Los juegos de papá

Theo descubre los juegos de Luka y su papá..
No sé que me despertó, supuse que estaba soñando hasta que el silencio se lleno de pequeños susurros y gemidos.

Bajé de la cama y salí al pasillo, los ruidos venían de la habitación de papá, dos puertas más allá de la mía.

Me acerqué despacio sin saber que encontrar y vi que la puerta estaba entornada. Dentro la luz tenue que entraba por la ventana iluminaba la cama dónde un cuerpo se movía…estaba soñando?

-Ahhhh, me gusta…otra vez.

La voz de Luka me asustó porque no pude ver de dónde salía pero estaba dentro de la habitación. Me puse de rodillas y como si fuera un cachorro entre en silencio, papá seguía soñando y moviéndose en la cama y no sé dio cuenta.

Me escondí debajo del escritorio y en ese momento papá corrió la sábana y pude ver que Luka estaba acostado encima suyo. Seguro había tenido una pesadilla y había corrido a los brazos de papá, a pesar de que era dos años mayor que yo era muy tímido.

Cuándo iba a salir de mi escondite para subirme a la cama papá levanto a Luka de encima suyo y pude ver que los dos estaban desnudos. Pude ver las gotas de sudor corriendo sobre el pecho de papá mientras hacía que Luka se diera vuelta y quedará mirando hacia la pared donde yo me escondía.

Nunca tuve miedo de él porque mi papá es el mejor del mundo pero su cara estaba transformada. Sus ojos relucían mientras acariciaba el cuerpo de Luka y lo acomodaba sobre la cama haciendo que se arrodillara.

Salió de la cama y fue hasta el sofá donde busco unos almohadones, mi corazón retumbaba y tenía miedo de que papá lo escuchará y me descubriera.

Dejo los almohadónes uno sobre otro y después hizo que Luka apoyará su pancita sobre ellos. No sé que había hecho mal pero estaba seguro que iba a ser castigado, una vez papá me puso así sobre sus rodillas porque jugando había volcado cosas en la cocina.

Luego de retarme me acomodó sobre él y bajando mi calzoncito me dio varias palmadas en mi cola. Cuando sintió que empezaba a llorar me abrazo fuerte y fricciono mis nalguitas hasta que ya no dolieron.

Luka no tenía miedo pero no sabía lo que le esperaba. Su pecho y su pancita descansaban mientras papá se subía a la cama y se acomodaba detrás de él.

Cerré los ojos porque no quería ver como lo castigaban hasta que escuché otra vez los gemidos y abrí los ojos.

Papá besaba toda la espalda de Luka mientras sus manos acariciaban su cuerpo. Su lengua iba haciendo un camino mientras bajaba hasta sus redondas nalgas.

-Si papá…que rico lo que me haces

-Quiero que disfrutes hijo, ahora viene lo mejor- dijo papá mientras abría las nalgas de Luka y perdía su lengua entre ellas.

El grito de Luka me asustó porqué di un respingo y termine pegando al sillón que estaba frente al escritorio. Papá levantó su cara del culito de Luka pero no me vio así que volvió a su faena.

Sus manos se movían sobre todo el cuerpo y amasaban las nalguitas de mi hermano mientras él gemía y suspiraba.

Papá se sentó sobre sus piernas, acomodó a Luka de costado sobre la cama y tomó un pote de la mesa de luz.

En esa posición pude ver como Luka tocaba su pitito pero me asombró más ver como era el de papá. Si bien nos bañabamos juntos él siempre usaba su bóxer, nunca lo había visto.

Era grande y largo y de su cabeza roja escapaba un hilo de ¿baba?. Mientras papá abría el pote Luka se dio vuelta y lo metió en su boca.

Papá suspiró y empezó a gemir mientras movía sus caderas de atrás adelante.

-Basta Luka- dijo papá mientras se retiraba- quiero estar dentro tuyo antes.

Mis manos que habían estado rígidas sobre la alfombra se metieron dentro de mi pijama, mi pitito estaba tan duro como el de Luka y me dolía. Empecé a acariciarlo de arriba a abajo cómo lo estaba haciendo papá.

Se había puesto una crema sobre su pene y ahora estaba haciendo lo mismo sobre el culito de Luka. Pude ver como uno de sus dedos se iba metiendo lentamente dentro del culito de mi hermano que suspiraba.

Su dedo entraba y salía muy despacio, al poco tiempo los dedos eran tres y si bien Luka se había quejado un poco ahora sus jadeos eran de placer.

De tanto en tanto papá paraba de meter y sacar los dedos del culito de Luka y tomaba su cabeza para darle besos en la boca…luego volvía otra vez a lo mismo.

Mi pitito estaba cada vez más duro y yo seguía acariciándolo. Papá volvió a mirar hacia el rincón…hice algún ruido? Me quedé quietecito hasta que papá volvió a acomodarse sobre Luka.

-Hijo quiero que estés tranquilo- le dijo mientras acariciaba sus nalgas- voy a ir despacio porque quiero que disfrutes tanto como yo.

Agarró su pene largo y duro y lo apoyo sobre el culito de Luka, nunca había visto como era eso pero desde donde estaba podía ver que un hueco grande se abría y tratada de cerrarse.

Papá dejo caer más crema sobre la cabeza de su pito y tomando otro poco la puso sobre el hoyo. Mientras apoyaba una mano sobre la espalda de Luka con la otra fue acompañando su verga mientras entraba en mi hermanito.

Un largo sollozo de Luka hizo que papá parará, esperó un momento y volvió a mover sus caderas. Así lo fue haciendo hasta que la mitad de su verga estuvo dentro de él.

Luka ya no se quejaba, solo suspiraba y gemía mientras pedía más y más. Papá iba y venía entre sus nalgas mientras una de sus manos empezó a sobar el pitito de su hijo.

Yo miraba cada uno de sus movimientos mientras aceleraba las caricias en mi propio pito.

En un momento papá salió del culito de Luka y se escuchó cómo un ruido de descorche, dio vuelta a su hijo y este quedo mirandolo a la cara.

-Esta primera vez quiero terminar en tu boca- le dijo mientras Luka agarraba su verga y empezaba a chupar.

Papá con una mano en la cabeza de Luka cogía su boca mientras la otra masturbaba la verguita de su hijo. De pronto el grito de los dos lleno la habitación mientras yo mordía mis labios para no hacerlo.

Mi mano se empapo de un agüita clara mientras mi cuerpo temblaba. Miré hacía la cama. El cuerpo tenso de papá seguía moviéndose mientras la boca de Luka rebalsaba de un líquido blanco. Sus labios se cerraban aún sobre la dura verga mientras papá lamia una de sus manos.

Cayeron los dos sobre la cama al mismo tiempo abrazados.

-Ummm que rico probar mi leche desde tu labios mi amor- le dijo papá a Luka mientras lo besaba- siempre que quieras volveremos a hacerlo.

Salí a gatas de nuevo y volví a mi cuarto, ese mi amor dicho por mi padre me dolió en el alma.

Me desperté pensando que todo había sido un sueño, cuando llegué a la cocina papá se afanaba preparando nuestro desayuno mientras Luka organizaba la mesa, yo con mis escasos 4 años estaba exceptuado de esas tareas.

Fui corriendo a abrazarme a sus piernas, papá me alzó sobre su pecho mientras sonreía.

Luego llevó todo a la mesa pero no dejó que me siente en mi silla, me acomodó sobre una de sus piernas. Estaba tomando mi taza cuando sentí un dedo queriendo meterse entre mis nalguitas.

-Quieres que te enseñé a jugar como lo hago con Luka? – me dijo en el oído mientras le guiñaba un ojo a mi hermano.