Lo conocí por Internet y por fin me hizo suyo en persona

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola, soy de México DF y éste es mi primer relato, espero les guste 😉

Mi nombre es francisco y hace dos años conocí a Pedro por facebook.
Todo empezó con un “Hola” “¿Cómo estás?” y ese tipo de cosas, el vive en el estado de Coahulia, un día entre platica y platica me pregunto sí era gay, a lo que contesté que no, que yo no era así y ese tipo de cosas que uno dice cuando aún es closetero.
Todos los días platicábamos, cualquier tontería era tema de conversación, y de repente un día me pregunta qué sí había tenido una conversación cachonda, yo la verdad no sabía que decir, supuse que era una insinuación yo me había encariñado con él, pero ni modo de decirle que en verdad si era gay, entre todos mis pensamientos me limité a decirle que nunca había hecho algo así, el me preguntó sí no me interesaba tener una conversación así con un hombre, le dije que no y así empezó todo. Tuvimos una conversación creando una historia de cómo haríamos el amor, yo me excite al igual que él, me dijo que un día en verdad me cogería y cumplió su promesa.

Dejamos de hablar como 6 meses, un día estaba cenando con mi hermano, mis padres se habían ido a ver a mis abuelos, así que solo estaba yo con mi hermano, mi celular en su celular y yo en el mio, una llamada a mi celular me sacó de onda, era un número que no tenía registrado, casi nunca contesto números desconocidos pero éste fue la excepción, conteste y una voz sensual, me dice: “Hola Fran, vengo a cumplir lo prometido”

Era Pedro! Mi corazón saltó, me estremecí tanto, me quede inmóvil, no sabia que decir, simplemente quería que él siguiera hablando.

Yo: ¿Pedro?
Pedro: Ven por mí, no sé cómo llegar a tu casa.
Y: ¿En dónde estás?
P: En el aeropuerto, cerca del metro.
Y: Oh vaya! Ya voy, no tardo.
P: ¡Oye!
Y: ¿Qué pasa?
P: ¿Tienes lugar?
Y: Sí que lo tengo.

Me salí rápido, por suerte vivo a menos de cuarenta minutos del aeropuerto, así que me fui en metro.
En el camino sentía emociones revueltas, miedo, deseo, temor, angustia, me sentía excitado.

Salí, le marqué, volteaba a todos lados, no lo veía, solo sonaba el maldito bipppp, bipppp, en cuestión de segundos sentí que alguien me soplaba por atrás de la oreja, asustado volteé y era el, salté sobre él, lo abracé, lo vi por un momento y me besó.

Y: ¡Qué haces aquí! No lo puedo creer, Ay Pedro…!!
P: Te extraño, además te prometí algo y vengo a cumplirlo.

Todo el camino a casa hablamos del por qué ya no hablábamos y esas cosas.
Al llegar le advertí que estaba mi hermano y no podíamos hacer ruido pero al entrar me encontré una nota de mi hermano que decía que se fue a una fiesta y regresaba mañana.
Tanto Pedro como yo nos alegramos.
Nos tomamos unas cervezas mientas hablábamos.

Ya estábamos algo mal, al menos yo si, dejamos de hablar solo seguíamos tomando, yo quería que eso ocurriera de una vez, estire mi brazo para agarrar otra cerveza, pero mi mareo no me lo permitió, y quede acostado en su pierna, vi la erección que ya traía Pedro así que tomé fuerzas y me aventé hacia ese rico miembro, hundía mi cara en ese Hermoso paquete, lo lamía por encima del pantalón, Pedro se estaba cada vez más.

Después de varios minutos así le empecé a desabrochar el cinturón y el pantalón hasta que se lo quité, ahora hacia lo mismo por encima del bóxer, Pedro me detuvo, me dijo que nos fuéramos a mi habitación, Pedro me cargo y me beso, el empezó a subir las escaleras y por fin estábamos en mi habitación.

Él me dijo que continuará así que lo hice, le lamía el pene por encima del bóxer, olía delicioso yo ya no aguantaba, estaba tan excitado que le quité el bóxer y deje liberar su erección, su pene era moreno, de cabeza roja, peludo, unas bolas peludas y deliciosas, empecé a lamer todo, de arriba a abajo, sentía que vomitaba pero era más mi deseo, lamía sus bolas, las saboreaba, entre ratos me levanta para ver la cara de Pedro, quería ver su cara de excitación, me gusta ver como Pedro se desvanece con una mamada, Pedro estaba acostado, no quería que ésto terminara, quería tener su pene y sus bolas en mi boca para siempre.
Pedro se vino en mi boca, su semen salado, me encanto, saboree cada gota de su exquisita leche.

Pedro se sentó en la cama me levanto, me besó y me dijo, ahora es mi turno.

Yo seguía vestido así que empezó quitándome la playera, pedro besaba mis pezones muestras acariciaba tanto mi culo como mi pene, yo solo echaba mi cabeza para atras, empezó a quitarme el pantalón y el bóxer me empezó a lamer el pene de una forma particular, sentía que me iba a venir en cualquier momento

P: No puedo creer que esperé tanto tiempo para ésto, eres… Delicioso chico no gay.
Y: Cállate y sigue

Mi cuarto estaba lleno de gemidos, tanto míos como de él, me vine en su boca, se acostó sobre mi, me besó, su beso que me supo a semen, mi semen.

Nos besamos un buen rato, lo masturbaba, el me abría el culo con sus dedos que de vez en cuando se metía a la boca.

Y: Metemela ya
Pedro me vio me sonrió y me puso en cuatro

P: Con o sin globito?
Y: Sin, quiero sentirte al natural

Pedro empezó a tallar la punta de su hermoso pene en mi culo, yo empujaba mi culo hacia el, para que lo hiciera de una vez

P: Tranquilo
Me decía que me tranquilizara, pero no podía.

Me tomó del culo y me lo metió todo, ahhhh- lancé un pequeño quejido
Pedro empezó con un mete saca lento, eso me gustaba, pero yo quería más, así que el empezó con unas embestidas que me hacían gemir una a una, el igual gemía, cuando me di cuenta el ya estaba más rápido y con unas de sus manos estaba masturbándome, se acostaba en mi, me besaba la espalda, sentía su sudor fusionarse con el mío.

P: Estás sangrando, quieres que me detenga?
Y: Yo quiero que tu sigas

Apenas termine de hablar siguió con esas embestidas, terminó en mi ano, se agachó y me lo lamió, nos acostamos, nos besamos.

Creí que todo había salido bien, pero salió mejor, abrieron mi puerta, era mi hermano, se nos unió, pero eso es otra historia…. :33

Espero les allá gustado, espero sus comentarios…