LOS HOMBRES DE MI FAMILIA 2° CAPITULO

Fernando mejora su relación con su padre y hermano, comienza a vivir las primeras experiencias sexuales de ser poseído por su padre y por su hermano.

LOS HOMBRES DE MI FAMILIA 2° CAPITULO

 

Mi hermano Luis estaba ya planeando su boda, ya estaba a días de casarse, así que mi mamá se mantenía ocupada con los preparativos de la boda, en la noche mi madre estaba poniéndose de acuerdo para acompañar a mi hermano y su futura esposa a ver los arreglos florales, pero ya en la mañana tocaron la puerta, mi madre fue a abrir la puerta, se encontró con mi tío Julián, mi madre de inmediato supo que algo malo pasaba, pues solo con ver a mi tío supo que algo le pasaba a mi abuela, se soltó llorando, mi padre, mis hermanos y yo esperábamos lo peor para mi abuela, mi padre corrió a la puerta para ver a mi madre y brindarle apoyo, preguntó ¿qué sucede Julián está todo bien? Mi tío Julián tenía a mi madre abrazada y tranquilizándola, comenzó a explicarle a mi padre y a mi madre.

Julián: Todo bien Efrén, pero Celia se sorprendió cuando le he contado, que ayer nos llevamos a mi madre al hospital, se nos puso mal y la tuvimos que internar, pero ya está mejor, ayer nos quedamos mi mujer y yo a cuidarla y me gustaría que esta noche fueran tú y Celia a cuidarla.

Efrén: No te preocupes hoy nos vamos Celia y yo a cuidarla y que ustedes descansen, ya sea yo o Celia en el día y otro en la noche.

Denise: No. Papá ve a tu trabajo, yo me iré ahorita con mi tío para que ellos se regresen y mi mamá se vaya por la tarde. Así tú nos puedes ayudar mañana que descansas.

Efrén: Que tome la decisión tu madre. Celia tú decides.

Celia: Le haremos como dice Denise, quiero que estés aquí por si necesitamos alguna cosa. Julián está bien, así que se vaya Denise y en la tarde me iré yo.

Mi hermana se marchó con mi tío rumbo al hospital, luego mi hermano fue por su novia, mi papá a trabajar, mi madre se quedó limpiando la casa y yo me fui a clases. Cuando regresé a casa aún no llegaba nadie, mi madre estaba preparando la comida y cena, así que todo normal, si dejamos de lado la cara de preocupación de mi mamá y sus ojos llorosos. Le di un abrazo a mi madre como gesto de apoyo y ella comenzó a llorar, la tranquilicé le dije que todo estaría bien.

Más tarde llegó mi hermano y su novia, luego llegó mi papá, terminamos de comer y más tarde mi padre llevó a mamá al hospital y se traería de regreso a mi hermana, cuando llegó mi padre esperaba ver a mi hermana y preguntarle por la salud de la abuela, pero solo entró mi padre y le pregunté por mi hermana,

Efrén: Se va a quedar a dormir con su novio.

Fernando: Y la abuela ¿cómo está?

Efrén: Ya está mucho mejor, pero los médicos quieren tenerla bajo observación, porque aún corre riesgo.

Fernando: ¿Mi mamá, como la dejaste?

Efrén: Se quedó más tranquila cuando vio a tu abuela que estaba mejor. ¿Tu hermano ya llegó?

Fernando: Qué bueno que este más tranquila, cuando llegué de clases se puso triste, mi hermano llegó cansado, se metió a bañar y se fue a la habitación.

Mi padre se puso a ver la tv y yo me fui a dar un baño, luego entré a la habitación, mi hermano estaba dormido, salí a la cocina para tomar un poco de leche y unas galletas, mi padre ya no estaba en la sala, se escuchaba que estaba en la ducha, estaba tomándome la leche, cuando apareció mi papá en pijama de tela muy delgada, dirigí mi mirada a su entre pierna y se le notaba que no llevaba ropa interior bajo el pijama.

Efrén: ¿Qué tomas hijo?

Fernando: Leche con galletas.

Mi padre sonrió y me dijo; mi niño si quiere más leche aquí tengo, mientras se apretaba su verga por encima de la ropa, se sirvió un vaso con agua, la tomó y me invitó a ir a la sala, nos sentamos juntos viendo tv y yo le agarré la verga que ya la tenía bastante dura, luego me puso de pie, me colocó delante de él y bajó mi short y bóxer casi hasta mis rodillas, luego me sentó en su entrepierna y comenzó a tallar su verga en mis nalgas, yo podía sentir su verga en todo su esplendor ya que la delgada tela que la cubría me dejaba sentir su verga entre mis nalgas.

Mientras mi padre estaba con su verga entre mis nalgas me decía al oído; quiero meterte la verga, no sabes lo caliente que me pongo tan solo de pensar en travesarte con mi verga, deseo metértela ¿quieres que te la meta? Le respondía entre suspiros, que también yo deseaba que me la metiera.

Después de un rato mi padre me dijo; ¿y si nos arriesgamos, estando tu hermano en casa?, ya no aguanto las ganas de metértela ¿quieres que nos arriesguemos?

Fernando: Quiero que me la metas, Luis está dormido.

Efrén: Vente vamos a mi habitación, hoy te haré mío, te voy a meter la verga, pero lo haremos callados.

Subí mi ropa, fuimos hasta la habitación, mi padre cerró la puerta y de inmediato me coloqué frente a él, nos dimos un beso, nos comíamos nuestras bocas y después fui bajando hasta llegar a su pene, me arrodillé y saqué su verga de 19 cm de la pijama, empecé a mamársela, tratando de meterme toda su verga a mi boca, su verga ya estaba muy dura y goteando liquido pre-seminal, mi padre me agarraba de la cabeza y la empujaba para que me la tragara toda, comencé a toser y a salirme lágrimas, pero se la estaba mamando con gusto, mi padre suspiraba e intentaba meterme toda su verga en mi boca.

Me tomó de los hombros, me besó y me dijo; te la quiero meter. En ese momento me empecé a desnudar y a bajar el pijama de mi padre, cuando tuve frente a mí su enorme verga, de inmediato me la metí a la boca para mamársela, dejándosela llena de babas, mi padre no paraba de gemir despacio, estábamos muy calientes y ansiosos, tanto él como yo deseábamos tener sexo.

Efrén: ¿Hijo cómo le haremos para que no te duela cuando te la meta?

Fernando: Eso déjamelo a mí.

En ese momento tomé las riendas de la situación, siendo yo quien dirigía dicho acto. Ambos estábamos desnudos, fui empujando a mi padre a la cama, lo dejé caer sobre la cama, quedó boca arriba y volví a mamarle una vez más su verga, me encantaba hacerle garganta profunda, a mi padre le encantaba que lo hiciera, aunque al principio era difícil, después de varios intentos se hacía más fácil, le dejé la verga toda llena de babas y cabalgué a mi padre.

Agarré su verga de 19 cm y me la apunté en mi culo y fui bajando despacio, la verga de mi padre estaba tan dura, que sentía que si me daba un sentón en ella o se la fracturo o me quedaría bien ensartado en ella, el dolor que sentía al intentar metérmela era soportable, de pronto sentí como entró su glande, al sentir que me había entrado el glande, emití un gemido ah, mientras que mi padre dejó salir un leve aaahhh…

El dolor que sentía estaba presente, pero era mayor el deseo de verme con toda esa verga dentro de mí, me saqué el glande de mi padre y volvía a mamársela una vez más, para dejarla llena de saliva, mientras el dolor desaparecía, volví a la misma posición y de nuevo tomé la verga de mi padre, me la apunté en mi ojete y fue entrando el glande, esta vez con menos dolor, pero entró más que solo el glande, mi padre observó cómo su verga entraba en mi culo.

Efrén: Ah que rico se siente, no te detengas sigue así, me encanta cuando va entrando mi verga en tu culito.

Paré un poco esperando que el dolor desapareciera y cuando el dolor se fue, bajé un poco más clavándome un poco más de la mitad de la verga de mi padre, cuando la tenía más de la mitad dentro de mí, suspiré y un gemido salió de mi aahh. Mi padre tenía sus ojos cerrados y se mordía los labios, me tomó de la cadera y me levantó un poco sacándome su verga, dejando solo el glande dentro de mí, luego volví a bajar más, metiéndome casi por completo la verga de mi padre, mi padre empujó metiéndome el resto de su verga en mi culo, sentí un leve ardor, pero por fin tenía toda la verga de mi padre dentro de mí, me quedé sentado sobre la verga de mi padre y resoplé de placer al sentirme completamente ensartado en el fierro de mi padre.

Nos quedamos quietos un rato y de repente mi padre me abrazó y empezamos a besarnos, mientras mi padre empezó a mover lento sus caderas entrando y saliendo, pero sin dejar de besarnos, los movimientos arriba, abajo, de un lado a otro y en cada movimiento, el placer nos invadía y embriagaba, por momentos nos olvidamos en dónde estábamos, nos dejamos llevar por la pasión, los gemidos se hicieron más frecuentes y fuertes, mi padre me tomó de las caderas, me levantó un poco y empezó a entrar y salir. Tomó las riendas y continuó envistiendo de una forma que me estaba volviendo loco de placer, empecé a gemir al sentir como entraba y salía la verga de mi padre, am um ah oh aaahhh.

Mi padre también no dejaba de gemir y de penetrarme, le pedí que no parara que continuará así, mi padre me tomó de las caderas y fue acelerando sus envestidas, mientras no dejaba de resoplar, se aferraba a mis caderas como poseído, me estaba perforando el culo con una bestialidad que también me tenía loco de placer y no paraba de gemir, en una de sus envestidas su verga se me salió del culo, en eso mi papá me dio la vuelta, colocándome boca abajo y sin más me la metió de una sola estocada, empezó a darme más rápido, metiéndome su verga sin piedad, se agarraba a mis caderas y empujaba su pelvis, chocando sus testículos contra los míos, cuando la sentía reseca, la sacaba y escupía en mi culo y volvía a darme envestidas.

El sudor nos brotaba, el de mi padre caía sobre mi espalda, la respiración de mi padre se agitó y su verga se ponía más dura de lo que ya estaba, sabía que mi padre estaba a punto de correrse, mi padre gemía más fuerte y resoplaba haciendo un sonido, umm, umm, más que resoplar parecía bufar, su cuerpo chocando contra el mío, sentí como su leche llenaba mi interior, le pedí a padre que no me la sacara, quería correrme yo también, mi padre se movió sin sacarme su verga de mi culo, quedé sentado sobre su verga, me di la vuelta como pude aún con la verga de mi padre dentro de mi culo, empecé a masturbarme y en poco tiempo antes de que la verga de mi padre perdiera su erección por completo, eyaculé sobre el pecho y abdomen de mi padre.

Mi padre sacó su verga de mi culo, me pidió que recogiera mi leche de su cuerpo, limpié cada chorro de leche en su cuerpo con mi boca y después mi padre me tomó de la cabeza y me dio un beso compartiendo mi leche con él, nos quedamos tirados un par de minutos en la cama, cuando nos dimos cuenta de que aún estábamos en casa y ahí estaba mi hermano.

Efrén: Gracias, hijo, esto ha sido todo un placer, que aguante el de tu culito, no sabes lo que me ha encantado, pero nos hemos excedido, ya que estamos en casa y aquí está tu hermano, será mejor que regresemos a la normalidad ¿te gustó que te penetrara tu padre?

Fernando: Por un rato me olvidé de todo y de todos, solo te puedo decir que lo he disfrutado como nunca lo había hecho, me ha encantado sentir tu verga dentro de mí, me gustó mucho papá.

Mi padre me dio un beso y después nos vestimos, luego me acordé de mi hermano, así que fui a la habitación y ahí estaba sentado en la cama viéndome fijamente muy serio, entré tratando de ignorar su mirada, pero éste me dijo; ¿dónde estabas? Le respondí muy calmado con mi papá. Mi hermano me empezó a cuestionar, pero lo ignoré por completo.

A los días dieron de alta a la abuela, a una semana de la boda de mi hermano, mi hermano se portaba distante y serio, tanto con mi papá como conmigo, pero no le quise dar importancia, pues intuí que mi hermano sospechaba algo, pero no tenía el valor de decírmelo, no hasta el día de su despedida de soltero que le organizaron mis primos, fue un viernes que habían organizado la despedida de soltero.

Ese día por la mañana, mi padre y mi madre salieron a comprar algunos detalles y ropa para lo boda de mi hermano y regresarían hasta el sábado a medio día para no manejar de noche, en cuanto a mi hermana ya tenía varios días viviendo con su novio, yo me desperté por la mañana después de que mis padres se fueron a la capital. Cuando desperté, vi la cama de mi hermano vacía, me fui a la cocina para tomar el desayuno y ahí estaba mi hermano, como en los últimos días, serio y sin decir una sola palabra, yo decidí seguirle la corriente, así que lo ignoré y me serví el desayuno, ya cuando estaba a medio desayuno mi hermano me habló.

Luis. ¿crees que soy un pendejo para no darme cuenta de lo que hacen tú y mi papá cuándo están solos?

Fernando: Habla claro, no sé a qué te refieres, ya te aclaré que veíamos una película.

Luis: Pero que excusa tan más pendeja, mi papá me contó que te encontró con el vecino y me dijo como te tenía, ahora mi padre ha tomado el lugar del vecino.

Fernando: Será mejor que esta conversación la continuemos cuando esté mi papá presente.

Luis: Cuando esté tu protector, que va a negar todo y te protegerá.

Fernando: ¿Y si así fuera, a ti en qué te molesta? ¿Cuál es tu inquietud? ¿qué quieres que te diga? habla claro, no te andes por las ramas.

Luis: Es mejor que lo dejemos para otra ocasión, veo que estoy tratando con un mocoso.

Mi hermano se fue por su novia, llegaron y se encerraron en la habitación, yo me quedé viendo tv, después de más de una hora salieron y se fueron a la casa de su novia, me quedé solo y después de la comida ya casi a las 4 de la tarde, llegó mi hermano, se dio un baño y volvió a salir dejándome solo, sin siquiera dirigirme la palabra, una hora más tarde, llegó mi tío Julián buscando a mi mamá, pero me vio que estaba solo, me pidió que me fuera a su casa para que no estuviera solo, así que me fui a la casa de mi tío, ellos ya están solo con su hijo Marcos, las muchachas una se casó y la otra está afuera estudiando, viene casi cada mes.

Al llegar a la casa de mi tío, saludé a mi tía Juana y después subí a saludar a Marcos mi primo, Marcos es delgadito, alto, piel blanca, cabello chino, castaño tirándole a rojizo, nariz afilada y grande ojos color miel y labios delgados. Es un chico alegre, relajado, algo desalineado, estilo medio roquero rebelde.

Fernando: Hola marcos ¿cómo estás qué haces?

Marcos: Hola Fer. Pasa ven a jugar un rato.

Fernando: No mejor te veo jugar, ya sabes que soy malo para esos juegos.

Marcos: Lo sé. Oye hace días estuvo aquí Ricardo, me contó que mi tío los encontró en la cama, se ha deber puesto como loco mi tío.

Fernando: Si, la verdad se enojó mucho, sacó a Ricardo a patadas de la casa, a mí me puso un par de madrazos, me quitó el celular y de vez en cuando me decía Fernanda.

Marcos: No mames, se pasa mi tío. ese día que vino Ricardo, me mamó la verga, y hoy tengo ganas de que me la mamen, ¿te animas Fer, unas manaditas nomás?

Fernando: No jodas, si nos encuentra mi tío o mi tía, el pedo que se nos arma.

Marcos: Nomás un poquito, nadie se dará cuenta.

Mientras Marcos trataba de convencerme, ya se estaba sacando la verga de su pantalón, una verga que ya antes me la había mamado de 17 cm, blanca con pocos vellos, las venas resaltaban en color verde por su piel blanca, su glande rosado, se acercó a mí y estaba parado frente a mí, yo me la metí a la boca, se la empecé a mamar, me daba miedo que alguien nos viera, así que estaba al pendiente de la puerta y le seguía mamando la verga a Marcos que me tenía agarrado de la cabeza y me decía quiero metértela, pero aquí no podemos mejor mámamela y sácame toda la leche.

Yo seguía pegado en la verga de Marcos y de vez en cuando volteaba a ver la puerta, cuándo Marcos estaba a punto de venirse, volteé a la puerta y vi a mi tío que se asomaba, me saqué la verga de la boca y le dije a Marcos: vi a mi tío en la puerta, Marcos subió su pantalón y se fue a asomar. Me dijo que quizás se me había figurado verlo, que no estaba nadie afuera, me pidió que terminara, así que continué, pero estaba al tanto de la puerta, cuando me avisó Marcos que estaba por terminar y me la sacó de la boca y se vino sobre el piso. Marcos estaba limpiando cuando escuchamos la voz de mi tío,

Julián: Marcos, Fernando, vamos a cenar.

Bajamos a cenar y después de la cena, mi tío Julián me dijo que a la hora que quisiera para llevarme a casa antes de que fuera más tarde, le respondí; si podía que ya me acompañara, me despedí de mi tía y de Marcos y salimos rumbo a la casa mi tío y yo, durante la cena mi tío estuvo muy callado y no dejaba de mirarme algo extraño, de camino a casa son dos cuadras, las que tenemos que recorrer. Al alejarnos un poco de la casa, mi tío empezó a hablar.

Julián: ¿Qué estaban haciendo tú y Marcos en la habitación, cuando me asomé?

Fernando: Tío discúlpame, yo no quería hacerlo en tu casa, tenía miedo de que nos vieran tú o mi tía.

Julián: ¿Te gustan los hombres?

Fernando: Si. Perdóname, tío.

Julián: Hijo, yo no tengo nada que perdonarte, esta no es la primera vez que encuentro a Marcos así, es la primera vez que lo encuentro contigo, mira Marcos nomás se le para la verga y la mete donde sea y como sea, no se cuida, le he dicho que se cuide y no me hace caso, piensa que se lo digo para mal y ya viene y te la mete a ti en la boca, ten cuidado con eso hijo cuídate, con quién lo haces y cómo lo haces, Marcos es muy activo sexualmente y no se cuida, te pido que tú te cuides.

En pocos minutos llegamos a casa, esperaba una reacción diferente por parte de mi tío, pero fue muy amable y comprensible, le pedí que no le contara a mi padre y menos a mi madre, él me prometió que no les diría nada, me pidió que cerrara todas las puertas con llave y que no le abriera a nadie, luego se acercó, me dio un beso en la mejilla, cosa que nunca había hecho y me dijo que me cuidara y cerrara bien la puerta, así lo hice después de que mi tío se fuera a su casa, me fui a mi habitación y me puse a jugar con la tableta, ya pasaba de las 11 de la noche cuando escuché que estaban intentando abrir la puerta y un auto se marchaba, supe que era mi hermano, apagué la luz, guardé la tableta y me hice el dormido.

Mi hermano entró a la habitación y se fue directo a donde estaba yo y empezó a sacudirme y hablarme, Fernando despierta que tenemos algo pendiente tú y yo y ahora mismo lo arreglaremos, yo seguía fingiendo estar dormido, mi hermano no dejaba de moverme, de sacudirme con fuerza, así que no me quedó de otra que hacerle caso a mi hermano.

Fernando: Déjame dormir Luis, vienes borracho, mañana hablamos.

Luis: Nada de mañana, hoy tenemos que arreglar esto. Te daré dos opciones, piensa bien antes de elegir y después te dejaré en paz.

Fernando: Sigues con eso, ya dime lo que quieres.

Luis: Te dije dos opciones, elijé bien porque no hay vuelta atrás. Primera, que me digas todo lo que han hecho tú y mi papá. Segunda, que me des mi despedida de soltero, piénsalo bien, tómate tu tiempo.

Fernando: ¿A qué te refieres con darte tu despedida de soltero?

Luis: Te pediré que hagas algo.

Fernando: Está bien, elijo la segunda, darte la despedida ¿qué quieres que haga por ti?

Luis: Hazme lo mismo que le hiciste al vecino cuando mi padre te encontró con él.

Fernando: ¿Estás loco? No lo haré, no haré nada.

Luis: Lo haces por las buenas y lo haces por las malas como tú quieras, ya dije piensa bien lo que vas a pedir.

Mi hermano se empezó a quitar toda su ropa quedando solo en ropa interior muy ajustada, se le notaba un buen bulto, pude ver que estaba medio parado. Por alguna razón, quería jugar con mi hermano, él es un joven algo robusto sin ser gordo, alto, moreno claro, pelo lacio, ojos grandes, labios carnosos y una verga morena de 18 cm, lisa, suave y con un glande rojizo hermoso.

Fernando: Por favor, Luis no lo hagas, no me violes, te contaré todo lo que hay entre mi papá y yo, pero no me violes.

Luis: Demasiado tarde pelón. Hoy tomaste una decisión que te haré cumplir.

Mi hermano se pegó a la puerta, la cerró con seguro, me tomó de la mano y me aventó a la cama yo le suplicaba que se tranquilizara, obviamente yo estaba jugando, pues ya andaba algo caliente, me jaló el short hasta que me lo quitó, lo lanzó a un lado, después mi playera y al final mi bóxer dejándome desnudo, me acorruqué en la cama dándole la espalda y mi hermano me dio la vuelta dejándome de lado y en posición fetal, mi hermano empezó a jugar con su dedo en mi ano , luego lo lleno de saliva y siguió jugándolo en mi ano, presionó sobre mi ano y empezó a metérmelo despacio.

Cuando me di la vuelta, vi a mi hermano que se estaba pajeando, di la vuelta sacándome su dedo y quedé al borde de la cama, mi hermano acercó su verga mi boca y me golpeaba la cara con su verga ya muy erecta, la pasaba por mis labios entre cerrados y me metió su dedo a la boca para después continuar metiéndomelo en el culo, cuando me metió su dedo en el culo di un suspiro aahh, en ese momento me metió su verga a mi boca, le empecé a mamar, primero solo su glande y poco a poco fui metiéndome más su verga a mi boca, mi hermano metió un segundo dedo, yo ya le tenía su verga llena de babas, me la metía hasta el fondo y me la comía por completo.

Mi hermano soltaba gemidos, oh si ah um que rico, si continúa como la mamas pelón, así me dicen mi hermano y hermana PELÓN, después mi hermano llenó de saliva sus dedos y me empezó a meter un segundo dedo, yo ahogaba mis gemidos con la verga de mi hermano en la boca.

Luis: Listo pelón, quiero meterte la verga antes que me hagas venir dentro de tu boca, ponte a gatas al borde de la cama.

Fernando: Hazlo despacio pues no quiero que me duela.

Luis: Descuida, tendré cuidado, no te preocupes, acomódate.

Me puse a gatas al borde de la cama y mi hermano se puso detrás de mí y apuntó su verga de 18 cm en mi culo y empujó lentamente, metiéndola poco a poco, me entró su glande y suspiré, le pedí que fuera despacio. Mi hermano abrió mis nalgas con sus manos y presionó metiéndome un poco más, solo escuchaba a mi hermano suspirar y gemir oh am ah sí um y su respiración gruesa, le metió por completo y la sacó toda, con su mano derecha, separó mi nalga izquierda y con su otra mano apuntó su verga a mi culo.

Me la metía de ladito, estaba viendo mi hermano como mi culo se tragaba su verga, como me metía cada cm. Luego me la sacó por completo y fue por su celular y me repitió la acción, separó mi nalga y apuntó su verga, me la dejó adentro y empezó a meterla lento, suave entraba y salía de mi culo, luego aceleró un poco, me envestía con fuerza, duramos bastante tiempo así y luego cambiamos de posición, me colocó boca arriba y me la metió de nuevo, pero esta vez ya no era lento, era más rápido y mis testículos rebotaban en su pelvis, el sonido de nuestros cuerpos chocando uno contra el otro hacían eco en la habitación.

Después de varios minutos en esa posición viendo la cara de mi hermano mientras me perforaba el ano, volvimos a cambiar de posición, apoyé mi pecho sobre la cama y mi hermano me agarró del pelo jalando mi cabeza hacia atrás y me clavó toda su verga, empezó a darme más fuerte y más rápido, solo podía escuchar como gemía y disfrutaba de estarme rompiendo el culo, también yo no paraba de gemir y gritar de placer, mi hermano se empezó a estremecer y con una fuerte envestida y un gemido, empezó a eyacular dentro de mí, me abrazó poniéndome de pie y me pidió que me masturbara mientras aún tenía su verga dentro de mi culo, me tuve que poner de puntitas para que no se me saliera la verga de mi hermano, me empecé a masturbar y mi hermano me besaba el cuello y las orejas, al poco rato, solté chorros de semen que fueron a parar al piso, mi hermano y yo nos tumbamos en la cama y dejó que su verga se saliera por si sola y así nos quedamos dormidos, abrazados en la misma cama.

Ya por la mañana me desperté, mi hermano estaba aún dormido con su erección mañanera, sin pensarlo me metí su verga a mi boca y se la empecé a mamar, mi hermano despertó agarrándome de la cabeza, hundiéndome más su verga en la garganta, se la mamé, hasta que se vino dentro de mi boca, me tragué toda la leche que salió de su hermosa verga, bajamos a desayunar y cuando estábamos desayunando, comenzamos a platicar como nunca lo habíamos hecho.

Luis: Hoy antes de que lleguen los jefes te voy a dar una metida de verga espectacular, te mamaré el culo que haré que te corras de la mamada que te haré, eso, si no, viene mi novia, sino en la noche te daré tu dosis de leche, si es que no me gana mi papá en dártela.

Fernando: ¿Por qué insistes con lo de mi papá?

Luis: A ver pelón, te he visto agarrándole la verga a mi papá y he visto como él te agarra las nalgas, el día que estabas en su cuarto, te escuché gemir a ti y a mi jefe. ¿Por qué lo niegas wey?

Fernando: Y si te hubiera dicho; oye Luis mi papá me mete la verga y se la mamo a cada rato, ¿tú qué hubieras hecho? Tú dirías, yo también te la quiero meter.

Luis: No wey, pero ¿por qué no confías en mí?, somos hermanos los únicos hombres, pero tú eres muy ermitaño te encierras en tu habitación, casi no convives con nadie de la familia, cuando estamos de vacaciones, estás encerrado o con mi jefa y nosotros acá los primos haciendo desmadre, hasta el Marquito es un desmadre.

Fernando: No sé, no me acoplo a ustedes, siento que me harán a un lado.

Luis: Como crees pelón, nada de eso, te voy a decir dos cosas, una te pediré que en mi boda no estés apartado, quiero verte feliz divirtiéndote, la otra es una confesión, pero no le digas nada a mi jefe o a mi jefa, ellos se van a divorciar después de mi boda y te quedarás con la jefa, ellos no la pasan bien.

Fernando: ¿Pero por qué se van a divorciar? yo quiero que estén juntos, no quiero que se separen.

Luis: Pelón ellos no están felices y es mejor así que se separen a que sigan con una vida miserable, tú más que nadie, sabes que ninguno de los dos es feliz.

Fernando: Si, lo sé, me contó mi papá y dice que ya llevan años así y pues a partir de eso he estado dándole placer a mi papá.

Luis: pelón, tú disfruta de mi jefe, pero sean más cuidadosos, no dañes la imagen que la jefa tiene de ti.

Después de ese día mi hermano y yo llevamos mejor relación, no me escondo de él para nada, mi padre aún no sabe que mi hermano sabe todo. Ese día llegó la novia de mi hermano a la casa y se marcharon, así que no hubo sexo ese día con mi hermano, más tarde llegaron mi mamá y mi papá, nos mostraron lo que habían comprado a mi hermano, hermana y a mí, ya en la noche mi mamá fue a ver a mi abuela, nos quedamos mi papá, mi hermano y yo, esa noche le mamé la verga a mi padre y después a mi hermano.

Cuando estaba vistiéndome para dormir y me dirigía a mi cama, mi hermano me dijo ¿qué haces? yo le respondí voy a dormir y me respondió, a partir de hoy y hasta que me case, vas a dormir aquí en mi cama, así podré practicar para cuando me case y así fue, a partir de ese día dormí en la misma cama que mi hermano, algunas veces con sexo, otras solo dormir abrazados.

Continuará ……………………………