Los niños de papá IV
Cuando Pepito creía que todo lo que le paso fue una especie de terrible sueño, se dará cuenta que no es así durante un fin de semana a solas con su papá .
Narra Pepito
Había pasado unos días desde que vi a mi papá y hermano hacer esas cosas, al mismo tiempo que mi papá me hizo participar en ese acto, durante este tiempo, mi trasero ya estaba dejando de dolerme ya que mi papá me ponía todas las noches crema en mi entrada, pero eso no impidió que se aprovechara y llegara a meter sus dedos suavemente
Era un viernes y recuerdo que cuando terminamos la clase iba con mi hermanito, sin embargo, antes de irnos, Carlos me aviso que me dejaría solo en casa, ya que se iba a quedar a dormir en casa de un amigo, aquello no me gusto para nada, ya que involucraba que me tendría que quedar en casa con mi papá, sin embargo y por una razón que no me explico, no proteste y solamente asentí para después irnos
Llegamos a la casa y Carlos se dirigió a su cuarto, yo me quede sentado en la sala sin hacer nada y tras varios minutos, mi hermano salio con una mochila, me dijo donde estaba la comida, se despidió y se fue de la casa, dejándome solo en la casa y con un miedo que me empezaba a consumir al mismo tiempo que me dirigía para comer, ya que tenía planeado encerrarme en mi cuarto y no salir de allí
Pero mientras comía, la puerta se abrió y vi que era mi papá, en ese momento me entró mucho miedo y más cuando se percato de mi presencia
-hola mi niño- me saludo -¿donde esta Carlos?
-me dijo que iba a salir y que se quedaría en casa de un amigo- le respondí mientras mi papá se dirigía a la cocina y yo empezaba a tener miedo
-eso quiere decir que estas solito, ¿verdad?- me cuestiono mi papá
No sabía que responderle, ya que sentí como se ponía detrás de mí y empezaba a acariciar mi espalda, por lo que me limite a asentir mientras mi papá empezaba a bajar su mano hasta llegar a mi trasero
-bueno, entonces aprovechemos esto- me dijo mi papá, entonces, me agarro tranquilamente del brazo con tal de levantarme de mi asiento
En un principio no me puse de pie, haciendo que mi papá batallara un poco, pero entonces, aplico un poco de fuerza, haciendo que me levantara de mi asiento y subiéramos las escaleras hasta que llegamos a mi cuarto, allí, sin cerrar la puerta, empezó a quitarme la ropa hasta que me dejo totalmente desnudo, provocando que me cubriera mis partes con las manos
-no tengas miedo, no va a pasar nada malo- me decía mi papá mientras volvía a poner su mano sobre mi espalda desnuda, la empezaba a acariciar hasta que bajo y empezó a tocar mi trasero, sin avisarme que me daría una leve nalgada mientras acariciaba con sus dedos mi entrada -andas apretadito, ¿verdad?
No sabía que decir, me estaba quedando sin palabras hasta que sentir algo que entraba en mi trasero, no era el pene de mi papá, claro esta, me di cuenta que era uno de sus dedos, soltando así unos leves gemidos que se fueron intensificando hasta que logró meter otro dedo, haciendo que mis gemidos se volvieran más sonoros, fue así como me di cuenta que mi papá mostraba una alegría inmensa mientras metía y sacaba sus dedos
-sabes, has sido un niño muy obediente- me dijo después de sacar sus dos dedos de mi entrada y me los paseaba por mis labios -te felicito por no decirle a mamá de lo que viste, mi niño, sin embargo ya va siendo hora de que disfrutes como tu hermano disfruta
Tras decirme eso, quito sus dedos de mis labios y se empezó a quitar todo hasta que quedo desnudo, su verga morena y su punta rosada me impresiono, pero el grosor de su verga casi hizo que me asustara, tras eso, hizo que me arrodillara y cuando ya estaba así intento meterme su verga por mi boca, en un principio me negué, pero tras cortarme la respiración de mi nariz aprovecho que abrí la boca para recuperar aire y logró introducir su miembro en mi boca
Intente sacarla y más cuando mi papá empezó a ahogarme con su miembro, pero cada vez que veía mis intenciones, presionaba mi cabeza, provocando que tosiera mientras seguía moviendo su miembro en mi interior, no fueron pocas las asfixiadas que me hizo y cuando libero mi cabeza y pude sacar su miembro de mi boca, en medio de la tos que estaba teniendo y de las ganas de regresar el estomago, volví la vista a la verga de mi papa, estaba llena de mi saliva, bien lubricada y hasta la baba salía de mis labios
En ese momento, mi papa me puso en cuatro, abrió mi culito y sentí algo húmedo en mi entrada, pronto sabría que mi papá me estaba haciendo un oral y eso hizo que mis gemidos volvieran con mayor intensidad
-veo que te esta gustando, verdad putito- me cuestiono mi papá entre risas y mi única respuesta fueron los gemidos al sentir como su lengua humedecía mi entrada anal
Pero entonces fue que sucedió, sin previo aviso y sin que yo lo pensara, sentí algo grueso ingresar mi trasero, intente gritar por el dolor que estaba sintiendo en ese momento, pero mi papá fue rápido y me tapo la boca mientras que con la otra me hacía el gesto de que me callara, al mismo tiempo que empezaba a sentir que mi trasero estaba siendo roto y eso se empezó a sentir aún más cuando mi papá empezó con sus embestidas, las cuales, fueron lentas y suaves en un momento hasta que se transformaron en rápidas y violentas, de igual manera trataba de gritar, pero mis gritos y gemidos eran opacados al tener la mano de mi papá
Lo que si se escuchaba eran los bufidos que mi papá hacía mientras penetraba con mayor fuerza y velocidad mi trasero, sentí como jalaba mi pelo así como también el sonido de sus huevos golpear mi culito, el cual, le excitaba mucho
-vamos putito- decía mientras continuaba penetrándome frenéticamente -se que te gusta la verga de papi- me decía sin darse cuenta que mis ojos se estaban llenado de lagrimas por el dolor que estaba sintiendo, pero eso no le parecía importarle y ya te imaginaras la imagen donde yo, un nene menor en posición de perrito mientras que su papá lo esta penetrando sin compasión alguna
En ese momento, los bufidos de mi papá se hicieron más fuerte y sus embestidas fueron tan fuertes hasta que, tras una fuerte penetrada que me dio y solté un apenas audible gemido de dolor, sentí como dejaba algo dentro de mí y que parecía ser una especie de liquido
Mi papá empezó a recuperar el aliento, momento que retiro su mano de mi boca y yo permanecía boca abajo, con el culito roto y preñado alzadito y llorando por aquella violada, en ese momento, mi papá se acostó a un lado mio y me empezó a abrazar, yo quería soltarme, pero me dijo algo en el oído que hizo que mis defensas bajaran
-recuerda, nada de esto a tu mamá, solo a tu hermano- me decía mientras me agarraba mi penecito -no llores mi niño, a la primera duele, pero después estarás suplicando por más y que te de más duro como lo hace tu hermanito
Me dio un beso en la mejilla y ambos empezamos a dormir, en mi cama y completamente desnudos, por fortuna, nos levantamos antes de que mamá llegara y nos pudimos vestir, eso si, antes me tuvo que limpiar mi papá ya que se percato que estaba saliendo un liquido blanco, me limpio con la mano y me obligo a tragarlo, obedecí y admito que su sabor era bastante salado
Luego de mucha espera por cuestiones personales y profesionales, aquí esta el cuarto relato de esta saga, espero que les guste y no se les olvide comentar y enviarme mensaje por Telegram para cualquier opinión o sugerencia
Telegram: @Boydaddy18
Hermosa experiencia en tus inicios ojalá que sigas adelante con tu relato y como te hicieron la niña más feliz