Los juegos de papá II
Theo se queda sólo con papá..
Desde hacía un año vivíamos solos con papá, luego del divorcio mamá cedió la custodia y fue a trabajar a otro país, a veces nos llamaba o enviaba algún regalo pero cada vez menos.
La casa en la que vivíamos era amplia y tenía un parque donde estaba la pileta, el verano invitaba a que estuviéramos afuera todo el día. Papá llevaba su compu al patio y desde allí nos vigilaba mientras hacía su trabajo freelance.
Luka es muy tonto y molesto, de tanto en tanto salía de la pileta y corría a sentarse en la falda de papá. En un momento en que yo también salí para ir al baño vi que estaba arrodillado entre sus piernas, cuando le pregunté que hacía me dijo que a papá se le había caído un lápiz y lo estaba levantando.
Cuando volvia lo hice despacio y vi a Luka prendido al pene de papá, él suspiraba mientras con las manos sobre la cabeza de Luka entraba y salía de su boca.
-Así mi ternerito…chupa hijito, abre más…que caliente me pones- aceleró sus movimientos- siii…toma la leche de papá.
El semen de papá caía por la cara de Luka hasta el piso mientras seguía acabando, luego con su lengua y sus dedos se ocupó de no desperdiciar nada. Papá lo acercó a él y lo beso mientras gemían.
Cuando salí se hicieron los distraídos y Luka corriendo se metió a la piscina. Mi pitito siguió duro un buen rato mientras pensaba en lo que había visto.
Era viernes y pronto vendrían a buscar a mi hermanito para ir a casa de un amigo, era su cumpleaños y los papás habían organizado un finde de pijamada.
-Theo sal de la pileta o tendré que castigarme- era la tercera vez que papá me lo pedía así que con mala cara salí.
Luka ya había salido y ahora estaba en su habitación terminando de acomodar sus cosas, cuando pasé por ahí escuché que papá le decía
-esto es algo entre nosotros amor, nadie tiene que saber los juegos que compartimos.
Luka abrazo a papá mientras le decía que ya lo sabía.
Le grité a papá que me daría un baño y fui corriendo a su habitación, la única que tenía una tina. Volví a mi habitación a buscar unos juguetes y vi que papá besaba a Luka en los labios.
La tina se había llenado hasta la mitad y estuve jugando un rato mientras hacía espuma con mis manos.
-Tu hermano ya se fue y tenemos dos días para estar juntos bebé- escuché que decía papá detrás mío mientras se sacaba su boxer y se metía a la tina.
Yo seguía jugando y papá se relajaba apoyado contra el borde, las pequeñas olas iban y venían y de tanto en tanto mostraban el pene de papá que se iba endureciendo mientras él lo acariciaba.
-Quieres jugar un juego Theo?- pregunto papá mientras me miraba.
-Si!- le dije entusiasmado. Sus juegos eran muy divertidos.
-Vamos a jugar a las cosquillas. El que se ríe pierde y tiene una prenda. Tu empiezas- me dijo.
Sin perder tiempo me subí sobre sus piernas y empecé a hacer cosquillas en sus axilas. Papá estalló en carcajadas.
-Perdiste!- le dije mientras rebotada sobre su verga, se había puesto más dura y su cabeza brillaba.
-Perdí, así que tienes que darme un castigo.
Me quedé pensando porqué como puedo castigar a papá si él es mucho más grande que yo, hasta que encontré la solución.
-Papito no quiero castigarte, solo quiero que me beses como a Luka. Papá me miro sorprendido pero se acercó y me dio un beso en la mejilla.
-No! Así no- le grité- quiero un beso como a Luka porque si no no me quieres.
Mis ojos se llenaron de lágrimas y papá me abrazó sobre su pecho.
Su boca fue dando pequeños besos sobre mi rostro hasta que se posaron en mis labios, los abrí y papá metió toda su lengua y empezó a jugar con la mía.
Mi pitito empezó a sentir cosquillas por lo que empecé a frotarme contra su pecho, papá riendo me fue bajando hasta que sentí su pene duro y caliente sobre mis nalguitas.
-Tú quieres jugar otro juego Theo- dijo papá y me sacó de la tina.
Me envolvió en una toalla y me dejó sobre su cama. Salió de la habitación y pensé que se había enojado conmigo pero al rato volvió. Tenía en su mano una valijita que dejó sobre la cama.
-Quiero que me cuentes algo- dijo mientras me acomodaba en el centro de la cama.- que viste la otra noche?
Me asusté y quise bajarme pero papá fue más rápido y se puso arriba mío. Descansaba su peso sobre las rodillas pero su verga se apoyó sobre mi pancita y pude ver que largaba su babita.
Sabía que a papá no le gustaba que dijéramos mentiras así que le conté que había escuchado ruidos y pensé que estaba sufriendo.
-Viste lo que hacíamos con Luka?
Asentí con mi cabecita mientras él sacaba la toalla que me envolvía.
-Te asustaste?-rápido dije que no.
-A Luka le gusta que le de besos y abrazos, quieres que haga lo mismo con vos?.- volví a asentir con mi cabeza.- entonces ahora tienes que hacer todo lo que yo diga.- me dijo papá mientras empezaba a besar mi cuerpo.
Excelente, espero el próximo.
Desde muy niño senti deseos de lamer la pija de mi padre y abuelo, pero lastimosamente no lo pude hacer.