldo de sus mecos, mientras yo seguí dándole verga por otros 10 minutos más,
Habíamos llegado a las 17:30 a la casa de Laza, y ya eran las 19:30, ya era muy tarde y no tenía una excusa para llegar a la casa, el tipo dijo, Laza tenemos que llevarlo, pero que quede claro, ahí que repetir esto lo antes posible.
Me llevaron a la esquina de mi calle y sentía latir mi culo, sentía un vacío enorme, me temblaban las piernas, Laza río cuando le dije,
– siento las piernas flojas,
– es por el placer, la primera vez sentí lo mismo.
su amigo dijo:
– tienes un rico culito cabron, y tu verga se siente de poca madre, espero y te haya gustado, porque a mí me encantó tu culito, aprietas muy rico, y no pienso dejar de meterte toda la verga, bueno, eso sí tú quieres.
– claro que quiero, pero no cuento con mucho tiempo, soy casado y mi ruca es bien celosa.
– así son todas, por eso me divorcié hace años, dese que encontré a Laza en aquella calle no hemos parado de coger.
– bueno nos vemos luego.
Nos despedimos y llegué a casa, la fiera estaba emputadosima pero cuando estábamos acostados me acordé de la cogida que me dieron y que yo di y me desquite con la raja de ella, le hice una cogida de 20 minutos cuando normalmente termino en menos de 10, la deje sorprendida a ella y a mi mismo.
La noche siguiente se la repetí, así paso el resto de la semana, dándole verga a mi ruca pensando en las dos vergas de mis amigos.