Lo que aprendi en el orfanato

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por ronaldmancos.
Hola quiero contarles lo que me sucedió en los tiempos de mi niñez, cuando me enseñaron lo rico que puede ser el sabor de un pene.

Resulta que me encontraba internado en un orfanato de Lima, muy cerca al mar, estaba aislado de mi familia que era pobre, mi madre sin marido y con siete hijos que mantener . El servicio social vio el caso y nos internaron a mi y a dos de mis hermanitos menores en el orfanato . A mis hermanitos los mandaron con los mas chicos y a mi que tenia 11 años me ubicaron con los grandes. Me dieron el dormitorio 4 y allí es donde viviría una experiencia inolvidable.

Cuando me llevaron a dicho dormitorio vi era un pabellón antiguo de techo muy alto ,amplias ventanas las camas formaban hileras en el amplio dormitorio y me percate la presencia de algunos chicos de mi edad y otros mayores de 13 a 17 años todos ellos vestían uniforme de soldado color beige. No habia muchos chicos porque era verano estaban de vacaciones y los que tenian familia habian salido a sus casas solo quedaban los huerfanos totales ; me señalaron una cama camarote y me dieron un casillero donde guardar mis pertenencias , me puse ese uniforme que para los de mas chicos como yo era con pantalón corto.

A los dos dias ya sabia la rutina del orfanato: levantarse, asearse, arreglar el dormitorio, tomar desayuno, ir a talleres, almorzar y en la tarde ver TV, ir a la piscina (lo mejor), cenar, ver otra vez TV y luego dormir.

Al tercer día en horas de la tarde estaba muy cansado y fui al dormitorio a tomar una siesta mientras los otros niños miraban tv y el auxiliar dormitaba . Estando solo allí sentado en mi cama entro un chico grande de 16 años, era el que estaba a cargo del dormitorio, es decir el jefe, y se sentó en la cama frente a mi y me pregunto:

-Como te llamas chico nuevo?

– Me llamo Rodolfo, le dije.

-Yo me llamo Ricardo ¿Eres huerfano? Le dije que no y le conté la razón porque estaba internado .

Entonces me percate que me miraba las piernas , como yo usaba un pantalón corto las mostraba totalmente.

Entonces me dijo de la manera mas natural:

– Bueno chico nuevo como bienvenida a la institución tienes que hacerme una una paja-

Yo no entendí bien, pero vi. que se agarro el pene sobre el pantalón y al momento se formo un bulto que levantaba la tela como una tienda de campaña de los scouts .èl se la apretaba mirandome con una sonrisa libidinosa y me dijo:

-Esto es para ti chico nuevo, y será todo tuyo, ven siéntate a mi lado para que me pajees.

Yo me quede mudo y no me moví de mi cama; al verme quieto me dijo molesto:

-¿Qué te pasa , acaso no sabes que aquí los mas chicos tiene que dar gusto a los grandes cuantas veces se lo pedimos? Y si no obedecen, les golpeamos duro hasta hacerlos llorar …¡Asi que será mejor que me obedezcas!

Así, con tremenda la amenaza, rápido me senté a su lado.

Ya con otra voz mas seductora me dijo pasandome el brazo por el cuello

-¿No sabias eso, no sabias eso chico huevo (al nuevo le decían chico huevo) que los mas chicos parecen niñas y por eso deben dar gusto a los grandes?-

Yo negué saberlo moviendo la cabeza y estaba temblando asustado, entonces bajo el ziper del pantalón y aparecio ante mis ojos una gran pinga , me tomo la mano y dijo este es tu nuevo amigo, tomo mi mano y la puso sobre su miembro viril y la apreto en torno a el , senti que estaba caliente y que iba creciendo mas y mas, entonces me soltó la mano y me dejo hacerlo solo .

Yo suavemente apretaba y movia de arriba abajo

-MMMM que rico, aprieta mas, mas – Otra vez tomo mi mano y me enseñó como hacerlo… vi como sobresalía , la punta de su pene mas oscuro ,sentí el calor de su miembro y ciertas pulsaciones y de pronto comencé a perder el miedo y a sentirme bien haciéndole eso.

Asi lo pajee largo rato y en un momento me pregunto que si ya me habían metido la pinga en la boca o todavía.

A lo que yo dije que todavía, como si eso me tuviera que pasar obligadamente

Entonces me dijo susurrando a mi oido:

– eso es bien rico, te va a gustar, chupar la pinga es delicioso –

sentía su respiración en mi oreja seduciéndome y eso me éxito

-Chupamela chico huevo -me dijo susurrante pero con firmeza

Como yo sabia que una negación lo enfurecería me agache y abri mi boca al maximo metiéndome la cabeza del pene lo mas que pude

Asi una pinga inaguraba mi virginal boca a los 11 años.

De pronto se puso de pie frente a mi, su cosota a centímetros de mi cara, era mas grande de lo que hubiera imaginado, me la colocó a la altura de la boca y me dijo :

-Abre la boca-

Al hacerlo, me tomo de los hombros y sentí su verga entrar en mi boca la tuvo allí un rato, yo movia mi cabeza un poco a los lados, para salirme pero no podía .

Asi en el silencio y soledad del enorme dormitorio yo chupaba la primera pinga de mi vida , y sentía el sabor de la pinga adolescente, un tanto desaseada porque así la tienen los chicos a esa edad , conoci el sabor del presemen , gotitas que mojaban mi boca; era todo nuevo para mi.

Me dijo que abriera más la boca y que con los labios apretara suavemente pero que no usara los dientes, lo hice y sentí como toda esa gran pija se metía hasta mi garganta y luego salía en mi boca. Al inicio me dieron arcadas pero me contuve, luego empecé a acostumbrarme mas al mete y saca que me sometía.

Aguanta me dijo y la metio otra vez hasta mi garganta , yo pasaba saliva y lagrimeaba , ahí se quedo un rato Yo lo observaba y veía como sus ojos se mantenían cerrados y se entreabrían con el placer , jadeaba y decia- que rica boquita tienes- me agrado que le gustara lo que le hacia con mi boca , luego la sacó de un golpe y me dijo que jugara con sus huevos. Comence a sopesarlos con curiosidad con mis manos con los sostuve, los pese , los acaricie en mis manos eran realmente grandes todavía no sabia que contenian la leche de hombre que me llenaria muchas veces ese año el intestino y el estomago. , los bese con mis labios humedos y a pasar mi lengua por los duros huevos del chico me senti completamente dominado y que asi calmaba su agresividad , era mi sumision total al joven macho.

Me dirigí a su polla nuevamente y el quiso que lo besara en todo alrededor de ella, que le pasara la lengua y escuche unos quejidos que salían de sus labios cuando lo hacía. Di unos mordisquitos y eso le agradó mas, por iniciativa me metí de nuevo su pollón en mis labios y lo comencé a chupar como loco mi actitud era ahora de puto . y lo hacia con mas y mas ansiedad como hambriento y de pronto algo ocurrio, sentí una explosión de su esperma en mi boca, se me llenó toda de esa leche de hombre, varios chorros llenando mi boca y garganta yo como que hice arcadas y no solo trague su leche una vez sino varias veces, era abundante y me chorreaba por los labios hasta mis muslos , él siguió moviéndose por unos instantes mas. yo lagrimeaba culminando mi primera mamada, el semen me mojo las piernas.

Lo que no sabia es que él disfrutaba de eso,por mi sometimiento y humillación, mis lagrimas eran mas gusto para el como macho posesivo yterritorial. Me dijo desde hoy eres mi esclavo y mi chupapinga principal, desde ese día,me domino totalmente me hacia tenderle la cama y que hiciera sus trabajos de limpieza ,después la oportunidad de hacerlo a escondidas de los auxiliares …se presento casi todos los días, nos cuidamos de los auxiliares no asi de los otros chicos que nos espiaban y se reian de lo que me hacia, estuve dos años y sali marica del lugar donde me enseñaron lo rico que es el sabor de un pene.

Contarles como me empalo por el culo es otra historia que ya les contare, así como otros chicos del orfanato se aprovecharon de mi debilidad por la pinga.

Y aunque ahora soy adulto y gay un experto en mamadas esa siempre la voy a recordar como la primera y más deseada.