Lo disfruté, pero no lo diré.
Imagínate un tipo física y personalmente repulsivo, ponle un pito grueso, hermoso y eso fue lo que me pasó.
Hay un “señor” que desde hace mucho me insinuaba cosas, no es pero que si nadita atractivo, ni si quiera tiene una personalidad agradable, es un amigo de mi papá, más joven porque mi papá ya acumuló más de 8 décadas y este señor debe andar en sus 60 y tantos.
Lo describo rápidamente porque así se facilita imaginar porque lo considero desagradable, siempre anda sucio, no sucio de porque haga trabajo que implique ensuciarse, sucio porque no se baña y tiene un olor que en mi pueblo se describe como acedo, como leche agria… es bajito, gordo y por su estatura de a penas 1.60 se ve más gordo, creo que son físicamente sus personales que más resaltan; en cuanto a su personalidad es mujeriego (tiene hijos por todos lados, no sé como alguna mujer le sigue creyendo que ahora si es un hombre responsable si no mantiene a ninguno de sus hijos), también es de esas personas imprudentes que hace comentarios misóginos, homofóbicos y todo lo políticamente incorrecto, lo peor es cuando se enoja al llevarle la contraria y según él nadie le “gana” la realidad es que simplemente la gente se fastidia y le dicen que si a todo, por ultimo sus bromas… pésimas bromas.
Cómo dije es amigo de mi papá… o mejor dicho conocido por unos conocidos, es de esos señores que andan colándose en todas las fiestas y reuniones para comer y beber gratis, nadie lo invita, solo escuchó por alguna razón y ahí llega.
Total, que cuando ya anda entrado me hace miradas, se agarra el paquete, me guiña un ojo y yo lo ignoro. Retomando el día que todo pasó pues un padrino mío nos invitó a la boda de su nieta y ahí vamos, estaba este hombre que se fue a sentar en nuestra mesa y ya sabíamos que sería una velada bastante incomoda, pero no queríamos adelantarnos a lo que pudiera suceder. Un hijo de mi padrino con quien siempre me llevé bien por ser casi de la misma edad fue a tomarse un trago conmigo y platicar, notaba las miradas de parte de este sujeto de nombre Ezequiel “cheque” le dicen todos.
Mi familia se fue a las 11 y yo me quedé porque varias hijas de mi padrino y nietos etc. Etc. Iban a sacarme a bailar en grupo, tomarse una cerveza y platicar, pero yo ya no estaba en la mesa con el cheque, ya me había cambiado porque lo vi ebrio y se pone aún más insoportable.
Casi al finalizar la fiesta fui al baño y ahí estaba él, tambaleándose de un lado al otro, orinando frente al mingitorio que es largo y sin separaciones, yo también iba a orinar, pero todos los baños ya estaban hechos un asco, pero un asco en serio… así que me fui a la otra orilla del mingitorio y empecé a orinar.
-Eh… y tu pa?
Volteé a verlo rápido y le dije – ya se fue- y ahí vi una cosa… gorda… larga… morena… flácida… hermoso pene con dimensiones que si he visto antes, pero no tan frecuentemente.
-Pos´te toca llevarme a mi casa
-¿yo por qué?
-Ándale y te enseño el pito- Comenzó a agitarlo y parecía una hélice haciendo círculos en el aire.
-No gracias
-Ta´bueno pues…
No insistió y se salió, yo volví a la mesa, hicimos de los últimos momentos de la fiesta algo memorable y salimos todos, yo primero porque ellos de anfitriones aún se despedían de los últimos invitados. Manejando veo al cheque recargado en un poste.
-Ya casi llegas
Le dije desde la ventana del auto.
-Mjmmgjjjm
No le entendí nada y a pesar de que era un tipo odioso pues lo subí al carro para llevarlo a su casa. Cuando bajé el wey tenía el pito de fuera y había acabado de orinar pero por andar tan pedo se quedó ahí medio dormido sin poder guardarse el pene.
Así lo subí, pero al acostarlo atrás no pude evitar darle una agarrada a su pito, se sentían unas venas muy ricas, suavecita la piel, grosor de no mames y eso que estaba solo un poquito parado.
Llegamos a su casa y le busqué las llaves y de nuevo una buena manoseada, después estuve probando cual abría su puerta, total que la encontré y antes de despertarlo para bajarlo le guardé el pito y ahora si, batallé en eso pero al fin medio despertó, su mirada iba de un lado a otro, no le entendía mucho de lo que decía, pero lo bajé y más cargado que de pie propio llegó a una cama, ni idea si era su cuarto porque vive solo, pero tiene varios cuartos de cuando se casó (obvio se divorció) y de cuando sus padres aun vivían, ahí lo aventé a la cama y para no dejar pasar la oportunidad le quité toda la ropa… de verdad que vestido era feo… pero desnudo era peor… parece un sapo, con la panza para arriba, solamente ese pene tan divino que la neta dije… “el que no arriesga se queda con las ganas” y haciendo uso de mis dotes en el arte de la felación lo dejé parado rápido, para ese momento este tipo ya hablaba en murmullos, pero se entendía mejor y sus “si, mmmh, cómetelo” ahora eran lo que escuchaba, no sé si sabía que era yo… pero pues ahí estaba yo de rodillas comiendo un pene hermoso de uno de los seres más despreciables que en mi camino se han topado.
Por ultimo y ya con su pene bien ensalivado me empecé a sentar en él, me quité solo un zapato y una pierna de mi pantalón, estaba usando un jockstrap que no hizo necesario más, ensalivé mi entrada y me empecé a sentar en él, sus manos se clavaron en mis caderas y hacían fuerza para entrar de una, pero con mis propias manos bien afianzadas en sus piernas impedía eso, de hacerlo así era seguro que me iba a lastimar y mucho, así que lentamente comencé a dejarlo entrar, fue difícil, pero esa tarde antes de la fiesta había tenido un pequeño encuentro que me tenía aun un poquito abierto. Al fin después de mucho movimiento estaba casi todo adentro, solo unos 5 cm faltaban y ahí si lo dejé dominar, quité mis manos y las suyas me sujetaron más fuerte para jalarme hacia su pelvis, uuuuffff esos últimos 5 centímetros fueron gloria, casi me vengo en seco, comencé un sube y baja despacio, pero mi culito estaba deseoso de ese pene divino y en minutos estaba subiendo y bajando por ese mástil gordo, subía hasta la punta y luego dejaba caer de una sola mis nalgas abrazando su pene con mis paredes anales, él pujaba y me decía que apretaba bien rico, me nalgueaba de vez en cuando, me hacia sentir la gloria la verdad, quizás por el nivel de alcohol y realmente así dura, pero fueron como 25 minutos en los que lustré ese pene con mi interior, al final se vino dentro y quedó dormido, lo saqué antes de que se pusiera flácido, quería una foto de ese pene tan hermoso.
Me vestí, dejé sus llaves a un lado, salí y me fui, la verdad cuando la calentura me pasó me dio mucho asco, pensamientos como “que bajo caíste, que vergüenza, etc” vinieron a mi mente, o sea… he hecho cosas peores, pero esto que yo siempre dije “ni de chiste como ahí” y al final caí, pero viendo la foto de su pene me volví a calentar, me hice tremenda chaqueta que acabé un montón de leche.
Varios días pasaron y una tarde fui a comprar algunas cosas de despensa, me quedé sentado en el jardín principal comiendo un helado y llega este tipo muy confianzudo.
-¿Qué paso jotito?
-¿perdón?
-¿Qué? pos si te gusta arto el pito, estabas puje y puje con mi verga
Aparentemente este es de los borrachos que si recuerdan toda la borrachera.
-A ver que día vas a echarte otros brinquitos, ya sabes.
En eso el hijo de la chingada, sapo parado, se sacó el pito por una pierna del short que traía, era de esos para jugar futbol (dudo que haga algún deporte pero seguido viste así) y se la acaricia dejando el glande fuera del prepucio… maldito… eso me mata; aprovechando que nadie volteaba o tenía visión directa a nosotros pues bajé la mano y la empecé a sobar, con la gente pasando detrás, otros sentados por ahí (era miércoles en la tarde, no había mucha gente a esa hora), policía en la esquina parado viendo su teléfono y yo haciéndole una chaqueta… la neta hasta me escupí la mano para hacerle mejor trabajo y a los 10 minutos por el morbo y la calentura se vino, todo su semen (que no era poco) cayó en la palma de mi mano.
-Sobres, cuando quieras jotito.
Se fue y yo me quedé ahí con su semen en la mano, con el resto de helado que quedaba en mi vaso y usando la cucharita lo mezclé y me lo tomé, este pinche viejo sabía ahora que tengo un lado morboso que a penas lo provocan poquito hace muchas cosas por satisfacerse.
He tenido más encuentro con él, una vez me lo encontré en otra ciudad y el wey me metió a un baño público, me cogió como si que cosa y le valió madres cuando unos chavitos entraron y nos escucharon. También una vez durante una procesión de semana santa (acudo a petición de mi madre, no por que me guste mucho) me arrinconó y me llevó delante de la procesión, adelantamos dos cuadras y en un callejón paralelo y solo (todos estaban viendo la procesión) me la metió y se vino dentro de mí. En otra ocasión me llevó a su casa y mientras estaba yo ahí llegó una mujer que iba a lo mismo, me dejó a mi en el cuarto y llevó a esa mujer a la sala, escuché como gemía la pobre con semejante grosor, al final dio un quejido largo y se fue, en todo ese tiempo yo seguía desnudo en el cuarto.
-Lávatelo antes de seguir si quieres seguirle, porque se lo acabas de meter a esa vieja.
-No… pos si se lo metí con condón y ni se los eché para juntártelos a ti.
Se subió en mi y si efectivamente seguía duro y si me llenó de muchos mecos.
Un día lamentablemente me enteré que lo atropellaron, murió en el lugar, tengo un montón de fotos de su pene, para recordarlo. Siempre me preguntaba si me gustó, nunca le contesté que sí, que por eso volvía siempre por más.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!