Los 3 novios
«te presento a mi marido, su nombre es Sergio» … de unos 60 años mas o menos, y bastante gordo … “y mira, él que esta en la cocina es nuestro novio, Diego” … es bastante gordo también, aunque no tanto como Sergio.
En las series de Netflix y otros medios es muy de moda que la parejita de la serie añada a alguien más y se vuelvan felices siendo novios entre los 3, la verdad es que nunca pensé encontrarme con ese tipo de relación en la vida real, si bien puede que las encuentres en una universidad o en otro lado donde la gente joven tenga relaciones poliamorosas; nunca me imagine encontrarme un noviazgo de 3 en unos maduros…
Como siempre inicio describiéndome un poco, mi nombre es Daniel, actualmente tengo 21 años, delgado pero marcado por el gym, unos 18 cm de verga y unas nalgas bastante firmes; mi fascinación desde que soy bisexual han sido los hombres maduros y/o gordos.
El relato de hoy me paso hace unos años, teniendo yo unos 19 años, no recuerdo muchos detalles sobre nuestras conversaciones, así que les contaré según yo recuerde como se dieron las cosas, los protagonistas de esta historia son mis vecinos, de los cuales como ya mencioné manejan una relación de 3; el primer vecino que conocí es si mal no estoy el más joven de los 3, aunque decirle joven estaría mal, pues hablamos de un señor de unos 50 a 55 años.
Todo comenzó cuando estaba de visita donde otro de mis vecinos; del cual no daré muchos detalles pues creo que merecen su propio relato, pues son 2 gemelos que viven en los apartamentos frente al mío; estos dos también son señores gorditos con los cuales tuve el placer de coger; pero bueno como digo eso es para otro relato, el punto es que mientras estaba de visita donde los gemelos, este señor de 50 a 55 años pasaba a pedir algo, honestamente no recuerdo que era, se que hablaron algo de cocina pero poco más, por simplificar digamos que fue azúcar.
Físicamente estamos hablando de un señor algo gordo, sin nada de cabello en su cabeza pero si una barba bastante corta, de color blanco y gris, vestía una camiseta blanca sin ningún estampado y unos shorts de tela color caqui, unas crocs blancas y poco más
Este señor al verme en la sala me saludo muy amablemente y con un carisma que me llamo muchísimo la atención, se presentó ante mi, su nombre es Gabriel y vive en el apartamento al fondo del pasillo del de los gemelos, yo me presenté también y le dije que vivía en la torre de apartamentos de al frente, las presentaciones solo duraron un par de segundos en lo que uno de los gemelos buscaba el azúcar y le daba un poco a Gabriel, una vez entregada el azúcar, Gabriel agradeció y nos comentó que su novio estaba de cumpleaños al próximo día, e invitó a los gemelos a su apartamento.
Ver que este señor de 50 y tantos años decía sin muchas trabas que tenia novio me llamó la atención y me fascinaba la idea de ver a este señor teniendo sexo con otro hombre; no se si fui muy evidente o no pero el gemelo al escuchar esto le dijo a Gabriel que no podían ir, pues su hermano no estaba en casa esa semana y él también iba a irse, que de hecho por eso me había llamado a mi, para que le cuidara la casa y también a su gato, a lo cual añadió diciendo que debería invitarme, esto ultimo lo decía con una sonrisa en su cara que en ese momento no entendí.
Gabriel volteó a verme y con una sonrisa también me reparaba de pies a cabeza, acto seguido vuelve a ver al dueño de la casa y le pregunta en voz baja “¿seguro?” A lo que responde con un movimiento de cabeza de arriba a bajo afirmándole, luego de esto nos dice a Gabriel y a mi “Bueno, no es por echarlos de mi casa, pero debo salir a comprar unas cosas para mi viaje, disfruten la fiesta” otra vez riéndose entre él y Gabriel, una vez salimos del apartamento, el gemelo salió casi que corriendo al ascensor que quedaba en dirección contraria al apartamento de Gabriel.
Fue en este momento donde recibo mi invitación, “Entonces Daniel, cuento contigo mañana?” Me preguntó “Si, como a que hora?” Le pregunto yo “Mmm a eso de las 8 mas o menos, aunque realmente puedes llegar cuando sea, solo estaremos nosotros” me responde, a lo que yo súper intrigado le pregunto “y eso? Solo van a estar ustedes? Que se va a hacer? Una cena?” Mas que todo pensando en qué me iba a poner para ir hacia allá, si era algo mas formal o informal. Luego de esto Gabriel suelta otra sonrisa y me dice “bueno, creo que mejor es que sepas todo antes de decidir si ir o no, la verdad es que planeábamos tener sexo junto con los gemelos” me dice con su sonrisa de oreja a oreja y bajando un poco la voz por si alguien estaba escuchando
Yo en este momento entendí todas las miradas y las señales de antes, pues para este entonces ya había tenido uno que otro encuentro con ambos gemelos; realmente no sabría decir que cara tenia en ese momento, pero no era cara de disgusto o alguna que le diera una señal de que rechazaría la invitación, por lo que Gabriel me siguió hablando luego de lo anterior, “Por lo que veo ya has estado con los gemelos, si te atraen ellos te debemos atraer nosotros” me dice entre risas “te gustaría pasar a mi casa? En este momento no hay nadie pero te puedo explicar más sobre mañana” me dice señalando su apartamento al final del pasillo, yo asentí y ambos entramos a su casa.
El diseño de su apartamento era idéntico al mío, 3 habitaciones con una sala y cocina amplias, con la diferencia en que sus muebles eran bastante elegantes y refinados, con un gran sofá cama y una televisión casi que del tamaño de la pared, yo me senté en el sofá cama mientras Gabriel dejaba lo que fue a buscar en la cocina y volvía hacia mi con dos vasos de coca cola. “Y bien, que me espera mañana si vengo?” Le pregunté “si vienes? Esperaba que si” me responde con un tono pícaro en su cara y voz “Pues no lo se, todavía no se que van a hacer” le digo, “Pues mira, aquí tenemos casi un mes de no coger, todo con la intención de darla toda el día de mañana, lástima que los gemelos no puedan venir, por lo que solamente vendrías tú” me explica entre sorbos de su vaso y sin quitarme la mirada de encima a ver como reaccionaba.
Yo estaba bastante indeciso, miraba alrededor de la sala intentando buscar fotos de su pareja a ver si también me atraía, pero en la sala solo se podía ver la gran TV y poco más en las paredes. “Mira, no vas a hacer nada que tu no quieras, si te gusta arriba o abajo tu solo nos dices, lo mismo si quieres verga o culo” me dice intentando convencerme, pero agarrando su entrepierna mientras decía lo último “Te gustan los maduros verdad?” Me pregunta “y que tal los gorditos?” Añade “Pues si, y si son ambos mejor” le respondo mientras miro su entrepierna y también sonrío hacia él “te gustaría una probadita de mañana?” Me responde mientras su bulto comienza a agrandarse y él lo agarra mostrándome la forma de su verga
Yo le digo que si con mi cabeza, mientras mi mano se acerca a su bulto “Ven pues” me dice mientras sus brazos se colocan en el espaldar del sofá, dejando su cintura cerca al borde de este y recostado hacia atrás; yo me arrodillo en el suelo, quedando frente a él mientras desabrocho sus shorts y me acerco a su miembro en lo que veo su ropa interior, tenia unos calzoncillos Calvin Klein blancos, al momento de acercarme pude notar como todo su cuerpo estaba peludo, con sus cabellos blancos y grises en todo su cuerpo, sin mucho esperar, baje su ropa interior un poco, dejando al aire su verga erecta, bastante carnosa y con muchas venas por todos lados, de unos 13 cm y bastante gruesa; con una de mis manos comienzo a masturbarle para luego llevarla a mi boca y comenzar a chupar su cabeza, miraba hacia arriba y solo podía ver su cabeza hacia atrás, con sus grandes brazos a los lados y hacia atrás, simplemente disfrutando de mi mamada
Comencé a chupársela con vigor luego de un rato, llevándola lo mas profundo que podía y luego sacándola completamente, le daba un par de besos y escupitajos y luego volvía a meterla, Gabriel gemía bastante gracias a todo esto, justo cuando pensé que se iba a venir, simplemente retiró mi cabeza de su miembro diciéndome “Bueno, recuerda que estoy guardándome para mañana, pero me encantaría que vinieras y así ves como suelto toda mi leche” me dice mientras guarda su miembro y vuelve a abotonar sus shorts “Esta bien, mañana vengo, algo que deba traer?” Le respondo mientras me limpio la boca y me vuelvo a sentar en el sofá “Pues de momento no, aquí tenemos de todo, condones, lubricante” me responde. Luego de esto me despido de él y le digo que ese día me quedaría en casa de los gemelos, así no llego tan tarde a mi casa y me puedo bañar sin ningún problema.
Las horas pasaban y yo sentía que iban super lento, estaba ansioso porque ya fuera el día siguiente a las 8 para ir a coger con Gabriel y su pareja, a quien por lo que me dijo yo asumí que también era un gordito y maduro, yo también intenté todo por mi parte por no masturbarme y guardarme mi semen para ese día, aunque lo mío no seria de un mes, mas o menos tenia unos 2 o 3 días sin correrme; finalmente llego la hora, hice mi maleta y me llevé unos cuantos pares de ropa, junto con varias cosas de aseo y me fui al apartamento de los gemelos, deje mis cosas, deje comida al gato y a las 8 en punto estaba en la puerta de Gabriel
“Míralo a él, muy puntual” escucho a alguien decir mientras abren la puerta “así es, supongo que estas emocionado por hoy” me dice Gabriel quien es el que abre la puerta; yo paso y al entrar veo a alguien en la cocina y otra persona en el sofá “Mira te presento a mi marido, su nombre es Sergio” Sergio es algo mayor que Gabriel, de unos 60 años mas o menos, y bastante gordo, más gordo que Gabriel, de lentes y con el pelo muy corto y una barba en perilla de color café oscuro, casi negro, vestía una camisa de botones azul y unos jeans que llevaba alrededor de su cintura, dejándole ver un bulto bastante deseable; yo estrecho su mano y le digo “mucho gusto, Daniel” a lo que me responde “El gusto es mío, soy pasivo y tu?” Yo le sonrío y le digo “versátil” Gabriel luego de esto añade, “y mira, él que esta en la cocina es nuestro novio, Diego” desde la cocina se escucha una voz que dice “ya salgo, deja termino aquí”
En este momento no entendía muy bien que pasaba, o si a lo mejor escuché mal y no me acababa de decir que uno es su marido y el otro su novio, “¿Que pasa? Yo pensaba que los jóvenes estaban mas acostumbrados al poliamor” me dice Gabriel “No, Si estamos jaja pero uno se espera verlo en alguien de mi edad” le respondo “¿Nos acaba de decir viejos?” Pregunta Sergio mientras se ríen “Viejo estás tú, yo solo tengo 68” dice Diego mientras va saliendo de la cocina en dirección a mi y me extiende la mano para estrecharla; Diego es bastante gordo también, aunque no tanto como Sergio, pero con menos barriga, vestía un overol que no era de pantalón largo, sino de short y abajo una camiseta blanca con un diseño que no se veía pues era cubierto por el overol, verlo de pie caminando hacia mi, me deleité con sus piernas gruesas y un culo gigante, con poco pelo en las piernas; al estrechar su mano me di cuenta de su olor a perfume, olía a hombre mayor; Diego, también de lentes y con nada de barba, solo un mostacho y en su cabeza tenia solo a los lados y atrás, en la parte de arriba ya se estaba quedando calvo.
“Mucho gusto, Diego; versátil” me dice al estrechar mi mano “igualmente, Daniel” le respondo. “Bueno, primero hay que llenarnos de energía, dame unos minutos para servir la comida” me dice Gabriel mientras entraba a la cocina y Diego se sentaba junto a mi y Sergio en el sofá; no me había dado cuenta que tan grande era el sofá hasta que fácilmente estaba sentado en medio de ambos gordos y no me aplastaban o incomodaban, aquí comenzamos a hablar un poco, me contaron de como se conocieron los 3 y de como pasaron de ser 2 a ser un noviazgo de 3, mientras comíamos la conversación siguió y cada tanto tiempo variaban entre sus historias y uno que otro comentario sobre lo que íbamos a hacer, y también hacía como tenían a alguien 3 veces menor que ellos y de lo energético que sería
Una vez terminamos de comer, poco a poco fuimos pasándonos al sofá y hablando ya no tanto de ellos y mas se sexo, me preguntaron sobre los gemelos y como los conocí, yo les conté y les pregunté lo mismo; la conversación era cada vez mas caliente y podía notar como los bultos de todos comenzaban a crecer; para ponerles en contexto, en el sofá estábamos Gabriel y yo sentados uno al lado del otro mientras Diego estaba frente a nosotros y Sergio terminaba de recoger la mesa, una vez que Sergio vuelve a la sala, comienza la acción diciéndome “Bueno niño, ya va siendo hora de que te quites la ropa” lo dice mientras caminaba hacia mi dejando ver sus gigantescas nalgas, mucho mas grandes que las de Diego y como el doble de las de Gabriel, luego de esto se agacha frente a mi y comienza a desabrochar mi pantalón casi que haciendo lo mismo que yo le hacia el día anterior a Gabriel, con la diferencia de que a mi lado estaba Diego arrodillándose frente a Gabriel.
Ver a los dos gordos en cuatro desabrochando nuestros pantalones me ponía a mil, sobre todo porque podía ver sus grandes culos paraditos hacia arriba como invitando a algo, Gabriel estaba en la misma pose que el día anterior, pero esta vez con su brazo derecho me llevó hasta él para darme un beso, sus labios y los míos se chupaban con una intensidad, mientras Sergio me hacía una mamada y Diego se la hacía a él, en medio de los besos pude sentir la otra mano de Gabriel subiendo por debajo de mi camiseta, tirándola hacia arriba para quitármela, mis manos comenzaron a hacer lo mismo, acariciando los pelos de su barriga y pecho, “Me toca, yo también quiero probarla” dice Diego mientras se retira de la verga de Gabriel y se dirige a la mía, yo me agacho y comienzo a mamarsela a Gabriel, mientras Sergio se pone de pie y comienza a besar a Gab.
“Vamos al cuarto” dice Sergio luego de alejarse de los labios de Gabriel, tanto yo como Diego soltamos las vergas de nuestras bocas y giramos hacia Sergio, quien caminaba hacia su habitación dejando ver como su gigantesco culo se movía coquetamente de lado a lado; yo me levanté del sofá y me quedé a un lado cediendo el paso a los demás, pues quería una buena vista de los culos de todos, así que luego de Sergio fue Gabriel y finalmente Diego, y luego yo. Su habitación era bastante grande, con una cama King size perfecta para los 3 y otra TV grandota en la pared, al llegar ya estaba Gabriel acostado en el medio mientras tenia a su derecha a Diego comiéndose la boca, del otro lado estaba Sergio de pie invitándome a pasar; yo comencé a besar a Sergio mientras ambos estábamos de pie, para luego agacharme y comenzar a quitarle el pantalón, una vez que sus jeans estaban abajo, le ayude a quitárselos junto con sus zapatos y luego subo a darle otro beso; todo esto mientras Diego le quitaba la ropa a Gabriel dejándolo desnudo en la cama
Finalmente Sergio se acostó en la cama también, al lado izquierdo de Gabriel, los 3 prácticamente acaparando toda la cama, boca arriba, Gabriel únicamente con las medias puestas, Diego con los tirantes del overol desabrochados y Sergio en trusas blancas y la camisa de botones; todos boca arriba y mirándome a ver que hacía, yo comencé a quitarme mi pantalón y zapatos mientras estaba de pie frente a ellos “Les va a encantar lo que Daniel puede hacer con su boca” dice Gabriel mientras sus brazos se colocan atrás de las cabezas de los otros dos “Quieren que los atienda uno a uno?” Pregunto mientras me termino de quitar los pantalones, quedando yo únicamente en bóxers; los 3 me responden asintiendo la cabeza y diciendo que si, por lo que me acuesto entre las piernas de Diego, siendo este el primero para ir yo de un lado al otro pasando por cada verga
Mis manos toman cada lado del overol y comienzo a quitárselos, dejando a la vista los Jockstrap de Diego, estos eran de color negro, con la parte que cubre la verga de color rojo, me coloco entre sus piernas y le doy un beso a la tienda que se le hacia y luego con mi boca (y mis manos) le bajo el Jockstrap dejando su verga al aire, su miembro era un poco mas pequeño que el de Gabriel, de unos 10 cm mas o menos, pero igual de gruesa, todos tenían altas expectativas así comencé a dar lo mejor de mi, dándole besos por toda su verga así como también lamiendo de un lado al otro, de arriba a abajo y por sus bolas también; como dije antes Diego casi no tenia pelo, de hecho su cuerpo y verga estaban completamente sin cabellos, para mi era un deleite lamer todo su cuerpo e introducirme su verga a mi boca, jugaba con sus bolas y lamía y chupaba su cabeza, al ser algo pequeña podía introducirla toda con gran facilidad, Diego gemía de placer mientras Gabriel jugaba con sus pezones y a su vez Sergio jugaba con los de él
Luego de un par de minutos seguí con la siguiente verga, Gabriel ya estaba desnudo y super erecto, por lo que decidí seguir lo que había quedado incompleto el día anterior, su verga estaba super erecta, sus venas estaban mas grandes que el día anterior pues está vez Gabriel tenia un anillo alrededor de su miembro, gracias a esto yo agarraba sus bolas con facilidad mientras su verga entraba en mi boca, jugaba con la punta de su verga y pasaba mi lengua por todos lados, al mirar hacia arriba luego de introducirla completa, podía ver como tenia a Diego y Sergio en cada uno de sus pezones, mientras que él por su parte acariciaba ambos culos, aunque por la magnitud de estos le era difícil alcanzar sus anos
Finalmente seguía Sergio, el mayor de los 3 y el mas gordo también, al estar entre sus grandes piernas podía ver como su bulto era mas pequeño que los anteriores, baje sus trusas y pude ver una verga mas gruesa que las otras dos, pero mas corta, de unos 7 o 6 cm sus bolas eran gigantescas en comparación y tenia vellos negros arriba de esta y continuaban haciendo un camino hacia su ombligo, aunque bastante cortos también, nada exagerado, era muy fácil introducirla completa y chuparla como si de un dulce se tratara, le puse muchísimo esfuerzo a esta mamada, pues las vergas pequeñas son mas fáciles de controlar, Sergio se retorcía de placer y entre gemidos decía cosas como “Que rico” o “Dios mío” lo que a mi me prendía mucho mas y me daban ganas de hacerlo con mas dedicación. Para este entonces Sergio solo estaba siendo atendido por mi, pues Diego se había sentado sobre Gabriel mamándose las vergas en 69; yo me percaté de esto y al ver que tenia a Sergio solo para mí, quise avanzar.
Retiré la verga de mi boca y comencé a subir por el camino de su ombligo mientras le desabrochaba su camisa, al llegar a su pecho mi mano le comenzaba a masturbar mientras le chupaba el pecho y el cuello, entre lamerle el cuello y su boca me acerqué a su oído y le pedí que se diera vuelta para yo mamarle el culo, por lo que Sergio inmediatamente se levantó de la cama, se inclinó sobre la mesa poniéndose de perrito quedando su cabeza cerca de la verga de Gabriel, yo comencé a calentarme demasiado al ver ese gran culo que me iba a comer, me puse de pie atrás de el y luego me agaché para comenzar mi labor, primero le di una chupada a su verga desde abajo, para luego subir y chupar sus bolas, finalmente decidí lamer desde la punta de su verga, pasando por sus bolas y llegando hasta su agujero, al pasar por este seguí subiendo un poco mas de su ano y luego me regresé a este; al pasar mi lengua por su ano, Sergio suelta un gran gemido que hace que los otros dos se detengan y comiencen a vernos a nosotros, Gabriel comienza a comerse también el culo de Diego “No me puedo quedar atrás” nos dice mientras vuelve a poner su cara en el culo de Diego
Mi lengua pasaba por todo su ano, dando círculos y luego introduciendo un poco la punta de la lengua, luego de meter mi lengua la movía de arriba a abajo y hacia esto una y otra vez metiendo más y más la lengua; mis manos solo podían sostener sus gigantescas nalgas separándolas para que mi cara pudiera entrar mejor en su culo; tanto Sergio como Diego no paraban de gemir, sus voces se escuchaban en toda la habitación “Hagan silencio, ni que el edificio fuera de nosotros, porque no me la chupan entre los dos” dice Gabriel mientras empuja a ambos hacia su verga; los dos comenzaron a mamar la verga, tomando turnos entre quien chupaba la cabeza y quien las bolas, mientras Gabriel y yo seguíamos dándoles un beso negro a cada uno, luego de un rato Gabriel llena uno de sus dedos de saliva y comienza a introducirlo en Diego, haciendo que deje de mamarsela para soltar un gran “Ay” en forma de gemido que escuchamos los otros 3, “A mi métemela de una” me dice Sergio mientras soltaba por un momento la verga de Gabriel “En la mesa están los condones” me dice Gab señalando la mesita de noche al lado de la cama y al lado mío; abro y me coloco uno de ellos lo mas rápido que puedo y comienzo a introducir mi verga en el culo de Sergio
Al tener yo una verga grande, con el tiempo entiendes que hay que introducirla lento para que así no le duela a la otra persona, sea mujer u hombre, pero cuando el pasivo es así de tragón a veces no me puedo resistir; por lo que luego de poner la punta de mi verga, comienzo a introducirla completamente en un solo movimiento, causando que Sergio deje de hacer todo lo que estaba haciendo y suelte un grito de placer, sujetando sus manos en las sábanas de la cama “Dame más” me decía “mas duro, esta muy grande y rica” añadió entre gemidos “Yo no la alcancé a ver, esta muy grande?” Pregunta Diego “Si, muchísimo” le responde Sergio “la tiene mas grande que la mía y un poco mas gruesa” añade Gabriel “Ay no, yo también quiero” dice Diego, mientras se coloca arriba de la verga de Gabriel y comienza a sentarse en ella, lentamente, y cuando ya esta toda adentro suelta también un gemido fuerte y luego comienza a moverse; yo por mi lado no podía parar, sentía como el gigantesco culo de 60 años se tragaba toda mi verga como pidiéndome más, mis embestidas eran fuertes y por toda la habitación se escuchaba mi pelvis golpeando sus grandes nalgas, con mis manos agarrando firmemente las nalgas para llevarlo hacia mi con fuerza y de vez en cuando una que otra nalgada.
Luego de un rato siento que su mano agarra mi brazo derecho y me dice “Espera, me vas a hacer terminar” con lo que yo decido bajar el ritmo y detenerme, pues el resto también debían probar ese magnífico culo, me retiro del culo de Sergio y me muevo al otro lado de la cama, donde Diego estaba dando sentones en la verga de Gabriel, “Te toca” le digo a Diego mientras me quito el condón y me acerco a él; ambos cambiaron de posición, quedando Diego de perrito con la verga de Gabriel en su culo y la mía en su boca, cada que embestían su culo su boca se acercaba más a mi pelvis llevándose toda mi verga en su interior “Ay, tan pequeño y tan malo” me decía, su mano derecha agarraba su propia verga para tocarse, y con la izquierda tocaba la verga de Sergio quien para este entonces estaba acostado a un lado de nosotros boca arriba; los gemidos de Diego eran cada vez mas fuertes, por lo que de un momento a otro agarro su cabeza e introduzco toda mi verga en su garganta, para que así no haga tanto ruido, “Dale mas duro pues” le digo a Gabriel mientras sujeto a Diego con mis manos, Gabriel comienza a embestir rápidamente a Diego una y otra vez sin parar, mientras que Diego solo podía soltar gemidos ahogados por mi verga, para este punto ya había soltado la verga de Sergio, pues ambas manos sujetaban fuertemente mis nalgas y piernas para no perder el equilibrio al ser embestido por Gabriel, de repente me hace señas con sus manos de que me aleje así que yo saco mi verga de su boca y finalmente le dejo respirar, todo para que segundos después nos diga “me voy a venir” a diferencia de mi, Gabriel no quiso parar y al contrario comenzó a embestir mas rápido el culo de Diego, pude ver como Sergio puso su cabeza abajo de ellos, metiendo la verga de Diego en su boca, segundos después Diego suelta una gran cantidad de gemidos unos tras otros hasta que finalmente se corre en la boca de Sergio, aquí es cuando Gabriel finalmente decide parar y retirarse del culo de Diego, quien exhausto se da vuelta y queda boca arriba en la cama con su verga escurriendo su semen.
E de admitir que ver todo esto desde lejos me puso a millón, ver estos machos gimiendo y cogiendo como animales me prendió muchísimo, me acerco y junto a Sergio comenzamos a limpiar la verga de Diego, tomándonos todo el semen que salía de su verga, si bien Diego estaba super cansado, Gabriel seguía sin venirse y con la verga aun dura “bien, el siguiente” dice Gab viendo a Sergio, quien aún no estaba del todo seguro “Me toca” le digo a Gabriel mientras me acuesto al lado de Diego, también boca arriba y con las piernas al aire “a mi no me han mamado el culo” le digo mientras Gabriel se va acercando a mi, luego de esto se arrodilla en el suelo y comienza a pasar su lengua por todo mi culo, dando círculos en mi ano y finalmente introduciendo su lengua al fondo para luego repetir el proceso, yo soltaba leves gemidos en reacción a esto y volteo a donde estaba Sergio “Ven, siéntate en mi cara, te la quiero mamar” le digo mientras nos acomodamos todos en la cama para que Sergio ponga sus piernas una a cada lado de mi cabeza, y yo comienzo a mamarle la verga, gracias a que se inclinó hacia adelante para mamarme la verga a mi también; podía sentir la lengua de Gabriel jugando con mi agujero y la boca de Sergio en mi verga, mi cara estaba presa del gran cuerpo de Sergio, con las piernas a ambos lados de mi cabeza y su barriga reposándose en mi pecho, todo para que yo me deleitara con su verga, mientras mis manos rodeaban su cintura y jugaban con sus nalgas
Gabriel tuvo suficiente y comenzó a introducir sus dedos en mi, e de aclarar que sus manos eran gigantes, y un dedo suyo era como introducir 2 de los míos, por lo que esto me excitaba demasiado, Sergio soltó mi verga para darse besos con Gabriel, quien luego del segundo dedo decidió introducir su verga, de manera lenta, introdujo su cabeza, podía sentir como la verga llena de venas me llenaba por dentro y me partía en dos, poco a poco introdujo todo su miembro y cuando su pelvis finalmente tocó mis nalgas, se quedo quieto un rato mientras besaba a Sergio, unos instantes después comenzó a embestir mi culo de manera lenta, haciendo que yo gimiera de placer, si bien casi no se escuchaban pues estaba debajo de Sergio, estoy seguro de que podía sentir mis gemidos en su verga, pues me detenía cada tanto por culpa de ellos; eventualmente Sergio se levantó de mi cara y nos dejaron solo a Gabriel y a mi divirtiéndonos, “Porque no vienen los dos y les mamo las vergas” les dije a ambos luego de unos minutos de estar solamente Gabriel y yo, con lo cual me hicieron caso y tenia ambas vergas en mi cara y una en mi culo, yo intercambiaba entre una y otra verga, masturbando una y chupando la otra, mientras las embestidas de Gabriel eran cada vez más rápidas
En esta posición yo estaba sobre el borde de la cama, mirando hacia arriba y con Gabriel embistiendo mi culo, Sergio estaba de pie con su verga en mi boca y Diego estaba arrodillado en la cama con su verga también en mi boca, pues aprovechando la posición mis brazos pasaban por debajo de las piernas de los dos y se introducían en ambos orificios, haciendo que estos junten sus barrigas arriba de mi y entre ellos 3 se comenzaban a besar, yo ya casi no podía aguantar más y mis piernas ya no estaban arriba, en su lugar agarraban la pelvis de Gabriel haciendo que este estuviera mas cerca de mi “ya casi me vengo” dice Gabriel “Yo también” dicen Sergio y Diego casi al tiempo separándose un poco entre si dejando mi cara al aire y mis manos seguían jugando con sus anos. “Quiero que los 3 me llenen de leche” les dije “Yo también estoy a punto” agregué
Lo siguiente parece de película porno, Sergio y Diego vuelven a poner sus vergas en mi boca para que yo las mame una y luego la otra, mis manos comienzan a jugar con ambos anos, con 2 dedos dentro de cada uno, todo esto mientras Gabriel me embestía con fuerza y con una mano me agarraba la verga, estuvimos así unos minutos, el primero en correrse fue Gabriel, quien al momento de hacerlo, sacó su verga de mi ano y comenzó a soltar toda su leche espesa y caliente sobre mi cuerpo, sus disparos llegaban hasta mi pecho y uno que otro caía sobre las barrigas de ambos, luego siguió Sergio, quien no pudo más y apretó su culo sosteniendo mi mano en él pudiendo únicamente mover mis dedos en su interior, su semen cubrió mi lado derecho llenando mi boca y mi mejilla de su también muy caliente leche, dio un paso atrás y siguió expulsando leche hacia Diego y el resto de mi cara; pocos segundos después mi verga no aguantó ser estimulada por Gabriel y comencé a venirme sobre mi mismo también, cubriendo la mano de Gabriel y disparando por todo mi abdomen hasta mi pecho; quien se tardó más fue Diego, pues ya se había corrido antes Gabriel estaba de pie recostado sobre la pared respirando firmemente, lo mismo con Sergio quien se había retirado también hacia un lado, mientras yo seguía mamando la verga de Diego esperando a que terminara sobre mi también mi mano derecha, mi cara y mi cuerpo estaban cubiertos de semen, solo podía esperar al ultimo de ellos que terminara, “Ya casi, que rico” me dice Diego “Dámela toda, déjame tragarla” le respondo, con lo que luego de unos segundos de estarse tocando la verga, yo tocando dentro de su ano y con la boca bien abierta, comienza a gemir nuevamente “Trágatelo todo” Dice Diego “Aquí viene y te la vas a tragar toda putita” dice mientras se masturba rápidamente y yo abro mi boca, puedo sentir como salen unos 3 o 4 lechazos hacia mi boca, de los cuales no desperdicio ninguno y me llenan la boca por completo
Luego de esto los 3 estaban a mi alrededor, contemplando lo que acababa de pasar y el como todo mi cuerpo estaba lleno del semen de todos, “No te podemos dejar así, tenemos que limpiarlo” dice Gabriel quien se acercaba a mi cara y comenzaba a pasar su lengua por mis mejillas limpiando todo el semen de Sergio, mientras Diego lamía mi pecho y abdomen saboreando mi semen y el de Gabriel, y finalmente Sergio lamía mi verga, dejándola sin una gota de semen; todos se acostaron en la cama y luego nos dimos turnos para bañarnos, yo fui el primero, luego Sergio, Luego Gabriel y finalmente Diego. Todos dormimos en la misma cama, de izquierda a derecha estábamos Gabriel, Diego, yo y luego Sergio, casi no dormí esa noche, pues constantemente sentía las caricias de Diego o Sergio en mi verga, y si me acostaba de lado cualquiera de los dos me restregaba su culo en mi verga, al día siguiente Gabriel se fue a trabajar y estuve un rato con los otros dos, Diego no se podía aguantar que me fuera sin que le metiera la verga así que así hice hasta que también se fue a trabajar, luego me fui a casa de los gemelos y Sergio llegó a tocar la puerta para que también le diera verga, finalmente en la tarde me llamó Gabriel y termine llevando verga yo jajaja al final no supe de quien era el cumpleaños.
Hasta aquí el relato de hoy, fue algo largo pues intenté relatar la perspectiva de todos y no solamente la mía, espero y les guste, recuerden que mi Twitter (o mi x) es @LDGhost28 por si también les gustan los gordos y maduros puedan ver lo que comparto, y si gustan compartir conmigo bienvenido sean. Luego les contaré sobre los gemelos, también tengo anécdotas con esos dos que les pueden gustar
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