LOS MULTAOS TIENE ALGO DE MAS II
Al conocer los efectos de una verga en el culo, lo despiertan y se esmera entregando el culo sobretodo si son mulatos….
Después de esos encuentros, los primeros ensayos de mi culo con esa monstruosa verga larga y gruesa, pase muchos días con dolor, un dolor que era un tanto agradable, porque me recordaba esos momentos de alegría anal; de recordar las embestidas de Tocho, sus entradas violentas y sus apretones en mis nalgas tratando de meter sus huevos en mi culo me hacía sentir placer y con más ganas de volver a sentir una verga en mis entrañas, que me la muevan y me hagan mas mujer, pero no sabía cuándo volvería a sentir una como esa o más grande o gorda. Pero mucho más dura en mi culo. Esa experiencia me saco del silencio anal, deje de ser sumiso y me acercaba a mirar más braguetas, si ere
A de mulatos mejor; mi culo lo pedía, quería que fueran no tan oscuros ni tan blancos, así eran, mejor, fuertes, musculosos con vergas gruesas y cabezonas…ya me está llamando el culo.
Pasaron varias semanas de trabajo muy intenso que me hicieron centrarme en otras cosas, dejando un poco el soñar en una pinga nueva para mi culo, hasta que un día volví a bajar a los baños del primer piso a las horas de salida de todos y, volví a encontrar a Elías duchándose, llegue en el momento que salía de las duchas para secarse y estaba desnudo con toda su vergota al aire, me quede impresionado nuevamente, solo ahora no pude disimular mi asombro que Elías me saco de ese estado Elías: Que pasa Adrián, que te has quedado paralizado? Yo: No, nada, estaba pensando en otra cosa, disculpa. Elías: Tú dime que paso o que quieres hacer y lo hacemos. Yo: No nada, sigue. Elías se quedó parado mirándome, sin secarse y con su vergota poniéndose dura, si se estaba excitando esta situación. Yo: Bueno, te dejo Elías: Espera dime que te paso, te molesta verme en pelotas o que ¿Yo: No, no es cosa mía adiós. Si Salí casi huyendo de mis impulsos de mi culo. Él se quedó allí aseándose y sacudiendo su reata humana, una verga que me hizo temblar mis nalgas, que si insistía allí le daba el culo, porque esa verga más chica, pero más gruesa y cabezona me estaba inquietando el anillo. Al llegar a mi oficina arregle mis cosas y Salí presuroso, quería llegar a casa y darme un duchazo, quería calmar ese incendio que tenía en mi culo.
Pasaron los días y desde mi oficina veía todos los días a ese mulato en la entrada, erguido y fuerte, por mi cerebro pasaban muchas fantasías, a veces dejaba de trabajar por imaginarme como seria esa verga dura y en su máximo tamaño, no sé si se la chuparía, o de frente le daba mi hoyo para que lo vuelvan a hinchar de tanto cachar. A la hora de salida Elías: Nos vemos Adrián, sueña cosas bonitas. Yo: Gracias. Elías: mañana es viernes y hay una reunión con los compañeros, no quieres venir? Yo: No, no sabía. Me aleje sin darle respuesta. Llegue a casa con el culo hecho una humedad de arrechura, me sabia caliente con mi hueco pero no tanto, me duche y en la ducha me metía el dedo para calmar esta tempestad y necesidad de verga, Si de esa verga mulata. Al día siguiente después de un sueño tormentoso, en la oficina se apreció Elías, Elías: Te dejo la dirección por si te animas Yo: Gracias. Me quede pensando, si voy hay mucha gente, se darían cuenta de mis gustos por la carne mulata, mejor me declaro enfermo y me voy tranquilo a casa a soñar con su verga. Llego la hora de salida, me voy al baño y allí lo encuentro, igual duchándose, su cuerpo fuerte y recio, desplegando ese aroma de la carne multa que me excitaba, al voltear y mostrarse de frente a mí, su verga estaba flácida pero muy gruesa, volví a mirarla con ganas y deseo, que alias lo noto Elías: Que pasa Adrián, quieres agarrarla, tómala, yo no diré nada. Yo: No, nada de eso, sino que la mía es muy chiquita al lado tuyo. Elías: So quieres entra a la ducha conmigo y las medimos, tú con tu boca y yo con mi mano Yo: No, ja, ja Elías: vas a la fiesta. Yo: No, tengo jaqueca.
El día lunes al entrar a la oficina Elías: Te extrañe Adrián quería regalarte algo Yo: Si, que será? Elías: el sábado hay partido de futbol si vas te lo doy hasta cuando tú quieras y por donde quieras Yo: No juegues que será. Elías: espera el sábado. Toda la semana estuve pensando en ese regalo, por donde quieras y hasta cuando quieras, que será me decía; eso me llenaba de morbo y calentaba mi culo. Llego el día sábado, como ese día no trababa jamo, fui al campo con mi buzo deportivo, pero sin nada abajo, si estaba con ganas de sentir unas manos en mis nalga y una verga en mi culo…claro una verga en mi boca…Llegue al campo y me diviso Elías, quien se aproximó con su ropa deportiva porque él era el capitán del equipo y se le notaba su musculatura regia, de macho poderoso y potente mire su entrepierne y, se dio cuenta e inmediatamente se sobo su paquete, como diciendo esto es para ti. Elías: vas a hacer barra okey? Yo: Claro, con mucho gusto. Elías: Después te doy mi regalo. Yo: está bien y en dónde. Elías: Vamos a mi casa para que lo disfrutes. Yo: Ja. Ja. El partido se disputo muy fuerte, el equipo de Elías gano y, el gerente de la empresa le brindo un brindis y les invito el almuerzo; cuando acabo todo, Elías se acero a mi lado y me dijo: Elías: Vamos o te has arrepentido? Yo: No, tengo curiosidad de saber que es Elías: Es algo que desde que te conocí me has mirado Yo: Si, que cosa Con su aroma de mulato manifestando y ese sudor del juego que invadía a mi cuerpo, lo seguí, caliente y con ganas de verlo duchas y, yo con él.
Llegamos a su casa, porque él vivía solo, era bien ordenada, de pronto el me levanto en peso me llevo a su cuarto, me quito la ropa Elías: Ya venias calatito, estaba listo Yo: Suéltame Elías De veras, no querías verga Yo: No, déjame Me quito toda mi ropa y llevo mi cabeza hasta su verga, yo mecánicamente abrí la boca para succionar esa verga áspera y casposa, que limaba mis labios…un placer exquisito; Elías: Si, así chúpala putito que desde el primer día me dije ese culo será mío. Yo: Acaricia mi culo……dale golpecitos… Seguía mamando esa pinga, negra, que seguía raspando mi lengua y mi garganta, seguro me raspara el culo también; era más gruesa que la de Toncho, mi padrino anal…pero que me arrechaba más saber si entraba a mi culo, si entraba toda o yo no aguantaría… Elías saco la cabeza de su pinga y me puso de cuatro, como un perrito, ensalivo mi culo y, más vaselina para que resbale, los dos estábamos sudosos, el con su olor de mulato, que ra muy rico que me calentaba más, me daba la impresión que iba a ser un polvo fuerte, como yo soñaba después de Toncho, mi otro mulato. Sentí su glande en la entrada de mi culo, yo abrí con mis manos las nalgas más, y le dije: Yo: Métela ya…de un solo golpe…rómpelo rómpelo Elías: Aja! Te gusta el maltrato ahí te va….Ayyyyy que entre más, sentía que me estaba anchando el culo, pero quería más, a su paso el placer crecía más, él se movía de la cintura para abajo, sentía sus caderas taladrar mis nalgas, sus huevitos chocar con mis nalgas…Mas adentro Elías… Elías: ya está toda Yo: Entro todo? Elías Si, tienes un culo apretadito pero muy rico, el mejor culo blanco que me ha comido la verga….Yo: dame más pinga…más… Ayyy que placer… El peso de su cuerpo cayó encima del mío, quedando los dos en forma horizontal sobre de mí, yo con el culo lleno y, el con su arrechura masajeando mis carnes, llenando mi piel con su sudor, impregnándolo de arrechura negra…que rico… ese vergon entraba y salía furioso de mi culo, al volver a entrar lo hacía con furia, y cada vez más caliente….de pronto sentí que mis carnes flaqueaba…me estaba corriendo….Ahh que rico pincho
Elías demoro en correrse, pero cuando lo hizo, sentí que me apretaba más, sus huevos se pusieron duros y su cabezota pareció crecer más en mi interior, su leche caliente, llenaba mi esfínter… Yo: Quedare preñado Elías? Elías: Si quédate callado que quiero darme otro polvo si sacarlo….El siguió, tenía tanta fuerza, que no solo se movió un ratio, sino que me dio tres polvos sin sacarlo, yo estaba feliz, mi culo estaba anestesiado de tanto placer….cuando lo saco sonó PLOP…y yo inmediatamente empecé a mamarlo…quería sentir ese sabor de leche con el sabor de mi culo…. llego la noche, después de bañarnos juntos, que allí también me volvió a meter la pinga cenamos y me llevo a casa….Elías: Me has dado los mejores polvos hasta ahora, nadie se dejó cachar tanto como tú, tienes un culo rico, muy rico y,… lo volveremos a repetir. Yo: Si, cáchame más, mucho más….soy tu mujer en secreto… Elías: descansar un semana, llega mi hermano menor y lo voy a pasear ir la ciudad, él también tiene una verga como la mía o más grande talvez. Yo: Si vamos los tres…..
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