Lenchito mi sobrinito
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por jarocho88.
Soy un hombre que ya está cerca de los 40 años mido 1.
88 mts.
de altura peso 95 kg digamos que algo corpulento y un tanto ejercitado, de pocos vellos, eso sí tengo barba, la verga me mide 22 cm de largo ya cuando la tengo bien parda, es gorda y pareja de la cabeza al tronco un poco curveada hacia arriba, circuncidado, sexualmente muy activo, siempre con mujeres, pero en una ocasión me vi envuelto en una situación un tanto gay pero más que gay algo delicada ya que este encuentro sexual lo tuve con un sobrino de 5 años, Lorenzo con él se dio mi primer contacto con un hombre sí con un hombrecito que me dio una mamada de campeonato hasta sacarme toda la leche y tragársela, a partir de ese día se convirtió en mi nene de boca hambrienta que se come entera toda mi verga y se toma mi leche, y que con el que llegue a mas que mamadas de verga y de huevos, con su respectiva venida.
Esto ocurrió hace un par de días que estando en casa hasta muy tarde a eso de las 11:30 pm estaba por acostarme repentinamente y e inesperadamente tocarón a la puerta, de manera sorprendente atendí a la puerta y era mi prima Eugenia que un tanto desesperada y con su hijo Lorenzo en mano me pide que si no es demasiada molestia que le cuide al chiquillo mientras se lanza a buscar a pedro su marido que le avisaron que estaba tirado afuera de una cantina en el centro de la ciudad.
Yo solo sentí pen por Eugenia y le dije que no había problema que se fuera por el borracho empedernido de su marido y que no tuviera cuidado que yo le cuidaba a lenchito como acostumbramos llamarle.
Ella agradecida le dijo a lenchito que no me diera lata y se fue.
Lenchito mi sobrinito es un lindo nene de cabellos rizados, quizá el pequeño me da a la cintura, un poco cabrón algo inquieto, después que su madre se fue cerré la puerta y le dije que yo ya estaba rumbo a la cama que ya tenía algo de sueño y que quería dormir, se lo dije con la intención de que el también hiciera lo mismo pero el sin más ni más me dijo que él no tenía sueño que quería ver la tele, le dije entonces que pues la viera y que si tocaban a la puerta me despertara que no le abriera la puerta a nadie.
Que va se sentó en el sofá busco el control de la tele y yo me dirigí a mi recamara cuando para mi sorpresa el niño encendió la pantalla y lo primero que proyecta es una imagen de un cabron chavillo mamándole el pito a un hombre un poco maduro como de mi edad, se me había olvidado que la última vez que ocupe la tele fue para sacear una necesidad sexual con mi amiga la mano y esa película (la verdad es que soy un poco curioso y creo que me atraen un tanto los chavillos).
La verdad fue tanto el impacto que en lugar de correr a querer cambiársela me quede pasmado y dije en mis adentros “en la madre” … de manera pacífica di la vuelta hacia la sala para quitar la película pero cuando me di cuenta lenchito no dijo nada ni reacciono de manera asombrosa al ver el acto de ese chico dándole una mamada al wey en el televisor, yo estaba un poco confundido tampoco decía nada pues el niño estaba completamente embobado con la escena, lo deje a ver hasta dónde estaba dispuesto a llegar, el niño comenzaba a tener reacciones a lo que estaba observando comenzó a tocarse el pito que yo creo que apenas y se le paraba, lo deje seguir, el hasta ese momento no se dio cuenta que yo lo estaba observando a sus espaldas y tal parece que se le olvido que se había ido a quedar a mi casa y que yo estaba ahí.
De pronto se sacó el pirrin y se lo empezó a jalar poco a poco no me quedaba duda que ese niño ya había experimentado antes algo así o lo había visto en alguna parte o alguien lo enseño porque parecía saber lo que hacía, entre mi desconcierto comencé a excitarme al ver la película y el morbo que mi sobrino me estaba causando, me fui arrimando más a donde el de manera sigilosa, él estaba en lo suyo se estaba poniendo tremenda puñeta pero es que parecía un cabronsito adolecente la verdad me tenía asombrado, llegue hasta un costado del sofá, yo solo traía puesta una playera sin mangas y un short sin bóxer, de pronto vi como de reojo me vio y se asustó, pego un salto que se guardó el pitito y me dijo:
Lenchito: tío perdón perdón yo no quería ver eso es que salió en la tele sin querer no le vaya a decir a mi mamá porque si no me va a pegar.
me dije a mi mismo "este nene hoy se va servidito a descansar con el culo roto, y me va pegar tremenda mamada de verga, me lo voy tener que culear", me pare frente de él dejando mis piernas abiertas con toda la intención de que viera mi tronco de verga dentro de mi short, y le dije:
-Lenchito si me la mamas como el muchacho al señor de la película te prometo que no le digo a tu mamá lo que estabas haciendo aquí en la sala.
Ya tenia la verga media parada, el asintió con la cabeza un poco cabizbajo, lo tome de la mano y le dije que no se sintiera triste que confiara en mí que yo aparte de ser su tío era su amigo y que esas películas las vemos todos los hombres y el aunque tuviera 5 años era un hombrecito.
Le reafirme que yo no le diría nada a su mamá y que de ahora en adelante él y yo seriamos amigos y nos podíamos contar muchos secretos y que yo le enseñaría muchas cosas de hombre pero que tampoco tenía que contárselas a su mamá.
La mano que le agarre me la puse en la verga sobre el short, se asombró y me dice:
Lenchito: A su tío pero es que la tienes muy grande no creo que me entre en la boca.
Yo: jajaja lenchito tranquilo que si no te cabe no importa solo quiero que le des unos besitos y unas chupaditas como si fuera un heladito.
Me baje el short ante sus ojos con toda la intención de que disfrute de mi verga, y cuando la vio, se abalanzo sobre ella para darle unos besos y comenzó a darme una muy buena mamada de verga como lo había visto hace unos minutos en mi televisión, se dio una entretenida rica con la cabeza, al tronco y hasta los huevos, intento metérsela toda, pero le provoco arcadas, aun así, ya lo tomaba de la cabeza y nuca para que mi verga le entrara hasta garganta, lo empecé a acariciar por todo su torso hasta llegar al culito sobre la ropa, tenía sus nalguitas bien redonditas así de niñito pequeñito.
Le dije que se quitara su ropa que estuviera más cómodo que yo también lo haría, me quite la playera y me quite por completo el short, los dos quedamos encueritos en media sala, su pene era realmente pequeñito estaba en erección y no llegaba creo ni a los 5 cm, le pedí que se parara del sofá y se volteara, lo empine sobre el sofá, por primera vez, vi un culito de nene ante mis ojos no lo podía creer pero si sabía que la reventada de culito no tenía vuelta atrás, en verdad era hermoso parecía un culito de mujer, lo comencé a tocar, lo tenía suave y terso parecía un duraznito, él se estremecía cuando le pasaba mis dedos por la raja de sus nalgas, no aguante más y le deje ir un lengüetazo en el culito, pego un brinco.
Lenchito: Ay tío me hace cosquillas, ¿qué me puso?
Yo: jaja te puse un buen salivazo pa´ que se te vaya amaestrando el culito chiquito.
Lenchito: Ay tio no se que sea eso pero que rico sentí jeje póngame más.
Sin mas ni mas me volví a abalanzar a su culito delicioso dispuesto a darle tremenda comida, el niño gemía de placer.
En una de esas volteo y con cara de asustado respingo y me quito el culo de la boca.
Lenchito: Tío no lo que me estás haciendo es con tu boca y con tu lengua eso no está bien.
Mi mamá me ha dicho que no me deje tocar por nadie la cola y el pipi.
Yo: Pero si te está gustando no hay problema.
Te dije que te haría y enseñaría cosas ricas de hombres y tu dijiste que si querías.
Entonces vente.
Lo agarre a la fuerza y le dije- aparte tu hiciste algo malo primero y yo prometí no decirle nada a tu mamá – lo puse de perrito otra vez en el sofá – entonces estamos a mano y déjate que te enseñe cosas ricas y nada de mariconadas de decirle a tu mamá.
Fui jugando con su culito, pasando mi lengua por ese hoyito, presionándola para que entre, estaba muy cerradito.
Me puse de pie y lo voltie para que me mamara la verga otra vez, la verdad me encanto su culito lampiño, le saque la verga de la boca, lo puse en cuatro patas, y comencé a darle una mamada de culo otra vez se estaba retorciendo de placer, gimiendo y gozando con esa mamada.
Yo:Lenchito la tengo muy gorda y grande, te voy a lastimar, pero t la quiero meter- estaba caliente y quería romperle el culito a mi sobrinito, me lubrique la verga bien con saliva, así como su culito, puse la punta de la verga en la entrada de su culito pero no entraba bien, le hechaba mas saliva directa con unas cuantas metidas de lengua le meti un dedo y luego otro le empece a abrir el culito con los dedos pero de manera urgente porque ya le quería meter la verga de un madrao y no podía lastimarlo, su mamá podía llegar en cualquier momento por el y tnia que apresurarme a culiarlo, volvi a poner la punta de mi verga en la entrada de su culito y empuje un poco por fin paso la cabeza, pego un grito de dolor pues estaba expandiendo en su máximo explendor con mi verga el esfínter de mi sobrinito de apenas 5 añitos, el se me quizo safar y me pidio que se la saque le dije que no que se agunatara tantito que se la hiba a dejar a dentro un ratito para que se le acostumbrara el culito.
Asi lo hice pero luego como de 2 minutos comencé a moverlo de las caderas en vaivén para que me lo pudiera coger.
Comenzo a llorar.
Lenchito: No tío me duele sácala de mi culito eso me duele ya no aguanto quiero que venga mi mamá por mí.
Yo: Mta.
Pareces niña te aseguro que otro de tus amigos si le enseño estas cosas de hombre si aguantan más que tú, eres muy chillona.
Te la voy a sacar y ahorita que venga tu mamá le voy a decir lo que te encontré haciendo en la sala de mi casa.
Seguro que te va poner como campeón con unos correazos.
Y esos no los vas a disfrutar como pudieras disfrutar este pedazo de verga que yo te estoy dando.
– Y yo me menaba la verga parada con una mano enseñando de lo que se perdía.
Lenchito: No tío –Comenzó a llorar desconsolado- No le digas a mi mamá porque me va a pegar y ya no me va a dejar jugar nunca más.
Yo: jaja no llores pareces niña, Ya vez, pues entonces ponte a disfrutar lo que yo te estoy enseñando y no le decimos nada a tu mamá ya te dije que no te voy a lastimar si te duele es porque a tu cuerpo le está gustando y en un rato más se te pasara.
Me senté en el sofá y me recosté, dejándole ver mi verga que la tenía bien parada y le dije tienes que sentarte aquí en la verga poquito a poquito tu hazlo solito.
Se me monto, se acomodó y dirigió la entrada de su culito a la cabeza de la verga, fue bajando poquito a poquito mientras yo lo ayudaba tomándolo de las caderas, se la iba metiendo lentamente hasta tener la cabeza de mi picha adentro, seguro sentía dolor pero lo aguantaba cerraba los ojos y los apretaba fuerte, no se detuvo hasta tenerla toda adentro, me pidió que no me moviera, podía ver en su rostro hermoso, un gesto de dolor, placer y no sé qué más, lo agarre bien fuerte de las caderas y comencé a moverlo hacia delante y hacia atrás para que aprendiera a cabalgarme como su macho.
Yo: Eso mi así, asi cabálgame como caballo así que te entre el camote hasta las entrañas cabron.
Así asi tiene que hacerle… ahora tiene que dar brinquitos despachitos.
Ándale así.
Comenzó a subir y a bajar para que mi verga le entrara le saliera con un excelente vaivén la neta me tenía bien caliente ver cómo le entraba todo el camote al culito chiquito de mi sobrinito como si fuera barra de mantequilla y como sus huevitos y su pichita brincaban como canicas,
ese culito infantil me apretaba la picha a mas no poder, me la ahorcaba literalmente, el comenzó a cabalgar lentamente sacándose no más de la mitad del pito, y luego nuevamente hasta el fondo me lo estuve cogiendo como 5 minutos, y le dije que me lo quería coger de a perrito, se la saque y lo empine en el sofá y se la coloque otra vez en la puerta del culo, que para ese momento ya lo tenía bien abierto y bien coloradito, comencé a penetrarlo, y al sentir que entraba mucho más fácil, se la deje ir toda de un solo golpe, hasta que mis huevos rebotaron con sus nalgas, el pego un grito de placer y dolor.
Lenchito: Aaaaayy!! Tíoooo me Dueleeee!!
Yo: Aguantala que se te va pasar cabrosito.
Lenchito: Ah haa ah haaa tío ya ya ya suélteme mejor así no.
Yo: Si así si.
Aguanta la verga como los machos.
Que tu eres un hombre ya.
Yo te estoy haciendo un machito.
Y lo envestía con fuerza.
Me lo cogía fuerte y profundo, comencé a bombearlo duro, se quería zafar y lloraba estaba perdiendo fuerzas por las embestidas y la tremenda violación que le estaba pegando pero no lo podía soltar porque me tenía muy caliente el hecho de que no se dejara y de que la estaba sufriendo, sentía la verga que me iba a explotar, le dije que quería dejarle la leche en el culito pero que mejor se lo echaría en la cara para verlo disfrutar, le saque la verga bien parada y jugosa del culo y se la di a mamar, y comenzó a comerla toda, explote, y comencé a venirme dentro de su boca, el como buen putito hambriento hice que se la tragara.
Yo: Trágatela toda que eso te hace más hombrecito y te da vitaminas para que seas grande y fuerte.
Lenchito: Tío –Llorando- Me duele mucho la colita ya no quiero que me enseñes más cosas de hombre porque si no me vas a matar y yo no me quiero morir.
Yo: Jaajaja lenchito que cosas dices entre más te enseñe más las vas aguantar no te vas a morir al contrario te hace mas fuerte, creceras mas rapido y te haces mas hombre así como yo, a mi un tío también me enseño estas cosas y mírame aquí estoy vivo y bien grande.
Asi que no te asustes ya para la otra no te va a doler tanto y es más para que no te sientas mal el sábado te voy a regalar una sorpresa ya para que no llores.
No me gusta verte llorar porque tu eres y seras mi sobrino consentido ven que te voy a chiquear.
Y ya sabes he que esto que yo te enseño es secreto de amigos y no tienes que contárselo a nadie porque si no ya sabes que le voy a decir a tu mamá.
Lo cargue y lo acariciaba y le decía cosas cariñosas para que ya se sientiera bien, lo vesti y lo volvi a cargar para chiquearlo.
Se quedó dormido en mis piernas.
Lo acosté en el sofá, me vesti y sorpresivamente su mamá ya estaba tocando a la puerta para llevárselo.
Quiero comentarles que mis relatos no son reales.
Algunos de ustedes podrán identificar que hay fragmentos parecidos a otros relatos porque de ellos me baso para escribir y transformar relatos.
Repito no lo hago con la intención de molestar a nadie ni de plagiar a nadie.
Solo me agrada darle un giro diferente para satisfacer el gusto de algunos lectores.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!